Él
Me preguntaron como era él, pensé en el día que volví a enamorarme de él, tras tratar de olvidarlo en balde.
Lo primero que vino a mi mente fue su pelo, rojo como el fuego, aquel día lo llevaba más largo de lo normal cayéndole sobre la frente, aquel día sentí más ganas que nunca de decirle algo, ¿pero qué? ¿Qué no lo tengo idealizado, pero que sin embargo estoy loca por él? ¿Qué lo único que quiero es olvidarle de una vez por todas, ya que jamás tuve a nadie tanto tiempo en la cabeza, tantos años? Sí, expresan a la perfección lo que siento, pero no puedo perder su amistad.
Luego recordé sus ojos y con ello aquél poema:
En sus ojos azules,
Dónde luz y tinieblas combaten,
Ver creía la sombra siniestra de todos los males.
En sus anchas y negras pupilas,
Dónde brilla el candor de los ángeles
Ver creía la sombra siniestra de todos los males
Del amor espejismos traidores, risueños, fugaces...
Cuando vuestro fulgor sobrehumano se disipa
Que grandes las sombras que envuelven las almas
De quienes con vuestros reflejos cegasteis.
Imaginándome su cara me pregunto ¿conoció a Miguel Ángel, el gran pintor? O tal vez sea una escultura suya, con su tez tan blanca casi marmolinea. Jamás he visto a nadie tan gracioso (Fred y George no son graciosos sino pesados), y me ha hecho reír en momentos y situaciones en las nadie más pudo. Puede hacer reír a su antojo, ese es su gran don aunque él no lo aprecie. También me encanta ese aire de rebeldía con el que lo dice todo.
Pero no todo en él me gusta, como hablar mal de la gente a sus espaldas como hizo conmigo en primer año y que por desgracio o por suerte terminé oyendo. Fue cruel conmigo por que herí su orgullo, quizás ese sea su mayor defecto, es demasiado orgulloso.
Localizo defectos suyos como por arte de magia y sin embargo es por ellos también que me gusta. Cuando sabes que la perfección no existe, no hay razón para buscar al hombre perfecto, para aprender hay que errar y si es o no un error el haberme enamorado de ese capullo me da lo mismo. Y además sólo con ver su carita y esos labios que me conquistaron cuando tan inocentemente me preguntaron si me gustaba el perfume que me regaló, el día vale la pena.
Volví a la realidad, me habían preguntado como era él y sólo yo lo veía así, así que respondí:
- Él es él, es único, tiene virtudes y defectos, como todos, pero es el único que tiene mi corazón.
Los personajes pertenecen a J. K. Rowling y a la Warner.
La poesía es de Rosalía de Castro, la puse de memoria así que puede ir mal, pero hasta que recuerde dónde está el libro...puede pasar cierto tiempo, así que si es así, sorry.
Esta historia va dedicada a Copito, porque en mi caso sí que fue un error.
Ahora solo me queda decir que me encanta leer reviews, así que dejenle alguno a esta nena caprichosa.
Saludos Neevy
