Descargo responsabilidad no poseo vampire academy.
Prologo.
Mire nuevamente las dos bandas de oro en mi dedo anular. Eran tan hermosos, tan delicadas que me dolía tenérmelas que quitar. Pero sabía que era el tiempo de decir adiós. Era el tiempo de partir del lugar que fue mi hogar durante los últimos 5 años, era el lugar donde compartí con mi esposo Dimitri Belikov.
Termine de empacar mis últimas cosas, en unas tres maletas, no tenía nada más que mis ropas y un poco de joyas. Al firmar el divorcio accedí a dejarle todo no quería nada material solo pedía amor y fidelidad. Pero ninguna de las dos se me fue brindada. Cuando por fin tuve todo en las tres grandes maletas di una última mirada a nuestro cuarto y cerré la puerta en silencio.
Baje las escaleras y en nuestra sala principal estaba los dos abogados, mi mejor amiga y mi esposo. Era tan hermoso como el día que lo conocí pero ahora mirando esos recuerdos se ven tan lejanos como si fueran de otra vida. Llegue a la superficie y Lissa corrió a ayudarme dándome una mirada de compresión. Ella era una enamorada empedernida.
- ¿todo listo? – ella pregunto yo no confiaba en mi voz por lo que solo asenti.- Esta bien solo tienes que firmar y nos iremos.
Me acerque a la mesa de café y mire las dos actas de divorcio un dolor se acumuló en mi pecho. Dolía tan condenadamente mal yo lo amaba tanto pero nuestra relación no podía ser más. Aguante lo más que pude, sus desplantes. Su olvido a nuestro aniversario y lo peor de todo… su amante pero llego el momento en el que el agua reboso la copa y simplemente ya no pude aguantar más.
- Sra. Belikov por favor firme aquí – dolió escuchar ese nombre pero a partir de ahora ya no lo tendría que oír mas. Adrian mi abogado me entrego un pluma. Yo me senté al lado de mi marido y lo mire por última vez. Nuestros ojos se encontraron y me sentí perdida nuevamente. Sabía que con la mirada él me decía que me quedara pero ya era tarde. Él jodio todo.
Con mano temblorosa firme la línea negra y larga. Con cada palabra que escribía sentí crecer mis ganas de llorar pero me negué hacerlo no iba a soltar una lagrima más. Como termine de poner la ''v'' de mi apellido supe que todo había terminado. Quite mi dos preciosos anillos y los puse encima de los papeles y supe que le hice daño pero no más del que él me acuso a mí.
- perfecto la lectura de los bienes se leerán el próximo viernes – me pare y frene al abogada de Dimitri.
- creí decir que no quiero nada de eso.
- Roza por favor todo esto lo hemos conseguido juntos.
- no importa, disfrútalo yo lo trabaje para un hogar. Un hogar que a partir de hoy dejo de existir – di media vuelta y tome las dos maletas lissa estaba esperando en el auto.
Pero antes de poder salir deje mis dos maletas y camine hasta donde él estaba me empine y roce mis labios a los suyos y me permití desfrutar de este último toque cuando me aparte puse una mano en su mejilla y él puso la suya encima de la mia, le di una última mirada antes de decir mis últimas palabras hacia el hombre que tanto ame. – ten una gran vida Dimitri. Te deseo la felicidad que a mí se me fue negada – y con eso deje caer mi mano de su mejilla y me fui nuevamente a la puerta pero esta vez no mire hacia atrás.
