Disclaimer: Existe una mujer de apellido Rowling quien dice ser dueña de Harry Potter. Pues, no se dejen engañar por la farandula del mundo de Hollywood. Harry Potter así como Lord Voldemort me pertenecen absolutamente a mi. Podría decir que soy la dueña de Francia y del Empire State, pero ya sería presumir demasiado (pero sí lo soy).
Summary: Drabble; Porque Dudley lo quería. Él era su familia, a pesar de todo. Y siempre lo sería. Dudley/Harry no-slash. Para PixieHaleCullen, Mrs. Runaway, Dianirus y Andre.
Nota: Okay, primera cosa que escribo sobre Harry Potter. Recién ahora voy por Las reliquias de la Muerte (atrasada, lo sé). ¡Pero hey! Llevo siendo una Pottermaniática desde hace como 6 años, simplemente no leí los libros en esa época porque, aja, tenía 6 años. En fin, no sean rudas conmigo, mujeres. Amo ese pequeño momento Dudley/Harry que está a principos del último libro, lloré demasiado (absurdo) y no miento. So, tuve que parar de leer y escribir esto. Piedad, mujeres, piedad.
Nota2: Esto es para mis amores Betzi, Leeh, Dianirus y Andre. Las amo, mujeres. Disfrútenlo.
Adiós, Harry.
«And when i go through that door, i want to know that i love you.
No matter what happen tonight».
–
Era extraño para Dudley el saber que no volvería a ver a Harry de nuevo. Patético (extraño) e hipócrita, después de lo mal que lo había tratado durante tantos años. Nadie le creería si, aún sin admitirlo en voz alta, decía que realmente extrañaría la presencia de Harry cerca de él. No es como si hubiesen compartido demasiados momentos juntos, de hecho, no habían compartido ninguno, excepto las incontables peleas que Dudley causaba.
Tampoco había sentido envidia de Harry antes. Sus padres siempre le daban increíbles regalos para sus cumpleaños y lo alimentaban con toda la comida que a él le gustaba, y Harry no recibía nada de eso, haciendo todo aún más emocionante para su pequeña y gordita cabeza infantil.
Pero todo había cambiado el día en que Harry lo había salvado de aquel Dementor. Esa criatura abominable y absurdamente siniestra. Jamás había sentido tanto miedo y tristeza como esa vez, y estaba seguro de que no olvidaría jamás esa sensación. Jamás.
«—Caray Dudley —había dicho Harry sobre los sollozos de Petunia—, ¿los dementores te dieron una personalidad nueva?
—No se —murmuró Dudley—. Nos vemos, Harry.
—Si… —dijo Harry, apretando la mano de Dudley—. Quizás. Cuídate Gran D.»
Cuando Dudley quitó su mano de la de Dudley, y caminó hacia la puerta para irse con sus padres a un lugar muy lejano del monótono Privet Drive, se sintió triste por Harry. Extrañaría discutir con él, hacerlo enfadar, sentirse asustado cada vez que Harry lo amenazaba con su barita, extrañaría ponerle trampas y lanzare chorros de agua con su pistola a Hegwid.
Extrañaría a Harry.
Porque Dudley lo quería. Él era su familia, a pesar de todo.
Y siempre lo sería.
Déjenme un review o Voldemort les hará un Avada Kedabra.
+Mel.