capitulo 1: Adiós.
La guerra había terminado, ellos estaban en la tienda de té de Iron, en un balcón. Katara no lo podía creer ¡Por fin había logrado decirle todo lo que sentía por Aang! Era emocionante. Se quedaron mirando el atardecer que poco a poco se iba transformado en la noche. Ellos tenia que regresar con sus amigos para terminar de celebrar su victoria. Lo que no sabían es que, mientras ellos se besaban, todos los veían y cuando se dieron vuelta para regresar, sus amigos se dispensaron como si nada hubiera paso, pero se miraban con una cara de "ya era hora".
Después de ese día, todos pusieron un destino a sus vidas. Todos tenían sus metas y sabían que ya no estarían todo el tiempo juntos como antes. Se pusieron en de acuerdo de que, aunque sea una vez por año se reunirían para charlar de sus vidas.
Iron ya habían decidido que se quedaría en Ba Sing Se en su tienda té y ayudaría para mantener a su sobrio informado de lo que pasaba en la ciudad, cosa que Zuko lo agradeció.
Sokka y Suki tenían que decidirse en ir al Polo Sur o a la isla Kiyoshi. Suki considero el caso de que Sokka no había tenido la oportunidad de permanecer mucho tiempo con su padre, así que le dijo que podían pasar un tiempo en el Polo Sur, para después ir a la isla. Sokka aceto el trato ya que, aunque amaba a su padre, no podía vivir en el mismo lugar en el que paso toda la infancia, más después de haber viajado por todo el mundo. Y aunque nadie lo decía sabían que tarde o temprano debían vivir en la Tribu, porque su padre no duraría para siempre y Sokka (al ser el hijo mayor y además de que si su hermana se casaba con Aang, ella no podía tomar el trono) debía seguir con la tarea de su padre.
Aunque todos sus amigos estaban en parejas, a Toph no le importaba ser la única en no estarlo ya que pensaba que era una estupidez. Ella tenia planeado en ir a saludar a sus padre para demostrarles que era la mejor maestra Tierra del mundo, que había detenido la guerra, que fue la maestra de Tierra Control del Avatar y en el intento de capturarla en Ba Sing Se, ella invento el Metal Control. Pero ella sabia que no iba a funcionar ya que la seguirían viendo como su hija débil, que además es ciega. Por eso tenia en mente un plan "B" y este era, como había sido invitada para ir a Omashu por el Rey Bumi, decidió que si las cosas con sus padres se alteraban ella podría ir allá, "Y por fin podre mostrarle a ese viejo quien es la mejor maestra Tierra." pensaba ella. También pensaba que podría abrir una escuela de Tierra Control y Metal Control ya que le había agarrado el gusto a enseñar.
Era de pensar que el destino de Zuko y de Mai era estar en la Nación del Fuego, por que Zuko era el Señor del Fuego y tenia que atender sus responsabilidades como tal. Le costo trabajo, pero con la ayuda de sus amigos, pudo restablecer la paz en su Nación y tranquilizar la aguas de venganza de todo el mundo, incluida su Nación. Pudo marcar la diferencial entra sus antepasados y él. Estaba orgulloso, ya que por fin entendía lo que su tío el había dicho desde que su búsqueda por el Avatar comienzo, y era que nunca perdido su honor, al contrario, al intentar ayudar a esas personas que iban a ser sacrificadas y recibir el castigo correspondiente su honor había aumentado cosa que el de su padre lo había perdido, ya que fue él el que desafió a su propio hijo ( cosa que sabia que Zuko nunca le aria daño). Mai disfrutaba que por fin Zuko era de ella y de nadie más. Ese era su sueño desde pequeña. Solo con él era realmente feliz y no estaba para nada aburrida.
Aang tuvo que viajar de acá para allá llevando la paz por todo el mundo, discutiendo con nobles ( sobre todo del Reino Tierra y de la Nación del Fugo). Comprendió que no bastaba con aprender los cuatros elementos, sino que también tuvo que aprender de política y para él era lo más difícil al comienzo pero le comenzó a agarrar el gusto y descubrió que no era tan difícil. Logro aprender de política gracia a Iron y un poco de ayuda de Zuko (quienes eran los que más estaban preparados y metidos en esto). Pero anqueta la política no fuera difícil, era muy estresante discutir y tratar que todo el mundo estuviese en paz, tanto como para él como para Zuko. Por eso pusieron un acuerdo, que se tomarían cada año dos semanas de vacaciones, así mientras uno estaba en vacaciones el otro se encarga de las responsabilidades de los dos. Aang aprovechaba esto para seguir entrenando, sea con Toph para aprender Metal Control, con Iron Fuego Control y política o en Agua Control.
Al comienzo se la pasaba viajando sin tener un lugar fijo, pero después de un tiempo los viajes fueron disminuyendo y por una temporada muy largo tubo que ayudar a Zuko en su Nación con algunos rebeldes que trataban de liberal y seguir a Azula. Lo que no sabían seque ella estaba loca y por su influencia el la guerra, Aang le había quitado su Fuego Control y estaba en un manicomio en el Polo Norte.
La más indecisa era Katara, quien tenia tres opciones para tomar: una era ir al Polo Sur con su hermano y su novia, eso era bueno porque podría saludar a su padre y a Gran Gran y contarles todas sus historias, además de ayudar a la Tribu para reconstruirla. También tena la opción de ir al Polo Norte y seguir con su entrenamiento del Agua Control allí. Y por ultimo esta ir con Aang y ayudarlo a él y Zuko en poner paz en el mundo, sin mencionar que en esta estaría más tiempo con Aang a comparación con las otras y pensándolo bien acaban de establecer una relación y no quería separarse de él así y por más que las otras opciones eran interesantes, la ultima era la que realmente no estaba dispuesta a perdérsela. Así que decidió en ir con Aang.
Aang estaba muy emocionado en que Katara se quedaría con él y lo ayudaría pero también estaba muy concierte en que Katara tenia ganas de ir al Polo Sur para ver a su familia y que también quería seguir entrenando el Agua Control. Así que decidió que en su primera vacaciones irán al Polo Sur y se quedarían allí asta que sus vacaciones terminaran, de allí volverían a la Nación del Fuego donde seguían viajando para solucionar los problemas del mundo. Debes en cuando aprovechaban sus viajes para ir y visitar a sus amigos. Cuando querían seguir mejorando en Agua Control, usaban las vacaciones de Aang para ir al Polo Norte y se entrenaban juntos por que los dos estaban en le mismo nivel.
Al transcurrir el tiempo, los dos eran muy felices, viajando juntos por todo el mundo, pero para desgracia de Katara, a medida que pasaba el tiempo, el trabajo de Aang fue aumentando. Había mucho grupos de rebeldes en el Reino Tierra que se tenían que controlar. Estos grupos eran guiados por la venganza, por alguna razón pensaban que el castigo que puso Aang el Señor del Fuego Ozai no fue suficiente y por eso querían tomar "justicia" en sus propias manos. Esto provoco que Aang estuviera muy distraído, preocupado por el futuro del mundo. Él no quería otra guerra, no sabia si la podría soportar, ya que en la ultima guerra había perdido todo lo que él más amaba,toda su Nación.
Un día regreso a su casa de Ba Sing Se, ya que recién terminaba una reunión con los nobles del Reino tratando de solucionar este problema. Cuando entro a su casa, vio a Katara ( que estaba más bonita que lo normal pero él no se dio cuenta por que estaba muy cansado) le dio un beso suave en su mejilla y siguió de largo hasta su habitación ( los dos a no estar casados dormían en camas separadas pero de vez en cuando uno se cruzaba a la cama del otro para dormir juntos, solo dormir). Una vez en su cama, se dejo caer como si nada y se quedo ahí por un rato, tratando de desechar las cosas que habían pasado ese día por un momento, cuando de repente entra Katara.
_¿No te vas a cambiar?_pregunta ella apoyándose en el marco de la puerta con los brazos cruzados.
_¿Para que que me tengo que cambiar?_ pregunta este acostado en su cama mirando el techo.
_No me digas que lo olvidaste_ repode ella, enderezando su postura pero con los bazos cruzados. Aang levanta la mirada para verla mejor. La habitación estaba oscura por que era de noche y él estaba tan cansado que no prendió ninguna vela, pero se podía ver por la luz de afuera de su pieza que ella estaba vestida muy bonita, con un vestido muy lindo. Al verla así Aang comienza a pensar que es lo que había olvidado...
_¡No! ¡Lo olvide!_ dice Aang recordando, sentando en la cama, frente a Katara_ Lo siento mucho, se me paso. Estuve tan metido en el trabajo que se me olvido.
_Pero Aang, es nuestro tercer aniversario. Y dijiste que te ibas a hacer cargo tu solo ¡No puede ser que se te olvidara!
_Lo siento... estos días estuve muy concentrado en la situación de la ciudad que no tuve tiempo ni para pensar.
_Si, si, si... ahora me bienes con la escusa de por que eres el avatar, y no puedes prestarle mucha atención a tu novia.
_¿¡Como que escusa!?_ casi comenzaba a levantar la voz_¡No sabes lo que es tratar que una nueva guerra comience!
_¡Y si estabas TAN ocupado ¿Porque no me pediste que yo me encargara, como en un principio habíamos planeado?!_ Ella estaba gritando ya, acentuando el "tan". Aang recodo que, desde que eran novios y para celebrar su aniversario decidieron que tenían que turnarse para organizarlo.
El primero lo organizo Katara, como una disculpa por hacerle esperar tanto tiempo a Aang para ser novios (sobre todo por lo sucedido en la Isla Ember), al segundo le toco a Aang y este le volvía a tocar a Katara, pero Aang se negó y le pidió si este no lo podía hacer él, ella el pregunto porque él quería hacerlo, y él le dijo que le tenia planeado una sorpresa. Esta sorpresa la tenia pensando desde hacia mucho, quería proponerle matrimonio. Ya había echo el collar de compromiso pero le faltaba el momento indicado, es por eso que Aang le pidió eso, por que quería proponerse lo en ese momento.
Katara, viendo que no respondía, continuo.
_¿¡No vas a decir nada!?_por unos momentos hubo silencio, Aang no estaba dispuesto para hablar. Ella suspiro_ Ya no se más que hacer, Aang. Últimamente te la pasas distraído. Yo sabia que como tu eres el Avatar no podíamos ser una pareja normal, que tenia que tener paciencia y que te tenia que comprender. Pero no estoy dispuesta de ser siempre la segunda, yo también quiero que alguien se preocupe por mi, que me tenga como primera ¡NO SOPORTO MÁS QUEDARME SOLA Y VER COMO A LA NOCHE VIENES, ME DAS UN SIMPLE BESO Y TE VAS A TU PIEZA, COMO SI YO NO ESTUVIERA AQUÍ!_esto ultimo lo decía gritando con una lagrimas en su rostro.
_¿A donde quieres ir con todo esto?_ dijo mirándola con curiosidad
_A que me quiero separar de ti_se seco las pocas lagrimas que tenia. Aang la miraba sorprendido_Creo que esto no va para más. Yo creo que tengo derecho de tener un vida normal, con alguien que me preste atención.
_¡¿COMO PUEDES DECIR ESO?!_gritaba, pero Katara ya se había ido de su pieza para ir a la de ella_ Katara, por favor, no me dejes_la había sujetado de su brazo, deteniéndola unos pasos antes de entrar a su habitación. Ella se da la vuelta y lo mira, él tenia unas lagrimas en sus ojos grises y tenia una cara suplicante_ te necesito, sin ti me voy a romper. Voy hacer todo lo que me pidas pero no me dejes.
_Lo siento Aang_ le pone una mano en su mejilla_ pero ya tome una decisión_ él sorprendido por la firmeza de su respuesta la suelta. Ella aprovecha esto para meterse en su habitación y sierra la puerta delante de él.
Aang paralizado por la situación se va a su pieza, sierra la puerta y se sienta en una esquina de su pieza, tratando de parar las lagrimas. Pasa al rededor de una hora cuando decide ir a pasear y relajar su mente, ya que había logrado parar de llorar. Camina por la ciudad y aunque había muchas cosa que ver, su mente estaba en una sola persona: Katara. "¿Como puede dejarme así? No es mi culpa que yo esa la única persona que tiene que proteger al mundo. Yo no elegir ser el Avatar."pensaba. Mientras caminaba, no se había dado cuenta que estaba justo en frente de la tiende de té de Iron. Este tenia el local abierto con pocas personas adentro. Aang decidió entrar, "Tal vez hablar con él me haga sentir mejor." volvió a pensar, cuando fue recidivo por Iron.
_Hola Aang ¿Como estas?.
_Hola Iron, y no estoy bien.
_¿Es por los grupos rebeldes?
_Si y no ¿Tienes un minuto?
_Si, por supuesto. Ven._ lo llevó a la barra donde cobra. En la otro punta del local, bien lejos de ellos se encontraba una pareja que estaban hablando. Aang se sienta y le cuenta todo lo que le venia sucediendo, cuando termina mira a Iron, esperando una respuesta.
_Y tu ¿Que piensas?_ pregunta Aang.
_Yo pienso que ni tu, ni yo podemos cambiar el pensamiento de Katara. Ella necesita pasar este periodo con ella sola. Piensa que es muy difícil ser la novia del Avatar, y más en tu caso, ya que no bastaba con detener la guerra, que además tienes que restablecer el equilibrio. Creo que deberías dejarla ir, que piense y si no vuelve es por que tal vez no estaban destinados a estar juntos.
_Pero ¿Como puede que no estemos destinados a estar juntos, si la amo con locura?
_Puede que sea un amor de adecente. En esta etapa es muy común enamorarse, tener a esa persona como novia y por algún motivo se pelan, por más que el motivo sea el más mínimo, y se separan para luego volver a enamorarse de otras personas. Y lo más gracioso es que a todos nos pasa, por eso esta etapa se la llama la edad del pavo, por que vivimos cometiendo errores, es por esto que tenemos que aprender de estos. Pero no te preocupes, por que, aunque Katara no sea la persona para ti, de seguro que los Espíritus te tiene preparado un futuro hermoso.
_¿Como sabes eso?
_Pues por que tu eres una buena persona Aang y a las buenas personas les pasa cosas buenas.
_Gracias por el consejo.
_De nada._ Iron ve por encima de los hombros de Aang y ve que la pareja quiere pedirle algo_Voy a atender a esa pareja y vuelvo ¿Si?
_Si, no hay problema._ esto lo digo de forma pensativa.
_Bien_ y se va.
Aang se queda pensando en lo que acababa de decir Iron, meditándolo bien. Sin darse cuenta, lleva una mano a una de su bolsillos y ahí encuentra una pequeña cajita. La saca de su bolsillo y la ve. Era cuadrada con un forro de tercio pelo negro. Cuando la abre ve el collar que le había hecho para comprometerse con Katara, tenia una cinta de tercio pelo de color azul, un poco larga, más o menos de la medida del cuello de Katara pero era lo suficiente largo para quedar debajo del collar de la madre de Katara, ya que él sabia que no era justo que la haga elegir entra el collar de su madre con el de él. En el centro de la cinta había una piedra que tenia tallado un dibujo que representaba las olas del mar y en el cielo unas corrientes de aire. Eran los símbolos del Agua Control y del Aire Control. Al ver el collar, a Aang se le rompió el corazón. Cerro la caja y la dejo a un lado del mostrador, un poco escondido. No quería ver esa caja nunca más en su vida y no le interesaba lo que le iba a suceder, pero él no la quería tenerla. Se levanto de su silla y se fue a despedir de Iron, para luego ir a su casa.
Katara esta en su habita, acababa de discutir con Aang y estaba haciendo las maletas para irse de esa casa lo antes posible. Cuando termino de hacer las maletas se fijo que cuanto había tardado en hacerlas, verifico que se había tardado una dos horas. Se sentó en su cama pensado en que iba a hacer ahora. Pensó que lo mejor era ir a la Tribu Agua de Polo Sur, pero no sabia cuando iba a partir el siguiente barco, por lo tanto pensó que si Iron podría hospedarla solo hasta que saliera el siguiente barco al Polo Sur. Se fue al escondite en el que Aang y Katara guardada su dinero ( después de detener la guerra las Naciones le dieron dinero a todo el grupo como agradecimientos, estos se negaron a recibirla pero insistieron tanto que tuvieron de aceptar) saco su parte del dinero y se fue con las maletas a la tienda de Iron. Si en el caso de que él no pudiera recibirla podría ir a un hotel. Cuando llego a la tienda, vio que Iron acababa de cobrarle a una pareja, cuando estos salieron, ella entro. Vio que Iron no paresia muy sorprendido en verla con las maletas.
_Supongo que quieres preguntarme si te podrías quedarte en mi casa, y yo te voy a decir que si_ dijo Iron_ pero vas a tener que esperar a que sierre la tienda.
_Gracias, pero ¿Porque no estas sorprendido?
_Ay querida, soy un hombre grande y se muchas cosas._ contesto este, pero Katara se lo quedo mirando con cara de "no te creo"_ Y vino Aang y me contó todo.
_¿Y para que vino él?
_Para buscar unos consejos.
_Ah, bueno._ estaba pensando que tipo de concejos le había dado_ Necesitas mi ayuda en algo.
_No. Si quieres puedes sentarte en esa silla mientras termino con unas cosas_ dijo señalando la silla de que estaba al frente de la barra. Ella asistió y se sentó allí.
Mientra esperaba a que Iron terminara con sus asuntos, ella puso su mano alado del mostrado y chocaba sus uñas con la mesa desviando su mirada al lugar. Cuando puso la mirada en sus manos noto que había una cajita forrada de tercio pelo negro. Le ganaba la curiosidad de saber que tenia esa caja, pero no la abrió por respeto a la intimidad. La agarro y se la mostró a Iron pensando que quizás era de él.
_Iron ¿Esto es tuyo?
_No ¿A donde la encontraste?
_ A lado del mostrador
_¡Ah! ¿Sabes de quien podría ser?_ella niega con la cabeza_ Podría ser de Aang, él se sentó ahí cuando vino. Puede ser que se lo olvido.
_Ah. Puedo dárselo, de todas formas se me olvido una cosa en la casa, ahora que lo pienso.
_Te lo agradecería mucho. Mientras tu vas, yo voy a llevar la maletas a la casa ¿Te párese?
_Si tu puedes encargarte de las maletas no tengo ningún problema.
_Si, si pudo ¿Sabes a donde esta mi casa?
_Si, a dos cuadras del local.
_Si.
_Bueno, nos vemos.
_Nos vemos._ y con esto Katara salio del local con la caja en su bolso.
Aang, después de hablar con Iron, se fue al establo donde se encontraba Appa y Momo. Necesitaba estar solo un rato, pensar bien en lo que tenia que hacer. Cuando llego, le dio de comer a sus amigos animales y mientras estos comían, él acariciaba a Appa. No paraba de pensar en lo que le dijo Iron y, aunque tenia razón, no podía dejar de sentirse mal. Sabia que tenia que dejar ir a Katara, pero le rompía el corazón pensar que ella ya no estaría a su lado. Se la imaginaba saliendo con otro chico, besando apasionadamente a esa persona, se la imaginaba casándose con esa persona, teniendo hijos, hijos que no eran de Aang y Katara, sino de la persona "x" y Katara. No lo soportaba, imaginar a "su" Katara con otro persona era la peor tortura que se podía imaginar. Sentía que clavaban miles y miles de dagas con veneno en el corazón, veneno que se concentraba en su corazón pero se expandía por todo su cuerpo Al llegar a su mente, le aparecieron miles de imágenes de ella, cuando se besaban, cuando se abrazaban, cuando miraba sus llamativos ojos azules, que con una sola mirada le hacia sentir que no importaba nada, mientras ella estuviera con él.
Las imágenes iban desde la ultima vez que la vio, hasta la primera, como cuenta regresiva. Eran todo tipos de momentos: tristes, felices, románticos, apasionados, etc... sus recuerdo iban pasando y cada uno de ellos le dolía más, aunque esa el más triste de todos. Las imágenes pasaban, hasta llegar a la ultima que era la imagen más preciada por él. Esta imagen representaba la primera vez que él abrió los ojos tras 100 años de estar in cociente. Era la imagen de cuando él cruzo su mirada con ella por primera vez y por más tonta que sea el recuero, para él era como el principio de una nueva etapa de su vida, y como esa simple mirada él supo que estaba profundamente enamorado de ella. Cuando termino de admirar la imagen, serró los ojos y suspiro profundamente, pensando que era todo pero no, todavía pudo ver imágenes más antiguas todavía...
Estas no se trataban de los momentos con Katara, no, sino de su más tierna infancia. Era la época en que su gente no se encontraban solamente en la Templos Aires, sino que se podían ver Nómadas Aire pos la cuatros Naciones. Él recordaba cuando podía ir a cualquier lado del mundo y encontraría aunque sea una Maestro Aire, ya sea por que hizo una parada o estaban visitando o lo que sea, le dio ganas de llorar, que sumado al sentimiento que le dejo Katara tuvo que hacer su mayor esfuerzo para no hacerlo. No pudo evitar recordar el momento en que abandono el Templo Aire del sur. En su mente veía la cara de sus amigos Maestros Aire, que aunque cuando descubrieron que era el Avatar Y ya no quisieron jugar más con él, él los quería de todas formas. Pero ahora recordaba y extrañaba más de lo normal era el rostro de Gyatso su mentor, era más que su mentor, era como su padre, ademas de su tutor.
Tras ver y refeccionar cada imagen, Aang saca una conclusión: "La causa de mi sufrimiento es, nada más y nada menos, que soy el Avatar."_pensaba él, tratando de no apretar muchos su dientes por la ira.
_ ¡SI! Es por eso_ comenzó a decir en voz alta, no lo soportaba más y las lagrimas se le escaparon de sus ojos_Todas las personas que yo amaba, se perdieron por el simple echo de que soy el Avatar. Si yo no hubiera sido el Avatar, seria una persona más, y, aunque me hubiera muerto hace 100 años atrás, no estaría sufriendo tanto. Es sorprendente como una decisión puede cambiar, no solo a ti mismo, sino al resto del mundo. Lo que daría para que me dijeran "jaja, te la creíste, no tonto, tu no eres el Avatar, tu gente esta bien, no estuviste inconsciente por 100 años, no estas enamorado de Katara y nunca hubo una guerra. Todo fue una broma." ¡PERO NOOO! Como soy el Avatar y mi deber es hacer que todos sean felices y que vivan en paz, mientras que yo soy el único que a los doce tuvo que hacerse cargo de una guerra y a los quince tiene que evitar que otro guerra se genere ¿Y quien me recompensa las perdidas que yo sufro? Por que, ni con todo el dinero del mudo, ni con todas la fiestas, ni con todas las mujeres que me alaben, van a poder recompensar mis perdidas. Y lo peor es que encuentro a alguien que con solo estar con ella, pudo recuperarme de mis perdidas, que me ayuda a mirar para adelante y cuando siento por fin que mi vida tiene sentido ¡BOOON! Aparece la escusa Avatar: "Que por que eres el Avatar y te la pasas en reuniones y me dejas sola y que bla bla bla ...". Como si me gustara estar todo el día en reuniones y alegado de ella ¡Y encima me deja! ¡Cuando pensaba pedirle matrimonio!_ y con esto se sentó a lado de Appa (por cierto, los animales lo miraban asustados) y trata de parar de llorar con las manos en su cara_ ¡Odio MI vida!
Después de un rato, se recupera y mira a sus amigos animales.
_ Por lo menos cuento con ustedes ¿No?_ dijo este y los animales emitieron un ruido de aprobación_ Gracias amigos.
Una vez ya relajado se fue a su casa por fin.
Cuando llego, se dirigió a la habitación de Katara. Había tomado una decisión y quería decírselo a Katara. Toco la puerta y al no escuchar respuesta, abre la puerta para encontrarse con una habitación desierta. "Debió ir a pasar la noche en la casa de Iron." pensó "Mañana ir a hablar con ella." . Y con eso se fue a su pieza, no tenia sueño, así que se puso a meditar en su cama.
Lo que no sabia es que a una cuadras de distancia estaba Katara, caminando en dirección a la casa de Aang para buscar una cosa que se le olvido y entregarle la caja que encontró. Al entrar a la casa se dirigió a su ex pieza, ya que no quería volver a esa casa. Una vez que llego a su pieza, busco en los cajones de su mesita de luz una caja rectangular que no era tan grande, allí adentro tenia sus joyas. Como no estaba acostumbrada a ponerse muchas joyas ( excepto el collar de su madre) en los días normal, a no ser que allá una fiesta, se le había olvidado. Al ver la caja se acordó que tenia que llevarle a Aang la otra caja que tenia en su bolso, guardo su caja en su bolso y se fue a la habitación de Aang.
Cuando abrió la puerta, se encontró que él estaba mediando encima de la cama. En cuanto lo vio no pudo evitar sentir ternura por él, le encantaba verlo meditar, se la pasaba viéndolo meditar, era como si él estuviera dormido porque una vez que se concentraba en su meditación, no había forma de distraerlo. Y con esa imagen, ella se lo quedo viéndolo, él se veía muy guapo en esa posición, con sus ojos serados, se notaba que esta tan tranquilo. Después de un momento escucho un voz en su mente:
"¿Estas segura que lo quieres dejar?"
"Claro que si."
"Yo que tu lo pensaría dos veces."
"¿Por que tendría que pensarlo dos veces?"
"Nada, sino por el simple hecho de que si lo pierdes ahora, es probable que no lo recuperes jamas."
"¿A que te referís?"
"A que él es el Avatar y de seguro tendrá a muchas de las loca del club de fans del Avatar Aang dispuestas a ser la novia del Avatar, sin mencionar que algunas de ellas son hermosas y son hijas de nobles, ya sean del Reino Tierra, Nación del Fuego o de las Tribus Agua. Y no me sorprendería si después de probar el gusto de estar soltero y rodeado de mujeres, le gustar y te olvidara."
"¡Ja! Que buen chiste. Ambas sabemos que él nunca me va a olvidar"
"¿Te estas escuchando? Suenas como si lo estuvieras usando como un juguete."
"¡Ya basta! ¡Yo ya tome una decisión! Y es el de dejarlo, y te aseguro que no me voy a arrepentir."
"Si tu lo dices."
Katara se queda mirando a Aang un rato más, estaba tan distraída que se le olvido el motivo por el cual había entrado a la habitación de él. Una vez que él logra tranquilizar su mente y consigue tener un poco de sueño, abrió los ojos y para su sorpresa, lo primero que distingue era la silueta de Katara. Esta al notar que abrió los ojos y que la estaba mirando, se enrojece sin saber por que. Sin pensarlo dos veces, sale de la habitación de Aang a toda prisa y cuando esta a puto de cruzar la puerta para salir, Aang le agra de la muñeca, logrando que ella se diera vuelta y que estuviera frente a ella.
_Espera, tengo que decirte algo._ dice Aang.
_Espero que no trates de detenerme, por que..._ Katara es interrumpida por Aang.
_No, no trato de detenerte. Mira, aunque esto me duela el alma, tengo que decirte que tienes razón en todo y entiendo que quieras que nos distanciemos. Necesitas tu tiempo a solas para pensar en que quieres de tu vida. Me has acompañado en los momentos más difíciles de mi vida y aunque sigo en uno de ellos, no te voy a pedir que te quedes, por que se que no serias feliz y si tu no lo eres yo tampoco. No puedo darme el lujo de ser egoísta por que, si te quedas me temo que nunca vas a tener esta oportunidad de irte. Quiero pedirte perdón por todo lo que has pasado por mi culpa. Y lamento no ser lo hombre de tu vida, el que te merezca. Y por ultimo te voy a hacer la promesa de que no te buscare y no te molestare en tu vida nueva, aunque me parta en dos, palabra de Avatar.
_Gracias Aang, sabia que entenderías._ "¿Pero porque me siento rota?" pensó Katara. A lo que la misma voz en su cabeza que le discutía, volvió a hablar:
"No esperabas esto ¿No?" dijo con un tono burlón.
"¡CÁLLATE!"
"No podrás callarme por mucho tiempo."
"¿Y quien eres tu para decirme eso?
"Soy la voz de tu conciencia, que trata de que no tomes la peor decisión de tu vida."
_Adiós Katara, espero que seas muy feliz_ se despidió Aang, distrayendo los pensamientos de Katara.
_Adiós Aang, yo también espero que seas feliz en tu vida.
"Dudo que sea feliz en mi vida sin ti" pensó Aang. Katara le dio un beso en la mejilla y Aang le soltó la muñeca para que ella pudiera irse. Pero ese ultimo beso de Katara desarmo a Aang y le causo sentir que su corazón se rompía en miles y miles de pedazos, pero él no podía hacer nada más que mirar a la mujer de su vida, desaparecer en la oscuridad.
Nota de la autora: espero que les gusten mi historia. Soy nueva en este tema de escribir historias.
Gracias por leer.
