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¡Feliz mes SasuSaku! Día número 16: Indestrutible.
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-I'am Human Too-
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Despertó sobresaltado, tocándose la cara. Limpiando un poco el sudor provocado por la agitación durante el sueño. Mucho más lejos de ser un recuerdo, parecía algo real, tan del momento. Había soñando cuando dejó a Sakura en esa fría banca a la salida de Konoha, quien entre lágrimas le pedía que se quedara. Bajó los pies del sofá y miró a todos los lados, buscando un pequeño bulto con cabello azabache. Encontrándolo en el gran jardín, debajo de frondoso árbol de Sakura.
Se acercó silenciosamente, hasta sentarse a su lado. El pequeño Uchiha tan concentrado cogiendo las hojas, ignoro completamente su presencia. Mientras él se recostaba en el tronco, haciendo memoria de su triste vida., hasta ese momento que todo parecía dio un cambio radical. Las peleas, guerras, sangre y muerte, eran las palabras que podían resumir su pasado oscuro, buscado por las grandes naciones, pero considerado héroe después de ese terrible enfrentamiento.
Muchos lo veían como el sobreviviente del clan Uchiha, quien podría pelear contra viento y marea. Enfrentarse a los Bijuus y controlar al zorro de Naruto, burlar a los kages de las cinco naciones, terminar con los akatsuki; sin salir muerto. Pero no era indestructible pensó sintiendo las manos de su pequeño hijo, tomar su pantalón mientras lo miraba con esos ojos tan similares pero al mismo tiempo tan diferentes, llenos de inocencia. Que le rogaban un poco de atención.
—Itachi—susurró por lo bajo, tomando el pequeño entre sus brazos.
—Pa-pa-papá—logró decir, mientras se aferraba a su cuello. Y cerrar sus ojos apoyando su pequeña cabeza en el hombre del Uchiha mayor para quedarse completamente dormido, bajo la atenta mirada de Sasuke, quién sonrió un poco ante el panorama.
Se levantó y caminó de nuevo hasta la casa, encontrándose a la señora Uchiha, aunque a ella le molestaba que le llamaran así. Era Sakura Haruno discípula de la quinta Hogake y una de las mejores ninjas médicos dormida en el sofá de la sala, llevando al pequeño Itachi hasta su cuna. Volvió por la chica, para tomarla entre brazos y llevarla hasta el dormitorio. Observando detenidamente sus movimientos entre el sueño, mientras trataba de acomodarse mejor. Recordando el momento en que la vio desfallecer por el cansancio en la guerra y cómo llego hasta la Haruno para sostenerla, y conectar sus miradas. Prometiéndose en silencio que siempre estaría con ella, sin importar lo que sucediera.
Ya que sabía, que lo único qué le hacía vulnerable, era lo que pudiera pasarle a su hijo y a Sakura. Y por ellos luchaba, manteniéndose en pie. Aparentando ser indestructible, para que nadie llegara a ellos.
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FIN
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¿Vieron el manga ayer? Verdad que estuvo increíble. El fandom revivió estoy más que segura de eso. Espero que les haya animado tanto como a mí, leer-ver de la propia mano de Kishimoto un hermoso momento SasuSaku. Memorable para nuestro mes.
Gracias por leer. Espero les haya gustado este drabble. Se aceptan comentarios.
Cuídense