Esta historia sucedió hace mucho tiempo ya, cuando se dio un milagro, y este fue la creación de un robot, hecha a imagen y semejanza de un persona muy valiosa para su creador, al ver reflejada a esa persona en su creación le dio el nombre de RIN.

En apariencia Rin era sola una niña que rondaba los 12 o 13 años, de rubios cabellos y ojos de un hermoso azul celeste, tal cual el cielo mismo; el científico estaba orgulloso de su pequeño logro, más sabia que, por perfecta que fuera en apariencia, carecía de algo que, según él le permitiera ser y comportarse como humana.
Por mucho tiempo intento recrearle "eso" a Rin, más sin embargo se comportaba indiferente hacia los esfuerzos de él, pero aún sin entenderlo realmente ella trataba de hacerlo feliz con lo que sabía al científico más le gustaba, el canto. Para él, el oírla le daba nuevas fuerzas para seguir intentando, pues el tenia las esperanzas de que con su programa ella por fin pudiera aplicar a sus canciones, lo que ella no alcanzaba a entender aún… los sentimientos.