Hola a todos, es la primera vez que escribo una historia y bueno quise compartirla... espero les guste, por fa dejen review.


CAPITULO 1

Era primero de Septiembre y había todo un alboroto en la estación King Cross, específicamente entre los andenes 9 y 10. Niños acompañados de sus padres esperaban el momento de partir, algunos entusiasmados por volver y otros nerviosos por ser su primer día. Entre todos los grupos resaltaban unas cabezas pelirrojas entremezcladas con el negro azabache y castaño. La familia Potter – Weasley se encontraba allí acompañando a sus hijos y sobrinos que estaban por partir a Hogwarts. Este sería el año para dos nuevos integrantes de esta gran familia, Rose y Albus.

Rose era una chica de baja estatura, su piel de un blanco pálido heredado de su padre al igual que sus ojos azules y su cabello de un rojo más oscuro que el resto de su familia pero con la belleza de su madre. Albus por otro lado también era bajo de estatura, se parecía mucho a su padre, ojos verdes, cabello negro y blanco con pequeñas pecas en su rostro.

Los padres de Rose charlaban con ella minutos antes de partir, le daban instrucciones de lo que debía y no debía hacer en Hogwarts para no tener problemas, pero su padre le guiñaba el ojo cada vez que se referían a romper las reglas. Por otro lado los padres de Albus mantenían una conversación con su hijo, había estado muy extraño en todo el camino hacia la estación King Cross.

Albus y Rose se despidieron rápidamente de sus padres y tíos cuando escucharon el silbato indicando que era hora de partir, subieron al tren y comenzaron a buscar un compartimiento vacio. Ya casi llegaban al final del tren cuando vieron uno pero no estaba vacío, un chico rubio que reconocieron inmediatamente como un Malfoy se encontraba allí.

- Disculpa, ¿podemos estar aquí? –preguntó Albus un poco nervioso.

- Por supuesto –respondió el chico con una media sonrisa en su rostro, se notaba algo triste.

- Ambos ocuparon sus asientos y comenzaron a charlar animadamente.

- ¿Cuál crees que sea tu casa? –le preguntó Albus a Rose.

- No lo sé, pero me gustaría un cambio –dijo Rose pensativa- Ravenclaw tal vez –asintió como tratando de convencerse a sí misma de que esa sería la mejor elección.

- Bueno yo quiero entrar en Gryffindor, aunque mi padre me dijo que eso no importaba, si entraba en otra casa seguiría siendo la misma persona –dijo sonriente- oye, ¿Cómo te llamas? –esta vez su pregunta iba dirigida al rubio, el cual se sorprendió.

- Mi nombre es Scorpius Malfoy –un pequeño rubor tiño su cara, a Rose le pareció adorable.

- Un placer Scorpius, mi nombre es Albus Potter y ella es mi prima Rose Weasley –dijo Albus animadamente- ¿a que casa te gustaría pertenecer? –la sonrisa del rubio desapareció.

- Por obligación familiar debería ser un Slytherin pero he leído mucho sobre la historia de las casas –comenzó a explicar Scorpius- y me gustaría ser un Gryffindor.

Rose y Albus miraban al chico con sorpresa, ¿un Malfoy quería ser Gryffindor? el resto del viaje la pasaron charlando y conociéndose, pronto descubrieron que tenían muchas cosas en común, como el amor hacia los libros que únicamente Rose podría tener y la adoración por el Quidditch.

Al llegar al castillo el ambiente se torno un poco tenso para todos los presentes, estaba a punto de comenzar la ceremonia de selección, la ansiedad y los nervios se hacían presentes en ese momento. Todos los alumnos fueron guiados al gran comedor en orden, escucharon maravillados las palabras que el sombrero seleccionador decía y luego de su hermoso canto. Escucharon atentos las palabras de la directora McGonagall y se aterrorizaron cuando dio inicio a la selección.

Los alumnos eran llamados por orden, cada uno nombrados a las casas Gryffindor, Huffelpuff, Ravenclaw y Slytherin. Todos los presentes en el gran comedor guardaron silencio cuando llego el turno de Scorpius.

- Malfoy, Scorpius –llamó el profesor Neville, el chico empalideció si es que se podía más. Rose y Albus le daban ánimos para que no se preocupara.

Mmm, si. Excelente, tienes una mente extraordinaria con una sed de obtener conocimientos, de sobresalir y demostrar ser digno –comenzó a susurrarle el sombrero- quieres demostrar que eres fiel y leal sin importar distinciones de ningún tipo, valor, veo mucho valor en ti; esto será difícil, muy difícil. En Slytherin podrás demostrar tu verdadera escancia, en Ravenclaw puedes desarrollar esa ansias por aprender y demostrar lo que sabes pero en Gryffindor puedes demostrar todas estas cualidades y por sobre todo demostrar que eres fiel, leal y valiente –el sombrero decía todas esas palabras y Scorpius temía por la decisión final- Ya veo, Ravenclaw no sería la mejor opción y Slytherin tampoco, entonces debe ser…GRYFFINDOR –gritó su decisión y todos en el gran comedor estaban sorprendidos, hasta la directora McGonagall.

Mientras caminaba a la mesa de los Gryffindor el miedo se fue apoderando de su corazón y su mente, miedo a no ser aceptado y por sobre todo miedo a la reacción de sus padres. Les pasó por un lado a Albus y a Rose que le dedicaron una sonrisa.

Y así nuevamente tomo curso el proceso de selección, pocos alumnos quedaban hasta que nuevamente el gran comedor quedo en silencio.

- Potter, Albus–subió un poco nervioso.

Otro Potter, pero tú eres diferente leal y valiente. Deseas ser diferente, ser tomado en cuenta, conocimientos si… muchos conocimientos ya sé donde te pondré… GRYFFINDOR –todo el gran comedor estallo en aplausos.

La mesa de los Gryffindor estaba celebrando, Scorpius lo recibió con una sonrisa en el rostro y para sorpresa de todos Albus le correspondió seguido de un abrazo amistoso. Finalmente llego el momento que todos los Potter y Weasley estaban esperando, ellos sabían que Rose deseaba ir a Ravenclaw así que no se extrañarían.

- Weasley, Rose –su cara era difícil de descifrar, no mostraba ningún sentimiento.

Mmm, si –susurro emocionado el sombrero- tu mente y conocimientos son impresionantes, deseas más y por sobre todo deseas ser reconocida, ser parte importante de este mundo que tanto ansias explorar, posees el valor y la dedicación de un Gryffindor, el deseo de aprender y dar conocimientos de un Ravenclaw, y la ambición de un Slytherin –decía notablemente indeciso el sombrero.

- Quiero estar con mis amigos, quiero estar en Gryffindor –pensaba Rose.

¿Así que quieres estar en Gryffindor? pero Ravenclaw te abriría las puertas al conocimiento, ese conocimiento que tanto buscas y Slytherin te ayudara a demostrar todo eso que tanto ansias; ¿estás segura?... bien… GRYFFINDOR –la mesa de los Gryffindor volvió a estallar en aplausos y gritos.

Rose bajo corriendo con una gran sonrisa en el rostro, abrazó a su primo Albus y luego a Scorpius, no tardaron las felicitaciones de sus primos. Minutos más tarde se dio el inicio al banquete, todos estaban contentos, felices de estar en sus casas que serian su nuevo hogar por siete años.

- Rose, te juro que pensé que irías a Ravenclaw –decía Albus notablemente emocionado por tener a su prima en su misma casa.

- Yo quería ir, pero decidí que mejor sería estar en Gryffindor, aquí puedo demostrar y adquirir conocimientos –sonreía complacida al decir todo eso.

- Eso es muy cierto, no importa en qué casa estés lo importante es que te sientas bien y desear aprender –intervino Scorpius algo sonrojado, Rose por otro lado le dedico una sonrisa.

Albus los miró con el ceño fruncido, esos chicos no podrían parecerse más, pensó. Sin embargo, tanto Rose como el notaron cierta tristeza en los ojos de Scorpius.

- ¿Estás bien? –preguntó Rose.

- Un poco nervioso, mañana le escribiré a mis padres para decirles la noticia y creo que no les gustará –dijo casi en susurro.

- No te preocupes Scor, Albus y yo te vamos a apoyar ¿verdad Al? –preguntó la pelirroja, el aludido asintió con una sonrisa sincera en el rostro y Scorpius no le quedo de otra que sonreír también.

Mientras cenaban se les unió una chica de mediana estatura, ojos color miel y cabello negro, su nombre era Lyna Cross; inmediatamente congeniaron los cuatro. Ninguno de ellos pensó en ese momento que el futuro les preparaba algo más que una amistad.