Este fic participa en el minireto de septiembre para "La Copa de las Casas 2017-18 del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black

Disclaimer: Harry Potter pertenece a J.K. Rowling in Warner Bros. No obtengo beneficios económicos con esta historia.

Personaje: Lisa Turpin

Material: guantes protectores


El chirrido de un murciélago, posado en el hombro del brujo que camina dando tumbos, apenas hace inmutar a un par de transeúntes. Dos muchachos montados en sus escobas pasan zumbando por encima de la multitud, que los señala y aplaude sus habilidades a tan temprana edad. Un niño ha dejado caer por accidente todos los rollos de pergamino y botellas de tinta que llevaba encima, causando un buen alboroto.

" ¿Lisa?"

Al tiempo que lo reprime, una bruja de sombrero puntiagudo repara el desorden con un golpeteo de su varita.

"¡Lisa!"

Ahora se pasean más niños de la edad de Lisa con calderos e ingredientes. Otros cargan montañas de libros y plumas que parecen tener vida propia. Una chica de sonrisa bonachona sujeta una caja cuidadosamente agujereada. La criatura en su interior, por los sonidos que emite, no se parece a ningún animal que Lisa haya visto antes. Algunas tiendas más allá…

Alguien le ha dado un empujón y Lisa vuelve en sí. los ojos de la señora Wiser la observan con toda consternación. La niña, dando dos pasos apresurados, abraza fuertemente a su mentora. La señora Wiser suspira de alivio.

Por la mente de Lisa pasan ahora mil recuerdos. En el colegio la habían llamado cientos de nombres distintos, pero todo se reducía al hecho de que ella era anormal. Y pasarse horas y horas leyendo en la biblioteca era sólo uno de los motivos. ¡Es que era tan difícil ser normal! En cambio en aquella callejuela abarrotada de magos y brujas, Lisa dudaba que nadie la fuera a llamar "manos de ceniza", de hecho… ¡Oh no!

La elegante capa de viaje de la señora Wiser está ahora en llamas. Sobresaltada, la bruja se apresura a apagar el fuego con un hechizo. Después sonríe a la angustiada muchacha, quien se mira las manos llena de culpa.

"parece que vas a tener que añadir otro ítem a tu lista".

Diez minutos después Lisa sale de una tienda de segunda mano luciendo unos guantes de cuero. "Es muy común en magos de primer año" explica Wiser "lo llamamos manos de salamandra".

Manos de salamandra… Sin saber por qué, Lisa esboza una amplia sonrisa.