N/a: No poseo Pokemon o Dragon Ball.
-Un guerrero en tierras lejanas-
Capítulo 1: Invasor
El maravilloso mundo Pokemon. Un lugar increíble con cientos de criaturas, tal vez miles, todas ellas con habilidades únicas. Los Pokemon. Habitando desde las profundidades más oscuras de los océanos hasta los desiertos más áridos, desde la tundra más helada hasta la jungla más cálida. Adaptables a cualquier situación, los Pokemon cubren todas las áreas de este mundo dando a entender lo increíble que son. Por supuesto hay quienes lo saben, quienes los defienden o quienes incluso los manipulan para sus egoístas propósitos. Un mundo abierto a increíbles posibilidades…
…algunas de ellas, que ni siquiera son de este mundo.
Sobre la enorme zona de los bosques de la Región Hoenn algo venia del cielo que alertaba al guardián de esta área: Rayquaza. Como si se tratara de un cometa, el objeto impactó en los bosques. Pero aun Pokemon Legendario no se le puede engañar de esa manera. Rayquaza podía sentir el poder que tenía, revelando que no era un objeto.
El impacto fue suficiente para sacudir todo el bosque, alertando a los Pokemon que vivían ahí, aun así la curiosidad supera al miedo en algunas ocasiones. Diversas criaturas se acercaron a la zona de impacto, sorprendidas de no encontrar roca alguna, solo lo que parecía ser un niño no más de doce años. Cabello negro, ropa purpura arruinada y un tonificado cuerpo notablemente lastimado, sangraba con gravedad.
Muchos de los presentes jamás habían visto a un humano en sus vidas, pero algunos pocos sí. Un pequeño Ralts fue el primero en reaccionar al no sentir malos pensamientos provenir de la mente del niño. El pequeño tocó al niño intentando hacerle reaccionar, sin resultados.
Viendo la valentía del pequeño y conociendo la naturaleza de aquella línea evolutiva al reconocer pensamientos perversos, varios de los Pokemon presentes se acercaron al niño dentro del cráter para ayudar. Fue un Shiftry quien se encargó de cargar al niño con extremo cuidado entre sus brazos. El Ralts que se había acercado inicialmente alcanzó a tomar una de las extremidades de Shiftry antes de que este comenzara a moverse a gran velocidad por los árboles.
Shiftry se encargó de llevarlo al centro del bosque donde un gran árbol se alzaba por sobre los demás. Solo unos pocos Pokemon lograron seguirle, pero fueron compensados rápidamente por los que vivían dentro del árbol. Shiftry se encargó de dejarlo sobre unas hojas para separarlo de la madera del árbol, Ralts inmediatamente se quedó a su lado. Sin siquiera pestañar, Shiftry se alejó pareciendo bajar a la parte superior del árbol que habitaba.
Los demás Pokemon, que en su mayoría eran Oddish y Seedot observaban con temor al niño. Lentamente las hojas que sostenían al muchacho comenzaron a teñirse de rojo, junto a los quejidos del muchacho daba a entender la gravedad de la situación. Por fortuna Shiftry regresó rápido, seguido de alguien mucho más lento debido a su forma: un Blissey. Los Pokemon en torno al niño rápidamente se apartaron, mostrándole el camino a Blissey.
Con notoria experiencia detrás de ella al haber visto nacer este árbol en su juventud, el Pokemon supo actuar inmediatamente. Juntando una energía rosada al frente la liberó hacia el niño cubriéndolo completamente con un destello del mismo color. Era el ataque denominado Pulso Cura. Varias de las heridas menores del muchacho desaparecieron, mientras que la profunda en su brazo, culpable de su grave sangramiento, logro cerrar considerablemente a pesar de no desaparecer del todo. Seguido a esto, Blissey tomó un brillo azul para luego esparcirlo al muchacho de este segundo color. Era el ataque Campana Cura. El Blissey había detectado una grave fiebre junto a una probable infección; el ataque se había encargado de curar aquello.
Seguido a esto el Pokemon pareció ordenar varios elementos a Shiftry quien las acató al pie de la letra. Shiftry trajo varias hierbas junto a varias hojas. Blissey utilizó un tronco plano para comenzar a moler los elementos en diferentes proporciones utilizando el huevo en su vientre.
Ralts dio un gritó a tiempo para que Shiftry mirara hacia la abertura del árbol, saltando ante Blissey y el niño. Ralts se refugió junto al niño. Una enorme corriente de aire se formó justo antes de revelar una gran sombra que opacó el sol. Por la pequeña abertura una cabeza apareció. Rayquaza, el guardián del cielo. Por fortuna el cuerpo de Blissey y Shiftry cubrían al niño. Este último parecía sentir el desagrado de Rayquaza al invasor, al estar buscándolo para eliminar a la posible amenaza.
A pesar de la diferencia de poderes, Shiftry no titubeo. Curioso ante el desafío Rayquaza se mantuvo suspendido en el aire simplemente observando. Tras no ver otras reacciones sospechosas sin contar el desafío, Rayquaza siguió con su vuelo buscando a la amenaza desconocida. Shiftry, Blissey y los otros Pokemon respiraron aliviados.
Con eso fuera del camino, Blissey siguió con su arduo trabajo. En menos de quince minutos había creado un ungüento que aplicó sobre una gran hoja. Esta fue puesta sobre la herida del niño, causando un quejido inmediato de él ante el ardor.
Durante aquella noche Blissey se quedó en vigía con el muchacho cambiando el ungüento cada un par de horas. Varios de los otros Pokemon se marcharon a descansar, quedando solo adicionalmente Shiftry y Ralts, el primero en guardia en caso de peligro y el segundo lleno de preocupación por el niño desconocido. Nunca pensaron que extrañarían ver el amanecer al día siguiente, la noche en verdad que se sintió larga para todos. Fue cuando el muchacho recobró la conciencia.
Shiftry miró con atención la interacción.
"¿Qué? ¿D-Dónde estoy?" Fue lo primero que dijo el muchacho al sentarse y no reconocer sus alrededores. Lo siguiente que no pudo reconocer fueron las diversas criaturas que le rodeaban. "¿Quiénes son ustedes?" Miró preocupado hasta que sintió el ardor en su hombro, por instinto lo tomó para al fin ver la hoja que lo cubría. "E-esto es…" Miro su entorno y comenzó a unir los puntos. "¿Ustedes me cuidaron?"
"¡Blissey-Bly!" Saludó antes de que revelara a Ralts quien se ocultaba tras ella. "¡Bly, Bly!"
El muchacho tardó algún tiempo en entender lo que le intentaba decir.
"¿Fue gracias a ti que me ayudaron?" Cuestionó el niño al Ralts, con lentitud le extendió la mano para no espantarle. "Muchas gracias, a ti y a todos ustedes les debo mi vida." Ralts se relajó al sentir las emociones positivas del niño, a pesar de que podía sentir un gran dolor en su interior su alegría honesta superaban su dolor en el momento. Con cuidado se aproximó para tomar su mano con las pequeñas propias; el niño lo tomó como un saludo. "Mucho gusto, mi nombre es Gohan."
Fue la primera vez que el niño pudo escucharle hablar al tímido Ralts.
"¡Ralts!" Gritó para sostener su mano con las dos pequeñas propias. "¡Ralts, Ralts!" Ahora parecía mucho más animado y mucho menos tímido.
"No puedo entender lo que dices, pero el gusto es mío." Respondió Gohan para usar su otra mano y acariciar la cabeza del pequeño cariñosamente.
Hubo un cómodo silencio, donde los presentes notaron la amistosa actitud del niño, permitiendo que bajaran sus guardias. A pesar de que Ralts inicialmente mostro que el extraño era bueno, no fue hasta ahora que en verdad podían compartir su opinión. Shiftry se alejó para tomar asiento contra una de las paredes de la copa del árbol.
Instantes después el muchacho intentó ponerse de pie, pero el dolor en el brazo hizo que tuviera que sostenerlo inmediatamente. Blissey inmediatamente frenó su avance para cambiar el ungüento de su brazo por uno nuevo, lo que Gohan observó con agradecimiento. Al parecer no le permitirían irse hasta que estuviera en mejores condiciones. Por ello lo único que pudo hacer es volverse a dormir con Ralts junto a él. Gohan no pudo evitar sonreír.
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Unas horas más tarde Gohan despertó, se sorprendió al ver una montaña de fruta junto a él. Varias de las otras criaturas aún estaban reuniendo fruta, con cada uno llevando una sola. Fue Blissey quien le dio a entender que debía comer, inmediatamente su estómago gruño fuertemente alertando a los presentes, incluso confundiéndolo como amenaza posible.
"¡He-he! Lo siento, no había notado que tenía tanta hambre." Se disculpó el niño antes de comenzar a devorar la fruta.
Al reconocer el gruñido como señal de hambre se volvieron a relajar, para luego observar maravillados como engullía y engullía frutas enteras con mucha facilidad. En cuestión de minutos la gran montaña de fruta se hizo nada, solo para revelar un estomago satisfecho en el niño.
"¡Muchas gracias por la comida!" Gohan hizo una reverencia leve en su estado sentado de gratitud. Su expresión se volvió ligeramente seria. "Creo que ya les he molestado mucho, debería irme." Blissey pareció entenderlo porque inmediatamente cambio por última vez el ungüento de su hombro. "Muchas gracias, a todos ustedes."
Con el estómago lleno y con sus heridas graves sanadas, Gohan se puso en pie por primera vez para caminar a la salida del árbol. Con solo sentir las presencias de este mundo sabía que no estaba en casa, aquí sentía poderes mucho mayores a los de los humanos promedios, y estos también se encontraban presentes. Miró desde lo alto en la salida del árbol para ver que su ubicación era un gigantesco bosque que no parecía tener fin en el horizonte.
"Puedo sentir presencias humanas." Se dijo en voz baja. "Tal vez me puedan explicar en donde estoy." El muchacho iba a comenzar a volar, pero antes de que siquiera se separara del suelo sintió que algo tiraba de su pierna. Al voltearse se encontró con Ralts. "¿Ocurre algo?" Cuestionó Gohan al pequeño agachándose sobre sus piernas para quedar a su nivel.
"Ralts-Ralts…" El pequeño se agarraba con fuerza de los restos de su pantalón, no queriéndolo dejar ir.
"¿Quieres venir conmigo, pequeño amigo?" Preguntó al tratar de interpretar lo que el pequeño quería. "Yo no soy de por aquí, ¿Es correcto que me acompañes?" Miro a Blissey y Shiftry para buscar alguna confirmación. Shiftry parecía indiferente, pero Blissey le sonreía con aprobación. "¿Estás seguro de que esto es lo que quieres? No sé a dónde voy."
"Ralts…" Esto último lo dijo en un tono tranquilo, dejando ir la pierna de Gohan para acercarse a él y abrazarle por la cintura, ya que al ser tan pequeño no podía abrazarle más a un nivel más alto. Gohan se encargó de completar el abrazo al levantarlo del suelo. "Ralts…" Dijo relajado, feliz ante el sentimiento de tranquilidad que emanaba Gohan.
"Supongo que es tu decisión, compañero." Gohan se puso de pie situando al pequeño entre sus brazos. "Al parecer he ganado alguien con quien viajar." A sorpresa de los Pokemon y del propio Ralts, Gohan se desprendió del suelo flotando lentamente para alejarse del árbol. "¡Muchas gracias a todos!"
El niño tomó más altura para ver sus alrededores con mayor rango, notando que el bosque en verdad era grande. Ralts al mismo tiempo admiraba el paisaje aferrándose a los brazos de Gohan, asustado por la situación. Gohan respondió apretándolo un poco más para darle algo más de tranquilidad.
"No te preocupes, no te dejare caer." Declaró Gohan. Llenándose de estos sentimientos, Ralts abrió los ojos para ver el asombroso paisaje. "Es maravilloso, ¿Verdad?" Pudo sentir que Ralts movía su cabeza en aprobación. "¿Alguna idea de a donde debo ir?"
"¡Ralts!" El pequeño señalo un una dirección en el bosque. Dudoso de las intenciones de Ralts, Gohan siguió a donde apuntaba. Se sorprendió de encontrar un cráter dentro del bosque por lo que aterrizo para verlo. El pequeño Pokemon se acercó al cráter para señalarlo a él y luego al suelo. "Ralts, Ralts."
"¿Es aquí donde me encontraron?" Cuestionó sorprendido el muchacho. "Significa que caí de una gran altura. ¿Pero de dónde?"
"¡Gryyyyaaaaah!"
El gruñido agudo llamó la atención de Gohan mientras que Ralts rápidamente se acercó al niño para que se refugiara en sus brazos en base a miedo puro. Preocupado por la acción de la criatura miró al cielo encontrándose con algo que nunca espero ver. Era una criatura enorme, verde y delgada, con dos cuernos que podrían confundirse con orejas y dos protuberancias que salían desde el costado de debajo de su cara, grandes colmillos, y con líneas rojas y amarillas. Ante la sorpresa masiva solo pudo decir una sola palabra en duda.
"¿Shenlong?"
Notas del Autor:
Aqui les traigo un nuevo proyecto, algo pequeño que tiene principio y final, aunque desarrollo aun lo estoy trabajando lentamente. Tengo un par de capitulos más listos, pero quisiera que me den tiempo de preparar algunos más y saber lo que opinan. También estoy trabajando en Tres años, pero es una rescritura completa y cada vez surgen nuevas ideas lo que me obliga a corregir de atrás a adelante, de momento, la nueva versión tiene 3 capitulos corregidos y voy en el cuarto, lamentablemente es la quinta vez que tengo que rescribir, la vez anterior llegue hasta el décimo. Mi idea es publicar los 16 capítulos de una sola vez o por lo menos lo que me permita esta pagina, junto algunos adicionales.
Los que no han perdido la fe, muchas gracias.
