N.A. Hola a todos, aquí una nueva historia, siguiendo la idea de mi historia "Todo cambia", aquí también jugaré con la idea de que un segundo puede cambiar nuestras vidas, así que a ver que les parece. Espero sus comentarios.
El amor esta en el aire
Spencer Reid sabía que la escena no auguraba nada bueno, que la balanza se inclinaba totalmente en su contra. No podía creer que las cosas fueran así, la primera vez que realmente se enamoraba y sucedía eso... No pudo controlar los hechos, el disparo, se le detuvo el corazón... pero paso algo más, no hubo un disparo, hubo dos.
Y eso cambio el rumbo de las cosas. Morgan había disparado justo un microsegundo antes, lo que cambio el rumbo mínimo del otro disparo... Y Maeve estaba tirada en el suelo, en el charco de sangre, herida... pero no muerta, se escuchaba su respiración aún. Reid estaba realmente sorprendido. Un mínimo movimiento lo había cambiado todo, en un segundo su suerte acababa de cambiar. Casi se ahogo con la sorpresa, su corazón se había detenido durante un momento y ahora que recuperaba el latir sentía que le faltaba el aire. Por eso mismo tardo en reaccionar, por eso no fue el primero en acercarse a Maeve... pero eso no quito un único pensamiento de su mente: tenía una oportunidad única en el mundo.
Ahora estaba seguro, Spencer Reid había encontrado el amor y podía conservarlo. Era el hombre con más suerte del mundo. Y lo siguió creyendo firmemente cuando finalmente se acercó a Maeve en el suelo, mientras le daba la mano, mientras comprobaban la herida que se había hecho, mientras le susurraba que todo iría bien, que estaría bien... Spencer Reid sabía que un segundo había cambiado sus vidas y estaba agradecido. Tomó la mano de Maeve hasta la ambulancia y se prometió no soltarla más... Se prometió hacer a esa chica parte de su vida y parte de la vida de los suyos.
En el hospital lo tuvo aún más claro, cuando Maeve se despidió de él con un beso, el primero que podían darse... Tenía suerte. Y quería asegurarse de nunca olvidarlo. Y quería que su equipo, su familia, pudiera compartir esa felicidad. Y para estar absolutamente y totalmente seguro de que iba en serio, que iba a compartirlo con todos, mientras estaba esperando en el hospital tomó una decisión. Se alejo de la multitud e hizo la llamada.
-Soy Spencer, es importante...- dijo él casi sin esperar respuesta del otro lado de la línea, sin pensar en la diferencia de horario ni nada así- mi vida acaba de cambiar totalmente... es algo importante... y quiero que vengas, quiero que vengas aquí lo más pronto que puedas, esta semana, mañana, ya mismo... quiero que vengas porque quiero que conozcas a alguien... encontré el amor, Emily... y quiero que vengas a conocerla-
Y sonrió. Sólo le hacía falta que ella estuviera para conocer a Maeve, sólo eso.
