Rosalie llevaba poco tiempo viendo a Emmett, aun no se lo quería decir a su familia hasta que fuera algo serio, solo Alice sabia.
Al principio todo iba excelente, Emmett era bueno, tierno, gracioso y caballeroso con ella, todo un sueño pero tiempo después la relación empezó a cambiar, ella siempre estaba preocupada o regañándolo por ser tan infantil y él se sentía con ella cada vez que ella se enojaba así que ella acababa cediendo de nuevo a su infantil novio.
Esta vez Emmett peleo con otro hombre, justo como le prometió a Rosalie no volvería a hacer y además estaba de un humor terrible y fue a los brazos de Rose a que para variar lo consolara pero Rosalie también molesta se había dado media vuelta y se había marchado
Alice y Rose habían ido de compras para tratar de calmar a Rose que seguía triste por su pelea con Emmett y después habían ido a casa de la rubia a ver películas pero la cara de tristeza de Rose seguía ahí no importa cuánto se esforzara Alice por hacerla olvidar la pelea.
Rose había ido a hacer palomitas pero su cara había llamado la atención de su hermano Jasper, amor platónico de Alice
-¿Qué pasa Rose?
Ella no respondió
-ok ok, no me digas pero si sigues con esa cara te saldrán arrugas- dijo Jasper riendo aun que de hecho esto había hecho que el seño de Rose se frunciera mas y corriera a su cuarto, cuando llego Alice estaba al teléfono y en cuanto la sintió entrar puso el teléfono bajo la almohada y le explico -es Emmett, quiere saber por qué estas tan molesta-.
Rosalie enfurecida tomo el teléfono
- ¡quieres saber que me molesta?, que me saldrán arrugas por tu culpa Emmett!