Hello. Les traigo esta historia rara que se me ocurrió no sé cómo.

¡Espero le guste!

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Unas Inocentes Preguntas

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Boomer caminaba de la mano de su pequeña hija de cinco años, mientras la pequeña estaba más pensativa de lo que normalmente estaba –Ya que era una loca. Iban de regreso a casa luego da haber ido a jugar al parque, ya que la pequeña había tironeado a su padre y ordenado que la llevara. Y como el pobre de Boomer consentía a su pequeña hija, la llevo.

La pequeña dudo un poco antes de preguntar:

–Papa ¿Qué es ser Gay?–El pobre Boomer estaba que se salia corriendo ante esa pregunta. Y eso que pensó que la primera pregunta que le aria, era de cómo venían los bebes. O cómo se hacían. Y la verdad, hubiera prefrido esas preguntas a esta.

–Es... bueno. ¿Viste que las princesas esperan a sus príncipes?–La pequeña asintió sin entender. –Bueno, esto es cuando las princesas, no son princesas sino príncipes. Y estos príncipes esperan a sus príncipes.

–¡Entonces yo soy un príncipe!–Ok, no había entendido nada de lo que Boomer le había dicho.

–No.. no. Tú eres una princesa. Pero... lo que te estoy tratando de decir es... queaunhombrelegustaotrohombre.–lo dijo tan rápido que la pequeña pensó que su padre tenia problemas.

–¿He?

–¡Bien! Que. A. Un. Hombre. Le. Gusta. Otro. Hombre.–Lo dijo en susurro hacia su hija. Para que las pocas personas a su alrededor no lo escucharan ni lo vieran como mal padre.

–Ahhh... ¿Y qué es lesbiana?

–¿De donde sacaste estas palabras Masturi?–Pregunto Boomer a su hija Masturi, ya que no podía más.

–Las escuche de un Hombre y de una Mujer que están jugando a los manchados en la cabeza. Y se gritaban estas cosas.–La inocente niña ni siquiera pudo entender que lo que había visto era en realidad una pelea bastante violenta entre un hombre y una mujer. Y no un juego de manchados.

–Uff...–A Boomer casi le dio un ataque al pensar en su pequeña niña en medio de esa pelea.

–¿Pero me dirás papá?

–Dios porque a mí... Esta bien. Este es alrevez. A una mujer le gusta otra mujer.–La pequeña Masturi asintió un poco confundida.

–Entonces, eso significa que ¿yo soy gay y tú lesbiano?–Se lo juraba. Esta no era la mejor pregunta. Pero no pudo responder ya que la pequeña salio corriendo en cuanto vio a su madre Miyako hablando con su tía Momoko y Kaoru. E lo peor es que se fue gritando:

–¡Mamá, Tía Momoko, Tía Kaoru soy Gay!–Haciendo que las dos voltearan a ver el parloteo de la niña. Y un escalofrío lo cubrió al ver sus miradas sombrías que las tres le dirigían.

Luego de una gran paliza y de explicarles a las tres mujeres psicópatas lo que paso. Se dirigió con chichones hasta por lugares que no sabía que podían doler tanto, hasta su casa. Donde su pequeña hija jugaba tranquilamente con sus sobrinas. Bueno, eso hasta que vio entrar a su padre y fue directamente a él, preguntando:

–Papa ¿De donde vienen los bebes?

Y de ahí salio corriendo dejando a su hija con la intriga. Y a los demás desconcertados.

Y bueno. El pobre de Boomer no podía soportar más las preguntas inocentes de su hija. Y bueno, no cualquier padre habría resistido tanto como él.

Sí, unas inocentes preguntas podrían causar tanto daño o miedo sin que las personas que la preguntan se den cuenta.

Y más una pequeña niña de cinco años que con una sonrisa en los labios jugaba con sus primas tranquilamente.

Mientras que el pobre de Boomer ya estaba hasta corriendo y ganándoles a todos en una maratón en la que se había metido mientras corría.

Y sí, solo por unas inocentes preguntas de una niña muy curiosa.

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Fin

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Hasta La Próxima