Mi yo en un tú

Disclaimer: Hey Arnold! no me pertenece. Ella y todos sus personajes son propiedad de Craig Bartlett y Nickelodeon, pero cuando junte suficiente dinero los compraré y haré mi propia serie con muchos poemas y amor. Y alguien que golpee a Arnold por lento.


Prólogo

Nuestra vida está llena de pensamientos. Inconexos, inconclusos y eternos. Llena de cosas que nos unen a otras personas y nos alejan de otras. De sentimientos que se mantienen ocultos dentro de nuestra alma gemela y que sólo se descubren cuando somos capaces de encontrarnos en alguien más. Es así, sin más, que nuestro corazón siempre está ligado a alguien en esta eterna búsqueda de la plenitud existencial. En la búsqueda de un yo que sólo se encuentra en un tú.

Es por esto que la vida no es fácil ni a los 10, ni a los 15, ni a los 20 y, mucho menos, a los 23, cuando te das cuenta de que tu vida está ocurriendo aquí y ahora, y que lo que hacer todos los días, lo que te esforzaste por conseguir durante años en una universidad, no es lo que esperabas ni querías…

Arnold se levanta a las seis con treinta, se lavaba la cara y pasa sus dedos, aún húmedos por su cabello. Es un acto simple que acostumbra. Pone la cafetera y pone a tostar dos rebanadas de pan blanco. Les unta mermelada de fresa y los saborea mientras sirve un poco de café en su taza que tiene el logo de la Hillwood High University, más conocida como la HHU.

Se acomoda la ropa deportiva y se calza las zapatillas mientras bebe su café. Se detiene a mirar en la ventana y ve un par de hormigas que caminan por el marco mientras arrastran una hoja tan verde como sus ojos. Sonríe con melancolía. Cómo desea, en ese mismo instante volver a tener 9, hacer proyectos de ciencia y, sobretodo, cambiar un par de cosas.

Cuando ya ha terminado, deja la taza en el lavabo. Son la siete menos cuarto y es "el momento deportivo", como dice el Señor Potts cada vez que lo ve llegar. Es una rutina que lleva desde que inició la universidad y no recuerda cuando fue la última vez que lo dejó.

–Aquí vamos –, susurra.

Y es como comienza su día. Luego de un suspiro baja los escalones de la entrada de dos en dos. Hace una pequeña mueca que intenta llegar a ser sonrisa. Hoy puede ser que el día en que todo en él se sacuda un poco.


Buenos días, buenas tardes y buenas noches a todos mis lectores maravillosos que me siguen. Mis disculpas por no terminar las historias que he empezado pero tuve ciertos imprevistos que me han imposibilitado de continuar de manera inmediata mis historias –que retomaré– por el momento.

Esta será una historia más liviana y agradable de leer, que escribiré paralelamente a otro par que tengo en mente, en conjunto a la lectura de mis historias publicadas para darles fin o continuarlas. Es por esto que pido paciencia.

Hey, tú! Sí, tú! Si eres del Fandom de CCS, también pido paciencia porque esas historias serán retomadas en breve. Y si te ha gustado esta, pido que la sigas.

Eso es todo por ahora, así que nos leemos pronto, pues el primer capítulo estará dentro de un plazo d días.

Con cariño,

MissCerezo.