Titulo: Lo Que Nunca Preguntaron.
Fandom: Monster.
Advertencias: Femslash, spoilers para toda la película.
Palabras: 385 aprox.
Rating: PG.
Resumen: Selby viendo por la televisión la ejecución de Aileen.
Comentarios: Basado en la película, no me interesa catalogarlo RPS. Si te incomoda, no es mi problema.

-o-

La amaba.

Me han hecho muchas entrevistas tras que Lee acabase en prisión, pero nadie me ha preguntado eso.

¿Te usó sexualmente¿Te tenía amenazada¿Te llegó a agredir sexual, verbal o físicamente? Esas han sido las preguntas que más me han hecho. Incluso, los más osados me han preguntado que si yo le tenía lástima o miedo, para no haber notado lo que pasaba, o para callar lo que Lee había hecho.

Pero nadie, jamás, me preguntó alguna vez si la amé.

Nadie.

Han pasado doce años, y aún me siento igual de destrozada que esa tarde, cuando ayudé a la policía para que Lee confesara. Para que, como me convenció mi padre, no terminara en prisión por algo que yo no había hecho.

Doce años...

Estoy casada. Con un hombre diez años mayor que yo, divorciado, con un excelente empleo y que me ha amado sin pedirme mucho a cambio. Yo lo quiero, pero jamás he podido amarlo, a pesar que tengo dos hijas con él: Aileen y Selby. Mi padre casi tuvo un infarto cuando supo cómo iba a ponerle a una de las niñas, pero le prometí que nunca le diría Lee y que estuviese tranquilo. Pero sé que él, en el fondo, sabe la verdad que yo siempre he ocultado desde ese día, en el que Lee dijo amarme con todas sus fuerzas por el teléfono.

Ese día que le hice el corazón pedazos y yo negué sentir algo por ella.

Y es increíble que tras todo ese tiempo, nadie me haya preguntado nunca si la amé. Que, tras tanto tiempo juntas, ninguno haya supuesto que quizá ese monstruo, como todos la nombran, me pudiese haber amado.

Que yo hubiese guardado silencio y fingido demencia respecto a esos asesinatos, porque la amaba.

Porque no quería perderla.

Pero en cambio, nadie lo hizo, ni preguntó. Y me encuentro aquí, doce años después, observando por televisión la ejecución de la primera persona que amé. Tengo a mi esposo a un lado, y no lloro. Las lágrimas para mi hace muchos años dejaron de existir.

La veo sonreír, maldiciendo a todos por enviar a una mujer violada a la muerte, y sonríe, sonríe viendo la pantalla.

Y yo, antes de irme de la habitación, pude jurar que me estaba viendo a mi.