Cláusula de exención de responsabilidad: esta historia es un fanfic hecho a base de mi imaginación, los personajes pertenecen a su respectivo creador masashi kishimoto.
Introducción
El lugar donde se encontraba no podía oler peor o eso quería pensar había estado en la misma habitación oscura durante unas cuantas semanas algunas veces las personas que cuidaban el lugar le llevaban un pedazo de pan con algo de agua su estómago gruñía con fuerza, pero no había nada que estuviera en sus capacidades por satisfacerlo unas cuantas ratas se habían comido las últimas migajas del mísero pan.
Sentía la boca seca y pegajosa con un dolor de cabeza ligero que era acompañado de las risas de los hombres fuera de la habitación.
Extrañaba a su madre sus palabras de aliento y aunque su padre siempre la regañaba también extrañaba sus regaños muchas veces creyó oír su voz en las penumbras cayendo nuevamente en una ilusión traicionera.
Los huesos de su columna con cada día que pasaba se hacían más notorios los ninjas enmascarados habían estado al pendiente de que se mantuviera con vida hasta que su jefe decidiera qué hacer con ella.
Sintió en el aire el olor a Sangre fresca pensó que nuevamente habían asesinado a otros prisioneros las suplicas de los prisioneros del lugar rara vez las oía su celda se encontraba más alejadas que las otras y tenían una mayor protección
Sintió la humedad en sus piernas la sangre atravesaba la puerta hasta llegar donde ella se encontraba tenía deseos de moverse del lugar, pero sus piernas no respondían vio desde la puerta de entrada como esta se habría dejado entrar un pequeño rayo de luz.
—come. — ordeno el ninja, pero, aunque esta quisiera levantarse y comer le era imposible, el dolor volvió a su cabeza más fuerte que la última vez, llevo sus pequeñas manos a está intentando calmar el dolor.
Realmente no pensó que funcionaria vio al ninja de la nube arrojado cerca de la puerta aparentemente muerto, sintió como su cuerpo recobraba la movilidad y la sensación de cansancio y hambre había desaparecido.
Corrió y tomo las llaves que colgaban del pantalón del ninja una vez fuera sus pasos desesperados eran lo único que podía oír, unos cinco ninjas que la estaban rodeando tomo su cabeza con desesperación los dolores de cabeza habían vuelto duplicado los ninjas caían uno tras otro no sabía lo que estaba sucediendo las lágrimas corrían una tras otra sin parar.
Levanto la vista viendo nuevamente la misma escena ninjas enmascarados arrojados en el suelo sin pulso y ninguna señal de a ver recibido un ataque, activo el byakugan con la última gota de cordura que quedaba en su cuerpo.
Pudo encontrar la salida con éxito corrió y corrió hasta que cayó derrotada en un pequeño arrozal sus ojos se fueron serrando pudo ver la sombra de un anciano sonrió inconsciente y fue cerrando sus bellos ojos blancos.
Había logrado escapar