Disclaimer: Naruto no me pertenece.
Ramen, ramen
Sasuke y Sakura habían llegado de una misión de tres días, ahora lo único que tenían era hambre.
Entraron al departamento en el que vivían ellos junto con Naruto, el equipo siete. Sigilosamente pasaron por la sala y fueron a la cocina, ya que si despertaban a Naruto tendrían que escucharlo gritar chorradas que no tenían ganas de escuchar. Además de que media aldea despertaría —junto a una enojada Hokage que le echaria la bronca a Naruto—.
Sasuke se sentó en una silla y Sakura comenzó a buscar algo que preparar, y si era mejor, cuanto antes.
—¿El Dobe se comió todo? —preguntó cansadamente Sasuke.
Sakura negó con la cabeza, mientras seguía revisando los cajones en busca de algún alimento.
La vida de Naruto era, adorar al ramen, ver alguna chorrada por televisión —más precisamente, novelas que chorrean miel—, joderle la vida a alguien y gritar a los cuatro vientos que va a ser el próximo Hokage de la aldea de la Hoja.
—Mira Sasuke-kun, hay ramen —dijo Sakura sacando una lata de ramen instantáneo.
—Agradece a Kami que el Dobe no se lo haya comido todo —murmuró el Uchiha, haciendo un esfuerzo sobre-humano por no parecer somnoliento.
—Umh —Sakura empezó a leer lo que decía en la lata—. Verter el ramen. Dejar hervir diez minutos… —se volteó hacia Sasuke— ¿Quieres comer ramen?
Sasuke la miró como si la respuesta era obvia. Podría comer hasta piedras, pero el ramen sabia mejor.
Escucharon un ruido de la sala y los dos se voltearon. Como materializado de la nada, en el umbral de la entrada a la cocina, había aparecido un Naruto todo despeinado y bostezando.
—¿Alguien dijo ramen? —preguntó con un bostezo acercándose y sentándose en una silla.
Sasuke y Sakura se miraron sorprendidos —aunque Sasuke no lo mostrara tanto—.
—¿Cómo mierda escuchaste que dijimos ramen? Si hablábamos en susurros —dijo la pelirrosa ya con voz normal.
—Uhm… no se. Algo en mi estomago me dijo que alguien había dicho ramen 'ttebayo —dijo Naruto rascándose nerviosamente la nuca, volviendo a despeinar su rubio cabello.
Parecía ser algo matemático, decir tres veces ramen y se te aparecerá el adorador numero uno del ramen. Y seguramente no dejara de joderte la existencia hasta que le des un poco.
—Sakura-chan... ¿me preparas un poco de ramen?
