La Gran Odisea de Kon - Especial

Había pasado casi un mes desde que Ichigo y Rukia unieron sus almas en un acto de profunda paz, como ellos secretamente lo llamaban. Pero desde ese entonces, no han vuelto a estar juntos,y tampoco tenían contacto de ningún tipo, no se abrazaban, no se tomaban de las manos,ni se besaban..además de que no era su estilo, en realidad ellos no eran nada...su relación ante los demás era tal como antes, discutiendo por tonterías. Sin embargo, detrás de esas gélidas miradas que suponían darse, existía un sentimiento muy contrario al desprecio...y eso no pasaba desapercibo para sus amigos.

A pesar de seguir comportándose igual, todos a su alrededor notaban un ligero cambio, algo en ellos era diferente. Quienes más seguros estaban de eso eran Inoue y Renji, aunque no conseguían saber exáctamente qué había cambiado.

Una de las razones por las que no podían tener un acercamiento eran las duras batallas que se les presentaron casi después de ese día; los arrancar aparecían como plaga, y cada vez más fuertes.

Esta situación era muy pesada para ambos, pues todavía tenían que asistir al instituto.Si estuviera en sus manos,simplemente dejarían de ir para darle más atención al asunto de Aizen, pero si hacían tal cosa, los directivos llamarían a Isshin y le dirían todo, y lo último que querían era levantar sospechas.

Y por si fuera poco, desde que Isshin descubrió quien sabe cómo que su hijo había dejado de ser un niño, se le ocurrió la loca idea de cambiar a Rukia a la habitación de Ichigo, alegando que sería más fácil para ellos estudiar y hacer trabajos escolares. El chico de cabello naranja trato de evitarlo,pero su padre siempre terminaba diciendo "Cállate y obedece". Y lo que más cabreó a Ichigo, fue encontrar un preservativo en el cajón de su escritorio con una nota del viejo: "No quiero ser abuelo todavía..". "¡Tche!, de cualquier manera ni lo necesito",pensó el muchacho, pues la chica morena no corría esos riesgos...almenos no todavía..

A Rukia le daba igual, aunque también cambiaron su cama al cuarto de Ichigo,ella prefirió dormir en el closet. De alguna forma, le agradaba estar cerca de él otra vez. Así que ahora había cuatro huéspedes en una misma pieza: Ichigo, Rukia, Kon...y la conejita Chappy que el pelinaranja le regaló a la chica en su cumpleaños.

Cuando para ellos era algo difícil volver a estar en la misma habitación, para Kon y Pyon fue como si les hubieran hecho un favor; así ya no tendrían que hacer planes para hacer "sus cosas". Los shinigami ya no les prohibían nada, entendieron que ellos también son seres vivientes y tienen derecho a estar juntos si es lo que más quieren y lo que mas les gusta. A veces, cuando los shinigami regresaban a sus cuerpos, les dolía todo.

Otra cosa había cambiado también, los poderes de Ichigo y Rukia se incrementaron. En una ocasión, poco después del cumpleaños de Rukia, dos Arrancar aparecieron, y cuando ella se transformó en shinigami, su zanpakuto había cambiado: ahora, al igual que Ichigo,la portaba en la espalda,pero sostenida por una manta blanca. Al desenvainarla, se dio cuenta que la hoja estaba un poco más larga y más ancha, no igual que la de muchacho,pero aún así habría sido una carga como para llevarla en la cintura.

Y al liberarla y lucha con ella, acabó con los arrancar en tan sólo unos instantes, la velocidad de su shunpo también incrementó.Para cuando Renji llegó, ya no había nada más que hacer.Él se impactó al ver la zanpakuto de su amiga.¿De dónde había salido tanto poder?,se preguntaba ella,no recordaba haber entrenado en algún momento. Por su parte, la espada de Ichigo seguía igual,pero sus ataques también se habían vuelto más poderosos. No lograban entender el aumento de su reiatsu.

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—Kurosaki...¡KUROSAKI!.

Ichigo se sobresaltó al escuchar la voz de su profesora; desde hace un buen rato que no prestaba mucha atención a sus clases, su mente se sumergía en otros pensamientos, casi todos relacionados con Aizen y los Arrancar

—Kurosaki, no estás atendiendo a las clases. Me temo que si sigues así tendré que sancionarte.

— Hai..—dijo sin muchas ganas.

Su maestra se dio vuelta para escribir en el pizarrón,en tanto que el chico fijó su mirada en la mujer que ocupaba el asiento de a lado.

Vio a Rukia escribir en su libreta de apuntes.

Pensar que hace casi un mes atrás perdió la virginidad junto con ella, en una noche con luna llena,debajo de un árbol. Todavía recordaba todas esas sensaciones que invadieron su mente y su cuerpo en aquel momento; el ver su frágil cuerpo desnudo,el estar dentro de ella...¿Quién habría podido imaginarlo?, ni él mismo se la creía. No sólo una vez estuvo con ella, sino dos, cuando regresaron a su casa.Ahora que lo pensaba bien,era la primera en vez en casi todo el mes en que se ponía a recordar vívidamente lo de aquella noche.¿Realmente había pasado todo eso?, con todo lo que había sucedo en esos días, ya hasta le parecía un sueño."Si eso fue, me gustaría volver a soñar.." pensó él. ¿Acaso ella pensaría lo mismo?, se preguntaba el chico.

Mientras la chica escribía en su cuaderno, miró de reojo a Ichigo y se dio cuenta de que la miraba.Entonces ella le sonrió. Después, fijó su vista nuevamente en la libreta.

"A lo mejor si" se contestó Ichigo.

De pronto, sintió algo puntiagudo golpear contra su frente.

—¡KUROSAKI! ¡AFUERA!— le gritó su profesora; le había lanzado el borrador.

Todo el salón se le quedó viendo, a excepción de Rukia, que sólo reía por lo bajo.

—Tsk...— se levantó de su escritorio y procedió a salir.

Al pasar frente a la chica,logró escuchar una palabra acompañada de una risita: "bakamono...". Ichigo frunió más el ceño..todavía que se molesta en pensar en ella y así le agradece.

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El timbré sonó indicando que era la hora del almuerzo, como de costumbre, las chicas se juntaron para platicar de cualquier cosa, que para un hombre vendría siendo insignificante. Ichigo ya había vuelto al salón de clases, tomó asiento en su respectivo lugar y de inmediato su amigo Asano Keigo se avalanzó hacia él.

—¡ICHIGOOOOOOOOOOOOOOO!—gritó Keigo, pero lo único que recibió a cambio fue un golpe en la cara por parte de su pelinaranja amigo.

Mizuiro y Chad se acercaron a dónde estaba Ichigo. Ishida volvió a la escuela hace unos días, pero no les había dirigido la palabra a Ichigo y los otros. Ya todos se habían percatado de que tenía reiatsu otra vez, de modo que había recuperado sus poderes Quincy; sin embargo, ¿por qué ahora actuaba tan indiferente?.

— Oi, Ichigo— la voz de Keigo lo sacó de sus pensamientos — ¿sabes que día es mañana?.

— Eh...¿miércoles?—contestó, sin entender bien la pregunta de su amigo.

— Aparte de ser miércoles...

— Eh...— se rascó la cabeza, como siempre solía hacerlo.

— ¡SAN VALENTÍN!—gritó Kiego, poniendo una cara de "como-es-posible-que-no-te-acuerdes"— ¡El día en que las chicas nos deben dar algo a nosotros sus amores!.

—¿Acaso le gustas a alguien?,¿Asano-san?— preguntó Mizuiro, mientras escribía un mensaje en su teléfono celular. Ese chico siempre tiene a alguien a quien llamar.

—¿¡Otra vez con las formalidades?!— se quejó él—¡Y no dudo que una chica me regalé uno de esos chocolates caros!, ¡Su amor hacía mí vale eso y mucho más!—decía, mientras daba vueltas como loco por todo el salón, fantaseando con la escena de la susodicha entregándole el chocolate más caro de todo Karakura.

— Se va a llevar una gran decepción mañana— declaró Mizuiro.

— Hai...— dijeron Chad e Ichigo al mismo tiempo. Pues era la verdad, Keigo tenía pocas o nulas posibilidades de recibir algo mañana.

—¿Y tú esperas recibir regalo mañana?— preguntó de repente Keigo, quien ya había dejado de fantasear por todo el salón de clases— ¡Seguro que esperas a que la bella Kuchiki-san te de un chocolate en forma de corazón con la leyenda "IchiRuki Forever"!.

— ¿Ichi..Ruki?.

— Sí, para no tener que escribir "Ichigo y Rukia forever" y luego no le alcance el espacio — explicó guiñando un ojo.

— ¡Tche!..estás tarado..además, ¿qué te hace pensar que espero que ella me de algo?, o más bien, ¿por qué me debería de dar algo?— inquirió, frunciendo más el ceño.

— ¡PUES PORQUE VIVEN JUN..— no alcanzó a terminar la frase, pues el chico de cabello naranja le había zampado otro golpe en la cara. Ya media clase sabía que Rukia vivía en su casa,pero andarlo gritando siempre, llegaba a molestar. Además, ni loco le contaría que, además de vivir en su casa, duerme en su habitación con el permiso de su padre. Eso de verdad debía permanecer en secreto.

— Aunque es verdad Ichigo—dijo Mizuiro,lo cual desconcertó a Ichigo—, le permitiste quedarse en tu hogar cuando no tenía a dónde ir, me imagino que almenos te debe dar el un regalo por compromiso , como agradecimiento. ¿Tú que dices Chad?.

— Tal vez— fue su única respuesta.

—Tsk..como sea, de todas formas no espero nada— afirmó él, colocándose las manos en la nuca. De verdad no podía esperarse que ella le diera algo, ¿sabía ella que ese tipo de acciones se hacían el 14 de febrero?.No tenía idea. Pero no pudo evitar imaginársela entregándole un chocolate envuelto en papel rojo. Desvió la mirada hacia donde estaba la chica y se preguntó: ¿lo consideraría ella alguien especial?.

¿Acaso podría ser tan especial como aquel que fue su teniente en la división trece?

Ichigo lo sabía,sabía que ese hombre fue alguien muy importante para Rukia,más que cualquiera que haya conocido. Se dio cuenta de eso cuando, aquella noche debajo del árbol, hablaron sobre sus más profundos pesares. "¿Cuál era su nombre?"se preguntó él..Shiba..¿Kaito?, no, ese no le sonaba nada. Shiba Kaien, se acordó de repente. Hermano mayor de Ganjuu y Kuukaku

Él sabía, por las expresiones de su rostro, que los sentimientos que le profesó a Kaien eran más que de respeto y admiración.

"Él me dio un lugar al cual pertenecer", fueron las palabras de la chica en aquel momento.

"A él nunca le importó de dónde viniera yo, siempre me trató igual que a cualquier subordinado...con una abrumadora calidez,como si estuvieras debajo del sol.." su mirada en ese instante parecía perdida..melancólica.

"Me aceptó tal y como soy."

"Tenía esposa, y a pesar de ser mujer logró ser tercer puesto dentro del escuadrón. Ella era amable, hermosa e inteligente...la persona ideal...yo quería ser como ella." Desde el momento en que escuchó esas palabras, Ichigo supo el porqué Rukia ansiaba ser como esa mujer..no era difícil de deducir.

"Pero entonces..ese hollow apareció,y mató a la esposa de Kaien-dono. Fuimos en busca de ese monstruo..Kaien-dono quiso pelear solo..por el orgullo de los subordinados caídos..por el orgullo de su esposa..por su propio orgullo..Pero fue posesionado por el hollow..y después...me vi...forzada...a matarlo..Y lo maté.."

Podía jurar que la voz se le había quebrado, además había empezado a temblar. Después de eso,ella no dijo nada más; seguía con la mirada perdida...Ante esto, a Ichigo sólo se le ocurrió tomarla por el mentón y hacer que lo viera a los ojos. Seguidamente la besó, y Rukia le respondió sin objeción.

¿Por qué lo hizo?, simplemente le surgió el deseo de hacerlo. Él entendía perfectamente cómo se sentía ella,lo sabía mejor que nadie.

Era algo soprendente para el chico, jamás imaginó que alguien pudiera pasar por el mismo dolor que él. Ahora más que nunca,se sentía muy unido a ella, compartían otra cosa en común...ambos perdieron a la persona que más amaban por acción de un hollow,y la culpa los acompañó durante mucho tiempo.

Sabiendo eso, ¿lo consideraría ella alguien así de especial?...porque ella para él,sí que lo era.

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Rukia estaba un poco más allá de su lugar, hablando con las demás chicas, pues como el 14 de febrero era una fecha especial para mujeres, no querían que los hombres escucharan lo que tuvieran que decir al respecto.

— Ya mañana es San Valentín, ¿tienen a alguien especial a quien obsequiarle chocolates?—quiso saber Michiru.

— No— contestaron Mahana, Ryou, Chizuru y Tatsuki al mismo tiempo.

— Qué bien, porque yo tampoco — aclaró dando un suspiro.

— ¿Por qué regalan...— comenzó Rukia,pero Inoue se acercó a ella y le susurró al oído,sabien lo que la chica morena deseaba preguntar.

— Es el día del amor y la amistad, donde las chicas regalan chocolates a aquellos chicos que son especiales para ellas— terminó y se alejó de ella.

¿A alguien especial?. Ella miró de reojo a Ichigo, quien hablaba cansinamente con Asano Keigo.

— ¿Y tú Kuchiki-san?— la voz de Chizuru la volvió a la realidad—, ¿no vas a obsequiar nada a nadie?.

— Eh...

— ¿Qué hay de Kurosaki-kun?, ¡tengo entendido que a él le fascina el chocolate!— exclamó de repente Inoue.

—¿Kurosaki-kun?, ¿y por qué a él?— inquirió Rukia, con esa voz que solía fingir cuando estaba delante de los demás.

— ¡Es cierto!—dijo Mahana—,él te está permitiendo quedarte en su casa, eso no cualquiera lo hace —observó ella, las demás asintieron.

—Al menos el obligado deberías darle,como por compromiso ¿no crees? — declaró Michiru.

—No lo sé...

— ¡No importa mi bella Kuchiki-san!, ¡si Kurosaki no quiere tu regalo, yo con gusto te lo acepto! —gritó Chizuru—,¡y después nos podemos ir a in lugar más íntimo para..— estaba a punto en lanzársele a Rukia, pero una fuerte patada de Tatsuki se lo impidió.

— ¡Cierra el pico de una vez pervertida!.

Todas las demás chicas rieron ante tal escena cómica. Pero Rukia seguía pensando; "así que a una persona especial..", se repetía mentalmente, volvió su mirada hacia donde estaba el chico pelinaranja,quien estaba comiendo el almuerzo que Yuzu le preparó. ¿Por qué todas insisntáin en que debería darle algo a él?...acaso...¿acaso era demasiado obvio lo mucho que le importaba Ichigo?. El recuerdo de que Keigo los vio besándose fue reemplazado por otro, con ese útil artefacto quita memorias,un día que a él le dio por hablar otra vez del tema; por lo tanto, ya nadie recordaba que Asano llegó con el chisme al salón de clases. Y aún así, ¿se notaba en ella la especial atención que tenía para con él?...era difícil saberlo.

La hora del almuerzo terminó, y todos volvían a sus lugares e intentar entender lo que la profesora decía. Inoue Orihime no tenía problemas con eso, pues siempre captaba las cosas que decía su sensei. Estaba apunto de tomar nota en su cuaderno cuando sintió algo golpear su cabeza y caer en su regazo; era un papel hecho bolita,o en otras palabras,un mensaje. Desdobló el papel y leyó:

¿Por qué animas también a Kuchiki-san para que obsequie algo a Ichigo?, si fui yo quien te dijo que a él le gustaba mucho el chocolate...

Tatsuki

Inoue fijó su vista en el remitente del mensaje, Tatsuki le devolvió la mirada,esperando respuesta. Inoue sabía el porqué de la pregunta, Tatsuki ha sido su mejor amiga desde la secundaria y por ende la conoce tan bien como la palma de su mano.

Silenciosamente, Orihime arrancó un pedacito de hoja de su libreta y escribió en él:

Porque ella es la persona indicada para regalarle a Kurosaki-kun mañana. Yo lo sé, créeme.

Orihime.

Y procedió a tirar el mensaje hacia su amiga. Vio cómo ella lo abría y lo leía, después la miró y se encogió de hombros. Si eso era lo que pensaba entonces no podía hacer nada.

Pero Inoue sólo escribió la verdad, si alguien debe estar con Kurosaki-kun mañana, si alguien necesita ese dato que Tatsuki le dijo más que ella, esa era Kuchiki-san. Para Kuchiki-san, Kurosaki-kun era una persona muy especial, más especial de lo que podía ser para ella ,Inoue.Eso es lo que se repetía en su cabeza.

Desde hace un rato que ella había notado algo diferente en ellos dos, era como una conexión, más fuerte que cualquiera que hayan tenido antes. Pues algo en ellos era diferente, no sabía qué, pero algo en la mirada de los dos era distinto,de eso estaba segura. Y ella quisiera saber qué es.Además, podría jurar que antes de que la profesora lo sacara de la clase, él estaba mirando a Kuchiki-san."¿Acaso Kurosaki-kun y ella..."

Comenzó a preguntarse Inoue,pero se detuvo al escuchar la voz de su maestra.

—¡Kuchiki!, ¿tú también?, atiende a la clase por favor.

— Hai..—respondió la chica.

La verdad es que no estaba atendiendo, pues su mente estaba rebosando de pensamientos, todos ellos acerca de cierto chico de cabello naranja.

Observó el claro cielo azul por la ventana, recordando que una noche debajo de un árbol ella había pasado uno de los mejores momentos con Ichigo. Realmente fue agradable estar así de cerca con él, unidos hasta ser una sola alma.

A pesar de estar más ocupados con el asunto de Aizen y los arrancar, ella siempre se daba tiempo, aunque fuera breve, de recordar esos instantes con Ichigo, pues la hacían sentir tranquila...y feliz. Feliz no sólo por el momento,sino también por la confianza que eso había generado entre ellos, pues el chico por fin le habló sobre su madre...

"Era una mujer hermosa.." y ni como negarlo, decía ella, pues constantemente apreciaba su fino rostro en el poster que Isshin-san tenía en la casa. "Para nosotros, ella era el centro de nuestra familia.."

"Cuando yo estaba triste, o lloraba, el hecho de que me abrazara, o con solo verla...me tranquilizaba y desvanecía toda mi tristeza.." Rukia podía percibir nostalgia en las palabras del chico.

"Ese día estaba lloviendo...como el día anterior,y como el anterior a ese. Caminábamos de regreso a casa, cuando vi a una niña cerca del río...de haber sabido que era ese maldito hollow.." ante eso, el muchacho había apretado los puños fuertemente...Rukia posó su mano sobre la de él,y la tensión en su puño bajó.

"Pensé que se iba a caer, y por eso salí corriendo hacia ella. Cuando me acerqué, todo se volvió oscuro. Abrí los ojos...y encontré a mi madre muerta encima mío...no pude protegerla.." podía sentir la remodimiento en la voz de Ichigo.

"Después de ese día, dejó de llover...pero dentro de mí la lluvia seguía cayendo..."dijo él.."con el paso del tiempo,todos volvieron a sonreír como antes...pero yo no pude.."

Y ella sabía porqué. De alguna forma compartían el mismo dolor: las personas más importantes para ellos murieron en sus brazos.

"Siempre me pregunté porqué nadie me culpó..."

Ella quería decirle que no debía culparse por lo que pasó,si el causante fue Grand Fische,no podía hacer nada contra un hollow siendo él un niño...¿pero cómo podía hacerlo cuando ni ella misma se podía quitar la culpa por la muerte de Kaien?..sus situaciones eran muy similares. Ahora comprendía que ella y él se parecían mucho, como dos almas gemelas.

Lo único que pudo hacer, es darle un pequeño beso en los labios y posteriormente abrazarlo,para que sintiera que pasara lo que pasara, ella estaría ahi con él.

—¡Kuchiki!.

El grito de la profesora la trajo de vuelta a la realidad.

—Kuchiki,me temo que tendrás que salir un rato— dijo,señalando a la puerta.

Resignada,se levantó de su asiento. Pudo escuchar un "baka" por parte de Ichigo, Rukia le lanzó una mirada asesina y después salió.

Eso fue en venganza por decirle tonto cuando a él lo sacaron de la clase. "Aunque hay algo que me molesta..",se decía él, "¿Por qué la sensei la trató mejor que a mí?..algo se trae contra los chicos".

Rukia se hallaba recostada contra los muros de su salón, pensado en todos aquellos recuerdos de hace un rato.

Definitivamente Ichigo era alguien especial para ella...después de todo lo que han pasado juntos,y de conocerse a fondo,¿cómo no podía serlo?. Era difícil no sentir nada más que aprecio por él después de todo eso. Ya se había formado una especie de lazo entre ellos, almenos así lo pensaba ella...

"Quizá...si deba comprarle algo para mañana..." se dijo así misma,formando una sonrisa en sus labios.

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Y weno,aquí esta la conti del fic,espero que les esté agradando..pq se va a poner mejor...habrá PORN ICHIRUKI/KONPYON xD...pero después jajaja. dejen reviews..

decidí separarlo pues es una segunda parte jejeje..quiero ver cuántos reviews llega a tener..la meta es superar los 85 reviews..así que ayuden jejeje