Hola! (: Este es mi primer fic en toda mi corta vida, y una personita a la que adoro como hermana me ha ayudado un montón.
Advertencias: Ligero Johnlock
Disclaimer: Ninguno de los personajes nos pertenecen, son de Sir Arthur Conan Doyle; y la versión moderna, de los escritores de BBC Steven Moffat y Mark Gatiss.
De casos y Mentiras
Aburrido – SH
No eres el único, Sherlock. – JW
Obviamente. Tu trabajo es aburrido. Las personas…sus problemas… - SH
Lo sé, pero ni se te ocurra disparar a la pared de nuevo. –JW
Tarde. No tienes citas hoy. Revisé tu agenda. Llama a Gavin. Necesito un caso. –SH
Greg. – JW
¿Quién? – SH
Lestrade. Greg Lestrade. Y no, no hay casos. – JW
No me esperaba menos de la incompetencia de Scotland Yard. – SH
¿Vienes a casa, entonces? – SH
No lo creo, paciente llegando –JW
No lo creo, Mycroft en el 221B. Ven ya. – SH
¡Es tu hermano! Pueden rememorar los buenos momentos – JW 12:37
12:45
13:16
13:32
Uh… ¿Sherlock? ¿Mycroft te comió los dedos? – JW
Te espero en Royal Parade St. – SH
No olvides tu pistola. – SH
Siempre la llevo. ¿Todo bien? – JW
No John, me atrapó una banda de mafiosos Rusos en el metro. Claro que estoy bien. ¡Ven ya! – SH 14:15
14:30
John? – SH
En camino. Quedé en shock y salí corriendo – JW
¿Shock? Ustedes son tan simples. - SH
Acabo de darme cuenta que por esa calle no pasa el metro. Y de que ahí está mi restaurante favorito. Pero gracias por la muerte express. – JW
Nada es mejor que molestarte para mi placer. – SH
Tenemos una reservación en Cessar's. – SH
Estoy en la puerta. ¿Estás dentro? – JW
Ingresa con el nombre de William Holmes. – SH
¡Eh! ¿Qué hay de Sherlock? ¿Está contigo? – JW
John. - SH
Al entrar al restaurante, me sentí fuera de lugar. Era un lugar muy elegante y yo vestía una camisa y unos vaqueros. Solo a Sherlock "yo-siempre-visto-bien" Holmes, se le ocurre sacarme del trabajo y no avisarme para vestir adecuadamente.
Lo divisé en una de las mesas privadas y caminé hacia él. Sherlock estaba con un traje de esmoquin y la condenadamente apretada camisa morada… John, no dejes que Harry te meta ideas en la cabeza. ¡Se puso un bigote falso! Sherlock puede ser muy bueno con los disfraces, pero esto es el colmo.
-Creí que Lestrade no tenía casos para ti – dije conteniendo una risa y tomando asiento en frente de él. Fue ahí que noté que a su costado se encontraba una pequeña cartera.
-No, al parecer Anderson compró unas cuantas neuronas en internet y las está poniendo a prueba.- Volví mi vista a la cartera y Sherlock añadió – Está en el tocador, no llevó su cartera, lo cual es raro para ser una fémina.
-Whoa… explícame, ¿por qué interrumpo en tu cita? – no sabía qué tenía que hacer ahí entre Sherlock y la dama que no conocía.
-¿Cita? Yo no tengo citas, John – me respondió con el ceño fruncido, claramente disgustado.
-Bueno, vale. ¿Cliente? – Me dirigió esa mirada de "Es obvio, John. No seas idiota" y agregué- ¿quién es, entonces?
Terminé de formular la pregunta y una mujer de aproximadamente 28 años se sentó sonriente, al lado de Sherlock.
-Isabelle, el Doctor Watson. Doctor, la señorita Sénnikov. – Isabelle me dedicó una sonrisa, y yo se la devolví. Aún no entendía.
-Isabelle, - dijo Sherlock - es actualmente estudiante de su segunda maestría en Ingeniería de sistemas, Informática y también estudia Negocios internacionales en la universidad de Oxford. – Ella se veía algo avergonzada, pero a la vez orgullosa de sus grandes éxitos debido al gran desarrollo de su inteligencia.
-Un gusto, doctor Watson.
-John, por favor. – le interrumpí.
-William, - Whoa. ¿William?- me habló de usted y su experiencia en el campo… ¿Tu hermano vendrá, Will? – Preguntó finalmente dirigiéndose a Sherlock.
-No lo creo, querida. Ya te he hablado cómo es Sherlock… - Me dirigió una mirada y automáticamente agregué:
-S...sí, Sherlock…Lo van a tener que disculpar, pero tenía algunos asuntos que discutir – Dije lo último dirigiéndole una mirada a "William".
-No importa. Isabelle, será mejor que le digas al doctor Watson sobre el problema. – Sherlock me debía una, y una grande.
-Bien, John; luego pondrá al día al señor Holmes. Se trata de mi padre, ha estado teniendo muchos problemas con lo que respecta al sistema de seguridad, el cual está cayendo. Es muy importante que este problema se resuelva rápido, ya que todo nuestro trabajo se vería amenazado si alguno de nuestros enemigos se llegara a enterar.
-Pero, se puede establecer uno nuevo – Propuse, pero ella negó con la cabeza
- Es algo diferente – continuó – Es un hacker. Viene una señal desde Polonia y de un minuto a otro aparece en Brasil u otros países. Nunca había visto algo igual. La única pista que tenemos se debe a uno de los gusanos informáticos…- al ver mi cara de confusión, agregó – Verá, recurro a ustedes porque son los mejores en este trabajo, según dicen; y porque William confía en ustedes. Además, mis sospechas están aquí, en Londres. Pero si mi padre se entera de que estoy contratando a un detective privado, perdería toda su confianza en mí, y eso no lo puedo permitir. He trabajado mucho para llegar al puesto en donde estoy.
-Disculpe, pero ¿qué clase de negocio encabeza su padre? – La señorita Sénnikov miró dudosa a su acompañante y este asintió para que siguiera hablando. – Mi padre, yo… toda mi familia es parte de una red clandestina que trabaja por medio de internet. Hemos logrado infiltrarnos en cada lugar importante del mundo, recolectando información de todo tipo y de todo el mundo; metiéndonos en los bancos más grandes y haciéndonos con el dinero.
Afortunadamente, tuve tiempo de digerir toda la información expresada y no contestar en ese instante, debido a que el mozo llegó con nuestros platos. Me sorprendí al ver que el plato que pusieron en frente mío era mi favorito: pasta fetuccini con salsa blanca. Isabelle debió notar mi cara de estupefacción, porque preguntó:
-¿Todo bien, John?
-Claro. Impresionante, es mi plato preferido.
-Eh, si...-comentó "William" incómodo – Sherlock nombró su preferencia por las pastas.
El teléfono de Isabelle sonó y esta se excusó, dirigiéndose al balcón del restaurante. Una vez que estuvo fuera de nuestra vista, me dirigí furioso a Sherlock.
-¡¿Me vas a decir de una puñetera vez qué es lo que está pasando aquí?! Es una red criminal, Sherlock! – al ver las intenciones del moreno de interrumpirme, añadí rápidamente – Y no, no me importa que el caso sea un 10. Estás respaldando contrabandistas como el loco psicópata de Moriarty!
Lo último pareció dolerle. Me quise disculpar, pero Sherlock habló primero.
-Lo sé, John; pero deja que te explique todo en casa. Sígueme la corriente – al notar que lo miraba con furia, puso esos ojos de cachorro y dijo – Por favor, John.
-Oh! ¿Por favor? ¿Es que acaso tengo opción? – respondí enojado pero a la vez sintiendo que la adrenalina de un nuevo peligro corría por mis venas. Sherlock sabía que no me negaría, total, ya estábamos en el caso. Él solo respondió con una de esas sonrisas que eran para mí… O eso pensaba Harry… mientras que Isabelle regresaba y tomaba sitio en la mesa.
Al llegar al 221B, estallé.
-¡William Sherlock Scott Holmes, ¿qué es lo que pasa contigo?!
-¡John Hamish Watson! – Me respondió en el mismo tono, el muy bastardo – Soy un sociópata altamente funcional, ¿recuerdas?
-¡No, Sherlock!, en serio. Dime de una buena vez que pasa o te juro que-
-¿Qué, John? ¿Qué vas a hacer?- preguntó con un tono y una mirada de superioridad, dando pasos hacia mí como un gato.
Estábamos a escasos centímetros, en plena batalla de miradas que no pensaba perder. No esta vez. A punto de responderle, entró la señora Hudson con una expresión claramente alarmada en el rostro.
-Muchachos, ¿por qué tanto griterío?
-No es nada, señora Hudson. Solo un malentendido, espero. – dije sin romper el contacto visual con el más alto.
-Tranquilos, chicos; pasa hasta en las parejas casadas.
-Señora Hudson, ¡Cuántas veces le tengo que decir que Sherlock y yo no somos pareja! – exclamé volteando a verla, cuando noté que desaparecía por las escaleras.
-Mira Sherlock, no sé qué es lo que pretendes, pero no quiero que este caso termine con uno de los dos, o ambos, muertos o en prisión; porque estoy seguro que a Mycroft no le hará absolutamente nada de gracia esta situación.
Continuará...
Bueno, este este es el final del primer capítulo (:
Estamos muy emocionadas. Espero que les haya gustado, aunque aceptamos tomatazos, vociferadores, cartas bomba y lo que se les ocurra :D
Déjennos un review! No engorda, es gratis y nos harían muy felices! (:
Hasta la próxima! Gracias por leer!
Nessa y Denisse (:
