2D recuerda, claro que sí. Que todo lo que vivio con Murdoc fue hermoso, pero todo en la vida tiene un final.
Y no importa cuántas veces el moreno golpee al menor, no importa todo el daño que este le ocasione. El siempre estará allí, o al menos estaba hasta el día de hoy. Para quererlo.
Por eso soporta todo maltrato proveniente de su compañero. Pero..
-Ya no podemos vivir juntos Muds, me voy de la banda.
Murdoc abre la boca horrorizado, procesando en su mente algún insulto, o algún chantaje para mantenerlo a su lado.
Es cruel pero Stuart ya no soportara mas, las cicatrices y el dolor son inimaginablemente tortuosas, como si una espada te apuñalara diariamente, con cada paso dado.
Él se pone en pie, alargando los brazos hacia el, entrando en su habitación, está haciendo la maleta y se sobresalta, comenzando a temblar.
Si bien él nunca le hizo daño a Noodle, como había prometido en mas de una ocasión, le ha hecho bastante daño. Suficiente como para justificarse: Le abollo el cráneo hundiéndole ambos ojos. Trato de ahorcarlo...e incluso lo secuestro, para obligarlo a cantar.
¿Puedes tener una relación con alguien que ha hecho esas cosas, siquiera sin querer? Cyborg Noodle no tenia tanta culpa como él, a fin de cuentas ella solo seguía ordenes, por progamacion. Ya tenía que cuidarse mucho en su presencia.
2D encontraba excusas con frecuencia para justificar a sus amigos desaparecidos. Más tratándose de su novio, que dormía a su lado por las noches.
Murdoc abre la boca para hablar, pero este se ve interrumpido por el peliazul.
-Perdón.- se limito nada mas a decir eso.
La confianza es igual que la sangre derramada por los soldados,no regresa. Si bien solo 2D puede saberlo a ciencia cierta.
-Bueno, el lugar este es de tu propiedad, ¿no? supongo que regresare a la casa de mis padres...solo por un tiempo, luego iras por mi. Por favor.-Porque aunque el daño sea mucho, 2D no se imagina una vida sin el moreno. Por eso se ira, para darle tiempo, y que este no tenga que lidiar con su estupidez diariamente.
Murdoc seguia inmóvil, de pie, junto a la puerta de la habitación.
-Por favor..-suplico nuevamente el peliazul.
Sería más fácil si lo fuera pero Murdoc es el héroe que supuestamente le salvo la vida, la peor de las amenazas también.
-Hay mucha comida en el refrigerador. No tendrás que cocinar en varios días.
Murdoc no dice nada. Se queda allí, esperando el típico ''era broma! no te molestes Murds...'' seguido de una carcajada, ni siquiera le da aviso a la Cyborg de venir, detener las acciones del menor y volver a drogarlo con somníferos. Pero nada de eso ocurre.
2D ya ha tomado la decisión. Las lágrimas le colman los ojos cuando se dirige a la puerta, convencido de que él se flipeará y esta vez, posiblemente, no le perdonase la vida, hundiéndole el cuchillo tantas veces que su delgado cuerpo quede hecho tiras, mientras se desangra.
No sucede. Es más fácil de lo que pensó o lo sería si ni bien se cierra el portal a sus espaldas, no se quedara de pie allí largo rato, como si algo muy importante le hubiera fallado en el guión elaborado.
