"Nadie puede cambiar su pasado; pero todo el mundo puede contarlo al revés."

- Noel Clarasó

El pasado era algo que acechaba a Chris por las noches desde casi toda su vida, la muerte de sus padres le había dejado una profunda marca que sabía no había curado del todo, al igual que el momento que decidieron echarlo de la fuerza aérea por haber escuchado a su corazón y no a sus superiores, siempre tuvo problemas con la autoridad, sin embargo de todo aquello que había marcado su vida Albert Wesker, S.T.A.R.S. y Racoon city fueron las cosas que más afectaron su pasado, lleno de sueños y esperanzas para el futuro.

Aquellos que lo conocieron en 1998 y lo vieran el día de hoy, se darían cuenta que ya no era el hombre de ese entonces, sabía que Jill y Claire se habían dado cuenta del cambio que dio, ya no era el joven alegre que gustaba ayudar a las personas, dispuesto a dar su vida por el bien común viendo el futuro con buenos ideales, no, esos tiempos se acabaron junto con Racoon city, después de la traición de Wesker, aquel que confiaba con su vida, su capitán.

Si tan solo no hubiera conocido a Wesker, si tan solo no hubiera ido a Racoon city o si no hubiera contestado la llamada que le hizo la RPD un lindo viernes por la tarde, o tal vez si hubiera hecho caso a sus superiores en la fuerza aérea aun seguiría ahí y jamás hubiera dedicado los próximos 11 años de su vida persiguiendo al monstruo en el que se convirtió el hombre que, muy a su pesar, llego a ocupar un lugar en su corazón.

Racoon City, Edificio de la RPD. 1996

Un joven de cabello café de unos 23 años observaba con sus ojos azules sus alrededores de forma nerviosa, hacía una semana que Barry lo había recomendado para unirse a la nueva fuerza de elite en la R.P.D., "S..S.", ese era el nombre que le habían dado a la unidad anti terrorismo que recién se formaba, y por ello era que ahora se encontraba sentado esperando su turno para la entrevista que decidiría su futuro con un traje que solo había usado dos veces desde que Claire se lo regalo, nunca le gustaron los trajes por lo que su hermana decidió regalarle uno diciendo que todo hombre necesitaba tener mínimo uno en su armario, junto con una corbata azul igual cortesía de su hermana.

-Combina con tus ojos- le dijo cuando se la regalo en navidad, pero Chris ahora sentía que esa misma corbata decidió tomar inclinaciones homicidas al sentir como trataba de estrangular su cuello.

Nervioso trato de aflojar el nudo de la corbata antes de sufrir un desmayo ahí mismo, ya llevaba una hora esperando en una silla no muy cómoda en medio de dos hombre que al parecer venían como él a la entrevista lo cual aumentaba su nerviosismo aun más.

El sonido de la secretaria de mediana edad tecleando en su computadora y el del reloj en la pared que parecía mirarlo de forma burlesca mientras el segundero parecía ir más lento era lo que acompañaba a Chris y llenaba el silencio de la sala en la que se encontraba, suspiro y apretó un poco más con sus manos la carpeta que descansaba en su regazo que contenía todas las recomendaciones que logro conseguir en la semana anterior, no eran mucho pero sabía que la fuerza aérea le ayudaría, Barry le había comentado que el nuevo equipo estaba conformado por ex-militares, lo cual ayudaba a tranquilizarse un poco.

La puerta del otro lado de la habitación se abrió, revelando a un hombre con traje que salía con la cabeza baja y sudando levemente, parecía asustado e intimidado, Chris trajo pesado mientras lo veía pasar frente a ellos y mirarlos con lastima, comenzó a apretar sus manos sin darse cuenta, sintió como se aceleraba su corazón.

"Cálmate Chris, no es más que una entrevista de trabajo, estuviste en la fuerza aérea por dios, solo cálmate" trataba de tranquilizarse mentalmente mientras miraba la puerta expectante.

-Christopher Redfield- su nombre completo sonaba muy extraño para sus oídos, casi nunca lo usaban para referirse a él, sin embargo sabía que lo llamaban, respiro profundamente y se dirigió a la secretaría que acababa de decir su nombre, saludo con una sonrisa que no fue correspondida por esta.

-Puede entrar señor Redfield- la mujer señalo la puerta mirándolo con lastima, Chris sonrió nervioso y asintiendo se acerco a la puerta, respiro una última vez dándose ánimos mentalmente y la abrió esperando lo peor.

La oficina era muy pulcra para su gusto, parecía que el dueño de esta era obsesivo con el orden, como si de un médico se tratase todo tenía un lugar, además el color blanco completaba el estilo, miro cada rincón de esta hasta que sus ojos se pasaron en un hombre que estaba frente a un archivero, buscando algo en los miles de folders que este tenía dándole la espalda a él, Chris lo miro detenidamente, tenía el cabello rubio obscuro, no veía bien pero parecía totalmente peinado hacia atrás, traía un traje color negro que hacía que el color de su cabello resaltara más, su porte era muy confiado haciendo que Chris estuviera más nervioso cada minuto.

-Señor Redfield- la voz del hombre se escucho en el silencio de la oficina, tenía un leve acento que Chris no supo identificar, pero hacia su voz muy distintiva.

-Es Chris por favor- Chris se dio una cachetada mental después de haber dicho eso, no pudo evitarlo, odiaba que se refieran a él por su nombre completo o apellido.

"Que bien Chris no puedes mantener tu boca cerrada" se reprendía mentalmente mientras el hombre giro sobre sí mismo para mirarlo, viendo que el dilema mental de Chris no terminaba aclaro su garganta atrayendo la atención de este.

Chris lo miro y tomo más detalles de él, su traje no era la gran cosa, un simple traje negro con una corbata roja, sin embargo lo que le llamo la atención era que usaba lentes obscuros en interiores ocultando sus ojos.

El rubio lo miro con una ceja levantada, Chris sacudió su cabeza y sonrió lo mejor que pudo, el hombre no dijo nada y con un gesto le indico que tomara asiento en la silla que estaba frente al escritorio, Chris asintió y se sentó mirando al hombre nervioso.

El hombre se acerco a la silla del otro lado del escritorio, coloco unos documentos que había buscado en el archivero y tomo uno en especifico y lo coloco frente a él, después tomo una pluma que estaba a su derecha y se acomodo mejor para ver a su acompañante de frente, Chris miraba todos los movimientos que hacía, le daban la impresión de que eran calculados y premeditados, como si el hombre no dejara nada al azar.

-Mi nombre es Albert Wesker, señor Redfield- Wesker extendió su mano ofreciéndosela a Chris notando que este hizo caso omiso sobre su nombre, Chris respondió el saludo, en cuanto sus manos se tocaron Chris sintió que su nerviosismo disminuía un poco, era extraño porque estaba seguro que comenzaría a sudar como cerdo si se quedaba un minuto más ahí.

-Espero que allá traído sus papeles- Wesker lo miró por sobre sus lentes revelando el color azul de sus ojos, más profundos que los de Chris, el aludido se dio cuenta que se había quedado perdido en sus pensamientos, sonrió tontamente y le entrego la carpeta al hombre frente a él, haciendo que sus dedos se tocaran por un momento.

Chris lo noto y se sintió más extraño que antes, sin embargo a Wesker pareció no molestarle y leyó el contenido, asintiendo levemente cuando estaba de acuerdo con su mente y frunciendo el seño de vez en cuando; mientras Chris lo miraba esperando que dijera algo.

-Así que estuvo en la fuerza aérea- Wesker hablo en voz alta, mirando levemente a Chris.

-Así es, estuve por seis años en servicio- Chris no pudo evitar sentir una punzada de tristeza al recordar sus vida en la fuerza aérea, tenía que admitir que amaba volar y en verdad lo extrañaba.

Wesker solo asintió ante lo dicho, luego su mirada se poso en una línea en específico.

-Aquí indica que se retiro, sin embargo veo que es muy joven para ello, supongo que esa no es la razón, ¿o me equivoco?-

Chris se tenso después de lo dicho, no era algo que le gustaba contar, bueno sabía que había hecho lo correcto pero eso no cambiaba como lo veían los demás, la excusa del "retiro" fue como una disculpa para hacer más fácil su expulsión de la fuerza aérea por el servicio que otorgo a su país y así no tendría problemas para presentar ese documento como ahora, pero Wesker era más listo que eso, así que Chris suponía que él quería la verdad, trago lento y suspiro, se lo diría, si los S.T.A.R.S. no aceptaban lo que había hecho no veía el caso en unirse para empezar.

-Bueno es verdad que no me retiré- Chris comenzó esperando que Wesker levantara la mirada del documento para verlo a él –lo que sucedió fue que desobedecí ordenes de un superior, en realidad desde hacía un tiempo tenía problemas con la autoridad, pero el incidente de ese día fue lo que colmo el vaso- a pesar de su nerviosismo Chris se mantuvo firme al dar su respuesta.

Wesker no mostro cambio alguno en su expresión, bajo el documento que estaba leyendo y miró a Chris directamente poniendo toda su atención en él.

-¿Que fue lo que hizo señor Redfield?, vi su historial y está prácticamente impecable, por lo que no indica que sucedió- Wesker cuestionó sin malicia ni reproche, solo con simple curiosidad, Chris trago pesado pero no dudo, siguió manteniendo su porte, porque sabía que lo hizo era lo correcto y no se arrepentía.

-Fuimos a una zona de guerra, mi orden fue retirarme de inmediato pero uno de mis compañeros se había quedado atrás, vi que aun podía salvarse así que desobedecí y fui a rescatarlo- Chris miró a Wesker a los ojos tratando de encontrar algo en ellos pero los lentes se lo impedían por lo que decidió continuar –Después de eso me llamaron la atención y no lo recibí muy bien, finalmente termino en una pelea y en mí siendo echado de la fuerza aérea- terminó su historia sin dejar de ver a Wesker, este último se acomodo mejor en su silla y se quito sus lentes obscuros y los guardo en el bolsillo de su traje por lo que Chris pudo ver mejor su rostro y se quedo sin palabras.

Sus facciones eran fuertes pero no muy marcadas por la edad, por lo que Chris calculo que tenía unos 30 años, su entrecejo estaba levente fruncido, pero hacía verlo mucho más elegante que antes.

Wesker lo miro directamente a los ojos, el azul profundo chocaba con el azul claro, Chris no podía dejar de mirarlo, era como perderse en lo profundo del mar.

-Así que eso sucedió- la voz de Wesker se escucho en la pequeña oficina después de un rato de silencio sacando a Chris de sus pensamientos -¿Y no se arrepiente?-

-No- la respuesta de Chris no se hizo esperar, ni siquiera lo pensó, admitía que extrañaba la fuerza aérea pero nunca, nunca se arrepintió de lo que hizo.

Wesker lo miro por unos momentos más, buscando la más mínima señal de duda o arrepentimiento, pero no encontró nada, sonrió levemente y Chris casi no lo noto.

-Ya veo- cerró sus ojos levemente y se levantó de su asiento tomando por sorpresa a Chris que se levanto inmediatamente después que él, extendió su mano de nuevo y espero que Chris la recibiera, este aun sorprendido extendió su mano y Wesker la estrechó fuertemente.

-Bienvenido a los S.T.A.R.S, Chris- Wesker le dio una pequeña sonrisa mientras estrechaba su mano.

-En una semana entraremos en operaciones, recibirás una llamada que te informara que día y que hora precisamente, hasta entonces Chris- y sin más Wesker le indico que se podía retirar.

Chris no se lo podía creer, lo habían aceptado en los S.T.A.R.S., al fin podía ayudar a las personas de nuevo, de nuevo su vida tenía un propósito.

-Muchas gracias- fue lo que alcanzo a decir antes de dirigirle una sonrisa al hombre que tenía enfrente la cual fue correspondida por el mismo mientras asentía.

Chris salió de la oficina con una sonrisa recibiendo miradas extrañas de los que aun esperaban afuera, pero eso no evito que dejara de sonreír, camino hacía el vestíbulo y salió de la R.P.D., en cuanto sintió el aire fresco en su cara, sonrió aun más, de pronto el haberse mudado a Racoon City no parecía tan malo, incluso su corbata parecía estar tan feliz como él, pues detuvo su intento de homicidio.

-Le diré a Barry cuanto antes, pero antes comeré algo, esa entrevista me canso un poco- y diciendo esto Chris se dirigió a un local donde vendían hamburguesas mientras pensaba que pasaría de ahora en adelante.


Hola mis queridos lectores, les traigo ahora un fic de unos cuantos capitulos (son solo 3 y tal vez un epilogo), ya los tengo terminados por lo que actualizare a este bebé cada 7 o 10 días (apredí a no publicar un fic sin haberlo acabado primero), en fin como se habran dado cuenta este es un fic que se centra principalmente en Chris pero es yaoi por que ahorita estoy viciada con Chris y Wesker (son tal para cual :P), así que espero les guste y me sigan en este pequeñíiisimo fic, tratare de que todo encaje en el tiempo y tenga sentido con los juegos XD

En cuanto a mi otros lectores de mis fic sasuhinas en verdad lo lamento mucho, pero ahora ya deje de ver naruto y por desgracia le perdí interes, sin embargo estoy escribiendo unos capitulos para "pequeños momentos" y los subire pronto, espero sean de su agrado y me perdonen por dejarlos tirados D:

See ya