Luna Llena.

La blanca luna se reflejaba en el cielo era hermosa pero no era ten hermosa desde su punto de vista. El cuando la veia sentia un ardor en la piel.

Sentia que se quemaba. Era doloroso. Sentia como su cuerpo se alargaba provocando una sensacion horrible pero no se comparaba con el dolor de las heridas.

Se sentia solo muy solo. Queria morir pero no podia. Queria dejar de sufrir pero esa maldicion no se lo permitia. Necesitaba algo...algo que lo ayudara contra ese dolor.

Nadie sabia como se sentia. El lo sabia. Su boca se alargaba dandole un arullador aullido. Sus Garras crecian y destrozaba su piel. El pelo abundaba pero sus ojos dorados permanecian ahi.

Veia como era su alrededor sentia esa euforia de dolor. No aguantaba mas necesitaba sangre, pero no la tenia. Sin darse cuenta empezo a arañarse pero cada vez daba un aullido un aullido que demostraba un dolor verdadero.

Era un monstruo, un monstruo que debia morir pero no podia. Ninguna cura existia. Ese monstruo lo dominaba, queria sangre y queria carne pero el no la tenia. Cada vez aullaba con mas dolor y melancolia.

No tenia a nadie se sentia desgraciado y desdichado. Nadie se merecia eso. Siguio aullando pero su ultimo aullido antes de amanecer fue muy potente mostrando toda esa trizteza, melancolia y dolor que el guardaba en su corazon.

La luna llena se oculto y el empezo a cambiar demostrando a un pobre muchacho llenos de moretones, cabello castaño largo hasta la nuca y unos ojos color dorados. El era Remus Lupin. Un licantropo, un MONSTRUO.

Fin.