Como parte de un nuevo ataque de desvariaciones severas, hace algunos días se me ha venido esta idea en mente y no me dejó dormir hasta que terminé de escribirla a las cinco y media de la mañana. Para los que me conocen, ya sabrán a que abstenerse en el momento en que decidieron entrar aquí.
Ahora, para los que no me conocen... ¡Hola, me llaman Kurenai Lukia y "mi especialidad" son los Levi x Lectora (Levi x Reader)! He escrito otro fanfic de este tipo anteriormente (Roulette of Memories) y actualmente estoy publicando su epilogo y una traducción de ingles a español de un fanfic de este mismo tipo (Reinicio/Reset), ambos del genero drama y el segundo con el agregado de ser un Yandere!Levi... Y la verdad, aunque disfruto mucho escribiendolos, tenía muchisimas ganas de publicar una comedía romantica y... la blasfemia que verán a continuacion es el resultado de ese deseo. Espero (por dios) que esta vez no pasé de diez capítulos.
ACLARANDO CLARESAS CLARAMENTE (?):
"blablabla" son pensamientos
-blablablabla.- son dialogos
-(N) fue a casa de pedro.- estan diciendo el nombre de la lectora.
-(A) fue a casa de pedro.- estan diciendo el apellido de la lectora.
Por -terribles- defectos de la historia, la protagonista mide 1.55 m y su segundo apellido es "Ciel".
Disclaimer: Shingeki No Kyojin NO ES MIO, es propiedad de Hajime Isayama! Historia basada de Gekkan Shōjo Nozaki-kun de Izumi Tsubaki.
Genero: Comedia, Parodia, Romance
Advertencia: Por ahora solo Lenguaje Vulgar y OOC, mas adelante puede que hayan escenas sugestivas.
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-(A)…
Él jamás…
-…Y-yo…
Jamás…
-¡Yo…!
JAMÁS…
-¡Yo realmente te admiro!
…Se le había confesado a una chica.
¿Qué diría la gente sobre el chisme de que el muchacho más atractivo, rudo y fuerte del instituto jamás se le había confesado a una mujer? ¿Qué dirían si se enteraban de que se había puesto tan nervioso como una colegiala virgen cuando se atrevió, tras muchos meses, a confesársele a la chica más bonita del segundo año, aquella que se había robado su corazón desde que la vio por primera vez? ¿Y que todo esto había pasado mientras llevaba en sus manos el capítulo del mes antepasado de cierta popular novela gráfica para chicas que una amiga le había entregado en la mañana y de la cual no se había podido deshacer desde entonces?
Tras un largo minuto en la que ella, con aquellos preciosos ojos suyos, se mantuvo observándolo mientras él se sentía morir en cualquier momento por los nervios, pudo observar como una suave sonrisa (con las cuales él se derretía) recorría su rostro mientras se inclinaba hacía su bolso, sacaba un bolígrafo negro, tomaba el capítulo de entre sus manos para abrirlo… Y empezaba a escribir en la primera hoja antes de entregárselo de nuevo con nada más y nada menos que una elegante y adorable firma que al final terminaba subrayada con una línea que luego se convertía en el dibujo de una pequeña flor, la firma presentando el nombre de "Jasmine Ciel" junto con la dedicatoria que dictaba "Con todo cariño, para Levi Ackerman."
-Muchas gracias por seguirme hasta ahora, Ackerman-Kun. ¡Por favor, continúa apoyándome comprando el capítulo del mes que viene!- Pidió aun con las mejillas sonrojadas, bajando la cabeza y juntando las manos frente a ella en señal de respeto.
"Ella… ¿Acaba de darme un autógrafo?"
…¡Ella lo había entendido todo mal! -¡M-mierda espera, eso no es lo que quise decir!- Él comenzó a desesperarse, su cerebro comenzando a echar humo al tener que pensar rápido en palabras coherente que le sirviesen para expresar sus sentimientos hacia ella. -¡L-lo que quise decir es que quisiera poder estar a tu lado y ayudarte siempre!-
"¡Espera, eso es lo que alguien diría para pedirle matrimonio a alguien!" sus neuronas comenzaron a realizar una revuelta dentro de su cráneo, sintiendo como las mejillas comenzaban a arderle como si hubiese un infierno bajo ellas. ¡Iba a darle una idea errónea! ¡Él tan solo quería comenzar a salir con ella, tener una cita! "¡¿Por qué mierda no pude solo decirle que me gusta?! ¡Ahora ella creerá que yo soy uno de esos tipos desesperados que…!"
-¡Oh por dios! ¡¿Tu realmente quieres…?! ¡Si quiero!- Levi levantó lentamente la mirada, observando el rostro aniñado de la chica mientras este, comenzando a sonrojarse, comenzaba a mostrar una sonrisa de pura emoción, haciendo que el corazón del joven comenzara a latir aún más fuerte de lo que ya lo hacía. ¡¿Ella había comprendido sus verdaderas intenciones?! -…¡Estaré profundamente feliz de contratarte como mi ayudante! ¡Por favor, mañana encontrémonos en la salida después de las clases para comenzar! ¡Cuento contigo, Ackerman-Kun!-
…
…
…
Levi solo atinó a asentir con la cabeza, prometiendo reunirse con ella al día siguiente después de clases y dándose media vuelta para salir del vacío salón, dejando a la muchacha atrás y caminando con la expresión en blanco durante varios minutos hasta que estuvo en frente de su casillero… Pegándole un golpe con la frente al metal de su locker.
¿Qué diría la gente si supieran que él, Levi Ackerman, el estudiante más fuerte, el muchacho más guapo y además el secretario del consejo estudiantil la secundaria, se había equivocado al elegir las palabras para confesarse y al final había terminado obteniendo el puesto como ayudante de una escritora de novelas rosa?
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Gekkan Shōjo Levi-Kun
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"… ¿Cómo es que… ¡Puedo ser tan infinitamente idiota!?"
Pegándole repetidas veces la cabeza al casillero hasta casi lograr romperse el cráneo, se preguntó por enésima vez aquello desde que había ocurrido "lo que había ocurrido" la tarde anterior, terminando por apoyar la cabeza contra el metal mientras miraba el suelo de granito bajo sus pies con anhelos suicidas. Quién viera al normalmente estoico y gélido Levi Ackerman poner esas expresiones probablemente huiría despavorido a buscar un refugio para esperar el fin de los tiempos.
(N) (A) Ciel era el nombre de la chica en cuestión. Tenía 16 años, 1.55 metros de altura, estudiaba el segundo año en la sección B de la secundaría Sina… Su alias de autora era "Jasmine Ciel", el cual también era el nombre de una flor que era la que ella dibujaba en sus autógrafos, y trabaja escribiendo novelas gráficas románticas para chicas de entre doce y veintiún años que se publicaba mensualmente en cierta revista para mujeres de la mano de la famosa editorial "S.N.K.". Su tercer y más reciente trabajo: "Viento bajo los Cerezos" se había vuelto popular a finales de ese año, cuando salió el primer capítulo a la venta. Actualmente tenía dos capítulos.
"Es además la chica más hermosa que he visto en mi jodida vida."
A Levi le gustaba esa chica desde que la había visto por primera vez el año anterior, mas no se había atrevido a aceptar sus sentimientos hasta ahora, empujado por los ánimos que sus dos mejores amigos le habían dado… Y todo había terminado de esta manera. Pero esto contaba como un acontecimiento especial. Aun cuando a sus dieciocho años había tenido suficientes parejas (o lo que fueran) como para que la gente le llamara un "Playboy", él jamás se había sentido como se sentía al respecto de aquella hermosa muchacha… O al menos intentaba excusarse con dicha explicación en cuanto al error garrafal que había cometido al intentar expresar sus sentimientos, no queriendo admitir que no era la primera vez que le pasaban cosas por no ser capaz de darse a entender claramente.
"Pero aun así, ¡¿Qué tan idiota es ella también como para haber asumido directamente que yo le estaba pidiendo trabajo?!"
-¿Ackerman-Kun?
De un segundo a otro, su posición con respecto al casillero cambió hasta que él adoptó la pose más cool que logró colocar en unos segundos, pegándole la espalda y un pie a los casilleros y metiéndose las manos en los bolsillos mientras retomaba su expresión hostil, girando el rostro hacia la figura de la chica que se acercaba a él con su bolso en la espalda, él intentando por todos los medios no babearse al ver su cuerpo menudo y femenino cubierto por el uniforme del instituto que le quedaba tan… "¡Actúa natural, maldita sea!"
-Tch. Llegas tarde, mocosa. Odio tener que esperar.- Ella le mandó una sonrisa apenada, inclinando ligeramente la cabeza mientras Levi contenía las ganas de golpearse a sí mismo por haber sido esa frase lo primero que se le ocurrió decir.
–Lo siento mucho, tenía que ayudar con algo en mi club y me he tardado más de lo que esperab-… ¿Por qué tienes tinta bajo los ojos?- Se interrumpió a si misma de pronto, haciendo que él frunciera el ceño ligeramente en confusión mientras se frotaba los ojos con la manga de su camisa, observando que esta no se había ensuciado al mismo tiempo en que un jadeo sorprendido salía de los labios de la chica, acercándose en ademan preocupado. –E… ¡¿Esas son ojeras?! ¡¿Estas bien?!-
-¡Tch, claro que estoy bien, mocosa molesta! Anoche estaba de juerga y regresé tarde, eso es todo.- Levi, en un intento desesperado de mantener su imagen de chico malo y encubrir el creciente nerviosismo que le invadió al sentirla tan cerca de él, soltó aquello como respuesta. Mas luego su consciencia pareció gritarle una reprimenda al ver que la jovencita fruncía los labios hasta convertirlos en una pequeña "o", alejándose y bajando la mirada al suelo, susurrando un "Ya veo, disculpa por entrometerme".
El corazón del joven partiéndose en pedazos. "¡En realidad estuve hasta la hora de ir a la escuela leyendo todos los capítulos de la segunda novela que ella escribió para tener algo de lo que hablarle hoy!"
-B-bueno… Supongo entonces que ya nos vamos.- la chica levantó la cabeza de nuevo, sonriendo políticamente mientras apretaba un libro contra su pecho, mirándolo mientras él levantaba una ceja, como preguntándole a dónde demonios iban a ir. –A mi casa. ¿Recuerdas?-
Levi sintió que su corazón se salía de su pecho tras eso, pero nada de esa emoción se reflejó en su expresión, limitándose a chasquear la lengua y hacerla apresurarse, tomando la actitud desinteresada que lo caracterizaba. ¿Ir al hogar de la chica que le gustaba? ¿Acaso era él quien había malinterpretado todo el día anterior y ella si había comprendido sus sentimientos? Él estuvo a punto de morirse de felicidad cuando ella comenzó a caminar, siendo seguida por él no mucho luego, quien se obligó a contener las emociones mientras cruzaban las calles, tomaban el metro y llegaban al fin a un edificio de departamentos, subiendo el ascensor y deteniéndose en una de las puertas en el piso cinco, todo eso mientras por dentro bailaba un maldito chachacha de la pura emoción. ¿Comó sería el hogar de la chica que le gustaba? ¿Sería ordenado o desastroso? ¿En su habitación habrían tapices rosados y muñecos de felpa, o al contrario serían tapices obscuros y posters de anime/manga o bandas musicales? ¿Qué cosas podían llegar a pasar mientras ambos estaban juntos?
-…Siento el desorden que puedas encontrar. Estas semanas han sido un poco ocupadas para mí y no he tenido mucho tiempo para limpiar. De nuevo lo siento.
"…¿Cómo puedes siquiera pensar eso?"
Levi en cambio estaba en el jodido paraíso. El pequeño departamento lucía tan pulcro que ni siquiera le importaría comer en el suelo. El piso de la sala/comedor/estudio estaba cubierto con alfombra color beige, las paredes blancas y celestes, un agradable aroma a jazmín llenando sus pulmones y las cortinas del balcón del mismo color que la alfombra, mientras que los muebles de madera o tapizados de color crema lucían como recién salidos de una revista de diseño interior, notando como en una esquina había incluso una pequeña fuentecilla de adorno. Este era el hogar de una chica como ella… Realmente le combinaba, más cuando siempre lucía como una muñeca de cristal pulido para él.
-¿Vives sola, (A)?- fue lo primero que se atrevió a preguntar cuando ella le ofreció asiento en el pequeño sofá beige de la sala/comedor, observándola asentir con la cabeza mientras le preguntaba fugazmente si deseaba algo de beber, a lo que recibió un simple pedido de un vaso con agua.
-Mis padres viven en otro país, me enviaron a estudiar aquí hace un año.- ella explicó mientras le tendía el vaso de vidrio con puntos color violeta.
"¿Entonces… Estamos completamente solos?"
De nuevo, el corazón de Levi comenzó a latir con fuerza contra su pecho. Miles de fantasías llegando a su mente ante ese hecho, estaba totalmente solo junto con la chica de sus sueños en un pequeño departamento... ¿Esto podía ser el escenario principal de una escena romántica entre ambos? Tal vez el leer todos esos capítulos en una noche había afectado su mente… Pero a estas alturas le importaba una mierda, ella se estaba acercando a él, ella… Ella…
-¡Entonces comencemos a trabajar! ¡La fecha límite de entrega está a solo una semana!
Ella lo había levantado del sofá, lo había sentado en la mesa del comedor y le había tirado una pila de hojas al frente, sentándose junto a él frente a una laptop antes de comenzar a escribir.
Pasaron al menos cinco minutos antes de que él le pegara la cabeza a la mesa tan fuerte que por un momento los papeles se levantaron de la superficie, volviendo a caer en el mismo orden.
"Ella realmente me contrató como su empleado."
-¿Pasa algo, Ackerman-Kun?- Al ver que él no movía un solo musculo, sino que se limitaba a mirar la mesa como si estuviese planeando una forma de suicidarse con ella, (N) detuvo sus manos y aparto la vista de la pantalla de su computadora, mirándolo confundida.
-Yo… Realmente no sé qué mierda quieres que haga.- fue la escueta respuesta del moreno, quien levanto sus ojos azul grisaceos mirándola de regreso. Un ligero sonrojo llenó las mejillas de ella sin razón aparente entonces.
-¿Qué no es obvio? Tu eres parte del consejo estudiantil de la secundaria después de todo, ¿No? Eres el secretario, si mal no recuerdo.- ella sonrió amablemente mientras extendía el pequeño grupo de hojas sobre la mesa ante él. –Tu trabajo es ayudar y aconsejar al presidente… Y eso es lo que deseo que hagas. Por favor, ayúdame a mejorar mi trabajo.-
"¿Eh?" ¿Ayudarla? Ciertamente él era el secretario del Consejo Estudiantil y cumplía la función de llevar registros, convocar las reuniones del mismo, pedir los permisos y la mayoría del tiempo era quien ayudaba al presidente a redactar todos los documentos competentes al consejo, pero… ¿Cómo podía ayudar a una escritora amateur con esas habilida-…?
-…Te equivocaste en esta palabra, idiota.- Tomando un lápiz que ella había puesto junto a los papeles, dibujó un circulo en una palabra que había sido deletreada mal, haciendo que ella lo mirase por un instante antes de que la sonrisa más radiante que él había visto en el rostro de alguien apareciese… Aun cuando él lo que había hecho era corregirla.
-Ahí está lo que quería. ¡Muchísimas gracias, Ackerman-Kun! ¡Continua así! Ese es el borrador del capítulo de este mes, por favor corrígelo.
Oh, craso error de su parte. Levi Ackerman tenía la muy mala costumbre de asimilar el refuerzo positivo y su conducta era demasiado fácil de reforzar.
"Aquí también te equivocaste."
"¿Qué no sabes qué demonios es un acento? Has olvidado ponerlo en demasiadas palabras."
"¡Esto no tiene congruencia con lo que dijiste arriba! ¡Mal!"
"¿Qué mierda es esto? ¿Cómo lograste equivocarte en algo así?"
"Esto es demasiado exagerado."
"¡Pusiste la misma palabra dos veces, idiota! ¡Ni siquiera un niño de primaria se equivoca así!"
"¿Qué no pudiste ser un poco más detallada aquí?"
"Ugh, redactas como la mierda"
"Estas siendo repetitiva."
"¡Que cagada de final!"
-¡Esto es basura!
Para cuando terminó de corregir y lanzar el manuscrito a un lado de la mesa como si no valiese la pena ni tocarlo, fue cuando pudo darse cuenta de cómo la autora de dicho texto ahora se encogía en un pequeño y solitario rincón de la habitación profundamente deprimida, intentando mantener la sonrisa política que le había regalado con la primera critica. –M-muchas gracias por tu trabajo… Lo siento…-
Ahí estaba el Secretario del Consejo Estudiantil, Alias "Capitán" Levi Ackerman, conocido por todos por ser el hombre más frío y cruelmente honesto de la humanidad.
Y este era el comienzo de una "muy agradable y enriquecedora" experiencia de compañerismo laboral.
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"Jasmine Ciel" había comenzado su carrera a los tiernos quince años de edad, siendo su primera obra una novela de apenas tres capítulos titulada "Amor de Media Luna", la típica historia de romance donde dos gemelos, uno bueno (Caín) y uno malo (Damon) terminaban enamorándose de la misma chica (Nanette), con la ligera variante de ambientarse en la época victoriana.
Su segunda obra, siendo esta la que la lanzó a la fama entre las adolescentes entre los doce y los dieciocho años por ser la primera con dibujos de los ambientes y los personajes en algunas páginas, "Entre sueños", relataba la historia de una adolescente (Diana) que se enamoraba de un muchacho que solo se le aparecía entre sus sueños, siendo estos buenos o malos, y que al final, tras muchos eventos divertidos, desafortunados y romanticos, terminaba por conocer en la vida real.
En "Viento bajo los Cerezos", la historia más adulta que la autora había escrito –y que además tenía clasificación de ser para mayores de edad por lenguaje, temática adulta y futuro contenido explicito-, se contaba la historia de Marine, una jovencita de dieciocho años que escapa de unos padres abusadores y una dura infancia para ir a vivir en el hogar de su mejor amiga, en donde al final terminaba por conocer a Lucas, un militar duro y frío que, en lo poco que tenía la recién comenzada historia, solo la trataba con indiferencia a pesar de que, sin que ella se diera cuenta, le mandaba miradas llenas de deseo.
"-¿Creíste que estaba bromeando cuando dije que vendría?- preguntaste en un tono de calma forzada antes de que ella se alejara de ti, sonriendo de oreja a oreja, contagiándote un poco de su alegría y haciéndote sonreír también al mirarla al rostro. Seguía siendo tan hermosa como la recordabas, su largo cabello rojo que caía como un río de lava hirviente por su espalda, su piel blanca y sus ojos castaños que brillaban con dulzura y picardía al mismo tiempo mientras sonreía radiante como un sol. Siempre habías sentido una ligera envidia por ella, jamás podrías ser tan hermosa o genial como ella lo era. –También me alegra mucho verte, Stefany. Ha pasado tiempo.-"
-Debo admitir aun así que estoy algo sorprendido… ¿Tu realmente escribiste estas cosas?
Las horas habían pasado entre correcciones y consejos, y ahora Levi solo estaba semi-recostado en la mesa mientras ojeaba el primer capítulo de "Viento entre los cerezos" (aquel que ella le había firmado el día anterior). No pudo evitar hacerse esa pregunta que había exteriorizado mientras sus ojos se quedaban perdidos en uno de los dibujos que acompañaban al texto, siendo este la imagen de una muchacha bajita y de cabello castaño atado en una cola de caballo que era abrazada por una mucho más alta y con un cabello idéntico al que era descrito en el texto, siendo capaz de escuchar como el sonido de las teclas de la laptop siendo apretadas se detenía por un instante mientras en pensaba en que la persona que dibujaba y coloreaba las imágenes en verdad lo hacía bien.
–Dejando de lado los errores que tienes… Tus historias no son para nada aburridas aun cuando son solo cursis novelas rosa para chicas... Por un momento siento como si me pudiese poner en los zapatos de la protagonista. Creo que tienes talento.- Más grande fue su sorpresa al ver que ella dejaba caer las manos sobre la mesa y le miraba con aquellos hermosos ojos suyos muy abiertos, su rostro comenzando a tornarse de un adorable color rosa antes de apartar la mirada lejos de él, quien ahora se sentía incapaz de dejar de observarla.
Ella… ¿Se había sonrojado por su cumplido?
"¡Ella está sonrojándose por algo que yo le he dicho! Aunque… He notado que cada vez que se voltea a verme, sus mejillas se vuelven algo rojas… ¡¿Eso tal vez significa que ella…?!"
-A-Ackerman-Kun…- tragando duro, ella se encogió un poco en su sitio, removiéndose incomoda de una forma que Levi no pudo evitar encontrar profundamente incitante, comenzando también a sonrojarse aun cuando la escuchó decir su apellido de esa manera que él particularmente odiaba, pero que dicho por ella sonaba como un jodido poema. Sin darse cuenta, comenzó a inclinarse sobre la mesa para acercarse más a su rostro.
-¿Si…?- sin darse cuenta, comenzó a entrecerrar los ojos para verla, sintiendo de pronto su corazón latir con fuerza dentro de su pecho cuando ella soltó un sollozo avergonzado, removiéndose de nuevo en su silla lejos de él.
-Y-yo… Y-yo tengo algo que decirte desde hace algún tiempo, pero… Es muy vergonzoso…- fue la respuesta de ella, su voz volviéndose ligeramente más aguda y temblorosa mientras entrecerraba los ojos, su rostro tornándose cada vez más rojo mientras que él se acercaba cada vez más a ella. Levi empezó a sentirlo, las mariposas en el estómago… ¿Acaso ella estaba a punto de confesarcele?
-Tch… No importa cuán vergonzoso sea, solo dilo de una vez, mocosa.- Su tono de voz en cambio se volvió ligeramente más grave, suave y profundo, acercándose al rostro de ella lo más que la mesa le permitió, estando apenas separados por algunos centímetros de distancia. Los ojos grises/azules le miraron con intensidad mientras los sentimientos que guardaba para ella comenzaban a aflorar… -Apresúrate, tengo poca paciencia…-
"Prometo que compensaré tu esfuerzo después..."
-T-tu… Tu…
Sin darse cuenta se relamió los labios, preparándose para besarla después de que ella se confesara, como desde hacía mucho tiempo deseaba hacer, mientras ella apretaba los puños sobre la mesa y cerraba los ojos con fuerza, tomando aire y abriendo los ojos por fin para mirarlo directamente al rostro.
-¡Tú tienes un moco colgando de la nariz desde que nos encontramos en la escuela!
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Kurenai Lukia.
