Serie de one-shots de LECTORA X PERSONAJES con eso lo digo todo, disfrútenlo!

.

"El cielo de Fran"

.

Siempre la felicidad nos espera en algún sitio, pero a condición de que no vayamos a buscarla.

.

-Oii~ despierta ya, el desayuno está en la mesa- Te acababa de despertar Lussuria.

-Voy~~ Lussu-kun- le respondiste al tiempo que te estirabas un poco entre las sabanas, sonreíste pensando que el desayuno estaría delicioso porque a pesar de los comentarios de Bell y Squalo, Lussu cocinaba de maravilla. Tomaste tu móvil del buro para ver la hora. "las 8.00 am" pensaste un poco fastidiada mientras un bostezo se te escapo.

-Ushishishishi la plebeya ya se ha despertado- te llamo el rubio recargado en el marco de tu puerta.

-Buenos días Bell-kun- le saludaste saltando de la cama hacia tu armario sacando algo de ropa.

-Qué manera es esa de dirigirte a un príncipe- te hablo con aparente molestia sacando un par de sus cuchillos lanzándolos hacia ti.

-Ahora no puedo jugar Bell-kun debemos de bajar a desayunar o Lussu-kun se enfadara mucho- le dijiste deteniendo ambos cuchillos con tu mano envuelta de llamas del cielo.

-Que aburrida eres (tu nombre)-chan, ushishishi- comento observando cómo te cambiabas.

-Y tú un pervertido Bell-kun- le sonreíste graciosa al ver un rubor en sus mejillas. Estabas algo confundida con respecto a Belphegor de cierto modo te sentías atraída a él pues su sonrisa retorcida lograba entretenerte, además de sentirte especial pues tú eras de las pocas personas que conocían los ojos de aquel príncipe.

Bell te sonrió antes de marcharse despidiéndose con un "bye-by" para dirigirse al comedor, cepillaste tu cabello mientras posabas tu mirada en una fotografía que adornaba tu peinador, una del escuadrón mas importante de varia, Boss (Xanxus) sentado en un sillón de terciopelo, a su derecha Squalo y Levi, a su izquierda Belphegor y Lussuria, volando por encima de él se encontraba Mammon y sentados a sus pies Fran y tu.

Te sentías muy agradecida con todos ellos después de todo te habían dado techo y trabajo, uno no muy convencional pero todos te cuidaban incluso Boss que parecía daré igual que quisieran atacar a sus subordinados pero tú eras la excepción a la regla porque te pensaba como su hermana menor. Probablemente veía en ti alguna cualidad que el mismo poseía.

-Al fin bajas (tu nombre)-chan- te regaño Lussuria pues ya todos se encontraban desayunando.

-Lo lamento Lussu-kun- te disculpaste sentándote junto a Squalo.

-¡Voi! ¡voi! No me digas que otra vez el príncipe inútil te estaba molestando- hablo el peli-plata dándole una mirada de desaprobación al mencionado.

-No Squalo pero gracias por preocuparte por mi- respondiste ruborizándote un poco pues te dabas cuenta de que eras sobreprotegida por todos ellos.

.

.

-(tu nombre)-chan gracias por ayudarme a recoger la mesa, estos insolentes solo se van como si nadie se tomara la molestia de cocinarles- se quejo Lussuria.

-No te preocupes Lussu-kun yo te ayudare-

-Y dime (tu nombre)-chan, ¿ya pensaste en la proposición de ese guardián insolente?- te pregunto mientras ambos lavaban los platos.

-¿El guardián de Tsunayoshi?- preguntaste un poco ruborizada al recordar la proposición del chico en tu última visita a Japón.

-Sí, debo de decir que es un joven muy atractivo si yo fuera tu ya estaría en Japón~~- hablaba el aun mas ruborizado pensando en "eso" y "aquello" según murmuraba.

-hehe pero si aceptara… boss iría a matarlo- pensaste divertida al imaginar aquella escena.

-…- Lussuria se quedo callado un momento luego de chasquear los dedos y hacer una "o" con sus labios.

-¿Qué pasa?- preguntaste un poco angustiada al verlo así.

-Fran no vino a desayunar. Me pregunto si estará bien-

-Ahora regreso iré a buscarlo, el nunca falta a desayunar- dijiste para casi de inmediato salir corriendo en busca de Ranita-kun.

.

.

.

-¡Ranita-kun!- Gritabas a diestra y siniestra pues no lograbas encontrarlo por ningún lugar. Hiciste un mohín para con fastidio usar tus llamas para salir volando en su busca. Pero aunque te fastidiaba debías buscarlo porque si no Lussuria seguiría preocupado.

Llegaste hasta el lago que estaba a las afueras de la base, era bien sabido que el ilusionista malgastaba el tiempo de ocio en aquel lugar.

"Ahí está" pensaste aliviada cuando viste una cabellera verde aunque te desconcertó no verlo con su sombrero de siempre.

-¿Por qué no fuiste a desayunar?- preguntaste mientras te parabas detrás de él.

-Ho~ hime tenia cosas que hacer- te respondió de manera monótona sin siquiera voltear a verte.

-Deja de llamarme Hime- le pediste lanzando un suspiro pesado recordando que te llamaba de ese modo pues en una ocasión te encontró con Belphegor en una situación difícil de explicar.

-¿Puedo sentarme?- preguntaste mordiéndote el labio inferior pues probablemente su respuesta seria no, sabias muy bien que él no simpatizaba mucho contigo.

Se encogió de hombros como respuesta y tu decidiste tomarlo como un "como quieras" sentándote de todos modos.

-¿Qué haces aquí?- preguntaste una vez más posando tus ojos en el agua como si ella te fuera a dar una respuesta.

-Hime ¿acaso nunca le gusta tomarse tiempo para pensar?- te dijo aun sin levantar la vista del césped.

-A veces- contestaste y comprendiste que probablemente era una invitación para que te marcharas. –Creo que debo de irme, pero sería bueno que vayas a comer algo a la base- te quedaste en silencio un momento antes de levantarte, esperabas que por lo menos se dignara a decirte lo que le pasaba o ya como mínimo darte unas gracias dirigidas a Lussuria por preocuparse por el…

-Vete probablemente el príncipe falso te está esperando- hablo sin dejar de lado su tono de siempre.

-¿Qué quieres decir?- le preguntaste alzando una ceja.

-Que hime es un imán de idiotas- te dijo en tanto él era el primero en levantarse de su asiento.

-¿Ya te vas?, v-vámonos juntos- le pediste.

-La hime también es idiota, de otro modo ya hubiera dejado de buscar- te dijo desapareciendo en una espesa niebla.

Te quedaste de pie mirando hacia el lago pensando en lo que dijo, estabas molesta, te había llamado idiota… "¿Buscar qué?" te preguntaste lanzando con todas tus fuerzas una piedra al agua.

.

.

Regresaste a la base casi al atardecer, habías preferido ir a dar una vuelta a la ciudad para comer algo y de paso comprarte un poco de ropa. No querías volver a la mansión varia pues sabias bien que Ranita-kun estaría ahí y ya te había echo una mala pasada por la mañana, lo último que querías es que ahora te tomara como su burla tal como lo hacía con el resto del equipo.

-¡Ya regrese!- alzaste la voz mientras uno de tus subordinados tomaba los paquetes de tus compras para llevarlos a tu recamara.

-¿Dónde estabas?- pregunto Squalo

-Fui de compras- hablaste aburrida encogiéndote de hombros, caminaste hacia la sala donde Lussuria y Mammon se encontraban, uno estaba viendo la TV y el otro se dedicaba a contar la paga que habían tenido el día de ayer.

-(tu nombre)-chaaan~~ ¿Qué le hiciste a Fran?- te pregunto Lussuria en cuanto tomaste asiento junto a él.

-¿Yo?- preguntaste confundida pues hasta donde tu sabias él fue quien te había ofendido al llamarte idiota.

-Si tu~~, después de que fuiste a buscarlo regreso diciendo que eras una idiota-

-¡Maldición! ¡Si llego diciendo eso es obvio que él fue quien me insulto!- gritaste furiosa alzando las manos en el aire golpeando a Mammon. –L-lo lamento Mammon-kun-

-Espero que te quedara dinero porque te va a costar-

-¿A la cuenta de siempre?-

-Si-

-¿Por qué dices que yo le hice algo a Fran?, él fue quien me llamo idiota y se marcho- preguntaste a Lussuria

-Bueno pues Mammon se le quedo viendo un poco extraño- respondió y de inmediato ambos se giraron a ver al ilusionista.

-¿Mammon?- preguntaste, sabias que a ti nunca te cobraba por información, solo por tus tonterías.

-Bag, patético llego haciendo una ilusión ridícula tratando de ocultar que había estado llorando- se burlo y no al mismo tiempo porque se le podía notar un poco contrariado con la actitud de Fran.

Te quedaste en shock pensando que fuiste una tonta por no darte cuenta que nunca te miro a la cara por ese motivo… y que probablemente se fue porque no te marchabas. Sentiste un golpe en el estomago recordando que Fran a pesar de no hablarte mucho siempre era bueno contigo, como cuando lo conociste la primera vez y estabas llorando asustada, el te regalo una rosa e hiso una ilusión de mariposas. Aunque no duro mucho su ilusión pues seguido de él llego el resto de varia gritando sobre que debían de hacer contigo. Recordaste que a diario te da los buenos días y las buenas noches, que en batalla siempre se mantiene a tu lado y te ha protegido innumerables veces.

No necesitaste seguir recordando mas pues te diste cuenta de que cada motivo era suficiente para que fueras a buscarlo.

.

.

-¿Ranita-kun?- le llamaste.

-¿Qué?~~- respondió desde el otro lado de la puerta.

-¿Podemos hablar?- cuestionaste repasando mentalmente lo que le ibas a decir como "somos amigos Fran confía en mi" o "Fran si quieres llorar aquí está mi hombro"… aunque cada dialogo en tu cabeza sonaba lo bastante lastimero como para que el oji verde te mandara a una ilusión bizarra por ser tan impertinente.

-Está bien hime~~- escuchaste su voz mientras la puerta de su alcoba se abría.

-Fran ¿estás bien?- mentalmente te golpeaste la cabeza, como podías preguntar eso claro que no estaba bien después de todo por eso estabas ahí.

-Si hime~ ¿debería tener algo?- te pregunto parpadeando un par de veces.

-N-no es solo que…- sonreíste con tristeza, después de todo no eras nadie para que él quisiera confiar en ti.

-Gracias por preocuparte hime~- te sonrió y podías jurar que era la primera vez que lo veías sonreír de ese modo.

-No me gusta que me llames hime- le interrumpiste mirándolo fijamente

-¿Por qué no, acaso no eres la princesa del príncipe falso?, o ¿prefieres que te llame "señorita Vongola"?-

-¿Señorita Vongola?... ¿de qué hablas Fran?- preguntaste confundida, realmente no entendías nada y por si fuera poco notabas como la voz de Fran y su expresión iban cambiando de tono.

-Lussuria me conto que el guardián del dame-Tsuna te beso y te pidió salir con él en Japón- te dijo levemente sonrojado y casi de inmediato tu también te sonrojaste al verlo así.

-Y-yo no tengo por qué darte explicaciones y Lussu-kun no debería contar esas cosas- respondiste desviando la mirada hacia un punto en la pared.

-Hime… ¿cuándo te cansaras de ir hasta Japón a buscar? ¿Cuándo te cansaras de buscar por todo Italia… de buscar por toda la mansión varia?...- te tomo de la barbilla para que lo miraras fijamente, basto escucharlo para darte cuenta de que a esas palabras les costó salir y no quedarse ahogadas en su garganta.

-¿Buscar?... ¿buscar qué?- preguntaste aunque probablemente ya te imaginabas la respuesta.

-Siempre le dices a Lussuria que estas buscando alguien interesante que te quiera… y siempre ha estado enfrente de tu recamara- te dijo soltándote bruscamente abriendo la puerta en señal que debías marcharte, no necesitabas ser genio para comprender que lo que estaba frente a tu recamara era la recamara de Fran…

Sentiste tu corazón queriéndose escapar por la garganta… "la hime también es idiota" recordaste sus palabras y en efecto, eras idiota.

-¡Yo quiero explicarte!- le dijiste con las mejillas totalmente rojas y los ojos un poco cristalizados por estarte tragando un poquito de tu orgullo. –Belphegor no significa nada para mi, ya sabes solo pienso que es lindo pero no estamos saliendo ni nada de eso, el guardián Vongola si me beso y si me pidió salir con el pero por si Lussu-kun no se tomo la molestia de decirte… debió decir que le di un buen golpe, si no me crees pregúntale a Squalo que se partió de risa…- diste una bocanada de aire te querías meter debajo de tu cama para que nadie te viera, en especial Fran que no podía quitar esa cara tan inexpresiva que siempre tenía.

-Dime, ¿quién te gusta?- te pidió serrando nuevamente la puerta.

-No se Ranita-kun- respondiste totalmente ruborizada sintiendo tu rostro totalmente caliente.

-¿Entonces tengo oportunidad?- te pregunto con una sonrisa que juraste era la más hermosas que habías visto en tu vida.

-Siempre la has tenido- le dijiste antes de salir corriendo de su habitación para entrar en la tuya.

.

.

.

.

-(tu nombre)-chan, despierta- te llamo Lussuria. Era de madrugada probablemente las 3:30 am.

-¿Qué pasa?- preguntaste mientras te sentabas sobre la cama y veías como Lussuria te arrojaba el uniforme de los varia.

-Tenemos que irnos, tal parece alguien está atacando en la mansión del noveno- hablo alterado y tú te pusiste de pie tomando la ropa al instante que corrías y te vestías al mismo tiempo, estaba preocupada por Xanxus a pesar de todo sabias que el noveno era la persona más importante para el aunque no lo dijera.

-Rápido, rápido- te apuraba Lussuria –somos los últimos que quedan, el jefe y los demás ya se fueron hace una hora, no querían despertarte pero Squalo me llamo por que necesitan refuerzos-

-Maldita sea que se piensan esos idiotas-

-No pensaron que serian demasiados-

-Va… me adelantare Lussu-kun- le advertiste envolviéndote en llamas del cielo para poder volar.

-Cuídate mucho (tu nombre)-chan-

.

Volaste hasta la mansión del noveno, no fue difícil llegar ahí estaba bastante cerca de la de los varia por si un incidente como ese sucedía, pudiste ver una gran nube de humo producto de un incendio que le atribuiste rápidamente a Belphegor pues siempre terminaba incendiando algo con la agresividad de su llama.

-Squalo ¿Cómo está la situación?- preguntaste acercándote al peli plata que se encontraba peleando en el tejado

-VOI~ el jefe estúpido está peleando con un sujeto cerca del cuarto del viejo, Bell esta con Mammon al oeste de la mansión, y Fran está solo, hacia el este- te dijo en tanto seguía con su pelea

-Entendido, voy a ayudar Fran- hablaste pero no te moviste del lugar.

-VOI ¿acaso no piensas ir?-

-No se hacia donde está el este- dijiste chocando la punta de tus dedos índices y Squalo te apunto hacia su derecha con una mueca que te hiso pensar estaba a punto de insultarte.

.

-¡Ranita-kun!- gritaste en cuanto viste que peleaba con un sujeto bastante temible el cual acababa de darle un golpe que lo impacto contra una pared destrozándola en el proceso.

-Colpo di fiamma- gritaste lanzando un poderoso disparo de tu magnum –No toques a Ranita-kun- tu mirada se afilo estabas realmente encabronada.

El sujeto te ataco con una gran cadena con púas a su alrededor, era rápido y podías comprender por qué había logrado golpear a Fran.

-Ne~ (tu nombre)-chan, ten cuidado- te dijo Fran desde el suelo con la poca fuerza que le quedaba pues había echo una barrera para protegerte.

-Sigues con vida- sentencio aquel hombre lanzando una espada corta que atravesó el estomago de Fran.

-Inferno Mortale- atacaste sacando tu segunda magnum, estabas decidida a carbonizarlo por haber golpeado de esa manera al peli verde.

-Eres muy entretenida cuando empiezo a golpear a ese mocoso- hablo sonriendo de manera macabra lanzando esta vez 3 cuchillas.

-¡Fran!- gritaste asustada viendo como estas le atravesaban el abdomen y lo decapitaban. Tu llama empezó a arder más intensamente tomando un color más oscuro, empezaron a rodar lágrimas por tus mejillas. "ne~ (tu nombre)-chan" recordaste cada vez que te llamaba.

-Fiamma l'inferno- usaste tu ataque más poderoso que empezó a calcinar todo a su paso logrando llegar a él y exterminarlo. Empezaste a descender rápidamente colapsando por una baja de llamas del cielo pues habías usado todo lo que tenias en ese ataque.

-(tu nombre)-chan ¿estás bien?- pregunto Fran sonriendo mientras te atrapaba.

-Maldito imbécil por qué haces ilusiones tan reales-

-Quería ver como reaccionabas-

-No soy un juguete maldita se...- te interrumpió con sus labios sobre los tuyos.

-Te preocupas mucho por mi ¿no?- tu solo asentiste recargándote en su pecho, rodeando su cuello con tus brazos.

-Vamos a buscar al estúpido jefe- murmuro regresando a su tono monótono de siempre, sin soltarte.

-¿Qué es esto maldita rana? Ushishishi-

-Ho~ sempai-

-Bájala de inmediato, debes de aprender a no jugar con las cosas del príncipe- le amenazo por tenerte en brazos. Lanzando un par de cuchillos a su cabeza.

-Eso duele sempai… si el príncipe idiota sigue pensando que (tu nombre)-chan es su juguete está equivocado.-

-Fran- murmuraste sonrojándote por completo

-Es mi juguete-

-¡Fran!- le regañaste

-Eres mía- te dijo con una sonrisa encantadora y ahogando tu aliento una vez más con un cálido beso.

.

.

.

.

Ñam Ñam dejad sus Reviews si les gusto el capitulo que fue muy largo pero odio los one-shot tan cortos hehe así que quería que vieran como era una vida con los Varia, y con la Ranita-kun… Para el próximo capitulo estaré pensando en que chico será esta vez pero estoy penando seriamente en Enma, dadme sus opiniones para saber de quién quieren leer xD… Bye-By