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Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Kishimoto-sensei, lo único que me pertenece es la historia
Esta historia es un UA, está situada en una época como la de Valiente si la película de pixar, pero se desarrolla en Inglaterra
Nota: En este fic Sakura tiene el cabello café ya más adelante entenderán porque se lo cambie. Y disculpen si hay faltas de ortografía.
—diálogos
—Pensamientos o recuerdos
Sin más que decir disfruten la lectura, espero que sea de su agrado
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Bruja
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Antes de que los humanos habitaran lo que ahora es Konoha existían uno seres muy peculiares, algunos demasiado grandes y otros muy pequeños, poseían alas de diversas formas, otros una extraña cola como la de un pez, había algunos con orejas puntiagudas, caballos con alas o con un cuerno en su cabeza, animales enormes que lazaban fuego por su boca y enormes alas, aves de fuego, eran tantos que no se podría contar acerca de cada uno.
El lugar era maravilloso, vivían dentro de lo más profundo del bosque rodeado de una densa niebla, era como si los arboles los protegieran de las amenazas del exterior.
Todo era paz y tranquilidad… Hasta que una noche de luna llena mientras los seres del bosque celebraban y agradecían a la Diosa Lunar…
Uno de los habitantes del bosque salió de su escondite, su nombre era Mito. Había escuchado sonidos extraños y temió que algo se acercara a su gente. Con sigilo se dirijo hacia donde provenían los ruidos, se oculto entre arbustos y árboles, lo que vio parecía imposible… los humanos se habían atrevido a pasar la niebla y se abrían paso con sus espadas, dagas y escudos.
Ella sabía muy bien que sus poderes-unas cadenas de oro que salían de su espalda- solo podrían detener a cinco humanos por unos minutos, pero aun así reunió valor para salir de su escondite, debía detenerlos por el bien de todos los que habitaban el bosque, y en unos segundos se apareció frente al que parecía ser el líder.
— Mi nombre es Mito, soy una de las guardianas del bosque—hablo con determinación una hermosa mujer con una extraña marca en su frente, de cabello rojizo el cual llevaba amarado en dos chongos y de ellos colgaban unos extraños adornos
—Lady Mito… —dijo asombrando de la belleza de ese ser—Mi nombre es Hashirama Senju, soy el jefe del clan— se presento ante ella un hombre de una larga cabellera castaña y piel bronceada
— ¿Qué buscan? — Exclamo molesta— ya varios de los suyos han intentado profanar este bello bosque…
—Por favor se lo suplico cure a mi gente—rogo el hombre. Hizo una reverencia—he oído que alguna de su gente desaparece heridas de muerte.
Mito se sorprendió nunca había visto que el líder de los humanos se enfrentara ante un guardián, siempre enviaban a los valientes o sus mejore guerreros y amenazaban a los guardianes con lastimarlos o matarlos
—los curaremos pero no me parece justo que yo no reciba nada a cambio. Haremos un trato, yo a cambio de lo que pides… quiero tu vida—señalo a Hashirama
—Así será—contesto con seguridad
Mito los introdujo al hasta lo más profundo del bosque, conforme avanzaban se encontraron tantas cosas maravillosas; las hojas de los árboles eran de varios colores, casas entre los árboles o rocas, también había animales distintos a los que cualquier humano conociera todo era sencillo pero hermoso
Siguieron caminado hasta llegar a un gran lago se podía observar una isla y en ella una pequeña choza. Se detuvieron no había forma de llegar ahí sin una balsa o un puente
— ¿Por qué nos ha traído aquí? —pregunto Hashirama
—Para curarlos como pediste—fue la seca respuesta de la guardiana, Hasirama estuvo a punto de protestar— Ahí están los curanderos señalo la choza— pero será muy difícil si no tienen alas o magia
— ¿Cómo cruzaremos? —pregunto un hombre de cabello blanco
—Con un sacrificio—Mito miro al líder
—My Lady, ofrezco mi vida a cambio de la de mi señor—dijo una mujer
—No, yo lo hare—hablo un joven —el nos ha guiado y cuidado, gracia a él estamos vivos
—Ninguno lo hará—interrumpió el líder Senju y miro al hombre de cabellera blanca— Tobirama por favor cuida de nuestra familia —el mencionado asintió
—Bien, Hashirama Senju—Mito hablo con tono amenazador — Has pasado la prueba.
— ¿Prueba? Pero si no ha pasado nada—dijo confundido
—Has protegido a tu gente, estabas dispuesto a morir por el bien de otros, ese es el sacrificio más grande —explico Mito
Del lago comenzó a aparecer un puente de cristal que conducía hacia la choza de los curanderos, Mito fue la primera en avanzar seguida de Hashirama, ambos temían que el otro los atacara en cuanto se distrajeran. La guardiana percibió la preocupación de Hashirama
—No se preocupe somos seres de paz—dijo Mito mientras avanzaban— no atacaremos guarden sus armas o los asustaran—pido
Llegaron al lugar y de la choza salieron unos seres con unos extraños ojos, todo su cuerpo resplandecía cada uno con un color diferente, con posar sus manos en las heridas durante un par de segundos eran capaces de curar cualquier lesión o enfermedad, eran conocidos como curanderos
Como prometió Mito los Senju fueron curados de las heridas y de sus enfermedades, con lo que no conto fue que esos humanos se quedarían. Hashirama se había enamorado de la guardiana y ella por un tiempo lo negó debido a que su deber era cuidar a su gente. Pero entre mas pasaba tiempo con los humanos los acepto, así como el amor que le tenía a Hashirama
La boda entre Mito y Hashirama se celebraría en una noche de luna llena, como la primera vez que se conocieron, esa unión también simbolizaba la aceptación de los humanos en el bosque místico. Pero había alguien que no estaba de acuerdo con la unión de un humano y un ser mágico, hizo todo lo posible para que los humanos dejaran el bosque envió dragones, quimeras, ogros, centauros y cualquiera que no sintiera confianza de ellos.
Nada funciono, los Senju creyeron que se trataban de pruebas para probar su lealtad a los seres mágicos. Ese ser que se ocultaba entre las sombras acepto darles una oportunidad…
— ¿Qué estás haciendo? — pregunto un joven de rubio, con unas extrañas marcas en sus mejillas.
— ¡Ay! no te aparezcas de repente—protesto una joven con unos singulares ojos como la luna y una hermosa cabellera azulada. Vestía un bello vestido lila con un cinturón de tono cobre ceñido a la cintura
—Llevo vario tiempo aquí—contesto fijando su vista en el bosque—. Por cierto su padre la está buscando.
—Naruto—llamo la joven levantándose de un viejo tronco que utilizaba como asiento. Suspiro antes de continuar. — Te pido que me llames por mi nombre
—Lady Hinata, es muy peligroso que este cerca del bosque—dijo Naruto ignorado su petición
—Ya lo sé, pero estar aquí es tan tranquilo y me hace sentir dentro de la historia que solía contarme mi madre—contesto la joven viendo hacia un punto perdido del bosque
— ¿Y de que trata? —la joven no respondió. Naruto sonrió malicioso — Bonita te estoy hablando—la saco de su ensoñación tomando su cara entre sus manos para que ella lo mirara
—Sobre… dos…
—Hinata— insistió él con una sonrisa— ¿me dirás sobre que trata el relato?
—Amor—
— ¿Eh?—Naruto la miro divertido y luego hizo una cara de molestia—No te dejes engañar por esas tonterías
—Naruto el amor no es una tontería—dijo mientras posaba sus manos sobre las de Naruto que aun sostenía su rostro.
—No me refería al amor, eso es lo mejor que podría pasarnos…—Con una sonrisa decidida, se inclinó y le acercó la boca a la oreja
Hinata no lo podía creer esto era demasiado intimo para ser solo amigos ¿Acaso se le iba a declarar? ¿Finalmente se había dado cuenta del amor que ella le profesaba? Pero el momento se rompió cuando él hablo—No te muevas o podrías salir herida, hay alguien espiándonos
—Ejem—carraspeo alguien haciendo que los dos jóvenes miraran hacia donde provenía la voz —Lamento interrumpir tan bello momento
—Enseguida vuelvo, Lady Hinata— Naruto soltó a Hinata y se acerco amenazadoramente a la persona que había arruinado el bello momento. — ¿Qué sucede capitán Kakashi?—
Kakashi era un hombre de cabellera plateada y una piel clara, ocultaba parte de su rostro con una máscara y su ojo izquierdo estaba oculto por un parche. Era un hombre misterioso
—Naruto ten cuidado, recuerda muy bien que tu solo vives para protegerla. Que tus sentimientos no se interpongan con tu responsabilidad— El tono de Kakashi era tranquilo pero firme
— ¡¿De qué rayos habla?! — Naruto no comprendía la actitud de su capitán, el solo estaba bromeando con Hinata porque le divertía hacerla sonrojar desde que eran pequeños
—Hablaban sobre amor— aclaro — ¿Y por que la llamaste bonita? —
—Este veras… espera, ¡¿Cuánto tiempo llevabas espiándonos?!
—Solo recuerda eres su guardián. Por cierto mantente alerta he escuchado que intentaron atacar a los clanes del Norte de Konoha, procura no alejarte de ella
Hinata se acerco a ellos pues temía que el capitán Kakashi castigara a Naruto sobre su actitud — ¿Esta todo en orden?
—Lady Hinata—dijo Kakashi haciendo un reverencia—me disculpo por la actitud del joven. me temo que aun le cuesta recordar algunas reglas—dijo mirando de reojo a Naruto—Sobre todo la que se refiere al contacto físico
—No se preocupe, el no ha hecho nada indebido, la cercanía fue porque escucho ruidos y me estaba protegiendo—defendió —El es un buen guardián…y me siento segura cuando estoy con…—se detuvo al darse cuenta de lo que decía—Q-quiero decir siempre está al pendiente de mi
—¿Lo ve?—dijo arrogante Naruto—No hay nada de qué preocuparse.
—Disculpe no me lo tome a mal Capitán Kakashi pero ¿Qué hace aquí? Es muy raro que venga a estas aéreas del reino
—Vaya ahora soy mal augurio —fingió sentirse herido— Me temo mi lady que es usted la que está alejada, recuerde que adentrarse en el bosque es peligroso por suerte Naruto está con usted
—El bosque no es peligroso, recuerde que de ahí obtenemos muchos beneficios—
—Parece una druidesa*—
— ¡Es verdad! — interrumpió el joven rubio— Capitán Kakashi ¿usted también escoltara a la familia de Lady Hinata?
—Así es. Bueno voy con los Hyuuga seguramente los hombres que envié ya deben estar ahí—dijo mientras volvía hacer otra reverencia a la joven—Nos veremos pronto para celebrar
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Los jóvenes quedaron solo nuevamente, había un silencio incomodo ninguno de los dos quería hablar sobre la celebración, sabían muy bien que era un tonta excusa para que los mejores guerreros presumieran de sus actos heroicos ante el Rey fuera verdad o no y también que alguna mujer se interesara en ellos. Para Hinata lo mas incomodo era que su padre esperaba que en esta fiesta se eligiera a alguien para casarse, pero eso ya lo había hecho a sus doce años, a pesar de que su amor no fuera correspondido. Naruto al igual que la joven no estaba muy emocionado, no le agradaba la idea de ver a su querida amiga unirse con alguien tan bestia por el carácter tan tranquilo de Hinata, además era evidente que solo la veían como un premio por ser hija del jefe de un clan, por eso desde que la conoció había ahuyentado-secretamente- a varios pretendientes hasta que el considerara que alguien era digno de ella
—Así que la fiesta ¿eh? —Naruto hablo al ver el semblante triste de su amiga— Sabes me gustaría…bueno como somos amigos, no veo nada malo en que tu y yo, quiero decir, si tú me lo permites—¿Por qué de repente le era tan difícil hablar con ella? — ¡Bailemos!
— ¿Eh? ¿A-ahora?—pregunto nerviosa. Naruto siempre sabía cómo levantarle los ánimos. Estuvo a punto de tomarlo de la mano y en eso fueron interrumpidos por una de las doncellas de Hinata
—Lady Hinata, lamento interrumpir, su padre me ha pedido que prepare todo para que puedan partir—dijo amablemente la mujer
—Un momento —pidió Naruto —No bailaremos ahora, me refería en la celebración—un leve rubor cubrió el rostro del joven
—C-claro, entonces me iré a preparar—dijo antes de irse con la doncella
—Si…—susurro el blondo —Espero que así nadie se le acerque
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Por fin había llegado el dia de celebrar, el Rey había preparado un gran festín, todo estaba listo para la llegada de los clanes. El castillo era enorme estaba rodeado por una gran muralla.
El rey aguardaba con algunos guardias el arribo de los clanes, los primeros en llegar fueron los Yamanaka; una familia donde todos tenían el cabello rubio y ojos azules, conocidos por su habilidad de espionaje. El segundo clan en llegar fueron los Nara; eran hábiles en planear los ataques y defensas. Por último el Clan Hyuuga; conocidos por tener un don para curar a los heridos y enfermos.
Al adentrarse en el castillo todos los clanes se arrodillaron como era costumbre ante el rey, tal vez la confianza era grande pero las costumbres no debían perderse además de que así ellos mostraban que eran leales y confiables.
— ¡Bienvenidos mis leales amigos!—Exclamo con júbilo el Rey Hiruzen—Como siempre es agradable vernos reunidos en cada celebración, por favor disfrutad de el gran festín que he preparado para ustedes por su gran lealtad y claro también para celebrar la llegada de la primavera—al terminar de hablar tomo una copa de vino y lo levanto seguido de una exclamación— ¡Viva el reino de Konoha!
—Larga vida al rey Hiruzen— exclamaron todos con euforia
— ¡Que comience la celebración! — proclamo el rey
El sonido de la música comenzó a resonar en el castillo, todos comían, bebían, platicaban y volvían a beber, al parecer muchos no se controlaban al momento de festejar y como no si el rey no se media cuando de fiestas se trataba. La joven Hinata al parecer era una de las pocas personas que no se encontraba a gusto porque como en cada fiesta debía bailar con alguien y no faltaba algún caballero que tuviera la mano muy larga, por fortuna en esta ocasión Naruto se había encargado de alejarlos. Pero al parecer el destino no quería que el joven rubio la estuviera cuidando toda la celebración pues el padre de Hinata le pidió que trajera un poco mas de comida y bebidas, claro que el no debía desobedecerle, así que se dirigió a una de las sirvientas para que les llevara mas comida.
—Disculpa, Lord Hiashi quiere que le sirvan mas vino y comida—le hablo a una joven de cabello castaño y ojos verdes. Llevaba puesto un simple vestido de color rojo
—Lo siento, pero no soy ninguna sirvienta—exclamo molesta—soy una de las guerreras de la princesa, tenga cuidado con quien se dirige
—Me disculpo — dijo muy apenado Naruto no solo por su error sino porque esa chica era muy bonita —por favor como disculpa permítame ser su pareja durante el baile—ofreció
—Acepto—sonrió gustosa y sin dudar—por cierto esa joven—señalo a una de las cocineras—si es una sirvienta pídale a ella que le lleve comida a Lord Hiashi
Naruto volvió rápidamente para comentarle a Hinata lo que le había ocurrido, estaba emocionado quizá ella se pondría feliz por él, pero cuando llego a donde ella se encontraba lo que vio no le agrado nada. La Hyuuga estaba platicando alegremente con un joven que conocía muy bien y no era mucho de su agrado
—Kiba—gruño Naruto. ¿Qué hacia el aquí? Se suponía que se había ido de viaje para investigar los ataques al sur de Konoha
—Vaya, al parecer no te agrada que mi hermana hable con otros hombres—dijo una pequeña niña de cabello castaño con ojos de color perla –igual que todo el clan Hyuuga- , llevaba puesto un hermoso vestido naranja con detalles en dorado—¿Estas celoso? —pregunto con malicia—Kiba conoce muy bien a mi hermana, no sería raro que ellos dos…
Naruto no la dejo continuar no sabía porque pero solo pensar que ellos dos estuvieran comprometidos le hacía hervir la sangre, asi que como era el rubio de impulsivo se dirigió rápidamente tomo a Hinata de la mano y se la llevo lejos dejando a Kiba confundido.
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—Naruto, m-me lastimas—hablo un poco temerosa, pues el rubio no solía actuar así a menos de que estuviera molesto
—Te dije que no hablaras con nadie mientras me iba—le contesto iracundo
—Pues tu al parecer lo estas pasando de maravilla con la guerrera ¿no? —le reclamo molesta
— ¿Me estabas vigilando? —se detuvo cuando ya se encontraban fuera del castillo. Giro a verla, se notaba muy enfadado— Sabes, solo soy tu guardián no te metas en mi vida, tengo derecho de buscarme a alguien…
—Ah ¿así que solo eres mi guardián? —Pregunto con enojo— creí que también éramos amigos—le grito la morena mientras se soltaba de su agarre. El comentario había dejando sorprendido a Naruto no pretendía decir eso pero él estaba hecho un lio—Entonces si solo eres mi guardia…te ordeno que no te metas en mis asuntos…—dijo casi al borde de las lagrimas—Y sobre bailar no te preocupes creo que estarás mas a gusto con la señorita Sakura…ese es su nombre por si no lo sabías—dicho eso aprovecho que Naruto aun no salía de su shock para salir corriendo al bosque
Naruto tardo unos segundo en reaccionar, pero Hinata ya se encontraba bastante lejos. Tenía que apresurarse a encontrarla el bosque era demasiado peligroso en cuanto anochecía
— ¡Hinata!— grito desesperado mientras se dirigía corriendo por el camino que se había ido la joven.
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Continuara
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Notas de la autora
Druidesa: Las personas con dones o virtudes psíquicas, intuitivas, los visionarios, los sanadores, eran muy respetados y admirados por el pueblo a lo largo de la cultura celta.
Holaaaaaa aquí Koizumi Hinata,bien pues me ha costado mucho trabajo este fic, casi dos años para atreverme publicar el primer capítulo , pero gracias a dos personitas que me han dado ideas para la historia por fin logre completar una pequeña parte.
Hola aquí reportándose Jakii Lovato.Siiii yo fui una de las personitas que ayude (*U*)/ a terminarlo y espero pronto poder crear mi cuenta para que pasen a leer mis historias.
Holi soy Evelyn yo también estoy feliz de haber ayudado con esta historia n_n espero que les haya agrado seguiré apoyando es bello fic.
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