Este drabble en particular fue algo difícil de escribir.
Disclaimer: Nada de lo que reconozcan me pertenece…aún. Todo pertenece a la maravillosa mente de la diosa de la escritura J. K. Rowling.
El espejo de Oesed
George Weasley no recordaba muy cómo había ido a parar ahí. Había ido Hogwarts para el sexto homenaje a los caídos en la batalla, pero se había escapado del gran comedor, al igual que en las cinco ocasiones anteriores. No sabía porque seguía yendo todos los años si sabía que no soportaba la ceremonia. Cada una de esas ceremonias no hacía más que abrir la misma herida, una y otra vez, como dar una nueva cuchillada en una herida que de todas formas nunca cicatrizaba.
Antes de que fuera consciente de lo que hacía se había retirado de la ceremonia dándole a Angelina una rápida excusa que ni él se había creído (ni ella tampoco, pero sabía que él necesitaba retirarse y no lo cuestionó) y estaba dando vueltas en los pasillos de Hogwarts, y al cabo de una hora recorriendo el castillo, había ido a parar a un aula vacía, en la que no había nada más que un espejo.
Él podía presumir conocer a la perfección el castillo en parte gracias al mapa del merodeador, en parte gracias a las andadas nocturnas por esos pasillos con… se obligó a no pensar en el nombre, solo el hecho de estar de nuevo en el castillo lo tenía a punto de quebrarse en lágrimas, sabía que si pensaba en él no daría más y lloraría como un niño. El punto es que conocía el castillo como a la palma de su mano, y aun así jamás había visto este espejo. Seguro sería algo reciente. No tenía muchas ganas de inspeccionar, pero tenía aún menos ganas de volver a la ceremonia, así que se acercó al espejo.
No era un espejo normal, era alto hasta el techo, tenía un borde de oro con muchos detalles y una extraña inscripción Oesed lenoz aro cut edon isara cut se onotse. No sabía en qué idioma estaba escrito, pero por alguna razón le parecía que sabía el significado de las palabras. Se acercó y vio a su reflejo dándole una sonrisa. Eso sí que era extraño, él no estaba sonriendo, pero debía ser parte de la magia del espejo. Volvió a ver de nuevo las letras y las releyó un par de veces más y de repente comprendió "Esto no es tu cara sino de tu corazón el deseo"
Comprendió ante que objeto estaba, había oído hablar de él. Se miró de nuevo en el espejo y volvió a ver su reflejo sonriéndole. Tal vez se había equivocado, porque no había forma posible de que este fuera el espejo de Oesed, se suponía que el espejo te mostraba el más profundo y desesperado deseo de tu corazón, y únicamente le mostraba su propio reflejo a la persona más feliz de la tierra. Era imposible que el fuera la persona más feliz de la tierra, no cuando en ese preciso momento se sentía tan desdichado. Definitivamente el espejo estaba descompuesto o era una imitación.
Oyó los pasos de muchas personas varios pisos abajo y comprendió que la ceremonia debía haber terminado. Y se marchó sin tener tiempo de inspeccionar más el reflejo en el espejo. De haberlo hecho se habría dado cuenta que la sonriente imagen en el espejo aún se veía de 20 años, no tenía el lunar que él tenía en el cuello, y si ambas orejas. Y es que jamás fue su propio reflejo lo que veía en el espejo de Oesed.
FIN
Recuerden:
Si dejan reviews ganarán un descuento a mitad de precio en sortilegios Weasley.
PD: NO tengo mucha experiencia con el Angts así que se aceptan críticas constructivas, tomatazos, hechizos, maldiciones (excepto las imperdonables sino quieren ir a Azkaban), en fin.
Besos
Tete
