Como siempre, no conozco ni a Lea Michele ni a Dianna Agron, esto es sólo una historia de ficción que espera entretener a la gente. Sin más, espero que os guste y que expresen sus opiniones por medio de reviews.
-¿Quieres bacon con el desayuno, Lea?
-No, Jon.
Así es como empieza cada domingo, Jon se presenta en mi casa a las nueve de la mañana y se ofrece a prepararme el desayuno, después vemoss la televisión durante un par de horas, hablando de cualquier cotilleo de famosos que no fuéramos nosotros, y después de comer en cualquier restaurante de Nueva York, nos vamos de compras por el centro de la ciudad. Casi siempre compramos cosas que nos resultan graciosas o que nos recuerdan a épocas pasadas, por ejemplo, la semana pasada nos compramos una camiseta cada uno, en la suya ponía "I'm Hamilton" y en la mía ponía "I'm with Hamilton". Pero hoy va a ser un día especial, porque mi mejor amigo ha venido con un par de entradas para la nueva reposición del musical Wicked. Los pases eran a las nueve de la noche, por lo tanto nuestro domingo empezaría como cualquier otro con la diferencia de cambiar la tarde de compras por la noche de musicales. Cuando terminamos de desayunar, nos sentamos en el sofá para hacer nuestra habitual ronda de cotilleos, pero lo que sin duda no esperaba era ver como en el primer canal en que paramos salía una foto en la esquina de ella, guapísima como siempre. Jon no paraba de mirarme y yo no podía parar de ver su foto, y lo único que salió de mi boca fue una petición para que Jon le subiera el volumen a la televisión.
-La estrella de Glee e intérprete de Glinda en la nueva reposición de Wicked, Dianna Agron, ha confirmado ante los medios en su última entrevista de promoción del musical que, efectivamente, está prometida con el integrante de la banda Mumford and Sons, Winston Marshall. No ha querido confirmar la fecha de la boda alegando que todavía no están seguros de la misma, pero lo que si podemos decir, es que en un par de meses, la soltera de oro de Estados Unidos, dejará de serlo. Y ahora pasamos al nuevo disco de Lady Gaga...
Diez, quince, veinte minutos... No sé realmente cuanto tiempo estuve con la mirada perdida en la televisión ni cuanto tiempo estuvo Jon diciéndome cosas que no supe responder, porque no podía escucharlas. Dianna, mi Dianna, estaba a punto de casarse con alguien que no era yo... Y además, según había escuchado, era una de las protagonistas del musical que íbamos a ver esta noche. Llevo más de dos años sin verla, sin hablar con ella, y sabiendo sólo de ella por las revistas e internet. Cuando conseguir salir de mi particular trance lo único que pude hacer era quedarme mirándole a él fijamente, porque no sabia si lo de Wicked había sido uno de sus trucos para que pudiera volver a verla.
-Mírame, Jonathan Groff, y dime que no sabías que ella era Glinda.
-Lo siento Lea... La vi en Los Ángeles y me lo dijo, y yo realmente creía que os merecíais esa conversación.
Ahora sí, las ganas de matar a el señor que tenía a mi lado aumentaron hasta el punto de estar trazando un plan de asesinato, y anotando mentalmente consultarle a mi abogado cuanto me podía caer por ello.
-¿Creías, Jon?, ¿por qué no me consultaste primero?, ¿no pensaste que si no tuvimos esa conversación en su momento es porque ya está todo dicho?
-Me preguntó por tí, Lee. Quiso saber como estabas y que era de tu vida... Cuando le dije lo de tus nuevos proyectos sonrío de una manera... Hacía años que no la veía sonreír así, desde que estabais juntas. Se nota a kilómetros que te sigue queriendo, y que te echa de menos pero resulta que sois unas cabezotas y unas orgullosas que no os queréis dar la oportunidad de tener esa conversación y de intentar arreglar al menos parte de las cosas. Y yo ahora me voy porque no me apetece ver como me echas la bronca después de intentar arreglar lo que vosotras dos no os atrevéis a hacer. A las ocho y media te recojo porque te pienso arrastrar a ese teatro.
Aproximadamente una hora después de que Jonathan se fuera, encendí mi teléfono y me decidí a hacer aquello que no había hecho en más de dos años, llamarla. Mi amigo tenía razón, nos debíamos al menos esa conversación, pero no podía hacerlo en persona, al menos no por el momento. Le dí al botón de llamada y al tercer pitido descolgó la llamada.
-No sé si después de dos años esto es una alucinación o realmente eres tu la que me está llamando, Lea.
Escuchar su voz refiriéndose directamente a ella hacía que se alojara un calor y una sensación de bienestar en su pecho que hacía años que no sentía.
-Bueno, puede que en realidad estemos alucinando las dos, Di...
-No me llames así, por favor...
-Lo siento, supongo que ahora te llama así él.
Primera alusión a su prometido, que hizo que se creara un silencio alrededor de ellas un tanto incómodo.
-Él no me llama así, sólo tú y mi familia lo hacéis.
-Entonces, ¿cuál es el problema?
-Que siempre después de que me dijeras Di o lady Di o de alguna de esas maneras, yo te besaba.
Se acordaba, claro que se acordaba. Cada vez que estaban juntas y la llamaba así, Dianna la besaba, empezando un juego que siempre acababa con ellas dos en la cama, diciéndose te quiero y queriéndose.
-Te he llamado por teléfono porque quería que tuviéramos esa conversación que nunca tuvimos, y lo cierto era que no me atrevía a tenerla en persona pero ahora me gustaría que vinieras a mi casa... Por favor, Di...
-No creo que sea lo correcto, Lea...
Dianna tenía que venir, y yo tenía que convencerla.
-Nos los debemos, Di.
-Está bien, Lea. Dame la dirección y en una media hora estoy allí, y por favor... Llámame Dianna...
-No puedo, lo siento.
Tras un par de minutos más, y después de darle la dirección de casa, terminamos la conversación. Ahora no sé si he hecho lo correcto o tan sólo lo he hecho porque Jon me había cabreado, pero dentro de veinte minutos la que fue el amor de mi vida estará llamando a mi puerta, para tener la conversación que nunca tuvimos y lo único que me apetece es besarla. Sé que no lo puedo hacer, que no puedo abrirle la puerta y lanzarme a sus brazos como hacia antes, y es por eso que quizá el mayor error he cometido, después de perderla, ha sido volver a llamarla.
Espero que os guste, próxima actualización pronto, pero mientras tanto... Feliz año nuevo.
TheDreamerOne.
