Conversación con Shippo

-Cree que a partir de ahora tendrás un clud de fans- Se reía la joven miko de su amiga.

-La broma ya llega tarde- Suspiro la hanyou.

-¡En serio!- Y con eso la chica no paro de reírse de Inuyasha en un buen rato, La inu ya estaba crispando las orejas de enfado.- Perdona, perdona. Auh!¡No por favor, que me salen muchos cardenales!- Seguía bromeando la miko.

-Keh! Como se nota que no te pasa a ti.- Suspiro- Kagome, que piensas que debo de hacer con Shippo.- En un segundo, la chica paro de reír, para volverse más seria.

-No se Inuyasha.- Empezó a tocarse con la mano detrás de la nuca- Se que no te gusta esto pero.. Somos humanos, no vamos a estar con ustedes mucho tiempo, ¡Kami-sama, si estoy rezando para no envejecer a mucha rapidez para no sentirme desplazada cuando tu sigas lozana!- La ino sonrío con tristeza, para su desgracia la miko tenia razón.

-Si él quiere, no me molestaría en ser su madre...- En verdad le encantaba la idea, desde que descubrió su lado femenino había tratado a Shippo como si fuera su cachorro.-Sí, si él quisiera...

-¡Pues ya estas tardando!- Y con esas, su amiga fue donde el niño jugaba.

-Shippo- El niño miro a la inu con ojos de estrella, que maternizo la aptitud de Inuyasha al momento- Ven quiero mostrarte algo.

Cogió al niño en brazos y salto al árbol más cercano, hizo su camino de rama en rama, hasta llegar al prado que ahora estaba recubierto con flores silvestres. Coloco al chico con cuidado en el casto, para luego sentarse con gracia a su vera.

-Shippo, ¿Qué piensas de mí?- No sabía como entrar le, así que decidió tantear el terreno. El niño pareció tomarse en serio la pregunta, medito bien la repuesta.

-Creo que me gustas. Bueno antes ya me gustabas, pero llegabas a ser... molesto y algo engrudo de tragar- La inu acepto la respuesta, ella misma reconocía que había llegado a ser "algo" bastante insoportable.- Pero... ahora me encantas, incluso puede que igual o más que Kagome.- Tuvo que sonreír a eso, era linda su actitud.

-Y..¿Qué te parece que pueda adoptarte?- Shippo se quedo pillado, se quedo sin expresión durante un tiempo -"¡Mierda! ¡La he jodido!"-B- Bueno, si no te gusta la idea, podemos hacer como..-

-¡Me gusta!- Inuyasha miro al chico, sus ojos verdes chisporroteaban de la emoción, lágrimas retenidas en las esquinas, por un intento de hacerse el valiente.

Inuyasha abrió sus brazos en espera de un abrazo, que en un momento fue rodeada por unos cortas y tiernas extremidades del chico. Pronto su hombro estaba recubierto por húmedas y calientes gotas de agua salada, temblores sacudían al niño obligándolo a hipar, haciéndole difícil respirar.

-Tranquilo, tranquilo, ya paso mi cachorro...- Un agradable cosquilleo aleteaba en el estomago de la inu. Shippo, con sonrojadas mejillas y ojos llorosos, miro a su nueva madre, mientras esta limpiaba sus carnoso rostro con la manga del hayori.

-Muchas gracias, oka-san.- Una adorable sonrisa surco por sus temblorosos labios. Creando una escena maternal en el agradable claro.