CAPÍTULO 0 – PRÓLOGO
Punto de Vista Tercera Persona
Es el séptimo cumpleaños de Ezra, él está muy feliz y ahora está haciendo una fiesta con todos sus amigos, su hermana (Sam-Samantha), su hermano (Jacob) y sus padres Mira y Ephraim. Todo va muy bien. En primer lugar, Ezra fue con sus hermanos a molestar a los cubos de cabeza; en segundo lugar, fue con sus padres a comprar algunos regalos para él, pero no los tendrá hasta la noche; y ahora se dirige a su habitación para esperar la sorpresa que su familia le tiene. Después de esperar dos horas, Sam entra y le dice a Ezra que venga. Ellos van a la sala común y Ezra encuentra cuatro regalos para él.
Todos: "¡Feliz cumpleaños Ezra!"
Ezra: "¡Gracias, es increíble!"
Ephraim: "Vamos Ezra, abre tus regalos".
Ezra abre los regalos uno por uno: el primero es un tirachinas de energía que su hermano hizo para él, el segundo es un peluche de Loth-gato que su hermana le trajo, el tercero es un diario de su madre y el último de su padre es un blaster. Todo el mundo está sorprendido al principio.
Tirachinas de energía:
Loth-gato peluche:
Diario de Ezra:
El blaster de Ezra:
Ephraim: "Te enseñaré a disparar con el blaster desde mañana".
Ezra: "Gracias papi, no puedo esperar".
Sam: "Bueno, Ezzy, ¿qué piensas sobre tus regalos?"
Ezra: "Me encantan, gracias".
Entonces oyen un ruido que viene de la puerta.
Soldado de Asalto: "Este es el Imperio, abran de inmediato".
Ephraim: "Oh no, Jacob, Sam, Ezra salid de aquí".
Sam: "Pero ¿qué hay de vosotros?"
Mira: "Estaremos bien ahora salid de aquí".
Entonces la puerta estalla y un grupo de soldados de asalto entra. Inmediatamente rodean a la familia.
Soldado de Asalto: "¡Rendíos, escoria rebelde!"
Efraín: "Nos rendiremos si dejáis ir a nuestros hijos".
Soldado de Asalto: "No hay negociación".
Mira: "Entonces pelearemos".
Entonces Mira y Efraín disparan contra el soldado mientras disparan de vuelta. Sam y Ezra están escapando por la puerta trasera. Pero cuando se vuelven para ver dónde está Jacob, ellos ven que no hay señal de él. Corren y corren hasta encontrar una vieja torre abandonada de comunicaciones.
Ezra: "¡¿Por qué has corrido?! ¡¿Tenemos que regresar y salvarles?¡"
Sam: "Lo siento Ezra, pero no podemos. Se han ido".
Ella dice mientras las lágrimas comienzan a caer por sus mejillas. Luego se da cuenta de que Ezra está sentada en su regazo y la abraza de una manera reconfortante.
Ezra: "No te preocupes, todo estará bien mientras estemos juntos, pero ¿dónde está Jacob?".
Sam: "Probablemente también está muerto, y Ezra hay una cosa más".
Ezra: "¿Qué es?"
Sam: "Tienes que tomar estas píldoras y todos los días toma una por lo que nadie sabrá que eres un Omega".
Ezra: "Lo haré, pero ¿por qué tengo que hacerlo?"
Sam: "Porque será demasiado peligroso si alguien sabe que eres un Omega, ¿entendido?"
Ezra: "Bien, te quiero hermanita".
Sam: "Yo también te quiero".
Entonces Sam y Ezra lloran hasta que se quedan dormidos preocupados por lo que les sucederá a partir de ahora. Poco saben es que desde aquí su destino cambiará más de lo que piensan.