Hola, soy muy nueva en esto de escribir fanfics, así que ojalá me apoyen con comentarios para que mejore como escritora n.n, bueno sin más preámbulo aquí está esta historia:

Este era el primer día del ciclo escolar, el sol brillaba en la preparatoria de William McKingley High, normalmente a los jóvenes les emocionaría el hecho de dar un paso hacia el futuro, el entrar en la etapa de preparación para la universidad, pero bueno, Kurt Hummel no lo estaba.

Kurt era un chico de 15 años, tez pálida, complexión delgada, altura promedio, y unos ojos bastante peculiares, azules grisáceos con un toque de amarillo. Kurt no era el modelo típico de un chico, él amaba la moda, musicales y el uso de los modales antes que nada, era un chico bastante brillante, un poco creído pero muy talentoso en el área de baile y canto.

Con un suspiro el joven Hummel hizo entrada hacia el corredor principal de McKingley, pensando en lo que se avecinaba, él sabía que la mayoría de los compañeros que tuvo en la secundaria seguirían ahí, esta era una de las causas por las cuales no quería entrar a esta escuela, los chicos siempre lo molestaban diciendo que era un "Maricón, joto, afeminado, etc." Claro que nunca demostró que le afectaban esos comentarios, siempre con la cabeza en alto y una mirada de hielo, pero llegando a casa se tiraba encima de su cama y lloraba hasta dormirse.

Y este no era el único problema del joven Hummel, su madre había fallecido cuando él tenía cerca de 7 años de edad, por lo cual la convivencia con su padre Burt Hummel no era muy buena, pero si agradecida, Kurt siempre quiso ser el hijo ideal para su padre, pero sabía que si lo hacía tenía que dejar de ser quien él era de verdad, así que se resignó a ser el mismo aunque no cumpliera con las expectativas de su padre. Kurt nunca confirmó ni negó el ser homosexual, aunque estaba seguro de serlo, no quería que su padre se enterase, así que nunca lo comentó.

Mientras entraba unos cuantos deportistas lo miraron con desagrado, haciendo que Kurt les dirigiera una mirada más fría que un iceberg, los deportistas solo rodaron los ojos y concentraron su mirada en otro punto.

"Hola chico blanco". Dijo Mercedes una chica de tez morena, amiga de Kurt.

"Hola Mercedes, ¿Qué tal tu día hasta ahora?". Pregunto Kurt de mejor humor que antes.

"Pues bien, pero pareciera que tu día no ha ido muy bien que digamos".

"No, estoy bien, solo unos deportistas molestos".

"Kurt, no dejes que ellos te lleguen, solo ignóralos".

Kurt bufó. "Es lo que trato de hacer cedes". Terminando de decir eso la campana a clases sonó.

"Bueno señor enfados, es mejor que nos vayamos o llegaremos tarde a la primera clase". Dijo Mercedes riendo.

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*Esta clase es tan aburrida, deberían cambiar literatura por algo más divertido como Historia de la música* Pensó un joven de 16 años, ojos miel, piel bronceada, cuerpo atlético y musculoso, y un extraño peinado (Mohawk). Su nombre era Noah Puckerman, mejor conocido como 'Puck'. Puck era un chico el cuál amaba la música, el Rock era su género favorito, le encantaba jugar Fútbol Americano, flirtear con chicas e ir de fiesta.

El venía de una familia judía, Su madre Nora Puckerman trabajaba todo el día y en varios trabajos debido a su condición económica, así que él se hacía cargo del aseo de la casa, y de cuidar a su hermana Sarah, su padre los abandono cuando Puck tenía 6 años, y nunca más volvió, dejándole todo el trabajo a Nora, Puck se sentía solo, rodeado de sus 'amigos', ellos nunca fueron a su casa o conocieron la condición en la que él se encontraba, y las únicas cosas que sacaban la tristeza de su mente y corazón eran el fútbol y la música.

Él siempre fue popular, y sobre todo en secundaria, ya que había sido el chico más codiciado, y solo a unas cuantas chicas les daba una oportunidad, él se consideraba un chico rudo, alguien que desafiaba la autoridad, por eso es que en secundaria se la pasaba molestando a los perdedores, a los impopulares y los raros, y ahora no iba a ser la excepción.

"Señor Puckerman, podría poner atención a clase". Dijo la maestra, haciendo que toda la clase volteara a ver al joven Puckerman.

"Lo siento Maestra Parke, pero me siento un poco enfermo". Dijo Puck fingiendo una jaqueca.

"Oh, en ese caso, por favor pase a la enfermería señor Puckerman".

"Gracias maestra, en seguido vuelvo". El joven puckerman salió del salón y se dirigió hacia la enfermería.

"Cualquier lugar es mejor que ese salón". Dijo Puck sonriendo.

En su camino hacia la enfermería se encontró con un chico de tez pálida y ropa muy ajustada.

El joven Puck noto que el chico lo volteo a ver y Puck miro hacia otro lado disimulando hasta que desaparecieron de su vista.

"Otra linda bailarina". Dijo refiriéndose al chico de antes.

Después de unos momentos, llegó a su destino.

"Disculpe, me duele la cabeza, ¿Tiene algo para que se me quite?".Pregunto el chico.

"Señor Puckerman, ¿cierto?". Pregunto una señora que parecía tener acerca de 40 años, pero muy bien conservada, y un cuerpo esbelto.

Puck solo asintió con la cabeza.

"Toma esto con un poco de agua y regresa a clase". Dijo cortante la mujer.

"¿Y si me quedo un poco más?". Dijo Puck en un tono seductivo.

"Señor Puckerman, si vuelve alguna insinuación fuera de necesidades medicas me temo que lo reportaré con el director figgins". Dijo enojada la señora.

Puck solo dio media vuelta y salió de la enfermería.

*Nadie antes había rechazado a Pucksaurio, ¿Estoy perdiendo el toque?* Pensó Puckerman dirigiéndose a su salón de clases.

"Señor Puckerman, tardo demasiado, ¿algo sucedió?".

"¿Eh? No, para nada, solo que la enfermera estaba un poco ocupada".

"Muy bien, tome asiento señor Pukerman".Dijo la maestra Parke haciendo que Puck se fuera en dirección a su asiento.

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"Kurt, ¿A qué club te vas a inscribir?". Preguntó Mercedes.

"No se, probablemente a ninguno". Dijo Kurt saliendo del salón.

"¿Por qué?, necesitas distraerte Kurt, conocer gente nueva".

"No hay ningún club que me llame la atención". Pero el estaba mintiendo, si había clubes que le llamaban la atención, como el glee club y el club de drama, pero no quería exponerse a que lo molestaran de nuevo, aunque sabía que tan solo con su ropa bastaba para que lo molestarán, no quería que el porcentaje subiera.

"Bueno, por mi parte, me inscribiré en las animadoras y tal vez al glee club".

"¿Al glee club? Y ¿Por qué no solo te inscribes en el equipo de animadoras?".

"Porque amo cantar, y lo sabes mejor que nadie, me inscribo en el de animadoras solo para no ser un blanco más".

*Podría hacer lo mismo, inscribirme en el equipo de fútbol, hacer que mi padre se enorgullezca de mi y proteger mi imagen*

"¿Kurt? ¿me escuchas?".

"Mercedes, ¿te han dicho que eres una genio?".

"Si, bastantes veces". Dijo Mercedes riendo.

"Sabes, creo que también me uniré al glee club, y al equipo de Fútbol".

"Wow, que rápido cambias de parecer chico, pero espera, ¿qué no odiabas el fútbol?".

"Cambiar de parecer es algo que un sabio hace, además de que ser popular no caería nada mal".

"Pues, estamos en la misma posición, y si fuera tú, iría consiguiendo la información para las pruebas de fútbol, es lo más solicitado y puede ser que no alcances a inscribirte si tardas mucho".

"Tienes razón cedes, te veré en el almuerzo, iré a ver al entrenador". Dijo el joven Hummel antes de dirigirse a la oficina del entrenador Tanaka.

Kurt se dirigió a la oficina del señor Tanaka, que justamente se ubicaba afuera de los vestidores de los chicos, la puerta estaba cerrada, así que gentilmente toco la puerta, se escuchó un pase, así que Kurt hizo entrada a la oficina.

"¿Qué se le ofrece joven?". Preguntó un hombre alrededor de los 40, con sobre peso, y lo que parecían rasgos asiáticos.

"Venía a preguntarle sobre las pruebas de fútbol".

"¿Tú vas a presentarte a las pruebas?"

"Así es señor".

"Tienes agallas chico, soy el entrenador Ken Tanaka, puedes llamarme entrenador Tanaka, y tú ¿Cómo te llamas?".

"Mucho gusto entrenador, soy Kurt Hummel". Dijo el joven extendiendo su brazo con un poco de desagrado.

"¿Hummel? ¿Eres hijo de Burt?".

"Sí, ¿Por qué lo pregunta?".

"Tu padre era el quarterback del equipo cuando estaba en preparatoria, y supongo que tú eres tan bueno como el, las pruebas son el viernes, así que suerte muchacho, salúdame a tu padre".

"Muchas gracias entrenador, si lo haré, lo veré el viernes". Dijo Kurt antes de retirarse hacia el comedor.

Aquí esta ya el primer capitulo completo, espero que les haya gustado, y si tienen alguna sugerencia o idea que pueda usar en el siguiente capitulo déjenlo en los reviews:3

Geeraa, este Kurt tiene 15 años, por lo tanto tiene el mismo cuerpo que tenia en la primera temporada, si claro que incluiré a todo el glee club, pero no me adentrare mucho en sus historias, habrá mucho drama y triángulos amorosos, así que mantente sintonizada/o:3 gracias por dejar tu comentario, espero que te haya gustado y que continúes leyendo la historia:3