Prefacio: "Furia. El nuevo florecer"
Despues de todo lo que hiso por mí, después de tanto explicarme, cariñosamente recordarme que debía seguir adelante. Que debía romper las cadenas, después de tanto sufrir. ¡De reír a su lado!. De sentirme seguro entre sus fuertes brazos.
¿Cómo?, -¡¿Como puede ser posible?!... Decidir tal cosa, y ni si quiera decírmelo de frente. Solo me eh quedado pensando, pensando en cómo todo termino así. El oxido de mis cadenas... ¿Le habrá segado los ojos?, prácticamente... en mi ignorancia, y estupidez. Se las restregué en la cara. Una y otra vez, mientras el intentaba liberarme de ellas. -¡Resulto que ellas me "liberaron" de él!-. Aquella limpia sonrisa. Aquella dulce voz, aquella aura orgullosa, esa persona que se las ingeniaba siempre para... salir airoso, de toda situación. Aquel que me enseño el poder, de un noble león. Y que, además de eso. Lo que significa ser un verdadero hombre, pero... sin embargo, se ah alejado de mí. Siempre sermoneándome sobre que debía crecer y ser fuerte, pero nunca dejo de mostrarse superior ante mí, nunca me permitió si quiera pensar en que podía ser mejor que él. Siempre decía "Un lobo jamás podrá compararse a un león". Pero seguida a esa oración, siempre estaba un "pero tu serás muy fuerte, yo te hare fuerte." Y una dulce sonrisa, una voz alentadora –Eh concluido que él quiere que siga adelante.
-Me hare fuerte, tanto... -¡Que impuros a mi paso temblaran por dentro al solo posar sus ojos sobre los míos!, ¡Que irrespetuosas se den cuenta de lo poco que me valen apenas verme pasar!- Tanto, que ni el más fuerte oso o león podrá hacerme frente. ¡Se lo demostrare, le buscare... usando la misma ética de caza que él me mostro. Y entonces, le haré mío de nuevo.- Pues nunca lo sacare de mi mente; ¿Como todo termino así?, ¿Tanto le molestaba... como soy?, ¿Es que acaso no puedo cambiar?-
Miles de preguntas desolan mi mente, debo enfocarme y seguir adelante. Por todo lo que quiero, todo lo que aún debo hacer. Todos mis deseos, aunque esos deseos... se unifiquen en un solo nombre... aquel nombre, que,-Aunque no fue su intención, me ah hecho tanto daño y que, aunque no merezco si quiera la compañía de esa persona. Parece preocuparse por mi... aunque, a pesar de aquellas apariencias, hace cosas que demuestran lo contrario y me hace pensar "qué poco le valgo", nunca podre saber cuál es la realidad, pero sé que tarde o temprano llegara el día, en que cruzare la línea, "airoso", y... ¡Romperé las cadenas!. Por ti, "L".
