Disclaimer: La película Mulan y sus personajes no me pertenecen.
Rice again
Chien-Po estaba harto. Desde que llegó al campamento no hubo un día en que no comiese arroz, hervido en el almuerzo y en caldo, que más parecía agua sucia con algún puerro flotante, a la noche. Los viernes eran, por lejos, el mejor día, ese día podía saborear algunos pedazos de pollo desmenuzado, aunque, claro, había tenido que buscarlos, cual cazador furtivo, en el morro de arroz de donde se servían las porciones.
Por supuesto que el entendía que estaban en periodo de guerra y que esa comida, tan barata y propia de su país, era la mejor opción. El hecho de que interpretara la situación de esta forma, que la comida, aunque repetitiva, no fuese desagradable y que tuviera un carácter sumamente afable y relajado, era lo único que evitaba que fuera a expresarle claramente su opinión al cocinero.
Eso no quería decir que aceptara la situación y mucho menos que se resignase. Por ello siempre estaba buscando algo más para llevarse a la boca. Cerca de donde practicaban artes marciales, por ejemplo, había un nogal donde muchas veces sus compañeros iban a parar de una patada y él siempre estaba atento para recoger las nueces que cayesen.
Fue ese árbol, y sus frutos, el que permitió que se granjease el afecto de sus compañeros de armas. Por muy hambriento que estuviese y aunque no hubiese logrado recoger más de veinte nueces, su corazón generoso lo incitaba a compartirlas con todo el campamento (¡incluso con cara de arroz!). Entonces, cuando todos volvían desasosegados y arrastrando los pies a sus respectivas carpas, el deslizaba silenciosamente algunas en las manos de quienes habían ayudado en la recolección, es decir, quienes tenían un chichón o un ojo morado, cortesía del Capitán.
Todos los soldados notaron esta atención y no dudaron en devolvérsela, con pequeños gestos. No le gritaban cuando su temor al agua provocaba que todos terminasen zambullidos, y cuando logro hacerlo sin dudar en un solo tronco recibió calurosos aplausos. Le ofrecían sus pedazos de pollo desmenuzado y cuando se armó la Fiesta de los Peces le dieron la porción más grande. Además muchas noches se encontraba con algún bocadillo en su carpa, ya fuesen bayas, algunas pequeñas patatas e incluso, en una oportunidad, un tazón de arroz con verduras.
En esa ocasión, mientras usaba los palillos de arroz que le había regalado su abuelita, «Guárdalos para una ocasión especial» le había dicho, pensó que si habría de comer arroz por lo que le quedaba de vida, solo lo haría si era compartiéndolo con esos hombres.
¡Hola a todos! Espero que les haya gustado la viñeta y si no es asi por favor ¡díganmelo en un review! Quiero mejorar, pero uno no suele ver sus errores (le tengo especial miedo al OoC) a menos que se lo señalen.
No suelo poner títulos en inglés, pero así le decía mi madre a mi abuela cuando en épocas de vacas flacas ella cocinaba arroz muy seguido. Tomenlo como un pequeño homenaje a ellas.
Mi idea es escribir seis viñetas, con los personajes más importantes del periodo de entrenamiento de los soldados.
