Capitulo 1
Jason Dark
Mi Nombre es Jason Dark, tengo 29 Años, trabajo en una estación de policía, soy el asistente del forense principal, mi especialidad es balística, recientemente no había habido casos relacionados con armas de fuego que requirieran la intervención del especialista, así que me limitaba a cubrir mi guardia mientras hacía inspección de mi arma de reglamento. Mi aspecto no daba la sensación de un detective privado ni un intelectual o un "Nerd", usaba una camisa negra ajustada por fuera con Jeans y zapatos del mismo color, con una característica bata blanca de laboratorio y mi carnet identificador en la solapa de la bata, mi piel es blanca, uso una barba corta en mi rostro y tengo el cabello un poco largo peinado hacia atrás.
Tras terminar la inspección procedí a llenar unos informes, la soledad de la pulcra sala de análisis, solo me acompañaba el susurro del aire acondicionado el toque de las teclas del computador y el tic tac del reloj, que para ese momento marcaba las 11 de la noche. Aburrido me estire un poco y me levante de mi silla hasta la máquina de refrescos, y dejando caer una moneda ordene un té frío en lata, deje que el líquido refrescara mi garganta, mientras hacía esto mi teléfono celular comenzó a vibrar en el bolsillo de mi bata, tome y vi que la llamada era de mi compañero Richard, no éramos amigos muy cercanos, solo de reunir a la gente de la estación a pasar un buen rato ocasionalmente, no recuerdo exactamente lo que dijo excepto por estas palabras "Tu hermano está en el hospital, ven pronto"
Caminaba por los pasillos blancos y fuertemente iluminados, viendo todo en una difusa ilusión, todo nublado a causa de la preocupación de mi Hermano mayor, Matthew Dark el cual se dedicaba a viajar constantemente como parte de su carrera de arqueólogo, o al menos eso decía, casi nunca venía a casa, y justamente hoy que se encontraba en la ciudad algo lo había mandado al hospital. Finalmente alcance su habitación y lo encontré allí, su cabello castaño claro revuelto y una dolorosa expresión en su rostro, el cual estaba lleno de moretones y raspones, su torso se encontraba envuelto en vendas, las cuales parecían ser la 3ra o 4ta muda de ellas que le habían hecho, los doctores se acercaron, diciéndome que se encontraba en grave situación, que debían mantenerlo bajo observación durante algunos días.
Me acerque a él y volteo a mirarme, se veía muy demacrado en ese estado, debía haber perdido mucha sangre, le dije que no hablara en el instante que abrió la boca pero su mirada me hizo quedarme callado, siempre había sido de aquellos que tienen una poderosa presencia e imponen respeto a los demás, "oh hermano, cuanto detesto que me veas así" comenzó a decir Matt "pero me alegro que llegases antes de mi muerte, la policía quería interrogarme pero necesito guardar mis fuerzas para hablarte a ti" continuo "no hables así, los doctores dicen que" interrumpí y el me interrumpió a su vez diciendo "Ellos no saben lo que yo sé, pero no me hagas gastar más fuerzas en palabras inútiles, lo que debo decirte es importante.
Matt tomo mi mano y cuando la retiro había una esfera de cristal Negro del tamaño de una pelota de golf "no puedes dejar que nadie más tome esto, es mi última voluntad para ti, ahora… debo enseñarte todo lo que pueda en el tiempo que tengo" Dijo antes de que una punzada de dolor recorriera su rostro, con gran esfuerzo llevo su mano a mi frente y la golpeo con la palma de su mano, en ese instante un flash de imágenes pasaron por mi mente, demasiado rápidas para distinguirlas todas, solo pude entrever una larga escalera, una habitación oscura con varias personas y una diabólica sonrisa, luego no vi nada más, un ligero dolor pasaba por mi cabeza mientras volvía a ver todo en la habitación. "Jasón, por favor, te he enseñado todo lo que se…Debes buscar a As, el causó esto, el traiciono…" comenzó a toser "a los 12 de pandora, yo falle y se llevó mi llave… pero hay esperanza… los demás están…" en ese momento comenzó a toser y sangre a brotar de entre sus labios, todos sus signos vitales se dispararon en descontrol, los médicos entraron con velocidad al cuarto y me sacaron de él, yo intente quedarme pero fui forzado afuera. Una hora más tarde… Matthew estaba muerto.
Al día siguiente el sol brillaba de forma hermosa y una amable brisa corría por entre los árboles, pero para mí era igual que si hubiese una horrible tormenta, mis padre habían fallecido hacia unos 5 años, y mi madre sufría de Alzheimer, por eso no había una poderosa reacción de parte de ella, aunque se encontraba en la sepultura de su propio hijo, los antiguos vecinos y compañeros de estudio de Matt se encontraban allí, llorando su perdida, mis colegas de la policía también se encontraban para dar su apoyo en aquel momento. Al final del día incluso mi madre había sido llevada a casa, pero yo seguía frente a la tumba, confundido y con el objeto que él me había entregado apretado en mi puño. "cumpliré tu última voluntad Matt… lo prometo, encontrare al que te hizo esto y lo llevare a la justicia, así sea lo último que haga.
El trabajo me dio unos días libres a causa del duelo, así que me encontraba en casa, naturalmente buscando darle sentido a las últimas palabras de mi hermano, mis manos se deslizaban veloces por el teclado buscando cada uno de los términos que podía recordar. Pero toda la búsqueda era inútil, solo salían referencias a los mitos griegos y grupos de teatro, frustrado decidí irme a dormir. Quizá hubiese sido mejor no haberlo hecho, contrario a lo que esperaba, el sueño me tomo rápidamente y en medio de las tinieblas oníricas comencé a soñar.
La oscuridad me rodeaba por todas partes, la poca luz que había provenía de una lámpara de neón que parpadeaba e iluminando débilmente las paredes de lo que parecía ser un almacén, el suelo estaba cubierto por casquillos de bala y algunas armas, no entendía que había ocurrido en aquel lugar ni como había llegado ahí… de pronto oí un fuerte sonido de golpe contra carne, y al mirar su pecho una enorme garra salpicada en sangre me atravesaba la caja torácica, entre en pánico, hasta que me di cuenta que no sentía dolor, siguiendo la figura de la garra dio con la silueta de un hombre encapuchado con una larga capa negra. La capucha ocultaba los rasgos de su cara pero la sombra dejaba ver justo su boca, la cual estaba en la forma de una retorcida sonrisa, de pronto escuche la voz de matt – ¿Porque… nos traicionaste? El otro sujeto dejo escapar una pequeña risa antes de responder – ¿La respuesta no es obvia? Deseo el poder que se nos encomendó proteger… ¡lo haré mío! –soltó haciendo énfasis en la última frase.
Abrí mis ojos, el sudor recorría mi frente y mi respiración estaba agitada, mi instinto me hizo llevarme la mano a mi pecho, pero como es obvio no tenía nada, ¿que había sido eso? Un sueño era la respuesta más lógica, compuesto de las últimas palabras de Matt y el informe policiaco de donde se le encontró, un almacén vacío con montones de destrozos y sangre en las paredes, pero por otra parte, era tan real, quien era ese hombre que había visto en sueños, estaba vestido de forma extraña, decidí que si era alguien capaz de hacer algo así debía haber registros de él, en la noche iría a mi oficina a tomar la información que pudiese.
Una vez hubo caído la noche entre a la comisaria, me registre diciendo que venía a buscar algunos objetos míos de mi escritorio y luego saldría, me aleje de recepción y salude al sargento García, un gran hombre dedicado a su trabajo, le dedique una simple sonrisa y seguí hasta mi despacho, encendí la computadora y de mi bolsillo saque mi disco duro portátil, lo conecte bloqueando la cámara de seguridad con mi cuerpo mientras ponía algunas de mis pertenencias en mi maletín, fingí que miraba algunos informes sin terminar cuando la verdad copiaba la base de datos del registro de armas a mi disco duro, hice esta operación lo más rápido que pude, sintiendo algo de culpa pues no hacía algo así desde que estaba en la secundaria, y tras eso Matt me regañaba y… en fin, volví a poner el disco y cerré mi sesión de la computadora, me despedí de todos y salí.
Caminaba por la desolada calle respirando profundamente del aire nocturno, no me moleste en tomar el bus que me llevaría a casa, cuando iba por la mitad del camino, una voz extraña llamo mi atención, en un tono musical me llamo por mi nombre "Jason Dark" busque el origen de la voz, rastreándola hasta un hombre sentado en un muro alto, probablemente entrando en sus veintes, llevaba unos pantalones de jeans color azul oscuro, o negros con botas de motociclista, llevaba una chaqueta de cuero con púas, y el rostro estaba cubierto parcialmente por su cabello, era un sujeto que sabía mi nombre y jamás lo había visto en la vida, instintivamente le pedí que se identificara, mientras alcanzaba el arma que tenía en mi chaqueta, el sujeto bajo de un salto del muro alto, que quizá tendría unos cuatro metros, y cayo como si nada, en ese momento un torrente de pensamientos corrieron a través de mi mente, no era posible que fuese el, demasiado extraño, demasiada coincidencia. "¿Quién eres?" repetí en tono autoritario, sacando mi arma y apuntando directamente.
"Vaya, vaya, que agresivo, pero tienes razón, debería presentarme, se me conoce por varios nombres y apodos, pero me gusta llamarme a mí mismo As" dijo aquel sujeto, escuche la última palabra como en cámara lenta, mientras mi sangre hervía "muévete un centímetro y te vuelo la tapa de los sesos" Dije como aquellos policías de las películas antiguas… había perdido la capacidad de pensar claramente y dije lo primero que me paso por la mente, tome mi celular y sin dejar de apuntarle, comencé a marcar al número de emergencias, vi cómo se movió hacia mí en un impulsivo movimiento "BANG" había halado el gatillo, le había atinado de frente y lentamente comenzó a caer hacia atrás, pero de pronto, se detuvo en su caída y comenzó a levantarse de nuevo, me encontraba paralizado de la impresión, mostró su sonrisa diabólica, me pareció ver un par de colmillos como los de los vampiros y sus ojos brillaban con un tono rojizo, "Siempre es divertido, hasta que alguien pierde un ojo" dijo en un tono que reprimía una carcajada, para cuando quise volver a halar el gatillo, se movió mas rápido de lo que podía reaccionar, des armándome y enviándome hacia atrás, caí sentado y sentí una terrible punzada en el estómago, seguido por el calor de la sangre manando de mi herida, el tenía un arma en su mano derecha, una especie de revolver alargado, con una cuchilla bajo el cañón, mis pensamientos se interrumpieron cuando hablo "tenías que ser buen detective e involucrarte… sabes tu hermano hubiese preferido morir solo… antes que meterte en todo esto… por eso sospeche de ti… había algo extraño en el hecho que te llamase" dijo As mientras revisaba mi maletín y volcaba los documentos que en él se encontraban, tomo el disco duro en sus manos y lo miro. "¿planeabas buscarme no es así?" rio por un instante y luego estrello el aparato contra el suelo, haciéndolo añicos con sus botas "lastimosamente la curiosidad mato al gato Señor Dark" menciono antes de inclinarse para hablarme a mi nivel, "sin embargo, voy a deleitar tus últimos momentos de vida contándote cómo llegamos a esta situación…" Sonrió y comenzó a relatar.
Nota de Autor: Bienvenidos al mundo de los 12 de Pandora, esta historia nació como un proyecto de cómic por allá en el año 2009, sufriendo refinamiento y cambios constantes, a falta de un buen progreso a la hora de dibujar, he decidido convertirla en una serie de historias cortas, este mundo esta basado ligeramente en la historia de la caja de Pandora, espero que conforme vaya escribiendo los capitulos pueda ir mejorando la calidad y que sea de su agrado, agradezco los comentarios y sugerencias que puedan ayudarme a lograr ese proposito, se despide de ustedes Mikemetal
