"Enfermo"

By The Lord Of The Fics.

Era un tranquilo día como cualquiera en las costas del sometido reino tierra, el cielo claro, los pájaros cantando, el sol que se ocultaba detrás de una manta nubosa que se extendía por el cielo, todo parecía dar señales de un buen día.

AAAAAAAA… CHUUUUUUUUUUUUU!.

O… al menos eso creiamos.

-Salud?!- dijo Toph con un tono de sarcastico

-Lo siento- Se disculpo el avatar aang luego de haber estornudado en la cara de la maestra tierra, la sopa de pollo avestruz que katara le preparo para el resfríado.

-ó.ò KATARA!, por qué soy yo?! Quien tiene que darle la comida a pies ligeros, ni siquiera puedo ver donde queda su boca- se quejo la bandida ciega.

-Porque yo estoy aquí ocupada preparando las plantas medicinales que Zuko ha recogido del bosque- dijo la maestra agua con un plato semihondo y una pequeña madera de tacu con la que molía las hojas hasta volverlas pulpa, todo bajo la supervisión de nuestro queridísimo maestro fuego.

-ò.ó Y que hay de soka?!- pregunto nuevamente toph.

-ò.ó ya olvidaste que fue al bosque por mas leña, debemos mantener caliente a Aang- dijo –Espero que traiga mucha, presiento un frente frío en camino- dijo en voz baja.

-eso no será nada bueno para él- dijo zuko quien habia logrado oír lo que la ojiazul dijo. Katara decidió no mirarle y continuar en su trabajo, olvidando la pequeña vergüenza de que alguien más escuchara sus palabras personales.

-o.o Aquí traigo la leña- dijo soka quien aparecía con un fajo de la madera en sus brazos.

AAAAA… CHU!.

Todos voltearon ante el sonido del estornudo para ver a la maestra tierra cubierta nuevamente por la sopa que aang estornudo –Podrías no estornudar cada vez que alzo la cuchara!!- gritó toph.

-T.T No puedo evitarlo, Creo que mi aire control se ha salido de control!- (N/A: que complicado juego de palabras!).

-ò.ó Demonios!, por qué tuviste que caerte en ese rio helado!- protestó toph una vez más.

-ó.òOYE!, no es mi culpa que soka me haya dejado toda la carga del mercado!- se excuso aang.

-Jamas pensé que el peso haría ceder el puente de salida del pueblo!-

-ò.ó SOKA!, eres un…!-

ACHUUUUUUUUUUUUU!. - FOOOOOOSH!

Con un demonio, los presentes quedaron cubiertos de un poco de la sopa de pollo avestruz para el resfríado de katara, sin mencionar, el cabello desordenado, la cara cubierta de vegetales a medio moler de zuko, las leñas peladas de soka, el cabello desatado de katara, la cabaña deshecha, etc, etc, etc.

/Minutos después…/

-¬ ¬ Estupendo resfríaste agarraste pies ligeros- dijo toph.

-Si, n.n pero al menos me termine la sopa- dijo aang.

-¬¬ querras decir, que me la "soplaste" encima!-

-u.u Lo siento!, creo que mejor me ire a dormir-

-Si, es mejor ¬¬-

-Espera aang!, antes primero tomate esto!- dijo katara entregandole un mejunje bien extraño, que incluso burbujeaba como liquido de motor.

-…-

-Tienes que tomartela-

-…de acuerdo!- dijo al avatar quien tomo el mejunje de un solo sorbo y con la nariz tapada, después de dejar seco el vaso se le entrego a katara, pero segundos después sus ojos se dilataron y su cuerpo estremecio de pies a cabeza, mientras el contenido del recipiente descendia por su tracto digestivo hasta alcanzar su basto destino,

K. O. para cuando llego el joven monje se encontraba nockeado en su cama.

-Seguro que esa es una medicina casera- dijo katara a zuko.

-Seguro, mi tio me la daba de pequeño cuando tenía fiebre y tosía-

FLASHBACK

-Tio, me siento mal, me duele la cabeza, y… cof!, cof! Estornudo!- dijo tiny zuko en la cama de su habitación con el tío al lado suyo sentado.

-No es estornudo, es tos, espera un momento!- dijo el gordo general para retirarse y volver minutos después con un mejunje raro que burbujeaba como líquido de motor.

-ó.òU Seguro que esto funciona!- dijo zuko un poco asustado por la apariencia del brebaje.

-n.n por su puesto, son las legendarias plantas Yang chao para el resfríado!-

-de acuerdo…- dijo el principe quien miró pertubado por ultima vez el brebaje y de un sorbo se lo tomo, segundos después tenemos la misma reacción de hace un segundo, solo que esta vez el pequeño principe expulsaba una baba blanca de la boca.

-ò.ò o acaso eran las plantas Xiao para la indigestión… bueno, en fin ya sea con cualquiera de ambas, al menos se le curaria la fiebre- dijo para luego retirarse de puntillas antes de que se arme un escandalo.

FIN DEL FLASHBACK.

-u.uU Eso espero…- dijo zuko en voz baja

-que dijiste ò.ó!- pregunto katara

-NADA! O.oU, u.uU cof… vaya, esto si que es un inconveniente, y justo cuando comenzabamos el entrenamiento!-

-Como sea, nunca previmos que aang se enfermara, no trajimos casi ninguna medicina en nuestra visita al pueblo cercano, y ya se nos acabo la que tenemos- dijo soka.

-u.u Parece que tendremos que volver al pueblo!- dijo katara.

-O.O! estas loca hermana!, escapamos y por poco! Ya casi pense que ese soldado que nos miro feo nos descubrío-

-U.U es verdad, si nos atrapan, no saldremos vivos, hay demasiados soldados!- dijo zuko.

-Ó.Ò Pero sin medicinas, aang podría…-

El atardecer comenzaba a caer y pequeña particular cristalizadas comenzaron a caer en el cielo que comenzaba a nublarse…

-O.OU oh NO!- dijo soka.

-Lo que faltaba, una nevada- dijo toph al sentir los copos de nieve caer en su nuca.

-El invierno llego más rapido de lo que creíamos- dijo katara. –No podemos permitir que se nos apagué el fuego!-

-Estoy trabajando en ello!- dijo soka mientras buscaba entre las cosas la manta para la lluvia que tenían.

-Esto si es un problema no aang!- dijo toph…

-…-

-que demo…- dijo toph y de inmediato poso su mano en la frente del monje, y de inmediato se asustó.

-La fiebre ha subido!- dijo en un tono alarmente a sus compañeros, que dejaron de inmediato sus cosas y prestaron atención.

-Esta empeorando- dijo katara al examinarle, su rostro mostraba un gesto de dolor único, con los dientes apretados y los ojos fuertemente cerrados, sin mencionar la piel sudorosa.

-Zuko, todavía tienes algo de tu medicina!- pregunto katara.

-No!, se la di toda en ese mejunje!- dijo zuko.

-esto es malo!- dijo katara retirando su mano de la cabeza de aang, luego de sentir como la fiebre subía.

-Debemos buscar una cueva!- dijo soka.

-La montaña mas cercana esta a 2 km!- dijo toph palpando un poco el suelo.

El viento helado comenzó a batirse golpeando con fuerza el campamento mientras mas copos de nieve bailaban ante la danza de viento, como los granos de arena arrastrados por el mar, los arboles vacilaban en su movimiento, los pajaros y animales cercanos comenzaron a regresar a sus refugios, el cielo ya oscurecía con un sol que se escondía por fin en el horizonte llevandose su preciado calor consigo, las nubes casi habian cubierto el cielo, y el viento aumentaba.

-No nos queda otra opción!- dijo zuko.

Otro viento helado abatio el campamento con mas violencia… la tormenta agarraba fuerza, apa quien habia sentido el frío atravesar su pelaje por fin se movió, mientras que momo regresaba al campamento luego de su paseo diario, colocandose al lado de su dueño quien yacía encogido por el frío que aumentaba apretando aun más los dientes resistiendo tanto las oleados de frío aire, como el ardiente calor interno.

-Parece que sera una gran tormenta de nieve, si nos alejamos demasiado del pueblo no podremos ubicarnos para encontrarlo, y aang necesita medicinas!-

-No puedes curarlo con tus poderes?!- pregunto zuko.

-Por desgracia no- contestó.

-que hacemos?- pregunto soka.

De inmediato la tierra comenzó a moverse, y de inmediato dos paredes grandes y curveadas de roca se levantaron a su alrededor para unirse en un punto sobre ellos, actuando a manera de techo, con dos paredes y una pequeña salida.

-Toph!- dijo katara.

-Vayan a por esa medicina, esto nos mantendra calientes- dijo toph a la vez que se arrodillaba al lado del monje.

-Y que hay de ti toph!- pregunto soka

-en pocas horas esto quedara cubierto de nieve, y yo no podre ver, no seré de mucha ayuda, mejor me quedare- dijo.

-esta bien!-

-Segura de que podrás cuidar de aang hasta que regresemos?!- dijo katara.

-Katara, seré ciega, pero no inútil!, ahora vayan!- contesto.

-De acuerdo!-

/…1 hora después/.

En su frenética carrera los chicos habian llegado ya a la entrada del pueblo, cuyos ciudadanos comenzaban a poner a salvo de la tormenta, en sus calientes y comodas casas, cerrando puertas y ventanas, excepto por unos cuantos soldados que se desplazaban por las calles.

-Espero que los comerciantes no hayan cerrado aún- dijo katara.

Sin darse cuenta el grupo se acercaba a una esquina, de la cual apareció un soldado de ojos negros, asi como su cabello desordenado bajo el casco, quien los miraba con un tono muy amigable, era el mismo soldado que soka menciono antes!, observando atentamente los disfraces que llevaban, en especial el de zuko, que estaba cubierta por una capucha en su cabeza, hasta que… ya sea por el fuerte y helado viento, o por un descuido en su carrera, la capucha de zuko se movío un poco, dejando ver su cicatriz, los ojos del soldado se abrieron como platos, alejandose de ellos sin atraer apariencias, y una vez perdidos de vista, se dirigio a la oficina de su capitan.

-

El grupo desapareció entre la tormenta que aumentaba cada vez más, dejando a oscuras los alrededores cercanos a la cabaña de piedra improvisada de toph, quien yacía adentro algo caliente junto con el monje, el lemúr, y el bisonte quienes lamian a su joven amo para ayudar a mantenerlo a temperatura adecuada.

-No te preocupes peludo, el estará bien, además, katara y los demás no deberían tardar en regresar- dijo. A lo que recibio un gruñido gutural de la bestia como respuésta.

-

La preocupación de katara comenzó a aumentar al ver las tiendas cerradas de los comerciantes del mercado, cuando cruzaba por la sección de plantas, vió como un hombre, el ultimo del callejón se encontraba a punto de cenar… se acercaron desesperados.

-Que los trae aquí jovencitos, no ven que ya he cerrado por la tormenta- dijo el dueño de cabello blanco, barba y bigote, y de ojos marron.

-Lo sentimos mucho, pero por favor, necesitamos medicinas, un amigo mío esta enfermó, tiene que ayudarnos- dijo katara suplicante.

-Uummm… que necesitan?!-

-

El soldado camino por varios callejones del pueblo hasta llegar a la casa del capitan, abrió la puerta de inmediato, dejando que el frío y helado viento penetrara en el hogar…

-Que mier… cierra la maldita puerta!- dijo un oficial de ojos café y cabello castaño que encendia la chimenea con fuego control.

-Lo siento sargento, necesito hablar con el cápitan, es urgente!- dijo exhausto el maestro fuego.

-Que pasa aquí!- dijo nada menos que el capitán de cabello gris arreglado en una coleta, y ojos blancos quien entraba a la sala.

-Señor, he visto a dos fugitivos cerca del mercado Shan-

-Fugitivos?!, no me interesa, además este no es momento para andar persiguiendo a ladrone callejeros!- dijo furioso el capitan.

-Pero sargento, no son un grupo cualquiera!-

-

-Bien!, ahora tenemos lo que queriamos- dijo soka alegre mientras el grupo regresaba rapidamente al campamento luego de el favor del comerciante quien de buen corazón les entrego la medicina para la fiebre.

El grupo habia cruzado por la calle principal, y ya se encontraba justo en la salida del pueblo…

-Demonos prisa!, todavía tenemos que buscar una cueva para…- pero el exprincipe calló al ver como de los callejones cercanos a la salida del pueblo emergía una gran masa de soldados de la nación del fuego.

-Oh no!- pensó katara.

El grupo detuvo en seco su marcha justo a 4 metros del grupo armado.

-Vaya! Vaya!, al parecer mi subordinado tenía razón, tenemos a tres de los seis fugitivos (N/A: digo "seis" refiriendome tambien a Iroh… me pregunto donde se andara metido?!) mas buscados de la nación del fuego.

El grupo se coloco en guardia, zuko en posición de maestro fuego, katara en su posición de maestra agua, y soka blandiendo su espada.

-El señor del fuego me dara un gran ascenso por sus cabezas!- dijo… -ATAQUEN!- gritó.

Los soldados armados fueron los primeros en entrar a la acción, y soka es quien responde al llamado atacando con su espada a cada uno de los soldados, katara toma un poco de nieve del suelo, la endurece en pequeño trozos y las arroja a las tropas que caen de espaldas por el impacto, zuko dispara llamaradas de fuego sobre cada maestros fuego que se le acercaba, pero pese a su habilidad y destreza el numero de ellos aumentaba, katara logra derribar a otro maestro fuego con una tecnica de hielo resbaladizo, y de inmediato se dirige contra el líder del grupo, pero dos soldados se oponen a la idea, pero katara los derriba con dos latigazos, pero antes de poder atacar nuevamente, una cuerda enlazada inhabilita sus manos arrojandola al suelo.

-KATARA!- dijeron soka y zuko al mismo tiempo.

Soka de inmediato va a ayudarla pero tres soldados mas se interponen, ataca al primero desde arriba desarmandolo y derribandolo, luego al de la derecha con una patada, pero el de la izquierda aparece por detrás y le propina un fuerte golpe en la cabeza con el mango de su espada dejandolo inconsciente, zuko retrocede mas y mas hasta quedar contra la pared rodeado de una numerosa tropa de maestros fuego.

-Que me dice ahora principe zuko?!- dijo el capitan con el lazo en la mano y katara a sus pies.

-Sueltalos, ahora!- dijo.

-Lo siento, ellos tienen una pequeña cita con la princesa azula!-

-Huye zuko!- dijo katara. –Nosotros estaremos bien!-

-Pero….-

-Ve y entregale la medicina a Aang- gritó nuevamente.

-De acuerdo- contestó para de inmediato sacar unas pequeñas esferas de su ropa y arrojarlas al suelo violentamente.

Una pequeña explosión, seguida de una densa cortina de humo se formaron alrededor del campo, segundos después de disiparse, zuko no estaba.

-Demonios! Lo perdí!- pensó el capitan –busquenlo!- ordenó.

-SI!- dijeron los soldados que se dispersaron en distintas direcciones.

-Vaya, si mis oidos no me engañan, diria que el avatar esta "enfermo"-

Katara lo mira furiosamente.

-Oh!, no me mires así, pronto podrán compartir tu y el chico de la espada, una calida celda en el calabozo con él y el principe traidor.-

-que quieres decir…- dijo katara.

-

-Porque tardaran tanto?!- dijo toph quien comenzaba a frotarse la palma de las manos en busca de calor, ya que hace 2 minutos, el frío habia penetrado la capa de piedra.

El lemur comenzo a emitir gruñidos de preocupación, cosa que obligo a toph a acercarse a aang y verificar su fiebre.

-Esta aumentando… que sucede chicos, ya deberían haber vuelto!-, pero de inmediato los ojos de toph se abrieron fuerte al sentir unas vibraciones acercarse hacia donde estaban

/…A unos metros mas allá de su posición/

-Maldición! Que hace frío aquí!- dijo un soldado de cabello negro arreglado de lado y ojos azules al caminar sobre la nieve entre el bosque seguido de otrs 20 más.

-Si!, lo sé!, pero el capitán los quieres vivos o muertos!- dijo otro soldado de cabello azul recogido y ojos verdes

-Si, el muy bastardo ha deseado un ascenso desde hace años-

-Tal vez para sentirse orgulloso-

-yo díría para salir de este basurero del reino tierra- dijo un tercer soldado de piel morena, ojos café y cabello negro.

/…en el campamento/.

-Maldición, que hare ahora?!- dijo toph poniendose de pie. –esta tienda ya no es segura…- dijo otra vez anhelando sentir en sus pies las vibraciones de katara, pero solo percibia las de los soldados, y ya estaban cerca…

-Toph… eres tú!- dijo una voz débil bajo ella.

-Aang, despertaste!- dijo la maestra tierra al verlo abrir ligeramente los ojos, con las mejillas fuertemente sonrojadas por la fiebre

-Que… sucede!- dijo con la voz débil.

-Mejor no preguntes, tenemos un par de soldados ahí fuera!- contestó.

-De… veras- de inmediato alzo su cuerpo y trato de levantarse, pero pesadamente.

-Que estas haciendo pies ligeros?! Recuerda que estas ardiendo!- reclamo exigente toph.

-Lo sé… pero… tenemos que escapar!- dijo con la voz pesada. –donde… estan, los demás!- preguntó

-Han ido al pueblo por medicinas, ya deberían haber vuelto…- dijo toph, pero de inmediato le vino un mal presagio a la mente –¡¡quizas los han capturado!!- exclamo.

-Debemos… /gemido/… salvarlos!- dijo aang esta vez de pie por completo aunque medio bambaleante.

-Ni siquiera lo pienses! En tu estado, no podrás con ellos!, es mejor que nos movamos a la cueva cercana a aquí!-

-Esta bien… pero, no podras… ver con claridad… debido a la nieve-

-es verdad!- contesto toph

-entonces, seré… tus… ojos…- contestó con la voz aun más debil.

-Estas seguro... de que puedes?!- preguntó.

-Claro… que sí!-

Los soldados caminaron entre la nieve y pastos cubiertos de nieve, hasta encontrar una extraña cupula de roca entre los arboles a campo abierto…

-Oigan, que demonios es eso!- pregunto el soldado de ojos café.

-Parece… una tienda de piedra!- dijo el cabello azul.

Y de inmediato la tienda reventó en pedazos ante su asombro, y entre los escombros que todavía restaban salió volando algo enorme, ya en el aire lograron identificarle difícilmente por la oscuridad, seis patas, piel blanca…

-Es el avatar!- gritó el tercero de cabello negro.

-Disparen!-

Bolas de fuego procedentes de los maestros fuego en tierra volaron hasta el objetivo aire como proyectiles… aang consciente logro mover las riendas de apa ordenandole que se moviera a la derecha, los proyectiles de fuego salieron volando sobre ellos, continuaron volando unos metros más esquivando las llamaradas del suelo, pero aang comenzaba a perder control de su mascota, con la cabeza dandole vueltas por la fiebre en aumento.

-Aang, estas bien?!- preguntó toph.

Su vista comenzó a nublarse, hasta que finalmente todo fue oscuridad en su mente… apa miraba sobre su cabeza que habia pasado al sentir las riendas sueltas en su boca, cuando sintio el impacto de dos bolas de fuego en su vientre, que le arrancaron un grito de dolor.

-Apa, cuidado!- dijo toph, quien no perdío tiempo y se movío entre el asiento y el cuello de apa difícilmente agarrando las riendas del animal, aunque este ya se encontraba descontrolado y cayendo a tierra.

-VAMOS!- gruño al hacer fuerza en las riendas, provocando que el bisonte se perdiera entre la orden y el dolor de su cuerpo.

Sin nada mas que hacer, apa cayo a tierra, rozando con la punta de los arboles, el cuerpo del inconsciente avatar se movió a la derecha soltando el reborde de la silla y dirigiendose al aire…

-AANG!- grito toph para luego tomar de la mano, al sentir como su cuerpo abandonaba la montura del animal. –resiste!-

Finalmente apa rompió con los ultimos arboles enfrente suyo y cayo violentamente a la nieve, arrastrando su pesado cuerpo unos metros más adelante hasta golpear contra una roca.

-

-Demonios!, los perdimos!- dijo el soldado de cabello negro –Busquenlos!- ordeno a la tropa que se disperso entre los arboles ya cubiertos de nieve.

-

-Ayayay!- dijo toph al levantarse de la nieve, su cuerpo habia caido cerca de la cabeza de apa, unos centímetros mas enfrente y habría sido aplastada por el craneo del bisonte, se toco la cabeza y sintió el tibio y calido correr de la sangre de una herida de no menos de 2 cm, su mente dio vueltas recordando las vibraciones de donde habia caido aang, cuando finalmente lo encontro, golpeado contra la base de un arbol, al tocarle la frente sintió como la fiebre continuaba subiendo, asi como el correr sangre de una herida de 5 cm.

-Oh no!- pensó… de inmediato quito la nieve de un pequeño pedazo de tierra y coloco la mano en ella, su mente se alivió al sentir las vibraciones de la cueva que estaba justo enfrente de ellos, con la base montañosa sobre ella. –gracias a dios!- pensó. Y haciendo acopio de lo que le quedaba de fuerzas tomo a aang que todavía yacía medio consciente y comenzaron su frenética carrera a la seguridad de la cueva, pero habiendo recorrido unos metros se volteo atrás y recordo a apa…

-Apa!- le gritó y segundos de tensa preocupación escucho su rugido, quedando aliviado. –Sigueme- le grito una vez más.

El bisonte se levanto de inmediato para obedecer la orden soltando pequeños gruñidos de dolor por las quemaduras en su vientre, dejando ver a un momo enterrado de cintura para arriba en la nieve con el trasero y patas expuestos, no tardando mucho en liberarse. La maestra tierra y las bestias entraron en la seguridad relativa de la cueva, pero toph se decepciono un poco al ver como la nieve cubría gran parte del suelo de la cueva, dejo con cuidado el cuerpo de aang en la esquina mas alejada de la cueva, y comenzó a limpiar lo mejor que pudo el suelo para poder ver mejor, luego acondiciono lo mejor que pudo el lugar para tratar de desguarecerse, colocando algunas piedras en la entrada para evitar que entrara el menor frío posible pero sin quitarles el suministro de oxígeno.

-No podía encontrarme en peor situación…- pensó –necesito mantener caliente aang… pero como?!- dijo.

Observó el alrededor, sintió con mas fuerza las vibraciones, el lugar estaba algo húmedo, posibilidades de generar fuego reducidas!, tendría que salir a buscar madera, y con suerte lograr obtener el preciado elemento.

-Desearía que zuko estuviera aquí-

-

/…en el sitio de campamento/.

Zuko observaba las tiendas aplastadas por nieve, la fogata apagada y cubierta por la misma, los escombros de la tienda de roca que toph levanto.

-Esto no es bueno- pensó. –adonde podrían haber ido!-

-Oye, quien eres tú!- gritó un soldado a lo lejos.

-Maldición!- dijo zuko quien de inmediato salio huyendo del lugar, pensando en como iban a lograr salir de esta.

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/Toph: tengo que encargarme de aang y esperar lo mejor/

/Aang: siento como alguien esta a mi lado, pero esta lejano, no siento mi cuerpo…/

/Zuko: donde se habran metido?!/

/Katara: espero que zuko pueda llegar a tiempo?/

EN EL PRÓXIMO CAPITULO… NOCHE HELADA!

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Tu puedes elegirla… votando con tu review… asi que anda… danos tu opcion y apoya a tu pelea favorita de la serie, los ganadores saldran en un video exclusivo por Youtube!... Asi que empiecen a votar!!!.

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Y NO SE PIERDAN EL PROXIMO CAPITULO DE "ENFERMO" de

\/T h e L o r d O f T h e F i c s/\