-Gine, tu irás con él-

Sentenció mientras baja la cápsula en la que su pequeño hijo se encontraba dentro.

- ¿Qué estás diciendo? No pienso dejarte. Si me voy, será contigo. Nos iremos los tres- no lo entendía, confiaba en su esposo y por dicha razón acepto enviar lejos a Kakaroto.

Pero, de un de repente que también la enviará lejos a ella la desconcertó. Lo amaba y no pensaba dejarlo sólo en una situación tan delicada como lo era la posible destrucción de su planeta.

Tenía miedo, y sabía que la intuición de Bardock siempre era acertada. Los años que compartieron en misiones le dio ese conocimiento que, si no fuera por él, su grupo y ellos dos hubiera muerte desde hace tiempo atrás.

-Si te quedas podrías morir- trató de convencerla aun sabiendo lo terca que podía llegar a ser su extrañamente dulce mujer.

-Y tú también. No me importa mientras este contigo. - insistió con lágrimas brotando de sus ojos.

- ¿Qué hay de Kakaroto? - toco una de sus debilidades y la sujeto de los hombros para que lo mirara de frente -A pesar que programe la cápsula para que vaya a un planeta de seres débiles. La patrulla Galáctica detectara a Kakaroto y mandaran a alguien para asesinarlo-

Era verdad, sabía los protocolos de exterminación en los que no se debía dejar escapar con vida a los habitantes del planeta. Lo abrazo con fuerza dando a entender que comprendió la razón para mandarla con su hijo.

Bardock le devolvió el abrazo, atrayéndola en su pecho con sus enormes brazos en la pequeña figura de ella.

Habían pasado muchas cosas juntos, desde que Gine ingreso en su escuadrón hasta convertirse en su mujer dejando de lado su propio orgullo y la burla de sus compañeros al haberse enamorado de una mujer como ella.

Enamorarse era algo raro para su raza, los sentimientos de afecto eran considerado inútiles. Eran una raza salvaje y hostil, y por dicha razón el gran Freezer los consideraba una amenaza.

-Iras por nosotros ¿verdad? - susurró ahogando su llanto. Quería que le diera una pequeña esperanza de que volverían a verse, aunque fuera mentira.

-Haré todo lo posible- le respondió con la voz más ronca de lo común. También le dolía dejarlos ir. Pero sabía que era lo correcto, los quería a salvo.

-Le envíe un mensaje a Raditz dándole las coordenadas del planeta. Para no levantar sospechas dije que Kakaroto fue enviado por una misión. - informó Bardock mientras Gine se acomodaba dentro de la cápsula con su hijo en brazos.

Era la suerte de que fuera una mujer pequeña en proporciones y que él niño tuviera sólo tres años. Era lo equivalente a un hombre adulto promedio.

El infante no comprendía nada, pero se encontraba más tranquilo teniendo a su madre con él. Pero le extraño verla tan triste con su padre cerca. Desde la incubadora cuando estaba despierto podía verla siempre sonriendo incluso cuando su padre se iba por mucho tiempo.

Al poco rato que la cápsula se alejaba del suelo vio hacerse cada vez más pequeña la silueta de su padre y de a poco el planeta hasta caer dormido a causa del gas de invernación.

Sería un viaje largo y a la vez tan cortó.


¿CONTINUARA?...

ESO DEJENLO EN LOS COMENTARIOS (SI ES QUE LLEGAN A HABER).

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO.

BYE :D