Capítulo 1: Correo basura
─¡Hola chicas! ¡Traje algo de comer! ─ Anunció alegremente Sonata, al entrar al apartamento que compartía con sus hermanas. ─ ¿Cómo estuvo su día? ¿Bien?
Adagio y Aria gruñeron, sin desviar su atención de la televisión, y la laptop, respectivamente. Sonata comenzó a tararear una alegre melodía, mientras ponía la comida sobre la mesa. Los tacos siempre la ponían de excelente humor.
─¡Más te vale que no hayas comprado tacos otra vez! ¡Estoy harta! ─ Le advirtió Adagio, con un tono de amenaza en su voz.
─Pues claro que traje tacos ─ dijo Sonata, colocando los platos. ─ Pero para mí. A ti te traje el pollo del General no-sé-quién que te gusta tanto, y a Aria, Calzone Meat Lovers.
Las dos hermanas asintieron sin muchas ganas, y se levantaron a comer. Sonata les dedicó la mejor de las sonrisas, pero ellas sólo gruñeron, y comenzaron a comer sin decir palabra.
La sonrisa de Sonata se desvaneció, y se puso a comer, en silencio también. El hecho era, que desde fueron vencidas por las Rainbooms, y perdieron sus poderes, Adagio y Aria se habían vuelto ariscas, y no paraban de pensar en la venganza. La propia Sonata estuvo muy molesta por un tiempo, y también buscó venganza durante ese tiempo. Pero al final, se le pasó el enojo. A diferencia de sus hermanas, la naturaleza de Sonata era más bien despreocupada y tranquila. No podía mantenerse enojada por mucho tiempo, y mucho menos guardar tanto rencor como Adagio y Aria.
A Sonata le dolía verlas así, y sabía que todos sus esfuerzos para animarlas eran inútiles. Pero ella no se rendía, de una forma u otra, encontraría la forma de hacer que sus hermanas volvieran a sonreír. El problema era que de momento no sabía cómo, lo único que sabía podría ayudarlas a recuperar su sonrisa era el poder derrotar a las Rainbooms.
¿Pero ella qué podía hacer para lograr algo así? Era mucho más inofensiva que sus hermanas, y no quería lastimar a nadie. De hecho, hasta era muy amiga de Pinkie Pie.
Entonces, el sonido de sillas arrastrándose la trajo de vuelta a la realidad. Soltó un gritito de sorpresa. En ese momento se dio cuenta que las otras habían terminado de comer, y que estaban levantándose. Vieron de reojo a su hermana, pero no dijeron nada.
Sonata se apresuró a embutirse el resto de sus tacos en la boca, para luego pasar a retirarse a su cuarto también. Pero seguía pensando en qué podía hacer para ayudarlas.
…
Más tarde, en la santidad de su cuarto, Sonata intentó dormirse, pero simplemente no podía concentrarse. Finalmente se levantó, y encendió su laptop. Tal vez navegar en internet le ayudaría a alejar esos pensamientos, y dormir. Entonces, al no más abrir, se fijó que le había llegado un mail. Sonata lo abrió, y lo examinó:
BLACK HAT ORGANIZATION
Asistencia para villanos
En el correo había un link a una página. Parecía correo basura, pero algo atrajo a Sonata. Sin pensarlo dos veces, le dio clik al link, y fue redirigida a una extraña página, en donde comenzó a reproducirse un video:
En el video se apareció un hombre alto, de piel gris oscuro, con dos amenazadoras hileras de afilados dientes, como de tiburón, color verde. Siniestros ojos negros, uno de ellos cubiertos por un elegante monóculo. Su vestimenta era un elegante traje negro, estilo frac, sombrero de copa con una franja roja, pero en su mayoría era color negro (¡dúh!). Una camisa a botones rojo sangre, elegante corbata negra, y un chaleco gris, sobre el cual sobresalía un botón de porcelana blanca.
Su mano descansaba sobre un bastón negro curveado.
El extraño sujeto hizo un cortés asentimiento de cabeza, mientras que una lengua como de serpiente se asomaba por entre sus colmilos.
─¡Saludos, inferiores engendros del mal! Si están viendo esto, es porque un héroe les pateó el trasero, ¿verdad?
Se rio de forma siniestra.
─Ya no puedes ni aparecerte en público, porque en lugar de verte con temor, la gente te manda miradas condescendientes, y hasta te ofrece su amistad.
Inconscientemente, Sonata asintió vigorosamente.
La sonrisa del sujeto del video se ensanchó, como si hubiese visto la reacción de Sonata.
─¡Entonces este es tu día de suerte! Para todos ustedes, patéticos fracasados, Black Hat Organization ofrece sus servicios de asesoría. Por un módico precio.
(Por alguna razón, Sonata sintió un escalofrío ante esta declaración).
─Los servicios de Black Hat Organization ofrecen completa evaluación de sus errores…
Sonata apuntó esto.
─…guía completa de cómo vencer a sus héroes, evaluación personalizada, y estrategias basadas en sus habilidades. Para cualquier emergencia o duda, nuestras perversas operadoras están activas las 24 horas.
Un número parpadeó en pantalla:
6.6.6. EVIL 6.6.6.
─¡Llame ya! Y, por tiempo limitado, si llama dentro e la primera media hora después de recibido este mail, yo, Black Hat, me encargaré personalmente de evaluar sus errores. ¡Completamene gratis!
Sonata no lo pensó mucho. Con una enorme sonrisa, tomó el teléfono y marcó.
No sé qué decir más que, no puedo prometer mucho sobre este fic más que, intentaré terminarlo rápido. Y no será incluido en la Crisis. Espero les guste.
Chao; nos leemos!
