Esta historia es de pocos capítulos, bueno, a menos que alguien pida mas, aun que sinceramente no lo creo, en fin, ni titulo, ni trama que valga la pena, es solo y únicamente para desahogar mis perversiones, sinceramente no creo poder escribir otra historia como esta, y esta la escribo, no mas porque leí un yaoi que me inspiro… (chale, que pervertida soy)

En parte Yaoi y además un trío muy especial (Inu,Kag,Kou)

PERVERSIONES:

Era una tarde bastante calurosa en el Sengoku jidai , Naraku, bueno, el hacia un tiempo que se había calmado, nadie sabia la razón, pero el no figurara en nuestra historia, Kagome Higurashi, la estudiante de secundaria, ahora era estudiante de preparatoria, cambiando el uniforme verde por uno rojo oscuro, con 19 años encima y un cuerpo bastante envidiable por cierto, bueno hacer mucho mucho ejercicio todos los días, que es sinónimo de estar mucho tiempo en el Sengoku, ayudaba bastante, jeje.

Inuyasha un hanyou de melena plateada y ojos dorados la observaba detenidamente desde la copa del árbol, era extraño porque desde hacia unos meses que Kagome compraba novelas (libros) que la tenían muy picada (metida) con lo que contenía, eso no era extraño ya que Inuyasha se había acostumbrado a que se la pasara estudiando mientras estaba aquí, pero cuando leía estos libros en especial el pulso de su corazón aumentaba y su aroma a hembra se intensificaba, claro sin contar que Kagome prefería leer en un lugar un poco apartado o ya de plano dentro de una habitación cuando esta se encontraba desocupada, y eso era algo que venia haciendo cada vez con mas frecuencia…

Kagome leía entusiasmada otra se sus tan apreciadas novelas que ni cuenta se dio de que el hanyou de ojos dorados se había acercado lo suficiente como para leer el titulo…

- el paraíso del coqueteo edición especial para chicas, parte 5-

- kyaaa¡¡¡ - el grito que pego Kagome al escuchar a Inuyasha leer el titulo tan concienzudamente, la habían dejado completamente roja sin contar que le dio un sonoro bofetón tipo los de sango para Miroku.

- que demonios te pasa niña?¡¡- Inuyasha obviamente molesto por lo que acababa de suceder, le arrebato el libro a Kagome en son de venganza, y solo por la pura vergüenza Kagome tardo unos segundos en reaccionar y mando a Inuyasha hasta el suelo con sonoros "osuwaris" recuperando su libro y huyendo del lugar, cuando Inuyasha dejo de sentir el ligero malestar que le provocaban las caídas (mas bien a su orgullo) se tomo su tiempo para levantarse ya que su conciencia aun estaba descifrando lo que había leído en aquel libro, recordándolo decía algo mas o menos así " y ella tomo entre sus brazos a aquel hermoso joven de ojos azules que aun sin experiencia era el protagonista de sus libidos sueños que estaban por cumplirse" y claro como era de esperarse un ligero sonrojo apareció en las mejillas de Inuyasha, no sin antes hacer mentalmente una comparación entre Kagome y Miroku ( en cuestiones de perversiones, claro D )

- creo que pasar tanto tiempo con Miroku le esta afectando a Kagome- sin embargo Inuyasha no contaba que el gusanito de la curiosidad lo estaría chingando el resto del día…

Durante la noche Miroku había cumplido con brindarle al equipo un lugar para pasar bien la noche en la lujosa casa de un terrateniente, así que cuando todos pasaron a sus respectivas habitaciones, puesto a que les habían dado una habitación por cada uno, Inuyasha aprovecho el momento para entrar al cuarto de Kagome y buscar entre sus cosas el libro que había estado leyendo esta mañana, tenia la intención de salir de ahí pero sabia que si Kagome se percataba de la falta de este libro, el se metería en un grandísimo problema, así que prefirió buscar la parte en donde se había quedado esta mañana y leer lo que seguía que era lo que lo tenia en ascuas, sin embargo al llegar a la pagina en donde Kagome la tenia marcada con una tarjetita curiosa de un paisaje chino (un marcador para paginas) se percato que ya había avanzado mucho, y ya iba a retroceder cuando antes de pasar la pagina comenzó a leer… "ambos chicos ya completamente desnudos, sujetaron a la chica quien con los ojos vendados esperaba impaciente el regalo que su pareja tenia para ella, sin embargo al devolverle la vista ella nunca creyó encontrar a su novio y a su amante juntos y solo para ella" Inuyasha escucho un ruido detrás de la puerta y se puso alerta, sin embargo era el personal del aseo que pasaba por ahí, así que decidió retomar su lectura, claro conforme pasaba las líneas el color carmín en sus mejillas iba en aumento al igual que su libido y las ganas de seguir leyendo, pero fue la voz de Kagome despidiéndose de sango y prometiéndole a esta que le prestaría el libro en cuanto lo terminara, lo que hicieron reaccionar a Inuyasha, pero demasiado tarde, esta ya estaba entrando, así que para no meterse en problemas se escondió dentro del closet de la habitación (las puertas de este eran de madera, de esas que están acomodadas de tal forma que de afuera hacia adentro no puedes ver pero de adentro hacia afuera si) Kagome entro completamente confiada a su habitación sin sospechar que un par de dorados ojos indiscretos la observaban, vio su libro tirado a un lado de su mochila pero no sospecho, ya que minutos antes lo había sacado para leerlo pero la interrupción de sus compañeros la hicieron que eso no fuera posible, sin embargo se acordaba haberlo guardado, pero por lo visto no lo había hecho, tranquilamente Kagome se fue quitando poco a poco su ropa común, mientras un ya sonrojado Inuyasha la observaba impasible mientras su corazón aumentaba su marcha de una manera desesperada y el calor en sus venas le quemaba la piel, Kagome quedo totalmente desnuda e Inuyasha sentía un picor en la manos que pedían tocar esa hermosa piel blanca, su mente pedía que Kagome se apurara en vestirse aunque sus hormonas querían observarla un poco mas, Kagome tomo su pijama anteriormente preparada e Inuyasha sintió alivio pero al mismo tiempo decepción, sin embargo Kagome después de pensarlo unas segundos decidió mejor meterse bajo sus sabanas sin nada de ropa y si con un libro en su mano, Inuyasha en ese momento sabia que tenia problemas…

Después de unos minutos Inuyasha ya había logrado sentarse dentro de ese pequeño cuartito de 2m x 1m y observaba tranquilamente a Kagome mientras esta leía, al principio logro sentir su olor a hembra mas intensificado pero ahora estaba como siempre, al parecer la parte picante había terminado e Inuyasha aprovechaba que estaba en sus 5 sentidos para planear la manera de salir de ahí sin problemas, decidió que lo mejor era esperar a que Kagome se durmiera para así poder salir de ahí, sin embargo el sueño lo estaba derrotando a el y quedo dormido a pesar de sus esfuerzos, ……cuando Inuyasha al fin despertó, lo primero que hizo fue recordar donde se encontraba, al recordar todo se reprendió a el mismo por ser tan débil, sin embargo el aroma a Kagome fue lo que lo había despertado no solo a el sino también a su erotismo, aun sin percatarse bien de la situación, miro hacia fuera y Kagome estaba dormida con el libro abierto a un lado de ella, al parecer se había dormido leyéndolo, Inuyasha dedujo con certeza que la picante historia del libro la habían dejado excitada por lo tanto ahora estaba teniendo esos sueños en donde te das el lujo de soñar con aquella persona que te gusta y te puedes aprovechar de ella (o viceversa XD) así que Inuyasha descorrió la puerta lo mas calladamente posible y al pasar por donde estaba ella sintió la curiosidad de saber si podría adivinar con quien soñaba, tal vez muy en el fondo quería acrecentar su orgullo al saberse dueño de ella aun en sus sueños, sin embargo lo que escucho al salir de su boca lo hicieron psicológicamente darse de bruces contra el suelo… no podía ser cierto de los labios de Kagome había salido el nombre de ese asqueroso lobo pulgoso… este se agacho lo sufriente como para que sus orejas quedaran a la altura de los labios de la chica y nuevamente escucho el nombre de Kouga salir de los labios de ella, eso lo destrozo por completo ya que su aroma a hembra tan intensificado solo significaba que ella estaba soñando de esa única manera, pero lo estaba haciendo con el lobo pulgoso, con el orgullo hasta es suelo Inuyasha intento seguir su camino pero al escucharla llamarlo por su nombre, Inuyasha creyó que había sido descubierto y volteo rápidamente pero se sorprendió al ver a Kagome aun profundamente dormida, ahora lo estaba llamando a el, con el orgullo de nuevo hasta el cielo, intento salir de ahí nuevamente, pero la chica empezó a gemir (por decirlo de alguna manera) el nombre de ambos chicos, el nombre de Inuyasha intercalado con el de Kouga, así que muy por encima de su razón, la curiosidad aun mas intensificada que la de un gato y esperando no sufrir la misma suerte de este, se acerco de nuevo a la chica que parecía estar en lo mas interesante de su sueño y tomo el libro abierto a un lado de ella que a pesar de su excelente vista no podía distinguir lo que decía así que prendió la vela que anteriormente había alumbrado la susodicha lectura, grande fue su sorpresa de Inuyasha cuando al leer las primeras líneas pudo percatarse del porque era un especial para mujeres, ya que la historia narraba el encuentro primeramente entre dos hombres que después de terminar de hacerlo entre ellos dos una chica entra en escena y es acaparada por ambos, formándose un perfecto trío.

O POR KAMI, Inuyasha apenas y caía en cuenta que Kagome estaba soñando con ambos, imaginarse a Kagome y el era algo muy fácil, (jejeje) imaginarse a Kagome y Kouga era algo que le hacia hervir la sangre de coraje, pero imaginarse a el con Kouga, el puro pensamiento lo hicieron hacer una mueca de asco y sacudir la cabeza fuertemente para sacar ese efímero pensamiento, tuvo hartas ganas de gritarle pervertida, pero sabia que se metería en un lío, en especial porque Kagome estaba destapada de la cintura para arriba, y si no fuera por que el imaginarse besando a Kouga lo habían hecho bajarse la excitación hasta el suelo, fue que logro salir de ahí sin mas. Ya tendría tiempo de reclamarle…

Inuyasha salio a pasear por los alrededores ya que aquel incidente le había quitado el sueño completamente, escucho la corriente del río y se encamino a lavarse la cara o tal vez el resto del cuerpo, iba tan metido en sus asuntos que no había notado que aun llevaba el libro con el, bueno después del baño ya tendría tiempo de devolverlo, llego al río y enjuago su cara, era una noche muy calurosa y con lo que le había pasado no estaría tan mal un baño, así que se quito todas sus prendas y se metió lentamente al río, después de que su cuerpo se acostumbro al agua ligeramente fría pero que por el calor en su cuerpo la hicieron sentirla realmente fría, ya pudo relajarse y dedicarse a limpiar su cuerpo, sin poder evitar imágenes de que sus manos eran las de Kagome, lo que lo hacían sentir un ligero estremecimiento placentero, pero el cual era rápidamente remplazado por un choque eléctrico desagradable ya que su mente insistía en jugarle bromas muy muy pesadas al imaginarse que las manos de Kagome eran remplazadas por las de Kouga, iagh¡¡, definitivamente leer ese libro fue un error,

Y como arte de invocación, su nariz pudo percibir el aroma de cierto lobo, sin embargo al creer que era otra mala jugarreta de su mente no le presto importancia, hasta que el aroma se intensifico y pudo deducir que era real, pero ya era demasiado tarde…

- hola, perro,¡¡ que desagradable sorpresa, vaya, veo que al fin decidiste darte un baño- dijo Kouga con total antipatía en su tono de voz

- si, lobo, lo mismo pienso yo, es lo que tu deberías hacer en vez de ir apestando el lugar por donde andas-

- mira quien lo dice, el que toma baños a media madrugada por que de seguro tus amigos ya no soportaban el aroma-

- al menos los míos no fingen quedarse atrás solo para alejarse de la desagradable peste-

Esa respuesta aunque claro, falsa, como todo en la platica, hicieron rabiar a Kouga quien molesto por no quedarse con la ultima palabra vio aquel libro cerca de las ropas de Inuyasha y sin que este se percatara lo tomo, por suerte para Kouga había luna llena y la luz era la suficiente como para leer lo decía, retomando claro la ultima parte, según el leída por Inuyasha, si al principio se había sorprendido por que Inuyasha leyera, aun mas sorprendido quedo al saber que era lo que leía, ya que definitivamente esto ponía en una situación completamente diferente a Inuyasha, al principio quiso burlarse echándole en cara que era homosexual, pero recordó que en mas de una ocasión alguno de los lobos de su manada admitían serlo y definitivamente no era algo muy agradable, así que mejor decidió callar y aporrear el libro cerca del perro.

Inuyasha ya iba a preguntar que tanto hacia Kouga que no se largaba ni decía nada cuando escucho el ruido sordo de un objeto caer al piso, cuando Inuyasha se percato de lo que era, miro con furia a Kouga, para reclamarle el que andará fisgoneando en sus cosas, pero la imprescriptible mirada fría que Kouga le estaba brindando lo hicieron pensar que, al parecer Kouga había leído parte del libro y por su extraña mirada, la parte marcada con el paisaje chino.

- que tanto me vez maldito lobo de pacotilla¡¡- le grito el hanyou

- nunca lo creí de ti Inuyasha- sus ganas de burla le ganaron a su razón

- nunca creíste que que?- Inuyasha en verdad no sabia a que se refería ni le importaba pero la imposibilitada situación en la que se encontraba no le permitía irse

- que te gustaran las relaciones hombres con hombres-

- que?- Inuyasha abrió muy grande sus ojos y un gran numero de signos de interrogación aparecieron sobre su cabeza

- sabes conozco a unos lobos que tal vez quisieran conocerte, jajaja-

Inuyasha entendió todo entonces, pero no se dejaría intimidar y mucho menos burlar por un lobo mal pensado y asqueroso

- no gracias, a menos que tu estés en la lista- dijo Inuyasha con un dejo de demasiado sarcasmo en su voz pero que sin embargo dejaron a Kouga mucho muy desconcertado, acaso estaba admitiendo abiertamente que era gay.

- lo cual no lo dudo, por tu forma de mirarme- decidido a no dejarse amedrentar por Kouga al haberlo "descubierto" leyendo estas cosas decidió hacerle una mala jugada, así que se salio del río en donde se encontraba dejándole la vista libre a Kouga para verlo completamente sin nada, este ahora ya no lo veía fría mente sino que lo veía entre asustado y asqueado, lo que le causo mucho gusto a Inuyasha, se acerco decididamente a Kouga y este apenas y pudo retroceder un par de pasos cuando Inuyasha ya se encontraba casi pegado a el, este se estaba preparando psicológicamente para atacarlo con sus garras, cuando Inuyasha le aclaro que.

- no me gustaría romper tus ilusiones lobito, pero ese libro no es mío, es de Kagome, es a ella a la que le gustan esas cosas- Kouga estuvo a punto de gritarle algo como, aléjate de mi, ya que su cuerpo había chocado contra una roca, pero entonces se dio cuenta de que la ropa de Inuyasha se encontraba ahí y que este solo se acerco a tomarla, claro sin importarle encerrar a Kouga en el medio…

Inuyasha terminaba ya de vestirse con mucha calma, cuando Kouga protesto al fin, de hecho según Inuyasha, ya se había tardado, tal vez se le paso la manita con la broma, pero feh¡¡, a el que le importa.

- y si es de Kagome como tu dices, que por cierto no lo creo ya que ella no es ninguna pervertida, como es que tu tienes el libro-

- para tu información ella no es ninguna santita, y le quite el libro para saber que es lo que la había tenido tan entretenida y excitada estos últimos días y grande, muy grande fue mi sorpresa al percatarme que a ella le gustan este tipo de cosas, en especial cuando hace reemplazos –

- reemplazos a que te refieres con reemplazos?-

El enojo de Kouga se había convertido en absoluta curiosidad al saber que probablemente Kagome ya había entrado en celo.

- si como oyes, estas historias las utiliza para ella misma-

- y tu como sabes eso, o es que acaso tu mente pervertida te hace…-

- no me hace nada, precisamente hoy la escuche, al parecer en uno de sus sueños, que habían utilizado como fuente de inspiración este libro y al parecer esta ultima parte, ella era mas que nada la protagonista de esta lujuriosa historia¡¡ hay pero eso no me molesta¡¡ claro que no, lo que me molesta¡¡ es que la muy muy¡¡ nos utilizo a ti y a mi como parte de la…- Inuyasha cayo en cuenta de que había hablado de mas, lo que lo hicieron voltear a ver a Kouga, y fue solo un segundo después que Kouga hizo una mueca de asco y sacudió fuertemente la cabeza, curiosamente la misma reacción que el tuvo cuando se imagino a el y a Kouga de esa manera tan desagradable,

- en que estas pensando lobo asqueroso¡¡¡- Inuyasha apunto incriminatoriamente a Kouga

- yo¡¡ es culpa tuya, que yo, iagh¡¡ que asco, me largo de aquí- acto seguido Kouga desapareció dejando atrás su remolino característico, sin embargo Inuyasha había notado el pronunciado color carmín que se había formado en las mejillas de Kouga al haberlo descubierto, tocándose el sus propias mejillas y notándolas levemente mas calientes de lo que deberían, seguramente el también estaba sonrojado, que vergüenza, seguramente Kouga lo había notado, a pesar de todo esto Inuyasha no perdió el gusanito de la curiosidad, el cual por cierto estaba siendo devorado por la serpiente del libido, y decidió aprovechar la luna y continuar leyendo la historia…

Kouga había notado el sonrojo de Inuyasha que lo hicieron imaginar muchas cosas mas, así que, mejor decidió retirarse, sin embargo por su mente se repetía la historia que acababa de leer pero que por culpa de Inuyasha que por culpa de Kagome lo habían hecho imaginar que una de los dos chicos de la historia eran el y el otro Inuyasha, y la mujer que salía hasta mucho después era Kagome, y el hecho de tener la imagen de Inuyasha desnudo grabada en la pupila no ayudaba en lo absoluto, todos los esfuerzos eran inútiles, después de todo en esta época no se acostumbraban lecturas tan abiertas, por lo tanto no se tenia la costumbre y enterarse de algo así era difícil de superar…

Inuyasha seguía leyendo el libro, la aparición de la chica a partir de ese momento la hacían mas interesante, pero el constante juego entre ambos chicos era algo difícil de ignorar después de todo los tres parecían disfrutar de la misma manera sin ponerse a distinguir en el caso de ellos, quien era la mujer y quien era el otro hombre ya que a ambos se los apañaba por igual, al igual que a la chica que ya ni distinguía si estaba con uno o con otro, ya que estaba con ambos a la vez, a pesar de sus esfuerzos el cuerpo de Inuyasha se había puesto notablemente rígido, tan así que ya ni sus gruesas ropas podían esconder su excitación y era extraño, por que lo que antes le parecía desagradable empezaba a darle sabor a la lectura, después de todo era algo… diferente… -o diablos, maldita sea mi imaginación- Inuyasha había empezado a imaginarse a Kagome como la chica y uno de los chicos como el mismo y aunque quisiera evitarlo a toda costa, al otro chico como Kouga, sin embargo al saberse solo, dejo que su imaginación corriera por si sola, obligándolo a respirar mas pesadamente que antes y a tener que cerrar los ojos de vez en cuando para avivar mas la historia.

Kouga había llegado a un claro en el bosque y no pudo evitar que todo esto se le calara en la mente, despertando desgraciadamente otros recuerdos, como cuando encontró a su hermano, un antes respetado lobo, líder de la manada que ahora el lideraba, con el subcomandante otro lobo tan atractivo como su propio hermano, esa mañana se suponía que Kouga había salido al campo a buscar comida, supuestamente por entrenamiento, pero siendo aun joven, olvido una de sus espadas y al pedirle a la manada que se adelantara el regreso por ellas a la cueva donde se suponía solo su hermano debería estar, pero lo encontró en una situación muy grave en cualquier clan, desnudos los dos, su hermano estaba de rodillas siendo embestido por el subcomandate el cual al mismo tiempo lamía la espalda de su hermano, una imagen que hasta la fecha le es demasiado vivida como para poder olvidarla, su coraje, puesto a que ya entendía plenamente lo que su hermano estaba haciendo, lo hizo acusarlo con el resto de la manada, su hermano al ser expulsado del clan de los lobos, le dijo que no le tenia rencor, que después de todo era la verdad, y tarde o temprano se sabría y que solo esperaba que su hermano menor no le odiase por eso…

Kouga creyó que probablemente Inuyasha ya habría regresado con el resto de su tropa, así que decidió que era ahora el quien necesitaba el baño en esa calurosa noche, y cual viene siendo su sorpresa al encontrarse nuevamente con Inuyasha, quien a diferencia de lo que creyó, se encontraba un poco agitado, al parecer no se había percatado de que el había regresado, lo que le sorprendió realmente ya que el perro siempre podía distinguirlo desde lejos…

- no me importa que estas haciendo perro, pero lárgate de aquí, es mi turno de usar el río- sin darle ni una sola mirada a Inuyasha o prestarle la mas mínima atención al extraño y fortalecido aroma que este desprendía, se quito su armadura y el resto de sus ropas y se sumergió en el río, Inuyasha no le había quitado la vista de encima y eso Kouga lo había notado muy bien…

- por que aun no te haz ido perro lujurioso?- le grito Kouga con un dejo de desprecio

- y por que habría de hacerlo si después de todo yo llegue aquí primero¡¡- vocifero Inuyasha

- como quieras, pero no me molestes- Kouga escucho un ruido sordo cerca de donde estaba y al girar su vista, distinguió a Inuyasha apoyado en un árbol con brazos y piernas cruzadas en una tranquila pose y noto que el libro que antes había estado leyendo se encontraba cerca de el

- anda, léelo, no por eso regresaste?- le dijo Inuyasha sin mirarlo

- por supuesto que no, yo no soy un pervertido como tu- y se sumergió de nuevo en el agua pero como era de esperarse la curiosidad y el libido le ganaron y retomo la lectura, para su desgracia, los reemplazos que su mente hacia eran de Kagome y su hermano así como el subcomandante, lo que claro no le agrado cuando los tres empezaron a interactuar, así que prefirió reemplazar a su hermano por el y eso desgraciadamente significaba que aun tratando de evitarlo el otro era remplazado por Inuyasha, -a pero que lectura mas desagradable- estuvo tentado a dejarla, pero mas tentado estuvo a continuarla, poco a poco y sin darse cuenta su respiración comenzó a volverse pesada e insuficiente el frió del río, ya que su excitación lo hicieron endurecerse, era increíble lo que tu imaginación podía ocasionarte, al grado de olvidar que estas siendo observado por alguien, y su imaginación comenzó a correr libremente hasta que de súbito fue despertado por la voz de Inuyasha, demasiado cerca de el para su gusto.

- vaya veo que te agrado la lectura, lobo sarnoso- Inuyasha apunto burlón con la mirada, la elevada masculinidad del lobo que la cual a pesar de estar dentro del agua y en la noche, podía distinguirse por la claridad de la noche y la transparencia del río, como acto reflejo Kouga acertó por cubrir su erección con ambas manos, ocasionando que el libro se sumergiese en el agua

- BAKA¡¡¡- fue el grito que pego Inuyasha al momento de arrebatarle el libro ya completamente mojado a un muy rojo Kouga

- Kagome me va a matar- dijo con una voz y carita de pánico- y todo es tu culpa lobo libidinoso¡¡¡- dijo completamente encabritado

- ja, te lo mereces, ¡por asqueroso!-

- yo¡¡ ja¡¡ si a ti te encanto la lectura al grado de que estas listo para…- pero Inuyasha callo al notar la extraña mirada de Kouga y trago pesado al notar como este le daba una mirada desvergonzada a todo el cuerpo del hanyou

- Kouga, ahora que, no me digas que ya te dieron ganas, ja- dijo con sarcasmo Inuyasha aunque sentía una extraña presión en el estomago que no lo dejaban moverse.

-ja¡¡ no vales ni mi tiempo, perro¡¡- grito Kouga a modo de regaño, después de eso se dio la vuelta y se vistió lo mas rápido que pudo sin impórtale el hecho de que estaba completamente mojado…

Cuando Kouga ya se estaba acomodando la armadura, Inuyasha, quien había quedado extrañado por la repentina reacción de este, reacciono

- tu… tiempo? ¿?- Inuyasha aun no entendía el significado de aquella frase, que demonios es lo que el lobo estaría pensando

- oye¡¡ como que tu tiempo? Que estabas pensando dímelo o te voy a….- pero Inuyasha no termino de hablar ya que Kouga se había marchado dejando el respectivo remolino tras sus pasos, Inuyasha se disponía a seguirlo cuando un aroma a sangre que el bien conocía se hizo presente en su nariz

-Kagome¡¡-Inuyasha corrió desesperadamente hacia la aldea. Al llegar, todo parecía estar en perfecta calma, pero al llegar al cuarto donde Kagome permanecía, se encontró con algunas gotas de sangre, suficiente para seguirle el rastro, al principio pensó en alertar a los demás, pero podría ser demasiado tarde sin contar de que ellos no harían mas que retrasarlos, si, estaba decidido, no había tiempo para avisar, el tenia que irla a buscar antes de que sea demasiado tarde…

Kouga se encontraba en un sendero que conduce a la aldea, se había sentado en una roca del camino y reflexionaba acerca de lo ocurrió hace unos minutos.

Esa maldita historia, demonios no se que demonios estaba pensando, hmph¡¡ será mejor que me deje de estas estupideces…

Kouga, después de todo mientras se encontraba en el río tenia subido demasiado la libido y a pesar del frió del agua sentía su cuerpo demasiado caliente, y definitivamente se había turbado al ver a Inuyasha con su carita de asustado por culpa del libro, le había parecido como un niñito pequeño al que tubo ganas por unos, no por una milésima de segundo, abrazar con fuerza por tan lindo gesto, y eso que aun no entendía realmente la razón por la cual lo había visto de pies a cabeza pensando o imaginándolo como una hora antes lo había contemplado, sin prenda alguna que tapase esa, aparente a la vista, tersa piel… Kouga sacudió la cabeza con fuerza y se reprendió a el mismo por estar pensando semejantes pendejadas por no decir puterias o joterias, aunque no tubo tiempo de mas ya que un olor a sangre, específicamente sangre de Kagome llego a sus fosas nasales, marcándole un escalofríos desde la medula hasta las palmas de las manos, emprendiendo como era de esperarse su veloz carrera para recatar a su mujer.

Inuyasha se había internado en el bosque siguiendo el rastro y aun sorprendido de no dar con el enemigo, pero el rastro de este se fue intensificado, al parecer había entrado a los dominios de este demonio… pero el constante aroma a flores y plantas medicinales apendejaba demasiado a sus sentidos, de hecho presentía que estaba dando vueltas en circulo… y fue entonces que choco contra algo, o contra alguien…

- hay mi cabeza¡¡- tanto Kouga como Inuyasha se habían encontrado de nuevo de una manera no muy agradable, ambos habían caído de espaldas y al levantarse tuvieron primeramente la intención de pelear, pero Kagome necesitaba ayuda así que solo se miraron fijamente y asintieron con la cabeza al mismo tiempo que emprendían una nueva carrera siguiendo el rastro anterior…

Hasta que se encontraron frente a una aldea, no muy grande ni muy bonita pero protegida por un campo de fuerza un tanto extraño, sin contar con que el aroma a extrañas flores empezaba a marear a ambos canes, Kouga solo se hizo para atrás dando espacio a Inuyasha este comprendió perfectamente la indirecta y una sonrisa de victoria se dibujo en sus labios, después de todo el lobo no podría seguir avanzando si no fuera por el. Inuyasha saco su espada la cual tomo un color rojizo y de un solo ataque rompió aquel campo, desgraciadamente fue contraproducente ya que el aroma a flores se intensifico, mareando e inmovilizando a ambos chicos, los cuales no pudieron hacer nada al ver a un demonio con forma de hada (un hada fea XD) se les acercaba a gran velocidad encestándoles un golpe que por su certeza desmayo a ambos chicos…

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Kagome tratada de despertar tanto a Kouga como a Inuyasha, ella se encontraba en un sótano iluminado apenas por una candelilla, el sótano era oscuro, húmedo, sucio y olía extrañamente rico ( XD, sin comentarios)

Inuyasha despertó poco a poco ya que podía sentir un tacto suave sobre su piel, al despertar su nariz reclamo el extraño aroma que se extendía en el lugar llevándose su mano a su cara para cubrirse, notando el que no tenia su rata de fuego…

- ka… Kagome… que aroma mas extraño… … … Kagome¡¡ te encuentras bien… donde? Donde estamos? -

- Inuyasha sabia que vendrías a rescatarme…- pero esta fue interrumpida

- tranquila Kagome, que ya estas a salvo conmigo- Kouga abrazo a Kagome mientras empujaba a Inuyasha-

- suéltala Kouga¡¡- aunque antes de decir cualquier otra cosa Kouga se le quedo viendo muy fijamente a Inuyasha, reparando en que este no tenia su rata de fuego, y ambos notaron que ambas partes del traje estaban ausentes ( XD si, ya saben el aori y en este caso, el pantalón igual) por lo tanto lo único que cubría a Inuyasha era la camisa blanca…

- pero que te pasa bestia¡¡ como te apreses así frente a Kagome, eres un¡¡…-

- mira que no es mi culpa¡¡- Inuyasha apunto el pecho descubierto del lobo puesto a que a este le faltaba su armadura

- Kouga¡¡ Inuyasha¡¡¡ ya basta, ahora lo que hay que hacer es encontrar la manera de salir de aquí-

- si, por cierto Kagome como fue que te secuestraron- Kouga esta vez tomo ambas manos de la chica…

- bueno pues veras Kouga…-

Flash back

Kagome se encontraba dormida en su futon, teniendo un agradable sueño con Inuyasha y Kouga quien se había colado en este sueño, inspirada en cierta novela ya muy mencionada XD, entonces se despertó al sentir la presencia de un fragmento, que se acercaba rápidamente. Apenas y le había dado tiempo de vestirse y ni bien había tomado su arco cuando una criatura, increíblemente silenciosa ya que ni siquiera la escucho llegar, ya la tenia completamente inmovilizada con al parecer algunos tentáculos que bien podrían pasar por ramas de plantas, Kagome se encontraba enredada en esta extraña planta con vida propia, su boca estaba fuertemente tapada, también sus ojos y solo sentía como rápidamente era alejada de su cuarto, pero como ultimo recurso tomo una pequeña lima de uñas ( de esas de metal) de la bolsa de su falda y se hirió su mano antes de que aquella criatura la enredara por completo dejándola inmovilizada, después un extraño aroma adormeció sus sentidos, perdiendo el conocimiento y despertando en este extraño sótano, el cual después de unas minutos dejo caer dos cuerpo mas con ella, el de Inuyasha y Kouga pero estos se encontraban, inconscientes, desarmados según podo notar y en el caso de Inuyasha faltaba su traje rojo y a Kouga su armadura…

Fin del flash back

- bien, pues ni hablar saldremos de aquí, recuperaremos las armas y mi ropa y destruiremos al youkai que provoco todo esto-

- se dice fácil bestia¡¡ pero te recuerdo que este demonio maneja muy bien los somníferos y puesto a que tenemos un excelente olfato será muy difícil que logremos derrotarlo o al menos hacerle frente sin dormirnos antes¡¡- Kouga se le había plantado enfrente a Inuyasha en plan de "yo se mas que tu"

- feh¡¡ eso ya lo se lobo de pacotilla, entonces que decides a¡¡, quedarnos aquí¡¡ o que¡¡-

- tal vez yo pueda ayudarlos...- la voz de un anciano salio de las profundidades del sótano, de la parte no iluminada comenzaron a salir algunas personas con aspecto asustadizo y se veía que tenían algunos días ahí.

- quienes son ustedes- Kagome se acerco un poco desconfiada, pero al parecer estos eran humanos ordinarios…

- nosotros somos los habitantes de la aldea, bueno, algunos de los que aun seguimos con vida- una señora con aspecto decaído fue la que se acerco a la chica y le entrego una botella de vidrio color rojizo con un liquido adentro…

- y esto que es?- Kagome destapo la extraña botella según la señora le había indicado y el extraño aroma que inundaba el sótano se hizo mas fuerte, logrando una ligera protesta en forma de gruñido por parte de Inuyasha y Kouga y no es que fuera un aroma desagradable, de hecho era un aroma dulce, pero para Kouga e Inuyasha sentían que este aroma se les calaba en lo mas profundo de su olfato obligándolos a cerrar los ojos…

El resto de la gente salio de la oscuridad en donde se encontraban rebelando a niños adultos y jóvenes de ambos sexos, en total eran como unas treinta personas, estas prendieron mas velas y aun así solo la mitad del sótano quedo alumbrada… Inuyasha recién y había empezado a sentir vergüenza por su situación y es que la camisa blanca apenas y le llegaba a la mitad del muslo, tapando con mucho trabajo lo meramente esencial, ( ¬ )

Un señor hablo - verán, nosotros no nos convertimos en el alimento de esa criatura por que ese día teníamos una fiesta en honor al cumpleaños de Alicia una de las aldeanas, así que todos los que estamos aquí, a excepción de los niños claro, habíamos bebido de este licor, al parecer, por alguna razón estar algo afectados por este nos hace inmunes a esta criatura, bueno en cuestión al somnífero ya que después de todo también cuenta con venenos y otras habilidades mas impresionantes, pero tal vez ustedes puedan hacer algo contra ella-

Una jovencita de aproximadamente 15 años se inclino ante ellos - si¡¡¡ por favor ayúdenos¡¡ ya tenemos unas semanas aquí y ya nos acabamos la reserva de comida que había -

- a ya veo, así que esta es la bodega generar- Kouga observo con atención alrededor buscando alguna posible arma o algo que les pudieras ayudar, pero no vio nada interesante

Una anciana hablo - si, así es, nos escondimos aquí y al demonio le pareció una buena prisión y aquí nos tiene y cada tres días baja y se lleva a uno de nosotros, del cual ignoramos el destino, pero seguramente son devorados por aquella criatura-

- bien bien, dame acá¡¡- Inuyasha le arrebato la botella a Kagome y es que quería acabar con todo esto rápidamente ya que le tenia un odio personal al demonio fuera quien fuera, por dejarlo medio desnudo y con tanta gente que lo veían de esa manera tan extraña y desagradable, aunque debía admitir que ya había pescado en dos ocasiones a Kagome mientras esta le veía las piernas de una manera que solo lo hacían sentirse arrogante, ya después la molestaría por esta situación

Inuyasha se empino la botella y bebió de ella de una manera precaria, provocándole un escozor en la garganta y soltándola cuando de plano ya no soporto el ardor en la garganta y boca, después de todo se trataba de un vino muy fuerte… haciendo una muestra de desagrado le paso el vino a Kouga quien lo tomo despectivamente e imito a Inuyasha, logrando beber un poco mas que Inuyasha…

- así es como se toma un vino… bebe¡¡- Kouga se burlo de Inuyasha por aguantar menos que este, a lo que Inuyasha respondió arrebatándole la botella y bebiendo de esta hasta que quedo vacía…

- ja¡ a quien le dices bebe¡¡- Inuyasha había tomado casi el doble de Kouga y aun no se sentía ni levemente mareado… Kouga se molesto por aquella actitud que convertía esta situación en una nueva pelea y le ordeno a uno de los aldeanos traer otra botella, estas eran de aproximadamente un litro…

- solo quiero informarles que los efectos del vino tardan en sentirse, no es poco a poco como el saque o la cerveza, estos vienen de golpe casi a un mismo tiempo así que les recomiendo que no…-

- YA CÁLLATE Y TRAE OTRA¡¡- ambos lo callaron

Kouga se bebió de un solo jalón la mitad de la que le habían traído pero cuando Inuyasha se la trato de quitar, no lo dejo y se bebió el liquido rosado hasta que llego al fondo de esta, y aun sin sentir nada…

Por supuesto Inuyasha no se quedo atrás y logro con todo el dolor de su garganta, beberse una botella de un solo jalón, bueno casi toda, ya que Kagome se la había arrebatado a unos tragos de gastarse ya le iba a reclamar cuando esta lo regaño.

- yo también quiero probarlo, además no es una pelea, esta bebida es un antídoto, por decirlo de alguna manera contra el somnífero de aquella criatura, no para que ambos vean quien queda ebrio mas rápidamente¡¡¡-

- Kagome, linda, tienes razón, perdona mi insolencia, y en todo caso, seria de ver quien aguanta mas, pero tienes razón hay un monstruo que derrotar ya después festejare a tu lado- Kouga tenia agarrada a Kagome de las manos

- ¿¿? A si claro, jejeje, como digas Kouga, ahora creo que ya han bebido suficiente no creen? Será mejor que vayan- aunque claro como era de esperarse Inuyasha ya había aventajado a Kouga con dos botellas mas y se jactaba orgulloso, así que Kouga no tardo en ponerse a raya, si no fuera porque los aldeanos mintieron diciendo que no había mas, el youkai y el hanyou hubieran seguido con esta estupida competencia, curiosamente ninguno sentía nada aun, pero suponían que se debía a su naturaleza de demonios…

- aush¡¡ con ustedes, deberás que no los entiendo, estamos en una situación critica y ustedes se la pasan peleando…-

- feh¡¡ no te preocupes Kagome, que ese vino no nos afecto en nada-

- aun así, veamos (Kagome contando con los dedos) si no contamos la primera, Inuyasha tu te tomaste cuatro y Kouga cuatro y media-

- ja¡¡ te gane perro, a que te supo a¡¡-

-Te hubiera ganado si no fuera por que kagome se tomo la que me correspondía-

- y que querían que me quedara sin nada y que cuando ese demonio hada viniera me devorara mientras ustedes estaban demasiado ebrios como para pelear¡¡¡-

- ya te dije Kagome, que ese vino no nos afecto en nada-

- es verdad, Kagome, pero no te preocupes que yo lo derrotare sin ayuda del vino ni de ese miserable perro-

- ya les dije que el efecto no es inmediato- el anciano se encontraba preocupado de que sus únicos posibles salvadores sean devorados por pasárseles la mano al beber

- bien pues en ese caso, ¡¡bestia¡¡ (dirigiéndose a Inuyasha) vamonos ya¡ o prefieres quedarte, para que no te de un resfriado, jajaja- (supongo que saben que se refiere a su falta de ropa XD)… después de que Inuyasha se pusiera ágilmente un pantalón azul oscuro de los que le ofreció el anciano…

Ambos demonios subieron velozmente las escaleras de la bodega, llegando a la puerta de acceso, a pesar de que se encontraba bien cerrada por fuera no fue ningún impedimento para estos demonios, pero curiosamente al momento de usar un ataque común, como una patada por parte de Kouga y las garras por parte de Inuyasha, ambos sintieron un extraño y muy fuerte mareo y aunque lograron no irse de bruces contra el suelo, los efectos del vino comenzaron a sentirse…

Kagome se encontraba tras ellos y había notado el extraño comportamiento de ambos chicos, sin embargo no pudo reflexionar mucho ya que ella misma empezó a sentirse mareada…

El demonio había escuchado la puerta romperse y ya había llegado en cuestión de segundos al lugar, después de todo era un demonio sumamente rápido, a pesar de que este uso su somnífero una y otra vez sus atacantes no parecían tener el mínimo adormecimiento, aunque si notaba sus ataques un poco torpes y mal organizados, pero le importo poco ya que después de todo esas criaturas no eran mas que una fuente de energía para el.

Kagome observaba escondida desde atrás de un árbol la pelea de Kouga e Inuyasha, a pesar de que sentía que el piso se quería ir sin ella, podía notar como ambos guerreros estaban demasiado torpes y lentos para ser ellos, así que decidió ayudarlos o esto no iba a terminar nunca…

Con trabajos y mas de un traspié llego al lugar donde sentía la presencia de la perla de shikon, esta se encontraba remojada en una gran tinaco lleno de sangre que a través de un extraño sistema de riego, mojaba algunas plantas que se encontraban en este extraño invernadero, probablemente lo que al monstruo le daba esos poderes sobre las plantas y los somníferos. Considero el que talvez seria peligroso (sin decir desagradable, ya que sentía ganas de vomitar, ya sea por el vino o por los cuerpos cortados y sin vida que colgaban en la parte superior del tinaco para llenarlo poco a poco con sangre) retirar el fragmento de shikon, agarro la espada de Inuyasha que se encontraba apilada entre un montón de otras armas… y corrió ( no muy ágilmente ) a donde la pelea se llevaba a cabo sin embargo la pelea ya había llegado hasta este lugar a lo que tratando de pasar desapercibida por el demonio arrojo la espada a Inuyasha y a este le basto con agitarla una vez para acabar con todo ese problema y de una vez con el invernadero…

El aroma poco a poco se fue disipando pero los efectos del vino se incrementaban volviendo a ambos chicos sumamente torpes… y arrastrando las palabras Kouga le pidió a Kagome que le avisara a los aldeanos que ya podían salir y que si podían que les prepararan una comilona, ya que después de todo si se les había pasado la mano al beber y el alimento ayudaría a bajarles la borrachera…

Kagome siendo al menos afectada por aquel vino rosado y dulce aviso a los aldeanos y estos aceptaron gustosos en agradecimiento el prepararles un banquete para ellos… la aldea no había sido destruida mas que en algunas partes y el ganado que se encontraba mas para los limites de la aldea al parecer no habían sido afectados en su totalidad, … …. ……. a pesar de que estaba muy entrada la madrugada, aun faltaban unas horas para que amaneciera cuando los aldeanos ya habían terminado un banquete rápido pero bastante abundante.

A pesar de su orgullo Kouga e Inuyasha tuvieron que ayudarse a caminar ya que por ser demonio y mitad demonio, los aldeanos se hacían a los desentendidos para ayudarlos de esa manera, Kagome los observaba divertida mientras ambos chicos intentaban llegar al lugar del banquete, ayudándose abrazados y dando traspiés de vez en cuando y replicando por eso, pero solo se les entendía los insultos y la mitad de lo que decían ya que arrastraban demasiado las palabras, al llegar recibieron un fuerte aplauso por parte de los aldeanos y les sirvieron bastante de lo mejor que habían preparado… terminado de comer, los tres ya se encontraban en mejor estado, aun así lo suficiente mareados como para pensar bien…

- yo, el jefe de la aldea quisiera agradecerles abiertamente y en nombre de toda la aldea a ustedes nuestro héroes salvadores, y ya que faltan algunas horas para que salga el sol, les invito a descansar el los aposentos mas lujosos de mi mansión- otro estruendoso aplauso por parte de todos.

- bueno, seria un placer, pero yo creo que…- Inuyasha intento pararse pero desistió antes de lograrlo…

- hay vamos Inuyasha, no tiene nada de malo, además aun no hemos dado con el paradero de tu rata de fuego-

- ni de mi armadura, así que no nos iremos, al menos hasta mañana que todo este mas claro- la verdad era gracioso escucharlos hablar XD.

A cada uno se les brindo un cuarto individualmente, cuando Kagome entro a este vio algunas ropas para dormir al igual que algunos objetos que habían puestos como paga y entre estos mas del rico y dulce vino rosado, y algo que llamo la atención de Kagome era la gran cantidad de diferentes vinos, destapo algunas botellas y las olía pero no le dieron ganas de probar alguna, hasta que tomo una de un color azul cielo y al olerla esta despedía un atractivo aroma, era como una invitación directo a tus sentidos para probarla, a lo cual Kagome no se resistió mucho, probando aquel extraño vino ligeramente amoratado, descubriendo que el sabor hacia honor a su aroma ya que te dejaba una sensación de calidez y frescura al mismo tiempo que tu sentido del gusto era golpeado con todas las sensaciones al mismo tiempo, dulce, agrio, salado, amargo, mentolado, suave y profunda la gama de sabores de aquel vino que te invitaba a seguir, o tal vez era que el estar ya afectada por otro vino la hacían mas propensa a seguir, bueno, de todas maneras ella no seria una de esas que se emborrachan solas, así que agarro otra botella mas de color azul cielo y se dirigió a la alcoba de alado donde Inuyasha se encontraba…

Al entrar, sin llamar a la puerta se encontró con Inuyasha y Kouga, ambos al parecer estaban teniendo una acalorada discusión ya que ninguno tenia buena pinta…

- muy bien que demonios pasa con ustedes dos?- Kagome se sentó en medio de estos para darse como intermediaria

- a mi nada- hablo Inuyasha- pero este lobo pendejo dice que esta es su habitación y claro que no lo es.

- claro que si lo es, y prueba de eso es la armadura- Kouga apunto con su dedo la armadura que se encontraba al fondo de la habitación y fue entonces que Kagome noto que la rata de fuego de Inuyasha se encontraba a un lado de esta…

- mira Inuyasha, que bien, encontraron tu rata de fuego¡¡-

-por eso mismo le decía a este lobo necio que esta habitación es mía-

- Kouga, por que peleas tanto, si a ti te dieron la habitación de alado de esta –

- tal vez, pero no permitiré que sea Inuyasha quien este mas cerca de ti cuando no sabe cuidarte bien-

- que quisiste decir con eso lobo del demoni..-

- ya basta¡¡¡ si tanto quieren esta habitación pues quedémonos los tres y ya déjense de pendejadas¡¡- la verdad es que ambos chicos callaron ya que era extraño escuchar insultar a Kagome…

- mmm si, pero por cierto Kagome que viniste a hacer aquí?- Inuyasha que ya había dado por terminada la discusión se acerco a donde se encontraba su aori y se dispuso a cambiarse de ropa

- a¡¡ que, jejeje¡¡ a si¡- Kagome se había sonrojado ya que después de todo abordar a Inuyasha no era difícil pero estando Kouga, la situación cambiaba. Kouga noto la reacción da Kagome la cual no le agrado mucho ya que después de todo esta era la habitación de Inuyasha y si era Kagome quien venia a verlo a altas horas de la noche pues… Kouga mejor decidió apartar esos pensamientos, cambiando un poco la conversación.

- por cierto Kagome, que es eso que traes ahí?- Kouga apunto las extrañas botellas al parecer de dos litros que Kagome había colocado a un lado de ella…

- a si¡¡¡ es verdad, venia a invitarlos, bueno pues ya que derrotamos…-

-derrotamos o derrote?- Inuyasha ya había terminado de vestirse y se sentó a lado de esta.

- bueno, bueno, no seas tan presumido, el hecho es que venia a decirles que-

- a decirnos o a decirle?- Kouga la interrumpió un poco molesto

- que estas celoso lobito, jajaja¡¡¡- Inuyasha se burlo

- claro que no¡¡¡ solo quiero que se explique bien¡¡-

Pero antes de que la situación continuara así y molesta de que era interrumpieran a cada rato Kagome tomo ágilmente ambas botellas y se las pego a los labios a Inuyasha y Kouga, ambos se desconcertaron, pero al sentir el sabor de aquel extraño vino, sus pensamientos se vieron nublados por unos segundos al sentir la gama de sensaciones que ese vino despertaba en cuestión al exquisito e indescifrable sabor que este vino poseía, y que los obligo a dar mas de un trago a esa bebida…

- mm¡¡¡ verdad que esta muy delicioso, a eso venia, a decirles que disfrutemos de estos regalos ya que mañana no creo que nos podamos llevar algo de lo que nos regalaron los aldeanos.

Kouga e Inuyasha cayeron en cuenta que se habían dejado llevar por el sabor del vino así que ambos al ser "despertados" por la voz de Kagome se sonrojaron de sobremanera y al verse a la cara, como un recuerdo fugas paso por sus mentes el encuentro en el río, y fue como adivinar el pensamiento del otro o mas bien temer que el otro descubriese lo que estaban pensando que desviaron la mirada hacia otro lado, a ver a Kagome mas precisamente… Kagome solo sonrió ajena a la situación de ambos chicos y sacando un vaso ( no se de donde XD) se sirvió un poco de la botella de Inuyasha y bebió tranquilamente, mientras sus mejillas se coloreaban al sentirse observada con demasiado énfasis por ambos chicos…

- que?¡¡ no creo que no les aya gustado- Kagome reprocho, sirviéndose un vaso mas, pero esta vez de la botella de Kouga…

- Kagome? Estas proponiendo que…- Kouga se hallaba un poco sorprendido ante la actitud de la chica

- porque quieres emborracharte Kagome?- sin embargo Inuyasha se encontraba mas tranquilo, aun así la observaba con cierta insistencia, y es que verla así ligeramente sonrojada, la hacían verse muy atractiva y su orgullo estaba por los cielos al saber que lo había escogido a el y no al lobo para beber a su gusto y merced, pero le molestaba la situación de que también había otro espectador que iba a disfrutar de la diversión, por que por lo que lo conocía Inuyasha, después de esto Kouga ni de gracia los dejaría solos…

Ambos chicos decidieron acompañar a Kagome en lo que se proponía después de todo ellos no estaban ahí para reprocharle ni nada, ella ya era una mujer como para saber cuando hacer que cosas… sin embargo con lo que no contaban es que aquel vino delicioso los atraparía a ellos también, Kagome había conseguido mas de ese vino amoratado y ahora los tres se reían de cualquier incoherencia dicha por cualquiera de los tres, de hecho la presencia de Kouga o Inuyasha respectivamente no solo se había hecho tolerable para el otro sino que hasta divertida.

Entonces a la platica salio aquel extraño libro que Kagome había estado leyendo unas horas atrás, y había sido Kouga quien había preguntado. Kagome se sorprendió de que Kouga supiera de aquel libro, de hecho si hubiera estado en aunque sea tres de sus 5 sentidos hubiera interrogado aquel hecho, pero bueno, a como estaba ahora, simplemente le dijo que si, que efectivamente era de ella y que de un tiempo para acá se divertía leyendo esas historias… poco a poco la platica comenzó a tener un sentido un poco elevado…

Kag: jajaja, si ese libro es mío, después de todo, esas historia ya me parecen muy interesantes-

Kou: bueno, pero parecen unas historias demasiado picantes-

Kag: si, eso es lo que las hace divertidas… jajaja no crees, después de todo no tiene nada de malo, o si?-

Kou: bueno no pero…

Inu: después de todo en la época de Kagome, hay mas libertades con respecto a todo

Kag: si, me imagino que entonces ustedes nunca han leído algo como esto?

Kou: pues no, La verdad yo no soy de esos hombres libidinosos a los que les gusta robar libros picantes para leer a solas

Inu: ja, te recuerdo que a ti te encanto esa lectura, al grado que se te olvido que yo estaba ahí jajaja

Kou: bueno, pero si no mal recuerdo fue tu idea el que yo la leyera ya que no querías pasar vergüenzas solo jajaja

Kag: ¿¿? De que hablan, no me digan que ustedes ya leyeron el libro?

Kou: solo la parte que a este perro le pareció interesante

Inu: bien yo solo leí la ultima parte de donde Kagome se había quedado

Kag: y bien Inuyasha? Dime (Kagome se acercaba a cuatro patas como gatita en celo a Inuyasha) como te pareció la historia, interesante? (Kagome se apoyo en los hombros de Inuyasha, puesto a que este se encontraba sentado, Kagome no hizo mucho esfuerzo para tumbarlo, de hecho esta pensó que Inuyasha le había facilitado la tarea, dejándose llevar, y quedando Kagome arriba con las manos a los costados del rostro y las rodillas a los costados de las caderas de Inuyasha, aun sin hacer contacto con su cuerpo) dime, te excitó tanto como a mi? (los cabellos azabaches de Kagome resbalaron haciendo contacto con el rostro de Inuyasha quien solo sonrió ante tal estimulante y tan atrevida pregunta)

Inu: mas que la historia, el verte y olerte a ti mientras la leías era mas excitante pequeña (Inuyasha tenia esa voz gruesa y sensual y sujeto a Kagome de la cintura, atrayéndola hacia el para hacer contacto con su cuerpo)

Sus miradas se encontraron demasiado hipnotizantes como para hacer otra cosa, además de sentir la respiración del otro dándole de lleno en el rostro como una fugas caricia calida y que erizaba los poros de la piel, y fue entonces que Kagome se mordió delicadamente el labio inferior, una reacción que Inuyasha ya se había dado cuenta de que la hacia cuando se encontraba nerviosa, pero en este caso hicieron de los labios de la chica algo deseable para el, ligeramente rosados al igual que sus mejillas, y esa delicada y húmeda lengua que se saboreaba dando a entender que probablemente la chica sentía las mismas ganas que el, tal vez por el alcohol, o por el haber estado en vilo durante tanto tiempo hicieron que ambos juntaran sus labios en una calida caricia, pero demasiado rápida para el gusto de ambos y es que Kagome había sido levantada por los aires a manos del hasta ahora espectador Kouga, Inuyasha había sido tomado desprevenido por lo que no pudo evitar la separación con el cuerpo femenino, vio a Kouga y como este lo veía molesto, también como se iba hacia su lugar con Kagome en brazos, así que intento levantarse, pero el repentino movimiento lo hicieron marearse y caer de nuevo en donde estaba, llevándose una mano los ojos como si esto pudiera detener el movimiento giratorio de la habitación… cuando se hubo recuperado se levanto mas lentamente para evitar caer de nuevo y vio con algo de incredulidad como Kagome y Kouga se acercaban lentamente a un beso…

Continuara……………..

No se pierdan la continuación ya que habrá LEMON Y LEMON Y LEMON TRIPLE XD… Nos vemos en el próximo. No olviden sus rewievs XD

Atte: KAGOME KITTY…