Kagura Yukai, alumna de primer año de bachiller, chica de pocos amigos, entre ellos, Yura Sakasagami, una joven de pelo negro con una actitud indiferente hacia los demás, le importa poco lo que piensen de ella y siempre lo deja muy en claro, a diferencia de Kagura quien constantemente actúa como piensa que los demás quieren que sea, nunca muestra su verdadero ser, con la excepción de Yura ,con ella es brutalmente honesta respecto a todo, en fin, su única verdadera amiga.

Un día que Yura no fue a clase, Kagura se vio obligada a juntarse con tres chicas de otra división, Rin, Ayame y Kikio, con sus respectivas parejas.

Sheshomaru se encontraba abrazando a Rin ,Ayame con Koga, apenas agarrados de las manos, y para la desgracia de Kagura, su amado en secreto, Inuyasha, dándole un beso de despedida a su novia Kikio mientras se marchaba apenas notando la presencia de la pobre Kagura.

Hace un tiempo Inuyasha y Kagura estuvieron saliendo, y hablando mucho por diversas redes sociales, pero un día el apareció en la escuela con Kikio y se olvidó por completo de ella sin dar ninguna explicación.

-che Kagura, no sé si se conocen, él es Sheshomaru, mi novio-dijo rin sonriendo-

-ah si, creo que te crucé alguna vez por la escuela ¿verdad?-dijo Kagura sin mucha importancia.

De pronto Ayame y Koga se pararon y entraron al baño de chicas.

-ellos están juntos ¿verdad?-pregunto ingenua Kagura-casi ni se tocan en público, que raros son-pensó.

-emm si algo así pero Ayame es muy tímida y no deja a Koga tocarla-dijo Sesho riéndose de su gran amigo.

Al finalizar el horario de clase Kagura fue como siempre sola hacia su parada esperando que pronto finalice el día ,pero para su sorpresa al subir al colectivo ahí estaba Sheshomaru, quien la reconoció y saludo con una sonrisa en la cara(N/A: a diferencia de en el anime acá es muy alegre y expresivo) ella solo sonrió y se acercó a él.

-¿te tomas esta línea? ¿Por dónde vivís? –pregunto Kagura alegre de no volver a su casa sola de nuevo.

-jaja si vivo a una veinte minutos del colegio pero hoy no quería caminar –dijo sonriendo haciendo una burla amistosa con la cara-

-puedo quedarme un rato con vos?-pregunto Kagura temiendo a la respuesta

-….si! Obvio sentate acá-dijo el mientras se paraba para dejarle el asiento a la chica que tenía una gran sonrisa en la cara.

Siguieron hablando un rato hasta que él se despidió y bajo del bondi dejándola con una sonrisa en la cara, y la alegría de haber hecho un nuevo amigo.

Faltaba poco para el cumpleaños de Yura y Kagura le estaba armando un CD con una recopilación de sus temas favoritos, cuando finalmente fue la fiesta, y los invitados empezaron a llegar, Kagura quedo en shock al ver a Inuyasha entrando como si nada, saludándola y preguntándole como la estaba pasando, como si nunca hubiese pasado nada, más tarde, mientras todos jugaban verdad o consecuencia:

-bueno ¿a quién le toca?-pregunto Kagura.

-A Inuyasha -comento Miroku, el mejor amigo de Inuyasha.

-¿yo? Bueno...Kagura-la miro fijamente y ella se sonrojó.

-¿si? Verdad.-dijo ella con algo de miedo.

-¿…Seguís enamorada de mi?-dijo el como si nada, como si fuera lo más normal del mundo, como si preguntara "si quieres manzana o naranja" o "si es de noche o de día".

-…-Kagura no sabía que decir, claro que seguía enamorada, era la persona más enamorada de la fiesta pero no podía decirlo como si nada, y menos frente a toda esa gente, entró en pánico, no sabía cómo responder ,sintió un nudo en la garganta y como le clavaban un cuchillo justo en el estómago, con toda su fuerza artículo una palabra, un monosílabo-…no.-sentencio dejando al público un poco decepcionado y con una gran duda por si ese "no" fue real.

-está bien –comento Inuyasha algo decepcionado pero aparentando indiferencia- ¿quien sigue?-queriendo saltear el asunto restándole importancia.

La fiesta ya estaba terminando y todos se despedían menos un individuo, Inuyasha se quedaba ahí como si esperara algo,y como Kagura se quedaría a dormir en lo de Yura, por lo tanto se quedaría hasta el final, sin saber por qué quedaron en la misma habitación Kagura e Inuyasha ninguno con el valor de romper ese silencio, hasta que de repente se escuchó una voz

-Che….te mentí.-dijo Kagura mirando al suelo, tratando de que todo su ser desaparezca.

-¿en qué?-pregunto Inuyasha mientras jugaba con una bombilla.

-en lo que me preguntaste antes, mientras jugamos- cerró los ojos con fuerza y lo dijo- si me gustas.

El freno de jugar y la mira ella abrió los ojos y solo lo vio, se quedaron así un minuto que pareció una eternidad pare ambos, para su desgracia su amiga entro para romper el momento, avisando que Inuyasha ya debía irse porque era muy tarde. Kagura solo miro como se despedía su enamorado y su amiga solo le decía perdón con la mirada.

Después de ese día iniciaron las vacaciones de invierno y no se volvieron a ver hasta el regreso a clases.