Pucca no me pertenece
Esta es una especie de continuación de "La maldición de Pucca"
El Diario
Una adolescente, pelinegra, cabello suelto hasta la cintura, ojos cerrados, vestida con una camisa de tiritas roja oscura y un pantalón negro y botas negras, estaba en su habitación escribiendo en su diario
Querido diario, otra vez te escribo, han pasado 6 años desde que era una niña pequeña, ya maduré y crecí, al igual que mis amigos
La verdad la persona que amo y yo estamos juntos, desde que recibí aquella maldición, me destruía poco a poco, me enfermaba y comencé a hablar al igual que el, rompió su voto por mí
Lo único que me entristece es que no solo el, también mis amigos, ninguno conoce mi pasado, quiero decírselo pero no se como
No deseo que se sienta mal por mí, sabe que soy un Kunoichi, pero no sabe, como comencé a serlo, incluso para el soy extraña, tengo poderes sobrenaturales, los cuales solo usaré para proteger a los demás, siempre será así y no volveré a cometer el mismo error del pasado
Cerró el diario, salio de su habitación al encuentro de su mejor amiga Ching
-Pucca- llamó la chica y ella sonrió- Los chicos nos esperan ¿Ya estás lista?
-Si- contestó las chicas se fueron
A las afueras de la aldea un chico de cabello negro corto entrenaba, mientras el otro chico cabello negro con una cola pequeña en la parte baja de su cabeza, vestía una camisa negra e igual de negro (no se me ocurre como vestirlo de otra manera después de todo es un Ninja) leía un libro en las escaleras
-Garu, hace tiempo que no practicamos juntos ¿te pasa algo?
-Nada, es sólo que el maestro Soo dijo que últimamente no debo hacer artes marciales, aún no me ha dicho la razón- contestó reabriendo su libro
-¿Y no te parece que últimamente Pucca ha actuado raro?
-Si- volvió a cerrar su libro- Pero si ella no me cuenta nada supongo que está bien, no la presionaré para que me diga algo que no quiere- se levantó- Lo único que conseguiré es molestarla
-Que atento- se burló
-Solo lo dices porque, no has visto el cambio que tuvo desde aquella maldición- apretó los puños y bajó la mirada- Y todo por mi culpa
-Garu, te dije muchas veces que no fue tu culpa- una mano femenina tocó su hombro- Pero aún si te lo digo 100 veces más, no me creerás y te niegas a perdonarte ¿no es así?
-Cada vez estás más silenciosa… Pucca- comentó mientras agarraba su mano que aún seguía puesta en su hombro
-Siempre fui así- rió- Te quiero pedir algo
-¿Qué es?
-Deja de culparte por el pasado, si lo sigues haciendo entonces, yo también lo haré
-¿De qué hablas?
-De que por mi culpa rompiste tu voto de silencio- respondió
El solo se quedó callado, era verdad, aunque el Maestro Soo lo había dicho que ya no era necesario seguir conservando el voto de silencio, tanto como a el le pesaba el recordar que Pucca había recibido esa maldición por el, a ella le pesaba que el rompiera su voto de silencio por ella
-Dejemos de pensar en ese día- propuso y el asintió
-Oigan ¿terminaron de hablar?- pregunto Abyo
-Si- respondieron al unísono
-¿Nos vamos?- indagó Ching, ellos solo asintieron
Llagaron a la feria donde se encontraron a Ring-Ring
-Valla Pucca, tal parece que Garu aún sigue ciego, después de todo sigue contigo- se burló
-Oye deja de…- Ching fue interrumpida
-Está bien Ching, déjalo así… no le demos el gusto de enfadarnos por algo tan infantil- dijo mientras avanzaba y dejaba a todos los presentes muy sorprendidos, Garu solo apresuró el paso para alcanzarla
-¿Te ocurre algo?- indagó preocupado
-Nada, solo me cansé de que Ring-Ring obtenga lo que quiera al provocarme- respondió
-Se que no es eso- dijo- Creo que ya sabes perfectamente que no puedes mentirme, se que algo te ocurre
-La verdad quiero decírtelo Garu, pero no puedo, no se como- pensó
-No te obligaré a que digas algo que no quieres decir y lo sabes- continuó- Quiero que sepas que si algo te ocurre siempre contarás conmigo para lo que sea
-Gracias- sonrío
Soo se encontraba en su templo (como cosa rara), solo que esta vez se encontraba con Tortuga
-Dentro de unos días, se cumplirán 6 años desde que esa niña vino a la aldea- comentó Soo
-Si, la pobre aún recuerda todo lo que le hicieron pasar, cuando era más joven, pobre Pucca- dijo la tortuga
-Todos en esta aldea creen que ella hizo ese voto porque Garu lo hizo, pero ni el mismo sabe la verdadera razón
-Así es, ella rompió ese voto, por esa maldición, pensó que sería suficiente con cargar ese peso, pero fue curada, o eso cree ella- dijo tortuga
-¿A qué te refieres?- pregunta Soo
-A que la maldición verdadera, es el recordar el pasado que tuve- dijo la chica
-¿Así que lo descubriste?- indagó el sabio
-Tuve la sospecha desde un principio- respondió
-¿Aún no se la has dicho al Ninja?- volvió a preguntar Soo
-Si le llego a decir a Garu, que la maldición continúa, solo se sentirá aún más culpable… eso es lo que menos quiero
-Entiendo- dijo el maestro
-Maestro Soo, quería preguntarle ¿de verdad Garu no necesita hacer su voto de silencio?
-Ya no, el máximo honor que se le puede dar a un Ninja es el proteger a la persona que ama, aún si su vida corre un gran riesgo- respondió
Pucca solo sonrió y se fue
-Esa chica es muy dulce- comentó Soo
-Parece increíble que sea una Kunoichi, ella sabe el verdadero significado de ser Ninja, el significado de honor, además de ser quien más comprende a Garu no por tener relaciones sentimentales
-Ella tenía la misma meta que el, pero con el paso del tiempo, se dio cuenta, de que no se podía conseguir más honor del que ya había recibido, solo se estaba destruyendo ella misma- argumentó el maestro- Y esa maldición hace que lo recuerde, y vuelva a tener ese sentimiento de culpa que desde niña la invadió
-Tiene razón al haber decidido parar
Era un día normal para Garu, no tenía nada que hacer, pero por alguna extraña razón sentía que debía ver a Pucca, el día anterior la chica se encontraba muy pensativa
El Ninja salió de su casa con cuidado de caer en alguna trampa, al salir vio que Santa le traía un paquete
-Es de Pucca, dice que lo abras antes de que la veas- dijo el hombre
Garu solo miraba el paquete interrogante, solo aceptó el paquete y entró a su casa, donde lo abrió, encontrando un libro blanco con detalles dorados arriba de la tapa encontró una carta, la cual abrió
Garu no cualquier chica le entrega su diario a alguien, pero yo confío en ti, no me gusta ocultarte cosas como estas, pero no podía, es decir, no tengo el valor de decírtelo a la cara, ya que, no quiero tu lástima, es por eso que te pido que leas mi secreto: Mi pasado
No le cuentes a nadie lo que estás por leer, ni a Ching, Abyo, o a otra persona no digas nada
En estas páginas se encuentra mi pasado y la razón por la cual hice un voto de silencio, la razón por la que estoy en Sooga ahora
Garu al terminar de leer la carta se dispuso a abrir el diario con una curiosidad que nunca antes había sentido
Primer mes (1º Día)
Querido diario:
Hoy es mi cumpleaños y mis padres me regalaron este libro en el que escribo en este momento, hoy cumplí 4 años
Yo no soy como las otras chicas mi inteligencia (según dicen todos) es muy desarrollada, pues no solo escribo como una adolescente, también tengo una fuerza inexplicable (que ni yo misma entiendo)
Creo que me desvié un poco de mi objetivo quiero contar que mis padres me inscribieron en clases de defensa personal, apenas ha pasado 1 mes y ya estoy en cinta negra, el sensei dice que tengo dotes para ser una Ninja de alto nivel, el me encomendó con su maestro, quién entrena Ninjas desde hace mucho tiempo, el dice que es el primo de un tal Maestro Soo (no se quién es), mañana comenzaré un duro entrenamiento
Mis padres dicen que es un gran honor y un gran privilegio haber sido escogida por el gran Maestro de las artes marciales o mejor dicho, como dice el Sensei, "El Rey de los Ninjas", supongo que es un título un poco exagerado, bueno eso no lo sabré hasta mañana. Veré que pasa mañana
He de admitir que estoy algo ansiosa y nerviosa, pero supongo que en el entrenamiento necesitaré estar muy concentrada, así que respiraré y me calmaré
-Hora estoy más curioso por saber el resto pero como este diario fue escrito una página cada mes yo leeré una página cada día- dijo cerrando el libro- Mío- llamó
El gato negro no tardó en aparecer y quedarse dormido junto a su amo, Garu solo sonrió, el paso de los años no cambió en nada al gato Ninja, aún si su amo cambió el no
-Buenas noches Mío- dijo antes de quedarse profundamente dormido
-Pucca ¿Estás segura de querer contarle todo a Garu?- preguntó Ho la chica solo asintió
-Pero sabes que Garu es inestable emocionalmente- intervine Linguini
-Lo sé, a veces no sé en que está pensando, al igual que cuáles serán sus reacciones, pero aún así… Yo confío en el- respondió
-Bueno tú lo conoces mejor que nadie Pucca, y es más que obvio que sabes lo que haces- dijo Tío Dumpling
Dada escuchó todo, solo observó con preocupación a Pucca, la chica se dio cuenta de su presencia y supo que estaba preocupado por ella, Dada era uno de los pocos que conocía su historia, sabía que Garu se llevaría muchas sorpresas al leer ese diario que nunca le mostró a nadie
-Está bien Dada- calmó Pucca
-Supongo que debo creerte y que sabes lo que haces- respondió
-Gracias- sonrió
Pucca y Ching paseaban por la aldea, como siempre de compras, las tiendas prácticamente se quedaron sin nada, pues no solo las chicas estaban comprando, muy a pesar de Pucca y Ching, también se encontraba Ring-Ring, quién nuevamente te estaba burlando de todos los compradores, detuvo su labor al ver a Pucca paseando de tienda en tienda
-¿Qué te parece esa chaqueta?- señaló Pucca un chaqueta de cuero marrón oscuro
-¡Que buen gusto Pucca!... estoy segura de que a Abyo le va a gustar- sonrió
-Querrás decir ¡Qué pésimo gusto!- interrumpió
-¡Vaya! Parece que vino alguien indeseado- dijo Ching
-¿Indeseado?... ustedes son las que son indeseadas- respondió- Además cualquier intento de lucir más hermosa será en vano- rió- Sobre todo tu Pucca
-¿Qué te da derecho a decir algo así sobre Pucca? Plumero oxigenado- criticó Ching
-¿Plumero? ¿Qué vas a hablar tú? Gallinero ambulante- volvió a reír- ¿Qué mas da? Siempre será el mismo desastre Ching, y peor es Pucca- Ching se enojó más- No se que les ven Garu y Abyo- rió
-¡¿Podrías callarte de una buena vez?- exclamó Pucca- No trates de provocarme porque te irá muy mal… ¡Termina de madurar Ring-Ring!... ¡Por eso no obtienes lo que quieres!... ¡Por eso Dada se arrepintió de enamorarse de ti!... ¡¿Cuándo es que piensas soltar ese ego que a todos nos molesta?... Te pido que dejes de intentar denigrar a todo aquél que se te cruza en tu camino- terminó de decir
Pucca jaló de la manga a Ching y dio unos cuántos pasos, cuando sintió que algo se aproximaba, en ese momento empujó a Ching lo más lejos que pudo
-¡Pucca!- dijo Ching observando que su amiga había aguantado unas estrellas de metal
-Esto es…- observó las estrellas- Una advertencia
-Pucca- dijo Ching
-Parece que fallaste- dijo una misteriosa mujer con una capa que cubría su cabeza
-Lo siento señora- dijo un sirviente- Esa chica sintió aproximarse esas estrellas
-Digno de una Kunoichi, pero no es solo por eso, esa chica tiene un poder especial, lo cual, la vuelve peligrosa, más de lo que debería ser- respondió- En el siguiente ataque, deberás hacerlo con más precaución
-Si señora- dijo el sirviente y se marchó
-Destruiré todo lo que amas- rió la mujer
Segundo mes
El entrenamiento ha sido más suave de lo que pensé, el maestro dice que yo poseo habilidades impensables para cualquier persona normal, al principio el me desafiaba diciendo que yo no era capaz de hacer muchas cosas, pero al final no me decía nada, ha subido el nivel de entrenamiento desde los últimos días, incluso me dijo en privado que soy la mejor de sus estudiantes (cosa que no le creo)
Hay una chica en particular en mi clase, se llama Ring-Ring, es muy egocéntrica y parece que me odia por algo, y no se que es, a mi primo Dada le gusta, pero no creo que sea una buena idea que intente que ella sea su novia, no tengo celos pero hay algo en ella que no me gusta no se que es
Mañana tendré que luchar con ella, no se si pueda, pero trataré de estar tranquila, además, mis padres quieren que yo gane, es para ganar algo que se llama "Honor", no sé cuál es ese concepto, aún hay cosas que desconozco de las artes marciales, pero mis padres de verdad quieren que yo gane esa pelea
Mis tíos suelen decir: No importa quién gane, lo importante es dar el mejor esfuerzo, y eso haré, daré lo mejor de mí para enorgullecer a mis padres
-¿Pucca conoce a Ring-Ring desde los 5 años?- preguntó asombrado mientras cerraba el diario- Es una sorpresa más- observó el cielo- Tengo un presentimiento de que esto apenas comienza- pensó en Ninja
"CHING"
Estoy molesta con al idiota de Abyo, caer tan bajo al dejarse seducir por ese plumero ambulante.
Ayer vi como esa estúpida le coqueteaba y el muy imbécil se dejó, claro como nadie en las últimas semanas le anda haciendo caso, se deja seducir por ella
La chica caminó por toda la aldea notablemente molesta, nadie quería acercarse, Ching se encontraba furiosa con Abyo y con Ring-Ring
Solo un alma valiente se atrevería a acercarse, al parecer en la aldea nadie era lo suficientemente valiente, salvo una persona
-Ching- llamó una voz preocupada
-Pucca, ¿Qué sucede?- dice intentando recuperar la calma
-Eso te lo pregunto a ti- respondió
-Abyo- dijo mientras recordaba el porque de su enfado
-¿Qué pasó?- preguntó
-Ayer estaba entrenando junto con Abyo… entonces llegó Ring-Ring halagándolo, el muy idiota le creyó cada palabra que decía incluso fueron a comer fideos y se olvidó completamente de mi- dijo entre dientes
-Iré a hablar con Abyo- dijo ella- ¿Sabes dónde está?
-Entrenando con mi papá- respondió- Garu está con el
No muy lejos una chica escuchó toda la conversación de ellas
-Creo que haré una visita- rió mientras se marchaba lo más rápido que pudo
Una figura con pasos ágiles entrenaba arduamente, al mismo tiempo (como cosa rara) presumía de todos sus movimientos
-Abyo ¿quieres volver a perder el rostro?- preguntó Garu mientras leía un libro a lo que su amigo negó con la cabeza- Entonces no presumas
Las puertas se abrieron estrepitosamente dejando divisar a Ring-Ring quien rápidamente se acercó a Garu
-Garu ¿Qué haces?- preguntó acercándose a el
-Leo- respondió frío mientras se alejaba
-Que inteligente eres- sonrió mientras se acercaba más a el
-Ajá- respondió volviéndose a alejar
-Oye Garu… ¿Quieres ir comer fideos conmigo?- preguntó
-No- dijo mientras cerraba el libro
-¿Por qué no?- preguntó enojada
-Pucca es mi novia, yo no te tolero y eres demasiado insoportable para todos- respondió
-¡Pero yo soy más hermosa que ella!
-A tu parecer, no al mío
-¡Ring-Ring!- gritó una voz recién llegada
-Pucca- dijeron Garu y Abyo con miedo
Pucca y yo habíamos llegado apenas hace unos minutos desde que Ring-Ring empezaba a acercarse a Garu, pero mi amiga no interrumpió hasta ahora, habíamos observado como Garu muy fríamente rechazaba a esa bruja oxigenada, sabía que Pucca por un lado estaba feliz de que Garu no cayó como Abyo en el juego de esa descarada, pero se que la tormenta apenas comenzaba
Pucca corrió hacia Ring-Ring, rápidamente la agarró fuerte del cuello de su vestido y la jaló hasta salir de mi casa
En ese momento supe que habría una fuerte pelea, Pucca estaba notablemente furiosa, y cuando ella está así rompe todo lo que se encuentre en su camino, y estoy segura de que no quiere dañar todo lo que se encuentra en mi casa
Garu, el idiota y yo salimos apresurados, queríamos cerciorarnos de que Pucca con su mal humos destruyera toda la aldea de Sooga, las encontramos una al frente de la otra mirándose fijamente
-¿Estás molesta Pucca?- rió la bruja esa
-Cruzaste la línea al coquetear con el novio de mi amiga… pero con Garu…
Pude ver como Pucca subía la mirada, su semblante era furioso pero a la vez tan calmado, era tan fría pero a la vez el fuego que desprendía su aura quemaba si te acercabas, una mezcla muy extraña pero algo se me vino a la mente… esa no era Pucca… más bien era…
-Kunoichi- escuché decir a Garu, el cuál se hallaba tan sorprendido como Abyo y yo, muy cierto era una auténtica Kunoichi
En ese instante veo como Pucca se pone en posición de ataque y a la vez defensiva, en ese momento la furia de su rostro se marchó, el fuego que desprendía también, solo dejó algo insólito en su lugar, una Pucca que nunca conocí, fría y serena
-Te pasaste de la raya- la escuché decir completamente seria
Ring-Ring se puso como siempre lo hacía cada vez que luchaba contra Pucca, su atuendo y poderes sobrenaturales lanzó un par de golpes hacia Pucca la cual no se movió, me asusté al ver esas cintas estrellarse contra ella y una nube de polvo salió disparada
-¡Pucca!- gritamos Abyo y yo
-Pucca es demasiado débil- rió Ring-Ring
-No le hizo nada- nos susurró Garu
La nube de polvo se despejó dejando ver a Pucca, quien sostenía con una espada que sacó de quién sabe dónde, enterrada en el suelo
-A pesar de conocernos desde los 5 años, deberías haber aprendido algo más que solo lanzar golpes y gritar- dijo fría y eso me sorprendió
No sabía que Pucca conociera a Ring-Ring desde hace tiempo
Ring-Ring volvió a lanzar un golpe el cual fácilmente esquivó saltando necesariamente alto, Ring-Ring hizo su canto (grito) el cual hizo volar varios árboles, uno de ellos voló hacia Pucca, el cuan utilizó para callarla estampándolo a su ENORME boca
-Diosa del viento, según dice el gran maestro- veo como ella levanta la espada apuntándola hacia ella- Demasiado débil
Velozmente Ring-Ring al terminar se sacar ese grueso árbol de su boca lanza más de 100 golpes al mismo tiempo, pero ya no veo a Pucca, no está en su lugar
-¡¿Qué?- grita Ring-Ring
-No deberías dale la espalda a tu enemigo- escucho decir a Pucca detrás de Ring-Ring, ella solo se voltea, Pucca aprovechó esa oportunidad para darle un golpe en la cara estampándola contra el suelo
-¡¿Cómo puedes hacerme esto?- volvió a gritar
Notablemente observé como mi amiga perdió por completo su calma y volvía a ser la de antes
-No intentes siquiera de acercarte… a Garu o a Abyo- dijo dándole la espalda
-¿O qué?- retó
-Tu puedes escoger… te mando a volar con un tornado… o… termino mi trabajo como Kunoichi… y créeme no querrás conocerme así- se dio media vuelta mostrando esa frialdad que por unos segundos vi antes- Y no es una amenaza… es una promesa- volvió a darse media vuelta, observé a Garu y me dí cuenta de que no estaba para nada sorprendido, el se dirigió hacia Pucca y le dijo algo al oído lo cual ella solo asintió
Tercer Mes
Hoy escribiré lo que pasó en la competencia
Esa niña, utilizó sus poderes para hacerme daño, solo recibí algunos raspones pero eso es todo, mis padres estaban animándome a continuar aún si me rompía todos los huesos, eso lo creí exagerado porque no me podría mover
Como pude, puse en práctica lo que me enseñaron, pero cuando me di cuenta el combate había terminado con mi victoria, recuerdo que el maestro habló conmigo y me preguntó que si yo sabía lo que hice, le respondí que solo había puesto en práctica todo lo que me enseñaron
El me respondió que eso estaba bien, pero, que yo traía el semblante más frío que nunca antes había visto
Sinceramente recuerdo cada movimiento que hice pero cuando me concentré no sentía mas dolor de los golpes o raspones que me hizo ella, estaba en blanco, solo miraba a mi oponente
Ya ha pasado 1 mes de mi combate con ella, pero he tenido muchos oponentes más, a veces hasta 5 en un solo día, y es el mismo resultado gano pero al final me siento insegura, el maestro me entrena ahora en un templo, hay muchas trampas escondidas en ese lugar, las cuales me topo cada día, mis padres no me dicen nada al respecto de ser Ninja, pero todo el tiempo organizan batallas para mí, se muy poco sobre las artes marciales pero estoy segura de que ganar combates organizados no te hace un Ninja
Se perfectamente que ser Ninja requiere mucho mas que solo trofeos de combates o un honor que no existe en esos combates
Cerró el libro mientras pensaba en lo sucedido ese día
-Desde que leo este diario se que Pucca no quiere luchar con nadie, por eso hoy le pregunté si estaba bien ella solo asintió pero no hizo más nada, después se marchó- se acomodó en su cama- Desde pequeño a mi también me animaron a convertirme en Ninja… pero lo decidí cuando mi familia por un error perdió el honor- cerró sus ojos y se quedó dormido
-Hoy volvió a pasar- pensó la pelinegra, quien se encontraba acostada en su cama boca abajo- Preocupé a Garu con esa actitud, no me gusta preocupar a lar personas y mucho menos a el… volví a ser la de antes
Tocaron la puerta, la chica indicó que pasara, vio a un chico calvo con los ojos cerrados completamente relajado
-Soso- dijo la chica- ¿Qué haces aquí?
-En este momento necesitas hablar con un pariente- respondió
-Siéntate
Soso le hizo caso, se sentó en una silla que se encontraba cerca de ella
-Primero que nada ¿Cómo supiste lo que pasó?
-Esta mañana observé que tuviste una "pequeña" pelea con Ring-Ring- dijo mientras se cruzaba de brazos
Pucca no se sorprendió ante tal acción, pues, desde hace algunos pocos años Soso empezaba a cambiar en todos los sentidos, tanto fue el cambio que ya no era el chico de amor y paz, bueno no tanto, aún seguía siendo pacifista, pero ya no era tan extremista y a la vez un poco desesperante (en mi punto de vista)
-Es por la misma razón desde que llegué a esta aldea- respondió imitando el gesto de Soso
-¿Y por esa razón estás dudando ahora?
-Si- mintió
-No creo que sea por eso- suspiró- Ya debes saber que no me puedes mentir, al menos no ahora
-Si puedo que me hayas descubierto es otra cosa
-Fue por lo de la Kunoichi ¿verdad?- asintió- Dejaste de se así hace mucho tiempo, no debes echarte para atrás
-No lo hice a propósito, Soso tú debes saber que es esa maldición- el chico se sorprendió
-Pero esa maldición la había eliminado Garu
-No… Garu solo eliminó aquello que enfermaba y destruía mi cuerpo, pero esa maldición afecta mis recuerdos y malos momentos
-¿Aún no le has dicho nada?- preguntó
-No… el aún se siente culpable por eso- respondió- No deseo que se sienta peor al saber que continúa
-Entiendo- dijo observando la ventana
-Hay algo más- intervino después de unos segundos de silencio
-¿Qué sucede?
-Debo hablar con Dada y contigo… por ahora
-¿Sobre qué?- preguntó
-Solo llama a Dada- dijo en tono autoritario
Pasaron unos minutos cuando el rubio apareció
-Lamento haber tardado… tenía que lavar platos… ¿Sobre qué nos quieres hablar?
-Sobre esto- dijo mostrando las estrellas Ninja
Los chicos observaron las estrellas detenidamente, las cuales reconocieron perfectamente
-Eso es…- dijo Soso
-Una advertencia- completó Dada serio- Son las mismas que atacaron a nuestros tíos Soso
-Debía estar segurar de mis sospechas… y tal parece que no me equivoqué- volvió a observar las estrellas
-¿De dónde las sacaste?- preguntó Soso
-El día en que salí de compras con Ching, atacaron de sorpresa, pude evitarlo pero si hubiera tardado un poco más Ching estuviese en el hospital- respondió
-Esas son las que contienen picos ocultos ¿no es así?- preguntó Dada (no tengo ni la menor idea si existen)
-Si… con estas mismas estrellas atacaron a mis padres antes de destruirlos
-¿Crees que quienes atacaron quieran destruir lo más cercano a ti?- volvió a preguntar Dada
-Si- respondió- Pero debo hablar con el Maestro Soo… si el piensa lo mismo entonces no importa lo que me pase los protegeré- con lar estrellas en la mano aplica con un dedo fuerza sobre un punto, destruyéndolas por completo- No permitiré que pase lo mismo otra vez
Soso coloca una mano en su hombro, Dada la coloca en sus manos casi imitando el gesto de su hermano
-Nosotros te apoyaremos y te ayudaremos en lo que sea- sonrió Soso
-Puede resultar muy peligroso- advirtió
-No importa- dijo Dada- Además nosotros podemos parecer y podemos actuar como unos verdaderos torpes… pero sabes bien que no lo somos
-Si, lo se… gracias- sonrió
Ching se encontraba en su casa como siempre estaba entrenando junto a Abyo, a quien no le dirigía palabra alguna, el chico se dio cuenta de que estaba molesta por lo que había sucedido con Ring-Ring, así que decidió no molestarla hasta que se tranquilizara, pero al no era tan paciente o mejor dicho no lo era
-¿Ya te tranquilizaste?
Ching solo suspiró
-Vamos no puedes enojarte conmigo para siempre
La chica recordó el motivo de su enojo y pateó con fuerza el saco de arena de boxeo y sin querer se desprendió de su base y fue a dar en la cara de Abyo, la chica solo se dispuso a irse
-Espera Ching- dijo el chico mientras se sacaba el saco que se encontraba encima de el
-¿Qué quieres Abyo?- dijo cortante
-Saber el motivo de tu molestia
-¿Para qué preguntarme si ya lo sabes?- dijo la chica- No eres más que un idiota- la chica se marchó
Alrededor de las 2 de la tarde Pucca se encontraba paseando por la aldea, parecía estar buscando algo o más bien a alguien
-Pucca- llamó una voz
-Hola Ching- respondió
-¿Qué haces?- preguntó
-Busco a Santa ¿no lo has visto?
-Debe estar en su casa supongo
-Ya fui allá- dijo
-El está en el templo del maestro Soo- intervino una voz
-Gracias oficial Bruce
-De nada… Cambio
Pucca se fue dejando a Ching y al policía
-Abyo últimamente ha estado deprimido… Cambio- comentó el policía- ¿Acaso paso algo?
Ching solo suspiró
-Creo que fui demasiado dura con el- respondió- Después de todo el ha estado acostumbrado a que siempre lo sigan
-El puede parecer algo irritante a veces pero es un buen chico… Cambio
-Eso ya lo se… de todas maneras el debe saber de alguna manera que muchas de las cosas que hace me lastiman, y ahora estoy dispuesta a hablar con el
-Me encargaré de decírselo… Cambio
-Gracias
El Maestro Soo como de costumbre se hallaba en su templo, hablaba con Santa sobre tonterías en ese momento llega Pucca interrumpiendo la charla
-Pucca… ¿Qué te trae por aquí?- preguntó el maestro
-Vine a hablar con ustedes- respondió
-¿Cuál es el asunto?- preguntó Santa
Pucca solo lanzó una de las estrellas Ninja hacia Santa y el Maestro Soo, las cuales agarraron sin ningún problema
-Estas estrellas…- dijo Santa sorprendido
-No termines esa oración… por favor- pidió la chica con un gesto de dolor
-¿De dónde las sacaste?-preguntó Soo
-Hace poco me enfrenté con Ring-Ring en la aldea pero no llegó a nada serio, cuando estuve a punto de marcharme sentí que algo se acercaba, efectivamente pude divisar estas estrellas acercarse a mi amiga Ching, la pude empujar a tiempo entes de que saliera lastimada
-¿Estás diciendo que atacaron a tu amiga?... Eso quiere decir…- dijo sorprendido Santa
-Una advertencia- terminó de decir Soo
-Maestro Soo… sé que su primo, es decir mi maestro, no está en condiciones para enseñarme más movimientos de defensa y ataque, es por eso que vine- respondió- Linterna roja es el siguiente en la lista después de Ring-Ring, necesito su ayuda
-Pero eres una Kunoichi Pucca, ya debes saber todo- intervino Santa
-Quiero hacer que mi defensa sea la mejor- respondió
-Pucca ¿esto es por honor?- preguntó Soo
La chica solo se quedó callada unos segundos, Soo creyó que era por esa razón que la adolescente, había ido a ese templo en el cielo
-No- respondió
-¿Entonces por qué?- cuestionó
-Por amor- dijo- No quiero que las personas que amo sufran lo mismo que mis padres, ni la familia que me queda, ni mis amigos, ni tampoco mis enemigos- respondió
-Entonces puedo ayudarte- dijo Santa
-Debo hacer que ese niño vuelva a entrenar- pensó Soo- Aumentaré la vigilancia en la aldea para evita que algo así vuelva a pasar
-Gracias Maestro Soo
Pucca se fue, acordó que al día siguiente comenzaría de nuevo un duro entrenamiento o eso intentaría Santa
-Dime algo- intervino Santa después de un largo silencio
-¿Qué?
-¿Por qué le prohibiste a Garu que dejara de entrenar por unos días?
-Mañana Pucca va a cumplir 7 años de haber llegado a esta aldea, en estos momentos la maldición que recibió por proteger a Garu, está haciendo efecto al hacerla recordar los momentos más dolorosos que tuvo cuando era una niña, quiero que ese joven esté a su lado, pero ella parece que se dio cuenta e hizo que se alejara por un tiempo, al menos lo hizo sentimentalmente
-Entiendo- dijo Santa- Ella quiere protegerlo- el maestro solo asintió
Cuarto año
No escribo desde hace mucho, pero la razón es por que había estado muy atareada
Hoy me animé a hacerlo porque me cansé de ser tratada como un objeto de gloria
Mi cuerpo esta herido y exhausto, ya hace 2 años que me convertí en una Ninja superior a otros una llamada Kunoichi, pero ¿a qué precio?, ¿acaso lo hice por ese concepto llamado honor?
Desde que cumplí 6 años cuando mi consciencia me lo permitió, he sentido que mis padres me han estado obligando a algo que nunca quise, eso ya lo confirmé
Me han obligado a lastimar a otras personas dolo por su propio bien, y no han pensado en mí, ya no quiero hacerlo más y no lo haré, me niego
Comprendí que no puedo recibir más honor del que ya tengo, me siento culpable de lo que hice por ser Kunoichi, no puedo continuar, me han enviado a espionajes de un muy alto peligro haciendo que terminara terriblemente herida
Ahora sé lo que significa honor, no es el heroísmo ni el propio bien común, se trata de dar lo mejor de ti para alcanzar el bien no solo en tu familia, si no también en todos los que te rodean, pero lo entendí muy tarde
Tras estar todo el día en un templo meditando, legué a casa, lo único que encontré fueron escombros sobre lo que se hacía llamar hogar, una estrellas Ninja con unos picos ocultos, encontré 3 cuerpos, 2 de ellos se hallaban sin vida, y el otro con graves heridas
El hospital se llevó al sobreviviente pero está en un estado muy delicado
Ese día mis padres murieron, y mi maestro fue gravemente herido
Desde este día prometo hacer un voto se silencio, por la vida que perdí, volveré a hablar cuando la recupere en otro lugar, en mi nuevo hogar
-Pucca- susurró cerrando el diario- ¿Por qué a pesar de tu tristeza actúas tan alegre siempre?- no aguantó más la intriga y volvió a abrir el libro
Quinto año
Hace 10 meses que cumplí 10 años, a pesar de lo que pasó el año pasado decidí cambiar, ser la persona que soy realmente, decidí irme con mis tíos y mi primo Dada a una aldea llamada Sooga, donde vive mi otro primo Soso, conocí a diferentes personas
Ching es una de las personas que conocí, es una niña muy dulce y cariñosa, y es una de mis mejores amigas
Abyo es un poco extraño, pero es bueno, le gusta ser el centro de atención de todo el mundo
Garu, el muy serio y reservado, no habla y se la pasa todo el día entrenando junto a Abyo, me encanta interrumpirlo en sus entrenamientos es muy divertido, he de admitir que estoy enamorada de el, puede ser que sea una niña pero no soy tan pequeña para saber que me gusta estar a su lado
Me reencontré con Ring-Ring, pero ahora es diferente, no la odio ni me desagrada pero hay veces en las que me saca de quicio
Hay muchas personas más a las cuales respeto, por ejemplo: Santa, El Maestro Soo, entre otros
Mi vida en esta aldea apenas comienza y quiero vivir sin remordimiento alguno y haré todo lo que pueda por proteger a los que amo si algo llegase a suceder
Garu sonrió al ver lo último que la chica había escrito (la primera lectura del diario al comenzar este fic)
El chico salió de su casa en búsqueda de la chica
-¿Cuál es el próximo plan?- preguntó una mujer
-Quitaremos del camino a todos sus seres queridos- dijo el sirviente
-¿Hablas de hacerlo igual que con sus padres?
-No, los secuestraremos para atraerla hasta aquí- dijo el sirviente
-Mucha suerte Cheng
-¿Hablas en serio?- preguntó
-Si… Cambio- respondió- Ella dice que quiere hablar contigo… Cambio
-No puedo creerlo, Ching es grande- dice con lágrimas en los ojos
-Mas te vale repetirlo si quieres que te perdone- interviene la chica
-¡Ching!- dijo Abyo lanzándose contra ella emocionado
Ching estaba recargada en una columna de concreto se hizo a un lado haciendo que Abyo se estrellara
-Los dejo solos… Cambio- dijo el oficial mientras se marchaba
-¿Por qué eres tan mala?- dijo sobándose la cabeza y con lagrimitas en los ojos
-¿Y todavía preguntas?... eres más idiota de lo que pensé- respondió
-Lamento mucho dejar que Ring-Ring me sedujera… yo no tenía ni idea de que te molestaría tanto
-Abyo… no se por donde comenzar- dijo ella dándole la espalda- En ese momento éramos muy unidos como novios, sabíamos todo acerca del otro, pero lo que no sabes es que… muchas de las cosas que haces me lastiman como no tienes idea
-Lo lamento, y sé que tienes razón al no querer perdonarme- bajó la mirada
-Ya lo hice- se dio la vuelta y sonrió- Siempre lo hago
-¿Qué?
-Solo quería que entendieras, que puede suceder si sigues haciendo lo mismo una y otra vez
-Eres mala- dijo el chico
-Lo sé- rió
Un chico se encontraba mirando las estrellas en ese momento, llega una chica muy agitada, se notaba que había corrido
-¿Estás bien?
-Si- respondió sonriendo
-Pero el mensaje…
-Te escribí que Tobe me estaba atacando precisamente para que vinieras rápido- amplió su sonrisa
-Garu tu no eres de hacer bromas… ¿Ocurrió algo?
-Terminé de leerlo- dijo mientras sacaba el diario- Has sufrido mucho… Pucca
-No quiero tu lástima- susurró
-No es lástima es respeto- dijo mientras la chica se sentaba a su lado
-¿Respeto?
-Es digno de admirar, que aún teniendo ese pasado, logras sonreír, ser una buena persona y aún así, guardarte ese dolor, sin siquiera compartirlo con alguien- explicó- Me alegra que me hayas confiado algo tan importante
-Garu- susurró- Pensaba que reaccionarías de otra manera al saberlo
-¿Qué otra manera?
-Me refiero a que te molestarías por no decirte nada, o simplemente te causaría lástima
-Ocultar secretos no es malo Pucca, todos tenemos secretos incluso el maestro Soo
-¿Y tu?
-También
-¿Cómo cual?
-La razón de mi voto de silencio
-Entiendo- dijo mientras observaba el cielo- Me gustaría dejar todo en el pasado
-Yo conozco una manera
-¿Cuál?
-Rómpelo- dijo mientras le daba el diario
-¿Hablas en serio?
-Tu misma lo dijiste yo no soy de hacer este tipo de bromas
-Lo se- suspiró mientras tomaba el diario- No se si lo pueda romper
-Si puedes, además tienes habilidades sobrenaturales
-Si lo dices así suena fácil- comentó con una gotita en la cabeza
-Tienes que saber que esta es la única manera de poder liberarte de tu propio dolor
CONTINUARÁ…
¿Qué les pareció? Dejen comentarios por favor
¿Qué va a pasar en el siguiente cap?
¿Pucca romperá el diario?
¿Cuál error cometió la familia de Garu para haber perdido el honor?
Lo más importante ¿Quién es la mujer misteriosa?
¿Quiénes son realmente Soso y Dada?
Este es un regalo especial para mis dos queridas amigas yaoistas Yumi y Drupi repontenciada (es contigo Andreina) felicidades por su graduación 26/07/11 (aunque falta mas de una semana) y mucha suerte en lo que sea que vayan a hacer
Cuídense