Surcaba los cielos con cautela. Ningún humano debía verlo, tendría más problemas de los que tenía. La separación de las dimensiones había hecho un gran problema para él. Casi todos sus portadores habían desaparecido en el espacio entre las dimensiones y solo había podido salvar a dos de ellos. Sin embargo, su memoria había sido reescrita como toda la realidad de cada dimensión y eso le preocupaba mucho al Dragón Carmesí.
"Sus cuerpos no están pero sus almas están intactas" susurro en voz baja cuatro orbes de diferente color, cada uno era el alma de sus portadores. Debía encontrar personas que fueran capaces de portar cada alma, no podía dejarlos así. Habían hecho tanto como para terminar de esa manera. 'Solo necesitan una oportunidad más y para eso necesito seguir buscando'
El sol brillante se alzaba en la ciudad de Maiami, un joven llamado Yuya se encontraba caminando por las calles con una mirada pensativa en sus ojos carmesíes "Me pregunto... que hubiera pasado en mi duelo con Mieru si no tuviera la polimerización de Yuzu?" se pregunto cerrando los ojos, "Probablemente hubiera perdido. Aunque tampoco me gusto ver que ella dudara de si misma" murmuro frustrado al recordar cuando la oji azul quiso entregarle la carta. Cruzo la calle y se dirigió al muelle, en un puente solitario donde se sentó en una barandilla, viendo su reflejo en el agua, '¿Como podre traer sonrisas al mundo de esta manera?' pensó frustrado mientras apretaba los puños. A este paso, ser un duelista profesional como su padre seria difícil.
Sin darse cuenta, su péndulo empezó a brillar tenuemente.
El Dragón Carmesí se detuvo abruptamente ante la repentina energía "Esta energía ... viene de otra de las dimensiones." murmuro antes de estrechar ligeramente los ojos, "Necesito ver de donde proviene esto." reunió parte de su poder y abrió un portal de color rojo antes de pasar por este. Hasta ahora, no había encontrado nadie que podría portar las almas de Yusei, Aki, Ruka y Rua en ninguna dimensión, pero esta energía podría ser un cambio.
Mientras se adentraba en el portal, pudo sentir más de aquella pequeña energía, venía de Standar. Esa dimensión había estado últimamente con una actividad rara hace varios días, Podía sentir desde las otras dimensiones un poder de invocaciones que era igual al de las dimensión Xyz y Fusión. Sabía el por que y esa razón le preocupaba. Desde un principio había vigilado un mundo, sin embargo, luego de la separación tuvo que vigilar cada mundo y estar al tanto.
Todo había estado tranquilo hasta que pudo sentir masivas catástrofes que venían de Fusión y luego esta catástrofe vino de Xyz, de allí fue cuando lo vio. Una de las ciudades de Y luego estaba Sincro. Estaba corrupta luego de que alguien de Fusión entrara en ella. "Solo puedo salvar esta dimensión de todo lo que se avecina" susurro mirando las almas. Su mirada se movió entre la gente mientras viajaba alrededor de la ciudad antes de detenerse en puente. Sus ojos se detuvieron en el chico sentando en el puente. "Es perfecto, sin embargo..." Sintio una energía maligna provenir del chico "lo que me temía, tendré que intervenir en esto"
Yuya se llevo una mano a su pecho cuando sintio un dolor agudo de este. Tragando duro. Noto que su péndulo brillo como el dolor aumento. Cayo de rodillas, respirando antes de notar que su deck brillaba también y lo ultimo que oyó fue el rugido de un dragón antes de caer al suelo inconsciente.
Yuya entre abrió los ojos cuando despertó, se encontró en un espacio de colores rojos y blancos. "¿Donde estoy?" se pregunto al enderezarse y mirar a su alrededor. El dolor que había sentido antes ceso por completo y abrió paso a la confusión al ver que se encontraba en un lugar aparentemente sin limite alguno.
Oyó un quejido detrás de él, encontrando a un joven de aparentemente 18 años, de piel bronceada con cabellos negros y mechones amarillos. Usaba una camisa negra con una marca roja extraña sobre ella una chaqueta azul con hombreras naranjas, pantalones negros con rodilleras, botas y guantes de motociclista, pero lo que más llamo la atención de Yuya fue la extraña marca en la mejilla del joven.
Como si su cuerpo se moviera solo, empezó a correr hacia él. La preocupación haciéndose paso en él con cada paso que se acercaba. Agarro los hombros del joven y lo sacudió, "oye, por favor despierta!" exclamo. El joven cansadamente abrió sus ojos, que eran de un color azul bastante hermoso. El oji carmín se sintio aliviado.
"¿Estas bien?" pregunto preocupado, carmín mirándolo, no parecia herido, pero se veía... traslucido, como si estuviera desapareciendo. Trago ligeramente, el pensamiento de que alguien desaparecería de esta manera le preocupaba y aterraba al mismo tiempo.
"Estoy bien ¿Quien eres?" pregunto confundido Yusei ¿por que se sentía tan debil? Lo ultimo que recordaba era estar con Crow y Jaca hasta que una extraña luz inundo el cielo, de allí, su mente estaba totalmente en blanco.
"Mi nombre es Sakaki Yuya" contesto mientras ponia una mano en su hombro, "¿Que te paso?" pregunto, sin notar que el brazo del hombre brillaba junto a su péndulo, pero Yusei podía sentir el ardor que causaba su marca.
"Eso quisiera recordar. Sin embargo, necesito encontrar a mis amigos" murmuro el oji azul para preocupación del pelirojo ¿había pasado algo para que este hombre estuviera en ese estado? Y, sin embargo, también había perdido a sus amigos.
"Te ayudare a encontrarlos." dijo sin pensarlo dos veces. No le gustaba ver esto y quisiera ayudar a ese hombre, aunque fuera lo ultimo que pudiera hacer.
"No creo que sea tan fácil." lo miro con una mirada seria. En este estado, no podría saber si podría seguir viviendo. Su padre lo había ayudado a seguir viviendo, pero no tendría la misma suerte dos veces.
"Eso no significa que debas rendirte," se dio cuenta de algo y sonrío levemente. Eso significaba que el tampoco lo haría "Siempre podemos hacer algo" murmuro en voz baja. Yusei no pudo evitar sonreir también, recordando cada cosa que habían pasado él y sus amigos. En eso el péndulo de Yuya y la marca de Yusei empiezan a brillar con más fuerza junto con Ojos anómalos y Polvo de estrellas.
"¿Que?" Yuya agarro con su mano izquierda su colgante mientras que con la otra sujetaba el hombro de Yusei.
"Mi marca" el pelinegro levanto su brazo y quito su guante, revelando una marca roja con la cabeza de un dragón. '¿El dragón carmesí hizo esto?' pensó confundido, sin embargo, tenia el presentimiento de que fue para salvarlo. "Yuya. Sujeta mi mano"
"¿Eh?" lo miro desconcertado pero de todas maneras lo hizo. Ante esto, el péndulo de Yuya y la marca de Yusei brillaron con más fuerza. "¿Que esta pasando?" se pregunto el oji carmín como la luz los cubría a ambos sin darse cuenta de que un dragón de ojos brillantes se elevaba sobre ellos y rugiendo con fuerza.
Cuando Yuya abrió los ojos, lo primero que se encontraba en el puente viejo de Maiami, mirando al cielo azul ¿Todo eso había sido un sueño? Sintió un leve ardor en su brazo izquierdo haciendo que lo mirara, jadeando al ver la marca de ese hombre en su brazo. Se sentó de golpe y miro la marca con detenimiento. "No... fue un sueño" murmuro tocando la marca, el joven miro a su alrededor antes de notar algo peculiar en el reflejo del agua e inmediatamente lo miro consternado.
Su cabello había cambiado, en este se encontraba con las crestas junto a los mechones amarillos que eran realmente similares a las de Yusei, y no solo eso, su ojo izquierdo había cambiado de color, volviéndose del mismo tono de azul que tenia Yusei. "Esto no puede estar pasando" murmuro llevando una mano a su rostro, cerca de su ojo izquierdo.
"¿Yuya?" pregunto una voz que el aludido reconoció y se giro para ver al joven detrás de él, que parecia sorprendido al ver su aspecto. Aun seguía traslucido, pero a diferencia de hace unos ¿minutos? Parecía mejor. El ahora oji dicromático no tardo en suspirar aliviado. Al menos estaba bien, pero ¿como diablos llegaron a esto? "Creo que sé como terminamos así" dijo el oji azul como si le hubiera leído la mente.
"¿En serio? ¿Incluyendo esto?" pregunto enseñando la marca en su brazo, Yusei asintió con seriedad.
"Si, sin embargo, esto sera muy largo así que toma asiento." el pelirojo asintió confundido y se sentó en el suelo cerca de la barandilla. Esperaba tener todas las respuestas con esto.
"Hasta ahora, Yuya a logrado vencer a Mieru con mi carta de polimerización, sin embargo ¿realmente podre vencer a Matsumi?" Yuzu se recostó contra la pared, estaba sentada en su cama, mirando cada carta tenia, en especial, la polimerización que le había dado Sora. Sus pensamientos de inmediato viajaron al día donde le entregaron la carta y al chico que se parecia a su mejor amigo, "Yuto... ¿por que esta en contra de la invocación fusion?" se pregunto. Solto un suspiro. Había algo más allí, el hecho de que hayan capturado a la amiga de Yuto y hermana de Kurosaki le ponia los pelos de punta, sin embargo, también estaba el hecho de que Huno y Yuto tuvieran algo en contra con LDS ¿habría una conexión allí? "Posiblemente pronto deba hablar con Yuya. Tal vez incluso tener un duelo con él para practicar" no pudo evitar sonreír con un pequeño sonrojo tiñendo sus mejillas, estuvo apunto de agarrar el disco de duelo hasta que un pensamiento cruzo en su mente, "Debería esperar hasta mañana, ha sido un largo día para él"
"Realmente han sido muchas cosas" suspiro Yuya mientras ponía una mano en su cabeza. Yusei había pasado por muchas cosas. Había luchado contra dioses para salvar al mundo, contra una organización que trataba de destruir el futuro y ahora que debería vivir su vida. Su mundo desaparecía y lo dejaba sin un cuerpo. ¿Que pasaría con él? No ¿que pasaría con ambos ahora que tenían esta situación en sus manos?
No creía que podría hacerlo. Sintió una mano hiendo que mirara hacia arriba para ver a Yusei a su lado, su mirada se había suavizado. "Esta bien, Yuya. El Dragón Carmesí hizo esto por que cree que podrás hacerlo, igual tuve mis dudas al principio, pero creeme, confío en que lo lograras." le sonrió al oji dicromático el cual no pudo evitar sonreír también. El bicolor (¿Tricolor?) verde se levanto del suelo, limpiándose sus ropas con calma.
"Gracias Yusei," dijo mirando al oji azul. Yusei lo miro, todavía teniendo esa sonrisa en su rostro.
"No hace falta que me lo agradezcas, Yuya, ya has hecho mucho este día" contesto a cambio. No sabría lo que le habría pasado si el dragón carmesí no encontrara al oji carmín, probablemente hubiera desaparecido y se hubiera reunido con su padre. No lo sabía, sin embargo, esto apenas empezaba.
Unos minutos más tarde, el pelirojo se encontraba caminando alrededor del puente, contando algunas cosas de lo que era su mundo al pelinegro. Hasta ahora, sabía de las D-whells, la invocación sincronizada acelerada, las cosas que podría hacer la marca de un salvador y sus monstruos. Yuya le contó las cosas que le habían pasado a él, la invocación péndulo, sus duelos, sus enfrentamientos para clasificar en el campeonato de Maiami y por ultimo su reciente duelo con Mieru. "Hasta ahora si no fuera por la carta de Yuzu no habría ganado" contesto con un suspiro mientras se tiraba en el césped debajo del puente, mirando al cielo.
"No te desanimes tan fácilmente, Yuya." el pelirojo miro al pelinegro el cual lo miro, "Te enseñare la invocación sincronizada, tienes algún monstruo cantante?" pregunto el pelinegro. Yuya podía decir que por la expresión de Yusei que no iba a aceptar un no por respuesta.
"Si, aunque solo tengo uno" contesto el oji carmín buscando su mazo en sus bolsillo, se confundió cuando saco un par de mazos, uno de ellos era el suyo pero el otro, era de Yusei. El pelinegro no pudo evitar sentirse aliviado al ver sus cartas con Yuya, había temido que los pudo haber perdido también.
"Es mi mazo" Señalo el oji azul. El pelirojo miro entre las cartas hasta que su mirada se detuvo en un par de dragones, igual que el pelinegro, pero este frunció el ceño al ver el dragón de Crow en su mazo '¿que hacia Ala negra en mi mazo?' se pregunto mentalmente antes de tensar su mandíbula, seguramente se había desprendido de Crow en algún momento. "Yuya" llamo a lo que el pelirojo lo miro de inmediato, "Podremos practicar con mis cartas"
"¿En serio? No quisiera molestarte Yusei" ya era suficiente que el pelinegro estuviera en esa forma sin hacer nada.
"Esta bien," contesto antes de sonreír "Sé que quieres superarte sin embargo, eso no significa que tus amigos no puedan ayudarte" Yuya lo miro antes de sonreirle y asentir con una mirada determinada al pelinegro, agarrando sus cartas y poniéndolas en el césped.
Yuto camino por el muelle de Maiami, hasta ahora no habían encontrado mucho que les indique algo sobre Ruri o academia. Apretó los dientes con furia mientras golpeaba una pared cercana. Si tan solo no la hubiera dejado sola, ella todavía estaría con ellos. Cerro los ojos, por ahora, debían ver si podrían capturar a Reiji, tenía el presentimiento que no alguien con el que se pueda tomar a la ligera.
"Creo que es suficiente, ya es muy tarde" abrió los ojos al oír la voz y camino adelante para ver a un chico de cabellos rojos con verde y amarillo, estaba de espaldas, así que no podría ver su rostro a menos que se volteara "Mi mamá estará preocupada si no voy a casa ahora" murmuro en voz baja Yuya guardando los mazos en sus bolsillos. Miro su marca y decidió ponerse su chaqueta para ocultarla. No quería darle más de una sorpresa a su madre, ya tenía suficiente con su nuevo aspecto.
Yusei volvió dentro del cuerpo de Yuya y el oji dicromático escucho la voz de este en su mente "Sera mejor descansar. Tengo el presentimiento de que sera un largo día mañana." con un asentimiento, Yuya se levanto y se estiro, dándose la vuelta y dándole la oportunidad a Yuto para ver su rostro. Este estrecho sus ojos con una mirada seria, hasta ahora, no podría saber si ese chico era aliado o enemigo.
El pelinegro se escondió en el callejón cerca de una caja de madera cuando el pelirojo paso junto a él, observando cada detalle del tricolor verde. Yuya miro a su alrededor luego de sentirse observado, pero luego se encogió de hombros, "¿Pasa algo Yuya?" pregunto Yusei con seriedad.
"Me siento observado" susurro cauteloso. Tenía que ser cauteloso de ahora en adelante, de lo contrario no sabría lo que podría pasar. El pelinegro apareció a su lado antes de ver por un rabillo del ojo una persona en las sombras, pero esta al ser notado corrió lejos de ellos.
La expresión del pelinegro se endureció. "Alguien nos estuvo observando" esperaba que no hubiera oído nada. Tendrían varios problemas si descubría al dragón carmesí.
"No creo tengamos tiempo de perseguirlos, ya debió haberse ido" Yuya dudosamente, se dio la vuelta antes de empezar a caminar a su casa. No antes sin darle una ultima mirada al callejón.
