Un nuevo fic en el que entran mis dos personajes favoritos, Bloom y Stella. Una historia llena de aventuras, romance y ante todo magia ;) Espero que os guste!
Este fic estará ubicado con el final de Tritannus, es decir, nuestras amigas aparecerán con su nueva transformación, el Sirenix!
Estos personajes han sido creados por Iginio Straffi.
Ella, mi mejor amiga.
Capítulo 1. Una amiga especial.
Cinco chicas se encontraban en un pequeño salón. Algunas estaban sentadas en un amplio sofá, otras en cómodos sillones y alguna directamente estaba apoyada en la pared. Ella tenía un largo cabello rojizo como el fuego, unos ojos grandes de mismo color que el cielo. Iba con un vestido rosa acabando en la falda de color azul y unas botas de igual color con tacones.
Su mirada se sumergía en aquel móvil que sostenía en su mano. Tenía un semblante serio y preocupado, necesitaba escuchar con urgencia su melodía o de lo contrario se volvería loca.
-¡Bloom!-la pelirroja levantó de su sueño para ver a sus amigas llamarla.
-¿Me habéis llamado?-preguntó no muy segura de haber sido cierto o su imaginación.
-Claro que te hemos llamado, y varias veces-le contestó una chica de larga melena azul oscura.
-Lo siento, Musa-suspiró Bloom volviendo la mirada a su móvil.
-Vamos Bloom-una chica de larga melena castaña, piel canela y ojos verdes se levantó del amplio sofá para ponerse delante de la pelirroja-deja de mirar el móvil tan desesperadamente.
-Flora tiene razón-dijo una chica de piel morena y pelo oscuro rizado de ojos azules-¿acaso no recuerdas que el hada de la tecnología es Tecna?
-En otras palabras-habló la de pelo corto magenta y ojos azules-que lo que quiere decir Layla es que yo debería ser quien esté con el teléfono.
-Lo siento, chicas-suspiró Bloom intensamente-pero no puedo...
-¿A qué se debe tanta preocupación?-preguntó Layla intrigada.
-Hace tres días que Sky se fue a Eraklyon y todavía no tengo noticias de él-contestó ella en un tono desanimado-estoy muy preocupada y sólo espero que me llame para saber que se encuentra bien y que no tardará en regresar a Magix.
-Bloom-Musa miró a los ojos a la chica pelirroja que la intercambiaba la mirada-espero que no te moleste que te lo pregunte pero... ¿piensas que Diaspro pueda estar en Eraklyon?
-Es una idea que intentó quitarme de la cabeza-Bloom miró hacia otro lado-pero yo sé que Sky no se fijaría en Diaspro.
-Debes despejarte-Flora intentó desviar el tema de conversación, no quería que su amiga se preocupara tanto por Sky y menos que acabaran hablando de Diaspro, eso podría empeorar la situación-¿os parece dar una vuelta por la ciudad?
-Eso sería una gran idea, Flora-apuntó Tecna con una amplia sonrisa-nos despejamos durante un rato y además podré ir a comprarle el regalo a Timmy. Dentro de poco es su cumpleaños y debo darme prisa.
-Yo también necesito un poco de aire-opinó Musa con una radiante sonrisa-durante estos días no he salido de Alfea y ya estaba poniéndome mala.
-Entonces movámonos-apoyó Layla animada.
-Sí-sonrió levemente Flora-Bloom, vente.
-Debo suponer que no me queda otra opción-las chicas negaron-iré a buscar a Stella, seguro que ella también querrá apuntarse.
-Pero no olvides advertirla de que no vamos a ver ropa-pidió Musa casi en un ruego.
-Tranquila-emitió Bloom la primera sonrisa, aunque pequeña-esperad afuera.
Las cuatro chicas se marcharon del lugar dejando sola a Bloom. Miró una última vez su móvil y una vez rendida lo guardó. Se encaminó hasta la habitación de su amiga Stella a un paso lento, estaba tan desanimada que no tenía ganas de hacer mucho.
"Stella está igual que yo" Pensaba Bloom mientras andaba hasta la habitación de su amiga. "Cuando Sky se fue Brandon iba con él... lo peor es que todos acabamos discutiendo... no me atrevo ni a decírselo a las demás".
Cuando llegó hasta una puerta donde ponía "Stella" respiró hondo. No veía a su amiga desde la tarde del día anterior, se había encerrado en su habitación, sin compañía alguna nada más que la de su sombra. Finalmente se atrevió a golpear la puerta de la chica y espero una respuesta rápida, pero no llegó. Bloom se preocupó demasiado por ella así que sin previo aviso abrió la puerta poco a poco.
-¿Stella?-preguntó asomando la cabeza por la habitación. Al no recibir respuesta entró al dormitorio cerrando la puerta tras ella-menudo desastre...
La habitación de Stella estaba patas arriba. Las sábanas arrugadas y desechas, las puertas de sus armarios y cajones abiertos y con la ropa tirada por todos lados. Bloom entró al baño que estaba al lado para ver si allí encontraba a su amiga, pero tampoco la encontró en aquel lugar.
-Al menos el baño está en mejor estado-Bloom volvió a la habitación y miró a su alrededor-¿dónde puede estar?
Bloom clavó la mirada al frente, las puertas del balcón estaban abiertas de par en par y dejaban las cortinas moverse a causa del viento. Sin pensarlo dos veces salió para ver si allí se encontraba su amiga y nada más cruzar al balcón la encontró dándola la espalada.
Su larga melena rubia era agitada por el viento dejando ver su espalda. Iba con un vestido naranja sin tirantes y unos tacones verdes. Estaba apoyada mirando la escuela desde arriba.
-Stella-volvió a nombrarla Bloom, la rubia se dio la vuelta dando a descubrir sus ojos avellana apagados-¿cómo estás?
-No lo sé-respondió sin mucho ánimo-¿cómo estás tú?
-¿Yo?-la rubia asintió-pues... tampoco lo sé.
-¿Qué querías?-preguntó Stella cambiando de conversación.
-Flora y las demás me han pedido que salga un rato para que me de el aire-contestó Bloom mirando al frente-y he pensado en venir a buscarte. No deberías estar encerrada entre cuatro paredes y... no sé si preguntar por el desorden.
-No me apetece salir-suspiró la rubia-gracias por la oferta. En cuanto a mi dormitorio, mejor no preguntes.
-Pienso que a ti te vendría salir como a mí-Bloom miraba desde el balcón a sus amigas que estaban hablando entre ellas.
-Bloom-la pelirroja miró a su amiga-alguna vez te has preguntado por qué hemos acabado conociéndonos.
-¿Te molesta haberme conocido?-preguntó con un poco de humor, no quería estar muy desanimada.
-Sabes que me alegra que nos hubiéramos encontrado, recuerda que eres mi mejor amiga-Stella sonrió levemente al igual que Bloom-¿te acuerdas de ese día?
-No podría olvidar un día como ese-contestó Bloom con una sonrisa muy amplia y tono orgulloso-ese día descubrí que era un hada.
-Y desde entonces comenzó nuestra aventura-Bloom asintió ante el comentario de Stella-aún recuerdo la cara de tu padre cuando transformé su teléfono.
-Es imposible de olvidarse-empezó a reír la pelirroja-¿y cuándo apareció Knut con aquellas bestias? Fue mi primera batalla.
-Para haber descubierto que tenías poderes luchaste con valentía-Bloom sonrió orgullosa.
-Tenía que defender a mi familia-luego Bloom miró a otro lado-ese día... ese día fue la primera vez que vi a Sky.
-A ti tampoco te han llamado ¿verdad?-preguntó Stella entendiendo su preocupación.
-No sé si está en peligro, si no quiere hablar conmigo o...-la pelirroja guió su mirada al cielo-tal vez se haya encontrado con ella...
Flash Back
Era una tarde de primavera, un sábado en Magix como otro cualquiera en la que las calles eran abordadas por demasiada gente, familia que disfrutaba de un hermoso día y personas que pasaban el día con la persona que querían. Sentados en una mesa de una cafetería había un pequeño grupo, dos chicas acompañada de dos chicos.
-Sky-la pelirroja miró a los ojos azules del chico rubio que la acompañaba-¿qué tal os fue el entrenamiento de la mañana?
-Agotador-contestó él-todo el día mostrando a los especialista de primer curso todo lo que aprendimos durante nuestro años.
-Eso suena aburrido-comentó la rubia que estaba removiendo lo que quedaba de su helado.
-¿Aburrido?-preguntó el chico de pelo castaño y ojos marrones que se sentaba a su lado-ha sido agotador pero muy entretenido. Me hubiera gustado haber tenido una clase así cuando empezamos el curso.
-Cierto, Brandon-sonrió el rubio apoyando a su compañero.
-Pues a mi dar clases a las hadas de primero me parece demasiado aburrido, seguro que Bloom está conmigo-comentó la rubia.
-Por un lado es cierto-opinó Bloom-algunas se comportan demasiado mal en las clases.
-Tampoco debemos quejarnos-la rubia rió un poco-el primer curso que tuvimos las clases con Palladium siempre estábamos haciendo cualquier cosa menos estudiar.
-Pobre Palladium-rió la pelirroja.
-¿De verdad le hacíais eso a vuestro profesor?-alzó una ceja Brandon.
-Sí... pero sólo ese curso-contestó la rubia que dio un pequeño bostezo.
-¿Vamos a dar una vuelta?-preguntó Bloom a los dos chicos-no quiero que Stella se duerma antes de tiempo.
Las parejas salieron de la cafetería en la que se encontraban y comenzaron a caminar por la abarrotada ciudad. Delante iban Bloom y Sky agarrados de la mano y tras ellos Brandon y Stella, ella se abrazaba al brazo del chico.
-Mañana podríamos salir otra vez-comentó Sky a su novia-pero los dos solos.
-Suena bien-sonrió Bloom-la verdad que hace mucho no estamos solos... a veces están los demás y hoy están Brandon y Stella.
-Entonces mañana tú y yo solamente-le guiñó un ojo a la pelirroja.
Detrás de ellos iban la otra pareja que también conversaban de sus cosas.
-La semana que viene hay unos días de vacaciones-Stella miró a Brandon que la estaba hablando con una hermosa sonrisa-he pensado en que podíamos irnos los dos a algún lugar.
-¿Enserio?-Stella iba a hablar cuando...
-No a centros comerciales-la rubia bufó ante la interrupción que había echo su novio rompiendo sus ganas de ir de compras.
-¿Entonces? Espero que no me lleves a la montaña-frunció ella el ceño.
-¿Acaso te molestaría el lugar a donde ir? Yo creí que lo importante era...
-Está bien-ella apoyó su cabeza en el hombro de Brandon-pero estoy segura de que no me iba a llevar a una montaña.
Brandon sólo atinó a reír ante el comentario de su novia. De pronto se escuchó una música, vieron como la pareja de delante paró de caminar y Sky sacaba su móvil. Rápidamente contestó la llamada.
-¿Padre?-preguntó Sky mientras veía a la otra pareja ponerse al lado de ellos dos-¿qué pasa? No hables tan rápido.
Stella se puso al lado de Bloom que miraba atenta a Sky y escuchaba lo que le decía a su padre.
-¿Qué?-el tono de Sky sorprendió a los presentes, parecía preocupado-¿cómo ha pasado? ¿Cuándo?
Bloom apretó fuerte sus puños, esto no le gustaba en absoluto. Stella miró a Brandon que tenía un semblante serio.
-Ahora mismo-Sky colgó la llamada y miró a Brandon.
-¿Qué ha pasado, Sky?-preguntó Brandon serio después de haber escuchado las preguntas y el tono de voz de su compañero-¿todo bien?
-No, nada va bien-Sky también tenía un gesto serio-debemos ir a Eraklyon cuanto antes.
-¿Qué?-preguntaron las dos chias a la vez.
-¿Qué ha pasado?-preguntó corriendo Brandon antes de que las chicas volvieran a preguntar.
-Mi padre necesita vernos cuanto antes, te lo contaré en la nave-ante el comentario de Sky, Bloom no pudo evitar fruncir el ceño.
-¿Cómo que se lo contarás en la nave?-Bloom se metió en la conversación de los dos especialistas-quiero saber lo que pasa, Sky.
-No te lo puedo contar, Bloom-intentó que la chica se tranquilizara-esto es entre Brandon y yo.
-¿Y yo que soy entonces?-Bloom se cruzó de brazos.
-Pero...
-Nada de peros, Sky-Stella también intervino para defender a su amiga y sobre todo para estar también al corriente-¿por qué no lo puedes contar con nosotras delante? Yo también debo saber que pasa si Brandon tiene que ir a Eraklyon.
-Stella-la rubia miró a su novio-no te entrometas en la conversación.
-¿Cómo?-Stella abrió los ojos sorprendida-¿qué dices? ¡Yo no me entrometo! Sólo quiero saber si es peligroso.
-De verdad que no os lo puedo contar-Sky intentó calmar la situación pero sólo consiguió avivar más el fuego, sobre todo uno especial.
-Otra vez guardándote secretos-Sky miró a Bloom que estaba apunto de estallar-¿todavía no confías en mí?
-Claro que confío...
-Entonces dime lo que sucede-le interrumpió mientras intentaba no perder la paciencia.
-Bloom-Sky la miró a los ojos-no puedo.
-Sea lo que sea-Brandon habló mientras se ponía al lado de Sky-es cosa nuestra y nosotros debemos ocuparnos.
-En ese caso ¡que os lo paséis bien!-gritó la rubia cabreada.
Los dos chicos a pesar de haber intentado mantener la calma también estaban cabreados porque creyeran que no se confiaba en ellas. Se dieron la vuelta y se fueron, dejando solas a las dos hadas que miraban como poco a poco desaparecían entre la gente.
Fin del Flash Back.
Bloom suspiró miró a su amiga que estaba con la mirada perdida.
-Vámonos con las demás, Stella-la rubia asintió. No le agradaba mucho salir pero tampoco quería quedarse en una habitación destrozada.
La tarde en la ciudad pasó rápida y cuando quisieron darse cuenta ya era de noche cuando llegaron a Alfea. Se dirigían a la habitación cuando de pronto el teléfono de Bloom comenzó a sonar. Las chicas la miraron y vieron una sonrisa de alegría, corriendo contestó la llamada.
-¡Sky!-nombró a su novio ilusionada.
-¿Bloom?-la pelirroja empezó a borrar su sonrisa.
-Vanessa-reconoció la voz de su madre adoptiva.
-Siento si te estoy llamando tarde, Bloom.
-¿Eh? No... tranquila-las chicas miraron a Bloom, ya habían oído el nombre de Vanessa y supieron perfectamente que estoy hacía que la desesperación se apoderara de su amiga-¿cómo estás?
-Muy bien, cielo-se oyó el tono de voz maternal en la mujer-necesitaba hablar contigo.
-¿Pasa algo?
-Mentiría si te dijera que no-Bloom se incomodó ante la respuesta-pero no te preocupes, no es nada malo, cielo. Verás, la floristería está yendo muy mal, me paso el día ayudando a una señora mayor y apenas tengo tiempo para atenderla. He perdido buenos clientes y casi no llego a pagar las facturas.
-¿No te pagan por cuidar a la señora mayor?-preguntó la pelirroja algo preocupada.
-No, eso es algo voluntario, pequeña-Bloom miró a sus amigas que estaban escuchando a la pelirroja-sabes que para mí la floristería es algo muy importante y no puedo perderla.
-Lo sé-asintió la pelirroja.
-Bloom, me agradaría que tú junto a alguien me ayudara con ella-la chica se impresionó ante la oferta-te pagaría, por supuesto. Yo no quiero perder la floristería y tampoco sé a quien poner que no seas tú. Si lo deseas puede venir a trabajar alguien contigo, pero que sepa que no pueda pagarle mucho.
-Pues la verdad-Bloom dirigió su mirada a Flora, pero pronto miró a la rubia-creo que Stella y yo merecemos un respiro. Nos encantará ir a verte.
Pronto colgó la llamada y ella junto con sus amigas volvieron al pequeño salón donde las hadas miraban a la pelirroja descaradamente, esperando que contara la llamada de su madre adoptiva.
-¿A dónde van Stella y tú?-preguntó Tecna al ver que nadie hablaba, ni siquiera la rubia.
-A Gardenia-sonrió la pelirroja, algo que no se veía desde hace tiempo-espero que no te importe, Stella. Pero las dos necesitamos un descanso y creo que ha sido una buena elección.
-No me desagrada-contestó la rubia-pero tú parecías un poco preocupada hablando con Vanessa.
-Es posible que pierda la floristería-las chicas se sorprendieron-yo también me quedé como vosotras, chicas.
-¿Cómo que la va a perder?-preguntó Flora, que le interesaba mucho la conversación.
-Esta cuidando voluntariamente a una mujer mayor-les explicó la pelirroja-no tiene tiempo de atender en la tienda y dice que ha perdido muchos clientes fieles, además de que debe pagar facturas.
-Todo eso me lleva a pensar de que tú y Stella vais a trabajar en la floristería-adivinó Layla.
-Espero que no te importe Stella-la rubia se quedó pensando-dice que te pagará poco y...
-No debe preocuparse en eso-la respuesta desconcertó un poco a todas-el dinero de la Tierra no me vale aquí, además, ella necesita más el dinero que yo-la rubia miró a las chicas-¿qué miráis así? Parecéis tontas.
-Stella, tú...-decía Musa en un tono de extrañeza-¿vas a trabajar?
-¿Qué pasa?-se molestó ante la pregunta del hada de la música-no puedo estar en Alfea acordándome de Brandon, necesito hacer algo y si trabajar hace que me olvide un poco de él, pues trabajaré.
-¿Por eso elegiste a Stella y no a Flora?-preguntó Tecna a Bloom.
-Sobre todo-afirmó la pelirroja.
-¿Y por qué no podemos ir todas?-dudó Layla.
-Porque estaremos viviendo en la casa de Vanessa y Mike y ahí no entramos todas-contestó segura Bloom-además, los chicos están aquí y os echarán de menos.
-Y en el caso de que Sky y Brandon vuelvan, si el primer sitió al que vienen es a Alfea alguien les deberá decir que estamos en la Tierra-dijo Stella acompañando a Bloom con su explicación.
-Está bien-dijo Flora sonriendo-pues no tardéis en preparar las maletas.
-Es cierto-Bloom miró a su amiga-por la mañana nos iremos.
Las chicas siguieron conversando sobre el viaje que harían a Gardenia, por un momento Bloom apartó su verdadera preocupación y pensó en como sería su viaje con Stella, su mejor amiga.
En las oscuras cuevas de Magix renacía un nuevo poder oscuro. De entre la oscuridad dos ojos rojos se podían distinguir. Una sonrisa malvada se creo en el rostro de desconocido ser.
Entre pequeños chillidos, ruidos tenebrosos y una niebla espesa se podía oír las carcajadas de distintas personas. Pronto se podían divisar tres figuras y finalmente, saliendo de la niebla dejaron ver sus rostros.
A la derecha iba un hombre de larga melena oscura, piel blanca como la luna y ojos azules claros. Era muy atractivo y vestía con un traje negro, a su lado, en medio, una hermosa chica de larga melena rizada plateada, con la piel pálida y los ojos cristalinos, de sus labios corría un hilo de sangre. Iba con un vestido rojo que era desigualado, la parte de atrás era mucho más larga que la de delante. A su izquierda un hombre de media melena ondulada color azabache, ojos azules y piel morena. El iba con una blusa blanca y unos pantalones marrones, unas botas negras y una larga chaqueta color café.
-Yedda-nombró el moreno mirando a la dirección de los ojos rojos-¿cómo va nuestro trabajo?
-Gracias por preguntar, Saith-se oyó la voz femenina de la cual sólo se veían sus ojos-pronto lograremos ir a la Dimensión Omega.
-¿Allí se encuentra Portos?-preguntó la mujer que acompañaba a los hombres.
-Sí, Erzebet-contestó nuevamente aquella voz-liberaremos a mi padre y juntos nos vengaremos de su hermano.
-¿Y luego?-preguntó el otro hombre.
-Y luego...-aquella voz femenina, llamada Yedda, dejó ver más que sus ojos. Era una chica de larga melena azulada oscura, ojos rojos y vestía con un vestido rojo oscuro, con guantes negros que dejaban ver sus dedos, destacaban dos oreja puntiagudas, dando a ver que era un elfo-conquistaremos la Dimensión Mágica.
Yedda formó una malvada sonrisa en su rostro, al igual que sus tres compañeros, a los cuales dejaban ver en cada uno un par de colmillos puntiagudos.
Aquí el final del capítulo 1. Espero que os haya gustado y ya hemos visto un poco de los nuevos enemigos. Y sí, los tres personajes que van juntos son vampiros, he decidido introducir nuevos seres que la serie no te introdujo, a excepción de la elfa, que tiene algunos secretos ocultos ;)
Gracias por haber leído este comienzo!
Leila white Moon
