Este es un fic mío de Las Tortugas ninja (cuando pueda continuo los otros)

Ninguno de estos personajes me pertenece.

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Fragmento 1

Y de nueva cuenta lo volvía a hacer. Raphael le había prometido a su familia que volvería temprano a casa, después de ir a tomar unas copas con Casey, pero ya eran las 3 am y no volvía.

Leonardo había mandado a sus hermanos más pequeños y maestro a descansar, diciendo que él esperaría a su hermano.

El reloj marcó las 3:25 am y la puerta de la guarida de las tortugas se abrió; Raphael entró y vaya pinta que traía.

-¿Y? -las luces de la estancia se prendieron y Leo apareció sentado en uno de los sillones y con los brazos cruzados.

-Ah, eres tú -le dijo Raph al verlo.

-Estoy esperando tu respuesta o al menos una excusa, ya que para eso te pintas solo -lo vio fijamente.

Raphael a toda respuesta le sonrió irónicamente a su hermano.

-No hay tal -le dijo.

-¡Prometiste llegar temprano! -Leo caminó detrás de él cuando Rapha comenzó a subir los escalones hacia las habitaciones.

-¿Y? -respondió él.

-Mike estaba asustado e imaginandose cosas sobre ti: Que si algo malo te había pasado... que sé yo. Donnie tuvo que convencerle que estabas bien... Rapha ¿acaso no te importamos?.

Raphael lo miró de reojo y estaba demasiado tomado para pensar claramente.

-Ya hablaremos mañana -fue todo lo que le dijo.

-No lo creo -Leo se paró a sus espaldas y de nuevo cruzó los brazos.

-No tengo tiempo y humor para tus sermones, ya vete a dormir Leonardo -le dijo ya hastiado.

-No hay duda de que necesitas disciplina y el sensei mañana mismo te la dará -ante el sonido de aquella voz, Raphael se tensó ya que la tomó como una amenaza (aunque no lo era) y tomó a su hermano bruscamente por los hombros.

Leonardo se asustó ante tal acción.

-Veremos quien es el que necesita disciplina y callarse la boca, Leonardo -abrió la puerta de la habitación de su hermano y bruscamente lo aventó sobre la cama, para luego cerrar la puerta por dentro con seguro.

-Rapha que...

-Ya me tienes harto -le dijo -. Crees que por ser el lider puedes sermonearme, pero esto se acabó -ante eso lo besó bruscamente abriendole el labio.

-Ra...pha -Leo comenzó a asustarse y al entender que era lo que pasaría a continuación, quiso pararse, pero Rapha lo acostó de nuevo bruscamente y lastimándolo un poco.

-Vamos, siempre he querido hacértelo y lo vamos a disfrutar mucho -. quizás fuera cierto que quisiera acostarse con él, pero no de la manera que estaba a punto de hacércelo.

Leonardo quiso pedir ayuda, pero cuando intentó gritar, Una de las manos de Rapha se estamparon contra una de sus mejillas (la derecha) y le sacó sangre de la nariz.

Los ojos de Leo se llenaron de lágrimas y Rapha para evitar que hablara lo ahorcó un poco.

-Si pudiera te mataba, puesto que ya me tienes harto, pero bno lo haré, ya que si mueres no podré disfrutar de tus gestos cuando te haga mío.

Y así comenzó con su faena, violando el cuerpo que era de su hermano. con besos bruscos, mordidas y sobre todo golpes.

Leonardo estaba aterrorizado y por el dolor de garganta no podía hablar y pedir ayuda. Su voz se había quedado atrapada como su fuerza.

Raphael al parecer disfrutaba de él y Leo se paralizó cuando sintió los dedos de su hermano adentrarse en él.

-Por favor...no -le dijo -Me duele.

-¿Acaso no quieres? -le dijo Raphael con ironía -Pero si eres muy bello -le metía los dedos con brusquedad y lo hacia sangrar -¿te cabrá mi puño completo? -Sin más se lo metió y Leo dio un grito silencioso.

Sólo Rapha y las paredes eran testigos de lo que pasaba en aquella habitación.

-Terminemos -le dijo sin mas y sacando el puño lo flexionó de tal manera que sólo sus hombros y cabeza quedaron recargados sobre la cama y comenzó a penetrarlo.

-Por...favor Rapha...perdóname -le dijo casi sin voz, pero su suplica no fue escuchada y su hermano lo embistió.

Leo volvió a gritar y esta vez lo hizo desgarradoramente, pero de nuevo su voz no fue escuchada y Raphael arremetió contra él hasta llegar al orgasmo y quedar rendido.

Al final, Leo temblaba violentamente en su cama, su cuerpo aparte de los golpes presentaba, sangre, saliba y semen. sus pupilas estaban dilatadas y una gran cantidad de sangre se escurría entre sus piernas. sus pupilas estaban dilatadas y nubladas. Rapha le sonrió con ironía y salió de la habitación no sin antes cubrirlo con una cobija.

Cuando su hermano se hubo ido, leonardo con las pocas fuerzas que le quedaban, cerró con seguro la puerta de su habitación, no quería que nadie se enterara de lo ocurrido y volvió a la cama donde se soltó a llorar.

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Fragmento 2

Unas horas después de lo sucedido, Rapha bajó a la cocina, quejándose de la cruda y por si fuera poco, no recordaba lo que le había hecho a su hermano.

-¿A qué hora volviste Raphael? -la tortuga de rojo vio detrás de sí a su maestro.

-No lo sé sensei, sólo sé que estaba muy cansado cuando llegué que me fui a mi habitación de inmediato -entró en la cocina -¿Y Leo? -dijo al ver ahí a Donnie y Mike, y se extrañó, ya que Leo siempre era el pimero en estar despierto y hacer el desayuno.

-No sé -respondió Mike -quizàs te esperó por mucho tiempo y se ha quedado dormido más de la cuenta.

-No recuerdo haber visto a Leo cuando volví -Rapha se tomó una pastilla para la cabeza y un vaso con leche.

-Donatello, ve a decirle a tu hermano que el desayuno está servido -le pidió el sensei.

-Sí -la tortuga de antifaz morado salió de la cocina y se dirigió a la habitación de su hermano.

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Leo no había podido dormir y su rostro era un mar de lágrimas, ni siquiera podía moverse por el dolor de los golpes, especialmente por el que sentía detrás. Sentía como si Raphael lo hubiese desgarrado.

Incluso estaba tan aterrorizadio que no podía pensar bien.

-Leo -Donnie llamó a su puerta -. El desayuno está listo.

Leo no le respondió.

-¿Leo? -Donnie lo llamó de nuevo y se percató que el cuarto estaba cerrado por dentro.

-Vete por favor -dijo Leo en un susurro, Donnie no lo escuchó y siguió llamándolo -¡Por favor vete, no quiero ver a nadie! -gritó reuniendo fuerza.

-¿Leo? -Donatello se extrañó -. Déjame entrar.

-¡Vete, lárgate de aquí! -aventó una almohada contra la puerta.

Donatello ya no insistió más y bajó a la cocina.

-¿Y tu hermano? -le preguntó su sensei.

-No va a venir -le dijo sin mas -y creo que estaba llorando.

-¿Leonardo? -su maestro se preocupó y subió junto a Mike y Rapha.

-Leo quería morirse y no pensar en nada. se sentía humillado, sucio y sobre todo destrozado y si fuera poco la persona que lo había ultrajado era e quien él estaba enamorado.

-¿Por qué, por qué? -se preguntaba una y otra vez en lo que sus ojos se seguían llenando de lágrimas y le seguían recorriendo las mejillas.

-Leonardo -su maestro llamó a la puerta.

-¡Váyanse, no quiero ver a nadie! -gritó y por el sonido de su voz se supo que sí estaba llorando.

-¿Qué tienes hermanito? ¿estás triste? Hay Hot cakes ¿quieres que le haga una carita feliz al tuyo? -era la voz de Mike.

-¡Vete por favor Mike, no quiero verlos! -volvió a gritar.

-Que es lo que ocurre hijo ¿te sientes mal?.

-¡No, ya lárguense! -gritó y aventó otro cojín a la puerta.

-Si necesitas algo nos llamas -esa era la voz de Rapha y Leonarlo al oírla se sintió más mal de lo que estaba. pero no se sentía mal físicamente sino emocionalmente. Jamás llegó a pensar que Raphael fuera capaz de hacerle algo así, pero ahí estaba la prueba en su propio cuerpo.

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Continuará....