Saludos, este es mi primer fanfic. Por lo tanto no tengo mucha experiencia escribiendo que digamos xD
Pero espero que disfruten esta pequeña historia tanto como yo disfrute haciéndola, ya que adoro este shipping, y se que a muchas otras personas también.
La historia se ubica cronológicamente después de que Ash regresa del archipiélago Decolora, alterando un poco la historia, y mostrando un hilo alterno en donde Ash tiene una pequeña "aventura" con Anabel, líder y cerebro de la torre de batalla. A la cual no ha visto desde su enfrentamiento con ella... Antes de que este tenga que seguir su aventura en la otra región.
Pienso alterar un poco la personalidad de Ash, basándome en su edad actual, (16 años), ya que a esa edad pienso yo. Que la pubertad haria cambios en sus intereses, y consideraria el intimar con una de las pocas chicas que genuinamente han demostrado interés por el xD
Pokemon y todos sus personajes le pertenecen a Game Freak y a Nintendo, yo como muchos servidores aquí, solo hago uso de ellos para crear un punto de vista alterno que el dado en la serie, para brindar entretenimiento sin fines de lucro, de fans, para fans.
Sin mas que decir, allá vamos...
Capitulo I: Nuestros Caminos de Acercan
-Ahí esta- dijo un joven entrenador de pelo negro y tez clara entrando a su habitación, al ver su querido estante lleno de premios y uno que otro trofeo.
-Algún día conseguiré mi sueño, paso a paso, ¿no es verdad amigo?- dijo Ash Ketchum, a lo cual su rata amarilla y su fiel compañero que cargaba en su hombro, asintió con una sonrisa... Para después posicionar con orgullo un estuche lleno de 8 medallas de gimnasio, que había ganado en su recorrido por la región de Unova, junto con los demás premios que ha conseguido durante todas sus aventuras.
Después de regresar de la ultima región, tras haberse despedido de sus últimos amigos, Cilan, Iris y también Alexa, extrañaba su hogar y le entraba un aire de nostalgia el sentir la misma sensación de siempre, cuando regresa a su cuarto después de viajar.
-¡Algún día seremos los mejores!-
-¡Pika Pi!- Gritaron los dos amigos.
Justo después, los dos se apresuraron y bajaron las escaleras con emoción hacia la sala de la casa, a seguir con su día.
Mientras que en otro lugar de la región de Kanto, una joven adulta de pelo morado, se encontraba es su casa, preparándose para una batalla, contra un retador que en ese momento, estaba desafiando la torre de batalla.
Esa entrenadora era mas y nada menos que Anabel.
-Aaaaah- Suspiro la cerebro de la frontera.
-Aunque no suelo recibir muchas visitas en la torre, por la naturaleza de la asociación en la que pertenezco, los contrincantes han estado muy aburridos últimamente-
-No me he divertido desde hace mucho, la ultima vez que recibí un buen reto fue, creo.. hace 2 años, si de peleas pokemon se trata- suspiraba acercándose a su querida Espeon, acariciándole en la cabeza.
-Aun recuerdo cuando solíamos tener esas grandiosas batallas cuando eras un pequeño Kadabra, ¿o no amigo?-
-Alakasam- le dijo su pokemon psíquico con rubor en sus mejillas.
-O cuando pasábamos todo el día entrenando, ya que nunca te ponías al día Metagross- veía a un lado su gran pokemon metal que abarcaba un gran espacio en la habitación, un poco avergonzado de su bajo desempeño y rendimiento cuando era un pequeño Beldum.
Anabel, que tenia un gran lazo con su equipo, a quienes considera sus mejores amigos y compañeros, podia entender todo lo que sus pokemon psiquicos le comunicaban telepaticamente.
Todos recordando lo divertido que era entrenar y batallar cuando Anabel aun viajaba junto con ellos, hizo que empezaran a reír de repente, por todos los buenos tiempos que habían vivido juntos.
-Bueno, es hora mis amigos, ¡tenemos una batalla que librar!- Le decia a sus tres pokemon que se hallaban en su sala antes de que los metiera en sus pokebolas y se dirigiera a su lugar de trabajo.
¡Ash!... Ya esta listo el desayuno!- gritaba Delia a su querido hijo que se dirigio directamente a la cocina.
-Buenos días mama-
-Pika, pika-
-Te vez con hambre, como siempre hijo mio- le decía su madre con su característica y cariñosa sonrisa.
-Disfruta del desayuno- Dijo al mismo tiempo que deslizaba un plato de huevos fritos, un pequeño emparedado y un juego de naranja al lado... Después le dio a Pikachu un plato lleno de comida Pokemon.
-Y dime Ash-
-¿Que?-
-No hemos dirigido casi palabra desde que llegaste-
-¿Te divertiste mucho en tu ultimo viaje?-
-Por supuesto que si mama!, conocí nuevos amigos, al igual que muchos pokemon que nunca había visto antes, aunque pase por una gran cantidad de peligros, siempre salia ileso junto a mis compañeros-
Delia, cambiando su serena cara, por una mas seria al oír lo ultimo, le dijo preocupada pero feliz al mismo tiempo:
-¿Y ganaste el torneo Ash?, la liga Pokemon de la región?- Le preguntaba ansiosa su madre que curiosamente mostraba gran interés por ello, cuando nunca le había importado de esa manera.
-ammmm, no... Lo siento mama- dijo el chico avergonzado.
PLAMMMMMMM* se tiro su madre hacia atrás con un tono morado y una gota en su frente con decepción en su cara.
Reponiéndose al instante, dijo en voz baja con los ojos cerrados y sus brazos levantados en señal de rendición:
-Ooooohhhh- -mi querido hijo lleva tanto viajando y aun no esta cerca de su sueño-
-¡Mamaaa!- decía Ash avergonzado
-Sabes, los rivales a los que me enfrente en esa liga eran muy fuertes, hice todo lo que estaba en mi mano, y aunque no pude vencerlos. Les di mucha batalla!-
-Ademas, yo he ganado la Copa Naranja antes-
-Aunque esa no cuenta mucho que digamos- dijo Delia con un tono algo burlón
-¡MAMA!-
-Bueno, bueno, era una broma hijo- Empezando a reír un poco, para después su hijo corresponder y hacer lo mismo.
Delia se levanto de su silla, se puso en frente de Ash tomándolo de los hombros, y mirándolo con ojos brillosos, le dijo:
-Hijo, no importa todo lo que tengas que viajar, con tal de que seas feliz en tu viaje, y así vivas la vida a tu manera, siguiendo tus metas con integridad y convicción-
-Yo seré la madre mas feliz del mundo, y seguiré orgullosa de ti por todo lo que has logrado-
-Lo haré mama!, te lo prometo!- dijo el ya adolescente chico, levantándose emocionado.
-Has crecido tanto hijo, cuando te fuiste de aquí, apenas tenias 10 años-
-Y mírate ahora, eres todo un hombrecito de 16- Dijo con gusto su madre para después murmurarle con un tono mas pícaro.
-Y dime Ash- ¿Durante tus viajes has tenido alguna chica especial?.
-¡¿QUE?!- dijo con exaltación el muy inocente chico.
-Ya sabes, una novia, alguien con quien te hallas besado, alguien con quien te abraces y con quien compartas todo.
E incluso con quien te hallas acosta...-
-¡Basta mama!, te entendí al principio-
-Y mi respuesta es no, nunca he tenido tiempo para esas cosas- le decía muy avergonzado y con la cara completamente roja.
-Oh, Ash... tampoco era para que te pongas así- le dijo sonriendo ante su demostración de inocencia y vergüenza.
-Es parte de la vida y algún día te tocara-
-Yo a tu edad por ejemplo, era bastante avanzada en ese asunto, estuve con muchos, PERO MUCHOS hombres, antes de conocer a tu padre- Enunciado al cual su hijo se asqueo un poco.
-Porque si quieres, puedo contactar a algunas de mis amigas, cuyas hijas tienen casi tu misma edad, y podría presentártelas para...-
-¡Suficiente mama!, lo digo en serio, no tengo tiempo y no es algo que me interese mucho!- le dijo aun con un tono avergonzado pero mas tranquilo que el anterior.
-Bueno, como quieras hijo- le dijo reincorporando su característica expresión de serenidad.
-Dijiste que querías visitar al profesor Oak, ¿verdad?-
-Si. No lo he visto desde que separe caminos con Alexa cuando veníamos hacia acá-
-De verdad quería hacerle esa entrevista al profesor apenas piso el pueblo. Aunque me hubiera encantado que la conocieras-
-Bueno, me iré directamente a su laboratorio-
-¡También estoy muy ansioso por ver a mis queridos pokemon en el establo!- Dijo Ash emocionado para después correr hacia allá.
-¡Cuídate hijo!, mandale saludos al profesor por mi-
-¡Mime!- Grito tambien el pokemon psiquico de Delia despidiéndose de Ash.
Pero mientras Ash caminaba, un pensamiento golpeo su mente de repente.
¿De verdad nunca le importo su vida amorosa?, nunca se había pensado el tener una pareja ya a su edad de adolescente?.
Su mama simplemente mino su cabeza con lo que le había dicho. Y se pregunto, que cómo habiendo viajado durante tanto tiempo con compañeras femeninas?, y habiéndose hecho amigo de tantas chicas distintas?, nunca pudo haberle importado el sentir atracción en su vida?, así como lo hacia y lo sigue haciendo su viejo amigo Brock.
Pensó Ash recordando lo hilarantes que eran las declaraciones de su amigo, y como siempre era interrumpido.. Esto le trajo una pequeña sonrisa en el rostro.
En sus viajes, el en raras ocasiones solía ver revistas pornográficas a escondidas, para sacar su curiosidad y calmar sus hormonas. Pero de verdad nunca le importaba el amor como asunto serio.
-¿Sera que en verdad nunca he tenido el tiempo, o es que siempre he buscado una excusa para evitar de esta manera, esa parte tan común en la vida?-
Se decía el joven mientras se sonrojaba un poco, sintiendo algo que casi nunca sentía, al intentar recordar a muchas de las chicas que quizás, se paso de largo en sus aventuras.
Es algo que lo intrigo y lo dejo pensativo durante todo el trayecto hacia el laboratorio del profesor Oak.
Fin del capitulo
Bueno, he aquí la introducción de esta historia
Al principio pensé en hacer de esto un lemon oneshot entre Ash/Satoshi y Anabel/Lila, pero queriendo extender un poco mas el argumento antes de llegar al lemon xD. La historia me terminara quedando e capítulos.
Agradecería mucho la critica constructiva para quien quiera dármela, ya que soy nuevo y debo de tener muchos errores de los cuales no me debo de dar cuenta. Hasta luego.
