Hola mis adorados lectores, no pude evitar no escribir y me puse a escribir otra vez (se me volvió un vicio u.u) Muchas gracias por todo su apoyo en la historia anterior. Tengo que decir una cosita que va para todas mis historias: todas las historias son versiones mías de cómo Robin y Starfire se vuelven pareja, entonces ni esta ni otra historia que escriba tiene que ver con otra. Bueno, empezamos.
Aprendiz
Chapter 1:
Caída
Era una noche en Jump City, nuestros héroes estaban descansando. Pero, cierta tamaraneana tenía pesadillas…
(Punto de vista de Starfire)
Corría, no sabía porque, pero todo lo que sabía era que tenía que correr. ¿Por qué corría? ¿Estaba huyendo acaso? Y si fuera así… ¿De qué huía? No podía usar mis poderes, pero aunque sea podía correr. Cada vez sentía que corría más lento. Eso me frustraba, ¿por qué no podía ir más rápido? Sentí que me ahogaba y pare de correr. Sentía que me faltaba aliento, luego una risa retumbo en el lugar donde estaba, esa risa era la risa más aterradora que había escuchado en mi vida. Luego un grito desgarrador, de esos que emites de puro dolor o de esos videos que traumaban a Chico Bestia de que todo era normal por un momento y luego escuchas a alguien gritar a todo pulmón. El grito no paraba de sonar y se volvía más fuerte. Quise taparme los oídos pero no podía, algo me impedía moverme. Sentí más terror, el pánico invadió mi cuerpo.
Desperté, estaba boca abajo, me estaba asfixiando con la almohada… que estúpida era. Estaba sudando en frio. Miré el reloj, 3:46 a.m. No me importó la hora y me fui a la ducha. Necesitaba refrescarme y borrar esos pensamientos. Tomé mi toalla, un nuevo pijama y todo lo que necesitaría para cambiarme en el mismo baño. Así iría a mi cama ya lista para dormir. Me fui a la ducha y me comencé a bañar, tenía razón, me estaba relajando. Salí de la ducha y me puse mi nuevo pijama, era un pantalón color esmeralda y un polo de tiritas del mismo color. Seque mi pelo con la toalla y me fui nuevamente a mi cuarto. Me recosté en mi cama y cerré mis ojos. Inmediatamente los abrí, las imágenes, voces y sensaciones invadieron mi mente haciendo que no pudiera dormir. Me puse unas pantuflas y me fui a la azotea. Si no iba a dormir aunque sea disfrutaría de la hermosa noche que se presentaba.
Me dedique a ver las estrellas, eran grandes hermosas y resplandecientes. Comencé a sentir frio y me fui adentro de la torre otra vez. Por X'hal que aburrida estaba. Me dedique a pasear por los pasillos. Me dirigí a mi cuarto. Pasaron 2 horas. Ya iba a amanecer entonces me puse mi ropa de combate.
Se anunciaba el alba. Y me fui a la azotea para recibir los rayos del sol. Necesito el sol para mis poderes, si estuviera 3 días sin sol ya no tendría poderes excepto volar y mi súper fuerza que se comandan por mis emociones. Era un hermoso amanecer. Sentí la calidez del sol influir sobre mi piel.
-Buenos días, Star.- dijo una voz detrás de mí.
-Buenos días, Robin.- dije, yo reconocía su voz donde fuera.- ¿Qué haces despertado tan temprano?- le pregunte.
-Me encanta el alba.- dijo con una sonrisa.- ¿Y tú?
-No podía dormir, entonces vine aquí para recibir los rayos del sol.- le respondí.
-Ya veo, ¿Tuviste pesadillas, eh?- dijo.
-Sí.- le dije recordando la pesadilla.
-¿Quieres hablar de ello?- me pregunto amablemente.
-No, la verdad no…- dije.
-Claro…- dijo.
Me quede mirando el alba, era hermoso y más todavía con Robin a mi lado. Pero, no le podía decir lo que sentía por miedo a no ser correspondida. Era mi amor secreto.
-¿Quieres bajar a desayunar?- me pregunto sacándome de mis pensamientos.
-Claro.- le dije con una sonrisa.
El me sonrió y me hizo un gesto de que lo siguiera, yo hice caso y nos dirigimos a la cocina. Nadie se había levantado aún. Robin se dedico a preparar los waffles. Todo iba bien hasta que la alarma sonó tiñendo la habitación de rojo. Los demás titanes se reunieron con nosotros.
-Viejo, ¡interrumpiste mi sueño embellecedor!- dijo chico bestia fastidiado.
Raven le golpeo la cabeza. Cyborg se dirigió a la computadora para ver cuál era el problema.
-¿De quién se trata?- pregunto ansioso Robin.
-Slade.- dijo Cyborg.
-¿Dónde está?- pregunto Robin molesto.
-En la vieja minería.- respondió cyborg.
-¡Titanes vamos!- dijo Robin autoritariamente.
Nos fuimos al garaje, Cyborg fue en su auto, Robin en su R cycle, Chico bestia se transformo en águila y voló junto a Raven y a mí. Nos dirigimos a la minería, donde se encontraba Slade. Cuando llegamos entramos adentro, estaba oscuro. Entonces iluminé el lugar con uno de mis Starbolts.
-Aquí no hay nada.- dijo Chico bestia.
-No estés tan seguro.- dijo Raven apuntando un montón de robots que efectivamente eran de Slade.
-¡Titanes ataquen!- grito Robin.
Nos lanzamos a la batalla, yo comenzaba a disparar mis starbolts los más grandes posibles para que al mismo tiempo ilumine la habitación. Todos, peleamos un buen rato hasta que la tierra comenzó a temblar. Luego me percate que el techo se estaba derrumbando.
-¡Tenemos que salir de aquí el lugar se va a venir abajo!- grito Cyborg.
-¡Titanes corran!- dijo Robin.
Nos dirigimos a la salida. Pero, una roca golpeo muy fuerte la pierna de Robin haciendo que grite de dolor y vaya más lento.
-¡Robin!- grite y me dirigí a él para agarrar sus brazos y poder sacarlo de allí volando. Los demás ya estaban a salvo afuera de la minería. El techo estaba a punto de caer encima de nosotros. Lance a Robin afuera de la minería poniéndolo a salvo.
-¡Starfire!- grito cando vio que el techo me iba a caer encima.
Yo puse mis manos arriba, para evitar que el techo me aplastara. Estaba cargando más de lo que podía soportar. El techo me iba a matar. Me concentre en algo feliz para obtener más fuerza. Pero, esa era toda mi fuerza no podía más. Mis brazos se cansaban. Hubo una explosión debajo de mis pies haciendo que caiga a un abismo. Trate de volar pero, no veía nada. Encendí mis starbolts para ver adonde me dirigía. Divise un camino para huir y comencé a volar para salvar mi vida. Pero, una roca me cayó en la cabeza dejándome atontada. Comencé a caer y caer. Espere el frio impacto contra el piso, pero, en vez de eso unos brazos me cogieron antes de caer al piso, no sabía quién era, pero me había salvado. El golpe en mi cabeza era muy fuerte y no me permitía abrir mis ojos. Poco a poco comencé a sentirme inconsciente y me sume a la profunda oscuridad sin saber que me esperaba.
Bueno mis amados lectores, ese es el capítulo de hoy. Espero que les haya gustado y hasta l próximo capítulo :3 No olviden dejar reviews y cuídense! :D
