Ladies and Gentlemen!
Un capítulo más de mi especial "Día del Pocky"
¡A disfrutarlo!
It's showtime!
Aclaración: Hyouka no me pertenece. Es propiedad de Yonezawa Taskohna. Yo solamente pido prestado sus personajes para poder escribir mis historias.
Bien, teniendo en cuenta que no era para nada normal tener a tu compañera casi encima de ti, casi encima, lo único que les separaba era la altura que ambos tenían.
¿En qué momento fue arrinconado?
No era raro que ella tuviera la curiosidad de algo que había escuchado.
No era raro que a él siempre lo utilizaba de "conejillo de indias" para nada raro.
Ya hasta era normal que todo eso le pasará pero en la forma en la que su compañera lo había acorralado contra la pared, eso si no se lo había esperado.
-Vamos Oreki-san es sólo un juego y es el día del Pocky que mejor oportunidad que está
-¿Acaso sabes lo que tienes que hacer?
-Ambos tenemos que comer este palito hasta que nos lo acabemos o hasta que alguno de los dos lo rompa
Sin embargo ella parecía no entender lo malo que era ese juego.
Lo malo para el ¡Iba a gastar toda su energía en ese tonto juego!
Pero si quería acabar rápido debía de hacer lo que ella quería.
-¿Porque no lo intentas con los demás?
-Porque Oreki-san es quien siempre responde mis dudas y mis curiosidades si voy con los demás probablemente lo odiarían
¡Rayos! En eso tenía razón ella, era tan tranquilo y no se desesperada con facilidad al resolver le algún que otro misterio que ella tuviera.
-Prometes que si hago esto dejarás de molestarme con esto
-Lo prometo
Estaba seguro que había visto una pequeña sonrisa. Con un suspiro cansado, bajo su rostro hasta llegar aquel palito de chocolate.
Sin duda podía sentir el aliento de ella. Veía a Chitanda con los ojos cerrados y comiendo lentamente aquel palito.
El tampoco dudo y cerró los ojos, poco a poco comía del palito, estaba seguro que sus mejillas estaban ligeramente rojas.
Moriría de la vergüenza si alguno de los dos compañeros del club entrará en ese momento.
No quiso abrir los ojos, decidió cerrarlos con fuerza. No supo en qué momento Chitanda tomó de su camisa y se acercó más a él.
El tampoco se quedaría atrás, el tomo de la cintura. Ya no sabía si había algún palito de chocolate que los separaba.
Solamente podía sentir el sabor del chocolate en los labios de Chitanda. Era un beso tímido y sin segundas intenciones. Tal vez no le importaba gastar energía.
Sin embargo ninguno de los dos quería separarse. Fue en ese momento en el que ambos pensaron lo mismo.
¡Gracias día del Pocky!
¡Muchas gracias por leer!
¡Hasta la próxima!
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Atte.: AnZuZu Dragneel
Fecha: Sábado 12 de noviembre de 2016
