El convento maría, una impresionante muestra de la arquitectura de la época, donde las chicas sin familia y sin rumbo terminaban. El convento jamás negaba la entrada, pero para algunas aquello que vieron como una esperanza al principio con el tiempo se convirtió en un infierno. Las reglas y sacrificios que debían tomar para convertirse en monjas ahí resultaban inaceptables para varias, pero no podían escapar de ahí. La vigilancia siempre estaba activa, y cada chica al llegar al convento firmaba con sangre un documento donde juraba solemnemente estar al servicio de Dios, desde el momento que llegan al convento.
Annie Leonart era de las chicas que tenían mas tiempo en el convento, según cuenta la hermana mayor llego un día lluvioso de noviembre, con su ropa manchada de sangre, y una mirada inexpresiva que aun conserva. Nunca dijo de donde venia, solo pidió que le permitieran entrar, desde entonces las hermanas pueden jurar que no a dicho mas de 2000 palabras en todos los años que lleva en el convento. Otra que tiene su historia en el convento es Mikasa Ackerman, quien llego tras el asesinato de sus padres, el gobierno no deseo ponerla en adopción porque se rumoraba que ella sola vengo la muerte de sus padres, así que decidieron que lo mejor seria que se convirtiera en monja y llevara una vida al servicio del señor, lejos de todo aquello que arruino sui vida.
Otra chica que tenia fama en el convento era Sasha Braus, ella llego al convento sin intención alguna., Llegó por accidente, las monjas la recibieron exclamando la frase: "nadie llega acá por accidente" con el tiempo Sasha se convirtió en un problema, al robar los suministros alimenticios del convento. Solía robarlos lo cual enojaba a la madre superior, que la castigo llevándola al cuarto. Era el nombre de un cuarto oscuro donde solo podía estar una persona a oscuras, era el castigo mas duro, solía destruir a Sasha rápidamente pero volvía a infligir con las reglas y robar. Lo cual motivo a la madre superiora a confinarla al subsuelo junto a los escribas, donde dedica sus días a trascribir textos. Solo así lograron detener su voraz apetito de robo.
Mikasa cansada de los trabajos forzados, de oraciones a alguien que para ella no existía, decidió emprender la fuga, el problema es que no tenía plan alguno. Se retiro a un lugar alejado del convento donde murmuraba y blasfemaba, era el único lugar donde decía ella que podía ser ella misma y no lo que esperaban que fuera. Entonces escucho que alguien se acercaba y vio la difusa figura de annie en la oscuridad.
-eres mikasa cierto?-
-Si, que haces acá annie-
-Caminar, estar alejadas de las locas del convento -
-No pensé que hablaras tanto-
-No vale la pena hablar acá, tu opinión es nula, solo lo que las hermanas dicen es lo correcto. Quieres escapar cierto?-
-Como lo sabes?-
-Te he escuchado murmurar acá y blasfemar-
-Si escapare, no intentes detenerme-
-No pienso hacerlo. Quiero ir contigo-
-Tu, pero pensé que tu vida estaba acá-
-Una vida triste y aburrida, vine buscando un refugio para escapar luego, y sola no podre escapar de estos muros, ahí es donde entras tu-
-Pero no tengo ningún plan-
-Ahí es donde yo me vuelvo importante para ti, yo se como escapar-
-Y porque no lo has hecho antes?-
-Te lo repito no puedo hacerlo sola, ahora cállate y escucha el plan. Como sabes, a Sasha la confinaron al subsuelo con los escribas, los domingos le permiten tomar aire fresco. Un día logre atraer su atención, con un poco de pan y queso, entonces le pedí que me hablare del lugar. Dice que su única iluminación son candelas en los pasillos y salones, hay una puerta que conecta con el pueblo, en caso de alguna emergencia, esta custodiada por un solo hombre. Tú y yo juntas podríamos derivarlo y escapar. para cuando se dieran cuenta estaríamos lejos.-
-y porque debo confiar en ti?-
-Yo no confió en ti, pero te necesito y esa misma necesidad es por la cual me eres indispensable. Y yo lo soy para ti, porque yo conozco a quien puede guiarnos en el subsuelo-
-mmm cuando y donde?-
-Domingo, en este lugar a la misma hora-
-debo traer algo?-
-Si tienes alguna posesión que te interesa, lo demás puede quedarse y morir en este lugar-
Annie se escuchaba sus palabras rebotar en su cabeza. Escapar, era lo que tanto había querido y ahora se veía tan próximo, entonces porque dudaba al hacerlo. Tomo su bufanda roja el último recuerdo que le quedaba de su pasado. La abrazo con firmeza y durmió. Durante la noche la acompañaron fuertes pesadillas, de como murieron sus padres, y recordó lo que le dijo su difundo padre, pelea Mikasa pelea o muere.
Llego el domingo, Annie llego al lugar pactado, y esbozo una breve sonrisa al ver que Mikasa efectivamente se había presentado.
-linda bufand.Sígueme, nuestra guía nos espera-
Se dirigieron a una vieja capilla, al norte del convento, donde al entrar se veían los estragos del tiempo y acompañados con un tenue luz de luna, provocaba un efecto siniestro. Al adentrarse en la capilla en la parte trasera del altar hay una manta roja, que al deslizarla se muestra una antigua puerta de madera. De pronto la puerta se abrió acompañada de un rechinido que era clara señal de que necesitaba mantenimiento. De la oscuridad con una candela apareció Sasha mas delgada y con menos color en el rostro de como la recordaba Mikasa. Sin palabras les pidió que se adentraran en aquella puerta de inmediato.
Era un largo pasillo de ladrillos, acompañado con unas velas en las paredes que solo permitían ver lo necesario del lugar, y le daba un toque siniestro. Sasha las dirigió hasta una pequeña habitación donde solo se encontraba una pequeña cama con un dibujo de un paisaje sobre ella.
-que es ese dibujo Sasha- pregunto Mikasa aun extrañada del lugar
-Lo hice hace tiempo, me hace recordar mi aldea. Odio este lugar, por eso escapare con ustedes-
Sasha las conduce por los pasadizos oscuros, la tenue iluminación permitía ver otras habitaciones con chicas en las misma situación reprobable de Sasha , delgadas, pálidas , durmiendo un sueño que parecía eterno.
-Porque todas las chicas están tan mal? parecen que desfallecerán en cualquier instante- pregunto Mikasa intrigada
-Acá trabajamos trascribiendo desde las 6 de la mañana la comida es poca, dicen que lo necesaria para que no te desmayes al trascribir, así todas terminan cansadas, y no intentan escapar, por eso la falta de guardia en la entrada frontal. Acá están todas las chicas que intentaron ir en contra de las reglas de la hermana superior, le dicen el scritorium pero en realidad es el infierno. El lado que las monjas no muestran.-
Mikasa quedo asombrada decidió continuar sin escuchar mas de aquel lugar que tenia una atmosfera de miedo.
-Bueno llegamos, al cruzar acá veremos al guardia-
-Estas segura Sasha?-
-completamente Annie-
-Muy bien. MIkasa avaneceremos primero lo derivaremos por la oscuridad no reconocerá nuestros rostros. –
-y si no lo logramos-
-Entonces tú y tu bufanda ganaran un puesto en este lugar. No se permite fallar señoritas-
Annie y mikasa avanzaron rápidamente por el pasillo, y vieron la sombra del guardián, podían imaginar que media 1.88 y que era fornido lo cual, hacia dudar a Mikasa del éxito del escape.-Quien viene allí- exclamo el guardián con una voz varonil y ruda que intimidaría a cualquiera. No detuvieron el paso cuando el se aproximaba a ellas, Annie reacciono y con una llave logro derivarlo sin ningún problema,.Annie intento darle un golpe en el cuello para noquearlo pero no lo logro, el guardián la sujeto de los brazos y la logro retener contra la pared. Entonces Mikasa entro en acción con una patada directa al rostro logro noquearlo. El callo al piso creando un pequeño temblor , pero ya no importaba su único obstáculo había sido neutralizado.
Buscaron en el guardián caído, las llaves rápidamente Annie las encontró y las mostro en la tenue luz de las velas, y se dirigieron a la puerta.
-La llave de nuestra libertad- Exclamo Sasha apenas manteniéndose en pie.
Annie introdujo la llave, la giro lentamente, y la puerta abrió acompañada de un crujido por los estragos del tiempo en ella. Al abrirla las tres vieron lo que perdieron el dio que entraron el convento. Vieron el mundo.
La puerta dirigía a una zona boscosa del pueblo, arboles y fauna silvestre las tres corrieron rápidamente para perderse en el abrigo de los arboles, pero antes cerraron la puerta y Annie guardo la llave en sus pechos. Corrieron unos cuantos metros, hasta que Mikasa noto que Sasha estaba demasiado débil para continuar.
-Annie debemos cargar a Sasha ya no puede continuar mas –
-O Déjala por los arboles, no la verán no podemos retrasarnos-
-No! Ella ira con nosotros aunque tenga que cargarla-
-Hazla tu responsabilidad. Solo procura seguirme el paso-
Mikasa puso sobre su hombro a Sasha y procuro moverse lo mas rápido posible entre la vegetación, para poder seguir le paso de Annie. No conocía el plan de Annie, pero cualquier lugar le resultare más placentero que el convento.
-A donde vamos Annie?-
-Al pequeño puerto de buques fluviales, ahí podremos infíltranos en algún barco que aun no zarpa-
-Y adonde iremos?-
-A cualquier lado, a empezar desde cero a ser nosotras mismas, no lo que esas locas monjas esperan que seamos-
Llegaron al puerto de buques fluviales, estaba completamente solo. Vieron un barco llamado mezmerize un nombre curioso para un barco, rápidamente al asegurarse de que nadie las observara se dirigieron a la borda del barco. A esa hora no hay nadie los barcos quedan solos a la espera del amanecer para zarpar con los primeros viajeros. Al abordar el barco Annie dijo que deberían dirigirse a la cocina, usualmente tienen congeladores gigantes con trajes de chef podrían robar uno y hacerse pasar por cocineras.
Cuando al fin llegaron buscaron los trajes de chef pero no encontraron nada, de pronto se escucha como cargan una escopeta Mikasa y Annie voltean y ven a un pequeño hombre de 1.50 de estatura apuntándoles con una escopeta.
-Vaya, vaya, vaya miren lo que trajo el viento a mi barco, un par de prófugas. Por su vestimenta imagino que escapas de ese famoso convento… como se llama?... convento maría cierto?-
-No tenemos porque darte explicaciones- Responde Annie clavando su mirada en el
-Soy el capitán de este barco, y tengo un arma así que yo controla la situación ahora cállate!-
-No nos intima- Grito Mikasa
El capitán dispara al piso muy cerca de los pies de Mikasa, lo cual deja perplejo a las tres chicas. Y carga el arma nuevamente a gran velocidad si apartar la vista de las tres intrusas-
-No suelo fallar dos veces, tu puedes ser la primera en morir pequeña-
-Que quieres a cambio de dejarnos viajar en tu barco-Exclama annie aun perpleja por el disparo
-me gusta el dinero, pero seguro no llevan ni un céntimo en sus bolsillos. Me gusta los objetos valiosos y lo único valió que les veo es esa pequeña bufanda roja que a de valer algunos centavos. Y solo queda una cosa que puedo querer de 3 chicas como ustedes…
-Dilo de una vez- Exclamo Mikasa mientras sujetaba con fuerza su bufanda
-Quiero sexo…..
