Hola! Este es mi primer Fanfic!
Espero les guste.
Acepto críticas constructivas.
Con Amor, Sakura.
Capitulo l
Él se había ido, para siempre
Siempre…
Era demasiado tiempo.
Una mujer corría con prisa a través del más oscuro y caluroso de los desiertos. Intentaba no tropezar con cada piedra y obstáculo que se atravesaba en su camino para retrasarla. Sentía el corazón a punto de estallar dentro de su pecho, tenía un presentimiento y no uno bueno. Ella ya no tenía el collar del milenio, no podía ver el futuro, pero la sensación de que algo estaba por suceder no la había abandonado desde que el faraón se había marchado para siempre.
—Todo había quedado sepultado. Todo había quedado atrás. — pensó.
Se había quedado allí durante un mes para cuidar de la sepultura, para convencerse de que nada sucedería, de que todo había llegado a su fin. Sin embargo, esa noche, se había despertado con el sonido más aterrador que había oído jamás; la tierra parecía resquebrajarse bajo sus pies, partirse en dos, entre fuertes sacudidas y atronadoras explosiones.
No le llevó mucho tiempo salir de su habitación. El movimiento telúrico había durado un minuto y medio, la gente corría gritando despavorida en todas las direcciones sin rumbo fijo, pero ella sabía a donde tenía que ir.
Ella tenía la certeza absoluta de a donde tenía que ir.
Corrió más deprisa, el miedo y la preocupación que la había perseguido durante un mes estaba impulsandola en cada paso que daba. Tenía que asegurarse que la tumba seguía oculta, que los artículos milenarios estaban aún bajo tierra.
Ella ya sabía lo que vería incluso antes de llegar. Por más que se negara, sabía que no todo había terminado.
La montaña de rocas y destrucción que había quedado tras la batalla ceremonial donde Yugi había vencido al Faraón se había reducido totalmente.
Ahora, un enorme agujero ocupaba su lugar.
Las piernas de la mujer cedieron ante la vista frente a ella, cayendo de rodillas a pocos centímetros del agujero. El aire parecía haber escapado de sus pulmones.
—No— murmuró — no puede ser.
Podía sentir una pesada casi tangible oscuridad saliendo del agujero, espacierdose, llevada por el viento. Quería saber por qué, ¿por qué no había terminado?
Finalmente, se arrastró lejos de allí.
Se apoyo contra una roca y se dejó caer nuevamente para asimilar todo lo que había sucedido.
Ishizu no supo cuanto tiempo estuvo alli, mirando el cielo hasta que se tornara claro y los rayos del sol lastimaran sus ojos.
Echó un vistazo al agujero y algo llamó su atención.
Un brillo peculiar parecía salir de un montículo de tierra cercano, haciendola levantarse tan rápido que un mareo le sobrevino de repente, aturdiendola. ¿Cuánto tiempo llevaba allí?
No se había dado cuenta de la brisa tan fuerte que soplaba en ese momento, parecía querer alejarla de su objetivo; aquel punto brillante y misterioso iluminado por el sol.
Con más prisa, se acercó al montón de escombros y comenzó a desentarrar con ambas manos, rompiéndose varias uñas y haciendo muecas cuando las rocas arañaban sus palmas y los brazos, hasta dar con el objeto que había llamado su atención.
Contuvo la respiración.
Allí, semioculto por tierra rocosa y suciedad pero resplandeciente a la luz del sol, estaba el rompecabezas del milenio.
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Tendría que advertir al pequeño Yugi, a todos sus amigos sobre esto. Tendría que decirles que el fin era un nuevo comienzo.
Espero les haya gustado!
El segundo capítulo en breve!
Envíenme sus comentarios.
