UN DÍA PARA RECORDAR
Tomoyo se dirigía al aeropuerto mientras dejaba una
nota a su asistente:
Marie
sacar boletos para:
Italia
Francia
Inglaterra
con
horarios de acuerdo a la agenda
y
una reservación en un hotel de Inglaterra
Miró su reloj, apenas era las 4 de la
mañana, llegaría a las 8 a Austria, una hora antes del desfile de modas,
suspira, no debió de haberse quedado toda la noche pensando, apenas había
dormido 1 hora, pero ya era costumbre
*
~ * ~ * ~ *
Acababan de dar las 8 de la noche, estaba
en el aeropuerto de Francia esperando su avión mientras marcaba el número de su
oficina, nadie contesta, esto era extraño ya que Marie salía a las 9 del
trabajo, iba a marcar su número cuando tuvo que abordar el avión, estaba de malas, el vuelo se había retrasado
dos horas, así que tuvo que cambiarse para la fiesta en el mismo aeropuerto, a
esto le agregamos el ajetreado día de trabajo y que su asistente no contestará
Una vez en el avión marcó el número de su
asistente
- Bueno - se escuchó la voz francesa de
la chica
- Marie, ¿en qué hotel hiciste las
reservaciones? - pregunta en francés
- Dios mío - se escuchó del otro lado,
Tomoyo sólo se imagino lo peor - lo siento srita. Daidoji, pero lo olvidé por
completo... lo que sucede es que Jean vino a recogerme y...
Tomoyo colgó molesta, se llevó la mano a
la frente tratando de tranquilizarse, tomo el celular otra vez y marcó un
número
- Buenas noches
- Buenas noches, ¿podría comunicarme con
la sra. Anderson?- preguntó en un perfecto inglés, tratando de ocultar su mal
humor
- Si, en un momento se la comunicó
- Gracias - Tomoyo espero intentando
tranquilizarse para que su dolor de cabeza disminuyera - ¿Susi?
- Tomoyo!! - se escuchó por el celular -
¿Dónde estás? Se supone que deberías de andar llegando ¿Todo bien?
- Si, lo sé, el avión se retraso
- Oh, ¿y a qué horas llegarás?
- A las 10
- Perfecto, 1/2 antes de la cena, pero no
te preocupes querida, el chofer te estará esperando para que dejes las maletas
en el hotel y te traiga
- Ese es el problema Susi, mi asistente
olvido hacer las reservaciones, y quería ver si podrías hacerme el favor de
guardar mis maletas en tu casa mientras dura la fiesta, terminado buscaré un
hotel
- Pero que asistente tan irresponsable,
pero no te preocupes, el chofer meterá las maletas por la entrada de servicio,
y al final de la fiesta yo te ayudaré a buscar el hotel
- Muchas gracias Susi, y perdona las
molestias
- No es ninguna molestia y lo sabes
querida, es más, si no tuviera casa llena sabes que te quedarías en mi casa
Tomoyo sonrió - Te dejo, nos vemos en 2
horas, y de nueva cuenta gracias
- Sabes que cuentas conmigo - y la
llamada se cortó
Susi Carral era de sus pocas amigas en
este mundo de modas, la conoció en la universidad y desde entonces se volvieron
amigas muy cercanas, las dos vivían en Francia hasta que está se caso con Alan
Anderson, un ejecutivo inglés de una importante compañía de modas, desde
entonces Tomoyo sólo la veía en fiestas o desfiles, y como ambas estaban muy
ocupadas comenzaron a alejarse sin romper su amistad, además de que debido a
sus trabajos, no tenía mucho tiempo para hacer nuevas amistades.
Entre estos pesnamientos recordó la
amistad con Sakura, antes de que está se casará y se fuera a Hong Kong con su
marido, recordó los buenos tiempos en los cuales tenía tiempo de disfrutar sus
diseños, no como ahora, que tenía que estar a la carrera, de un desfile a otro,
o como este día, un desfile en Austria, una comida en Italia, una junta con su
compañía en Francia y una fiesta en Inglaterra, Tomoyo suspiró, hubiera
rechazado ir, si no fuera porque Susi se lo había suplicado, además de que ya
casi pasaba un año de no verla
Bajo del avión y recogió sus dos maletas,
todos los del aeropuerto se le quedaron viendo, a la pobre Tomoyo sólo le salió
una gran gota, si el avión no se hubiera
retrasado, esto no hubiera ocurrido, el tener que viajar con vestido de fiesta
era incómodo, pero más, las mirada de los hombres. A los lejos distinguió el
rostro del chofer, que se dirigía hacia ella
- Buenas noches, srita. Daidoji - el
chofer hizo una reverencia tomamando las maletas de la joven - tiempo sin
verla, ¿tuvo buen viaje?
- Si - dijo Tomoyo, que ya había logrado
tranquilizarse
Subió a la limosina y se acomodo el
cabello, por suerte desde la mañana se lo había agarrado, así que no necesitaba
más que un retoque, al igual que su maquillaje, el viaje fue rápido, y cómo lo
había pensado, llegó a las 10:15, volteó a ver su atuendo y notó con agrado que
no se había arrugado, se acomodó el vestido, Susi la estaba esperando en la
entrada
Cuando entro a la casa, se sorprendio al
escuchar los aplausos y un letrero de Feliz Cumpleaños, había estado tan
ocupada que lo había olvidado por completo, unas lagimas quisieron correr pero
las detuvo, Susi se acercó y la abrazó
- ¿Te gustó la sorpresa? - Preguntó, pero
al ver el rostro de su amiga sonrió - lo habías olvidado, ¿verdad?
Tomoyo estaba muda, sólo asintió con la
cabeza
La fiesta siguió su rumbo, Tomoyo salió
al balcón a tomar un poco de aire, y no pudo evitar bostezar, realmente estaba
cansada, y no se estaba divirtiendo mucho, pues casi no conocía a nadie, y sus
conocidos ya se habían retirado, además de que no estaba con muchos ánimos para
hacer nuevas amistades, es entonces cuando un joven se le acerca
- ¿Daidouji?- pregunta el joven con una
sonrisa, Tomoyo esta algo desconsertada, parece conocer al joven, de
aproximadamente su misma edad, no superan los 25 años, su cabello azulado
estaba recogido a manera de una coleta a la altura de la nuca, vestía unos
pantalones negros, camisa azul marino y saco negro, a través de sus lentes se
podía contemplar una mirada serena y profunda, encubierta por el azul de sus
ojos, era un joven muy guapo y galante
- ¿...Hiragirazawa? - pregunta después de
reconocerlo, el chico sonríe de nuevo mientras asiente
- Tanto tiempo - dice mientras contempla
a Tomoyo, la edad la habia vuelto una mujer muy hermosa, elegante y
sofisticada, aunque todavia conservaba su toque humilde, traía un vestido negro
de corte chino, con los hombros y espalda descubiertos, el vestido era
entallado dejando ver la hermosa y bien formada figuara de la chica, el vestido
tenía una avertura del lado derecho la cual llegaba a medio muslo, su cabello
recojido en un chongo, dos rizos caian sobre su rostro, mientras el resto de los
risos sobre sus hombros.
- ¿Quieres bailar?- pregunta mientras le
extiende la mano, la cual Tomoyo acepta sonriendo
Y así comenzaron a bailar, ya en el
tercer baile Eriol decidió romper el silencio que se había puesto sobre ellos
- Me hubiera gustado ir a la boda
- Fue muy hermosa, hubieras visto a
Sakura, parecía una princesa de cuento de hadas- dijo Tomoyo ilusionada - se
veía soñada
- No has cambiado en nada - Eriol sonrío,
Tomoyo no pudo evitar bostezar
- Disculpa - dice algo sonrojada, no se
sabe si por el comentario o por el boztezo
- Se ve que has tenido un día muy
cansado, ¿puedo acompañarte a tu hotel? - Pregunto amablemente, Tomoyo dio un
pequeño brinco
-Tranquila, lo que sucede es que quiero
ver si puedes pasar mañana el día conmigo, hace mucho que no nos vemos y me
gustaría que siguieramos platicando - se justifica al ver la reacción de Tomoyo
- No es eso Hiragizawa, también me gustaría pasar el día contigo,
pero ...-
- ¿Sí, qué sucede? - pregunta curioso,
Tomoyo termino contandole toda su travesía a grandes rasgos en especial el
hecho de que su querida asistente olvido las reservaciones a un hotel debido al
novio, Eriol apenas pudo controlar la carcajada
- Podrías quedarte en mi casa - ofreció
- No es necesario, Hiragizawa, ya que
terminé la fiesta llamaré a algunos hoteles
- Eso sería muy cansado, Daidoji, además
de que sería muy noche
Después de un rato de argumentar, Tomoyo
aceptó quedarse con Eriol, ya que casi todos los invitados se retiraron, se lo
dijo a Susi, quien después de escuchar que eran amigos de la infancia aceptó
que su amiga se fuera con él, además de que sabía, por su esposo, que Eriol
Hiragizawa era todo un caballero y no le pasaría nada a Tomoyo
En la mansión de Eriol
- ¿Dormiste bien?- Pregunta Eriol
mientras le indica sentarse, Tomoyo se acerca al sillón y se sienta
- Demasiado bien, gracias - contesta con
una sonrisa, Eriol sonríe y es cuando Tomoyo nota que éste trae su cabello
suelto, el cual le llega a la altura de los hombros - Te sienta bien el cabello
largo
- Gracias, lo mismo digo - Tomoyo traía
una trenza que le llegaba un poco más abajo de la cadera
- ¿Qué hora es?
- Medio día - Tomoyo se sorprendió, nunca
se despertaba a esas horas, y estaba algo apenada, Eriol volvió a sonreír
- ¿Quieres acompañarme a desayunar? -
Tomoyo lo ve extrañada
- No sólo tú te has levantado tarde
Ambos se sientan a desayunar
- ¿Dónde están Nakuru y Spinel? -
Preguntó al no verlos por ningún lado
- Salieron un rato
- ¿Y cómo están?
- Siguen siendo los mismos - dijo
mientras reía - siguen siendo igual de traviesos
- Me imagino - Tomoyo también río,
mientras recordaba la comida de despedida
- ¿Y cómo están Sakura y Shaoran?, ayer
no terminaste de contarme
- Están muy bien, según la última carta
que recibí, ya tuvieron a su primogénita, a la que llamaron Nadeishko
- Como su abuela
- Exacto, pero debiste ir a la boda, fue
perfecta
- Me imagino que tú realizaste todo -
afirmo, Tomoyo sólo asintió mientras comenzaba a contarle todos los detalles, y
lo mal que se sentía de no haber podido grabar la declaración, a esto Eriol
soltó una carcajada, definitivamente, no había cambiado
Una vez que terminaron el desayuno, Eriol
le propuso llevarla a conocer Londres, y por mayor facilidad decidieron ir en
camión
Primero la llevó al Bing Ben, luego a
algunos museos, y por último decidieron ir a un paseo por el Ténesis
El camión se lleno, parecía que todos
había decidido ir al río en ese momento, Tomoyo y Eriol estaban algo
apretujados, de pronto, el chofer tuvo que frenar de golpe, provocando que Tomyo,
que no estaba bien agarrada, terminara recargada en el pecho de Eriol
abrazándolo, y debido a que subieron más pasajeros, tuvieron que quedarse en
esa posición la mayoría del viaje, ya que bajaron del camión, Tomoyo no
apartaba la vista del suelo
- Lo... lo siento - dijo algo avergonzada
- No te preocupes - contestó Eriol, que
se sentía igual de avergonzado, ya que jamás había tenido a una chica tan
cerca, pero al ver que el barco estaba a punto de zarpar, la tomo de la mano y
jalándola, subieron al barco, a los pocos segundos éste zarpó
Mientras recorrían el viaje, estuvieron
platicando de muchas cosas, el trabajo de Tomoyo, de cómo se había vuelto tan
famosa con sólo llevar 3 años en el medio, de la amistad con Susi Anderson y un
poco de su vida, también hablaron de Eriol, quien era el dueño de la compañía
de modas para la que trabajaba Alan Anderson, de cómo fue invitado a la fiesta
y otras tivialidades. Y desde ahí vieron el anochecer
Cuando llegaron al puerto ya estaba
bastante obscuro, ya después de que todos habían salido, Eriol ayudo a subir a
Tomoyo, y cuando éste iba subiendo, el barco hizo un movimiento brusco,
provocando que Eriol se tropezara y perdiera el equilibrio, cayendo sobre
Tomoyo, sus rostros quedaron a unos cuantos centímetros de distancia, y los dos
agradecieron que la obscuridad no permitiera que el otro se diera cuenta de lo
rojos que estaban, Eriol se levantó y ayudo a Tomoyo a hacerlo, y ya calmados
regresaron a la casa
Tomoyo subió a su recámara, después de
cenar, a acomodar su equipaje, ya que tenía que estar en la tarde en Francia,
ya todo acomodado, se sentó en el tocador soltándose la trenza, era cómoda,
pero a veces llegaba a cansarla, en ese momento tocaron a su puerta
- Si, ¿qué sucede? - Preguntó mientras
abría la puerta, Eriol quedo algo atontado al verla con el cabello suelto, le
llegaba hasta las rodillas, parecía un ángel - ¿Eriol?
- Ah sí, lo que sucede es que quería
entregarte algo por tu cumpleaños - le dijo mientras sonreía para disimular
- No debiste molestarte - le dijo
sonriendo
- No es molestia, ven - y tomandola de la
mano la llevo a la biblioteca
El lugar era enorme, Tomoyo pensó que
debía ser el cuarto más grande de toda la casa, Eriol la sentó en un sillón que
estaba frente a una televisión y fue a su escritorio, de donde sacó una cinta
de video
- ¿Qué tiene? - Preguntó con una gran
curiosidad
- Tiene todas las aventuras que te
perdiste al transformar las cartas - sonrió Eriol mientras metía la cinta en la
videocasetera
Tomoyo no supo que decir, lagrimas
corrieron por sus mejillas sin que pudiera detenerlas, Eriol se sentó aún lado
mientras le limpiaba las lagrimas
- No llores - le entrego un pañuelo
- Es que es el mejor regalo que me
pudieron dar - contestó a duras penas
- Vamos - Tomoyo ya había dejado de
llorar - deja te enseño el video - y mientras decía esto apretó play y comenzó
la película
A la mañana siguiente entro Nakuru a la
biblioteca, buscando a su amo, ya había buscado por toda la casa, cuando entró
vio la tele prendida, y al ir a buscar el control para apagarla se encontró con
Tomoyo y Eriol dormidos, ella recargada en él mientras él la abrazaba
*- Que escena tan dulce -* pensó mientras
sacaba una cámara de la nada y les tomaba una foto, apagó la tele y salió del
cuarto
Nakuru y Spi estaban en la sala
discutiendo cuando entraron los chicos, Spi le aventó una cámara a Nakuru,
quien la escondió en el sofá, los chicos estaban tan avergonzados que ni
siquiera lo notaron, Eriol dejo las maletas en el piso y les dijo a todos que
era hora de desayunar, después del desayuno, tomaron y guardaron todo en el
automóvil, Tomoyo se despidió de Nakuru y Spinel y subió al carro, pero antes
de que Eriol subiera, éstos le entregaron una caja dirigida a Tomoyo
En el aeropuerto
- Nakuru y Spi te mandan esto - Tomoyo
tomó la caja sonriendo, Eriol le da un beso en la mejilla - Sabía que esa
mirada todavía seguía en ti, la mirada que tanto me gustaba ver cuando niños-
dice Eriol un poco sonrojado, Tomoyo se sonrojó también
- Muchas gracias por el día de ayer -
diciendo esto salió corriendo
Estando en el avión abre el regalo, es
una videocienta (de lo que hicieron ayer) y un casette (con la canción de Eriol
al piano y Tomoyo cantando), detrás estaba la fotografia que tomo Nakuru con
una nota al reverso
Hacen
una linda pareja, esperamos verte pronto de nuevo.
atte
Nakuru
y Spinel.
La nota trae un dibujo chibi de ellos y
la fecha
Mientras el avión se aleja, Eriol murmura
- Espeto verte de nuevo
FIN
NOTAS DE
LA AUTORA:
Fuu:
Espero les haya gustado, este fic lo hice en colaboración con Gochan, es más,
si su ayuda, hubiera tardado más en salir
Gochan:
¬¬ Cualquier duda, reclamación, jitomatazos, cebollazos, mentadas de madre
(Fuu: ¬¬Uu), virus, favor de enviarselos a Fuu
Fuu:
Hey!!
Gochan:
¿Qué quires? La idea fue tuya ***^^***
Fuu: ^^Uu
uh, bueno, cualquier aclaración a usaguilady@hotmail.com
Isis: Les
quedo muy bien, más que bien
Kali: ¿Y
la continuación?
Gochan:
¬¬ ¿conti... qué?
Fuu:
¿continuación?
Gochan:
(Agarra del cuello a Fuu y la estampa contra la pared) ¿Teníamos que hacer una
continuación? O_ó
Fuu: Yo
te lo dije (intentando safarse)
Gochan:
¿En serio? (se queda pensando pero aún así no suelta a Fuu)
Fuu: ^^Uu
si....
Gochan:
Ya me perdí @_@
Fuu: ...