N/A: Vale, yo no iba a hacer esto. Yo tenía escritas estas cositas para mí y no pensaba subirlas (para no ser pesada más que nada xD), peeeeero soy muy fácil de liar para estas cosas así que aquí os traigo una serie de relatos de uno o varios capítulos sobre personajes o hechos concretos que no aparecen en "Kilómetro cero". Y, para empezar (y como hoy han anunciado los concursantes de OT 2018) pues os traigo un one-shot en el que los chicos (menos Albus y Alice por razones geográficas obvias) ven la final ;)
Al final del capítulo os dejaré lo que opina cada uno de ellos sobre el programa ;)
Espero que os gusten :D
Operación Triunfo
―¡Venga, rápido!
―Tranquilo, que todavía queda casi una hora para que empiece. ―Lily puso los ojos en blanco y pasó al piso de su hermano, donde ya estaba todo preparado.
―Lizzy y yo llevamos con las canciones en bucle desde las siete de la tarde ―contestó él―. Creo que nos hemos repasado ya todas las canciones guays.
―Pero La bikina la volvéis a poner, ¿eh?
―Que sí, pesada.
―Yo no sé por qué he venido. ―Scorpius, cruzado de brazos, resopló―. Os vais a poner todos histéricos por una tontería de concurso.
―Oye, que está muy bien ―replicó Rose―. Aunque dudo que gane mi leona. Ojalá.
―Tu leona va a quedar la quinta ―replicó Lizzy―. Es que no sé cómo ha llegado a la final.
―¿Y quién debería estar? ¿Cepeda? Porque te recuerdo que se fue a casa hace unas cuantas galas. Y menos mal porque se cargó a gente muy buena.
―Sería por algo, ¿no?
―Venga, chicas, no empecéis con eso otra vez. ―James suspiró―. Entráis más a valorar cosas personales que musicales.
―Porque en eso se basa esto, ¿no? En tener afinidad. ―Su novia resopló―. Un artista es más que una voz. Tú deberías saberlo, cariño. Si no empatizas con el público…
―Es que le tienes manía a todos los que no son de ese team Friends que os habéis inventado ―insistió la pelirroja―. Pero Miriam no puede quedar quinta. No puede quedar por debajo de Ana.
―Oye, con mi Bikina nada, ¿eh?
―Lo que está aquí claro es que Amaia y Aitana van a quedar primera y segunda. ―Theo se sentó en el sofá y cogió un puñado de patatas de un cuenco―. Los demás puestos, no tengo ni idea.
―Estoy hasta nerviosa, os lo juro. ―Lizzy se mordió el labio.
James sonrió se sentó a su lado y besó su hombro.
―«Has colgado tu bandera has traspasado las fronteras. Eres la reina. Siempre reinarás…»
―Te quiero. ―Lo besó y acarició su mejilla―. ¿Pero cuándo decías que igual coincidías con Cepeda? ¿No ibais a ir a algo que…?
―Estás más enamorada de él que de mí. En serio, Elizabeth.
Se levantó y ella rió, tiró de su brazo y lo acercó a ella para poder besarlo.
―Solo quiero tu canción, cariño.
―Por favor, no reabramos ese debate. ―Scorpius bufó―. Bastante hemos tenido que aguantarlo estas últimas dos semanas.
―Es que Lo malo debería ir a Eurovisión ―dijo Rose.
―Lo malo es una cutrez ―replicó Lizzy.
―Y Tu canción una ñoñería heteropatriarcal.
―Si este concurso no termina con vuestra amistad, nada lo hará. ―El rubio puso los ojos en blanco―. Que haya paz, por favor. ¿Podemos pedir la cena?
―Será lo mejor. ―Lily suspiró y miró a su hermano―. ¿Y el menú del chino?
―Aquí. ―James lo cogió de la mesa y se lo pasó―. En cuanto os decidáis, pedimos y así llegará para cuando empiece la gala.
―¡Buah, qué pasada el trombón! ―Theo silbó―. ¡Alfred es un genio!
―Pues a mí me ha decepcionado. ―Lizzy suspiró―. No sé, me esperaba un poco más.
―Ya, quizás no es de sus mejores actuaciones. ―James suspiró y cogió un poco de pollo del recipiente que la morena y él compartían―. Pero tiene mucho mérito y la música en directo siempre es un plus. No es fácil tocar y cantar sabiendo que tanta gente te está escuchando, Lizz.
―Ya, si lo sé, pero es que… me esperaba algo más.
―Esto es culpa de Que nos sigan las luces. ―Lily suspiró―. Es una pasada de canción. No me la quito de la cabeza, os lo juro.
―Doy fe. ―Rose puso los ojos en blanco―. El otro día me desperté para ir a la oficina y me la encontré cantándola en el baño a pleno pulmón. A las siete de la mañana.
―Oh, así que eso era lo que se oía desde el piso. ―Theo rió y le tiró una patata―. Yo creía que alguien se había dejado la radio puesta toda la noche y resulta que eras tú siendo feliz a las siete de la mañana.
―Una buena hora para ser feliz, ¿no?
―No para despertar a tus vecinos cantando una canción tonta de Operación Triunfo ―masculló Scorpius.
―A ver, bonito, si no te gusta el programa, ¿para qué coño has venido? ―Lily lo fulminó con la mirada y se cruzó de brazos―. Aguafiestas.
―Déjalo, Lils. ―Rose se agarró de su brazo y sonrió―. Es como el Grinch.
―¡Oye!
La pelirroja rió y lo besó y él le pasó un brazo sobre los hombros y la abrazó. Solo hacía aquello por Rose. Y por la comida china.
―¡Diva, reina! Joder, es que es maravillosa. ¡Ana, te quiero!
―Lily, por favor, respira. ―James rió y negó con la cabeza―. Ya sabemos que amas a Ana.
―Es que es maravillosa. Oye, me la tienes que presentar, ¿eh? ¡A ver si os hacéis famosos de una vez y empezáis a conocer a gente interesante!
Apoyó la cabeza en el hombro de Lizzy y sonrió.
―Oye, cielo…
―Si vas a decir algo en contra de mi Bikina, mejor cállate, Theodore ―lo interrumpió.
Todos rieron y el moreno hizo gesto de cremallera sobre los labios.
―Lo que Theo quiere decir, pero no se atreve, es que estás sobrevalorando la actuación.
―Pues bien que Ana está ahí y Agoney no ―replicó, molesta.
―Pobrecita, déjala tranquila ―intervino Lizzy, abrazando a su cuñada.
―Oye…
―Si vais a empezar a pelearos, os juro que os echo del piso ―intervino James―. Venga, que no me quiero perder la gala.
―Mandón. ―Su hermana puso los ojos en blanco―. Ya sé por qué vuestro gato es tan arisco.
―No metas a Mr. Knightley en esto o dejaré de defenderte, Lils.
―Bueno, vale… Pero me odia.
Lizzy negó con la cabeza, pero la abrazó. Lo mejor sería seguir viendo la gala.
―Joder, ¿no?
Todos se giraron para mirar a Scorpius, que tenía la vista fija en la pantalla y los ojos muy abiertos.
―¡Por fin! ―Rose dio un pequeño salto y lo abrazó―. ¡Sabía que tarde o temprano acabaría gustándote el programa!
―A ver, no ―se apresuró a contestar―. No he dicho en ningún momento que me guste el programa, el formato o lo obsesionados que estáis todos con él. Pero Aitana ha cantado muy bien. Si tengo que elegir ganador, me quedo con ella.
―No, cariño, nosotros vamos con Miriam, ya hemos votado por ella.
―Yo quiero cantar así de mayor. ―Lily suspiró―. No llegaré a esas notas en la vida.
―Bueno, mi apuesta es que Aitana irá primera o segunda dependiendo de lo que hagan Amaia y su piano ―comentó James―. Pero Aitana es una pasada. Además, como es tan pequeñita, sorprende esa voz. Lo mismo pasa con Nerea. En persona son como dos bebés y, de repente, te cantan esas canciones…
―Claro, tú como estuviste en la academia… ―Lizzy le puso morritos.
―Lo siento, no me dejaban pedirles autógrafos, cariño, ya te lo he dicho muchas veces.
―Todavía me pregunto cómo acabasteis ahí. ―Rose frunció el ceño―. No sois tan buenos, ni famosos.
―La discográfica pensaba que así nos seguiría más gente y parece que ha funcionado ―contestó―. Y la verdad es que todos son increíbles. Gane quien gane será un digno vencedor y estoy seguro de que todos tendrán una carrera llena de éxitos.
―E iremos a los conciertos todos juntos ―dijo Rose―. Hasta Scorpius.
―Bueno, eso ya es más relativo. De momento ya os he acompañado a las firmas y voy a ir al concierto de marzo. Luego ya veremos.
―Pues para no gustarte OT, vas a muchas cosas, ¿eh? ―Repuso Theo, intentando molestarlo―. A ver si solo finges que no te gusta, pero luego eres el fan número uno.
―Si esta chica saca canciones de este tipo, seré su fan número uno desde luego.
―¡Esta sí que es una reina! ―Rose se mordió el labio con fuerza―. ¿Cómo puede creer que es invisible?
―No lo es ―murmuró Lizzy―. Además, un cuarto puesto no está mal.
―¡Lizz! ―James le dio un codazo―. ¿Qué he dicho de pelear?
―No he dicho nada ―protestó la morena.
―Miriam es una leona. ―Lily sonrió a su prima―. Tiene un vozarrón. Puede caerme mejor o peor, pero no negaré que tiene una voz increíble.
―No sé cómo va a quedar esto, pero va a estar igualado ―intervino su hermano―. Me da pena que, al final, la gente entre a valorar tantas cosas ajenas a la voz y la actuación final. Miriam se merece un top 3.
―Y yo espero que lo consiga o no habrá quien soporte a Rose…
―¡Lily! ―Protestó la aludida.
―¿Qué? Si te pones muy pesada, no apareceré por el piso en toda la semana. Me mudaré enfrente.
―Pero si prácticamente vives en nuestro piso ―comentó Scorpius, frunciendo el ceño―. Tienes toallas, ropa, un cepillo de dientes, otro del pelo y hasta ese té raro con especias que tomas para desayunar. Ah, y cartones de leche de avena. A veces creo que vives con nosotros sin pagar alquiler.
―Bueno, siempre puedes irte con Rose. Podemos hacer un cambio de apartamentos, ¿no? ―Se encogió de hombros.
―Ya, creo que no.
―Ni de broma ―murmuró ella―. Pero no porque me ponga insoportable, que no lo hago. Mucho menos por un programa de televisión. Aunque más le vale al público darle un buen puesto a esta pedazo de cantante o dejaré de ver el formato.
―¿Ves como sí te cabreas, vecina? ―Theo rió―. ¡Venga, si esto es para divertirnos! A mi favorito lo echaron en la gala 6 y aquí me ves: pasando el rato. Además, mi madre me ha dicho que, si consiguen entrevistas en alguna de las revistas, te mandarán de representante de la empresa. ¡Anímate!
―¿Ha dicho eso en serio? ―Enarcó una ceja.
―Espera, ¿que Daphne ha dicho qué? ―Lily abrió mucho la boca, ofendida, y cogió su teléfono móvil―. ¡Ahora mismo voy a escribirle! Ten una suegra rica para esto.
―Cuando dices esas cosas, parece que solo me quieres por el dinero.
―¿Y no lo hago?
―Muy graciosa.
Lily le sacó la lengua antes de besarlo, sonriendo sin poder evitarlo.
―Al final alguno de vosotros me presentará a Ana. Ya lo veréis.
Silencio. En el piso solo se escuchaba el silencio más absoluto. Hasta que resonó un sollozo y James abrazó a Lizzy con más fuerza. Le dio un beso en la frente y murmuró en su oído que no llorara.
―No pasa nada, Lizz.
―Es que ha sido precioso. Se ha roto y… yo me he roto con ella ―confesó.
―Tiene que ganar ―susurró Lily, que se mordía un nudillo.
―Por una vez, estoy completamente de acuerdo contigo ―añadió Rose―. Menuda sensibilidad.
Y no pudieron decir nada más. Aquella actuación los había dejado tocados a todos y ahora solo les quedaba esperar el veredicto.
Después de las primeras eliminaciones (que indignaron a Lizzy, que quería a Alfred en el top 3, y entristecieron a Lily, que no quería que Ana quedara quinta), vieron las tres actuaciones y esperaron la decisión final, muertos de nervios (todos menos Scorpius, que se había quedado dormido hacía rato). La cosa iba a estar bastante igualada.
―Dame la mano, Rosie ―le pidió Lizzy, estirando la mano hasta alcanzarla―. Gane quien gane vas a seguir siendo mi mejor amiga.
―Ídem ―contestó la pelirroja, riendo y aceptándola.
―Aunque espero que gane Amaia.
―Va a ganar Amaia. Me encanta Miriam, pero lo que ha hecho Amaia hoy…
―Callad, que Roberto está ya hablando ―les dijo Theo.
―El concursante que ha quedado en tercer lugar con el 12% de los votos es... bueno… Miriam.
Vieron como la chica abrazaba a las otras dos y Rose suspiró y sonrió.
―Bueno, un tercer puesto no está nada mal, mucho menos después de la campaña de odio que ha habido contra la leona en redes ―dijo―. Amaia y Aitana son también justas ganadoras.
―¡Vamos, que ya anuncian al ganador! ―James se puso de pie de un salto―. Tiene que ser Amaia.
―Y el concursante más votado y que, por tanto, es el ganador de OT 2017 y consigue así el premio de cien mil euros, con el 46% de los votos es…
―¿Lo digo contigo o no? ―Le preguntó Rosa López a Roberto Leal, haciendo que todos en el salón empezaran a reír a pesar de la tensión―. Que me tienes atacá.
―¿Te tengo atacá? ―Roberto rió―. Vamos. Es… ¡Amaia!
Todos empezaron a dar saltos en el salón y a abrazarse, despertando al rubio, que no entendía qué estaba pasando.
―¿Qué…?
―¡Ha ganado Amaia! ―Dijo Lizzy, dando saltitos y aplaudiendo―. ¡Sabía que iba a ganar ella! Es la mejor.
―Qué bien. ―El chico se incorporó y sonrió―. Bueno, ya ha terminado el programa. Esto acaba aquí, ¿no? Ya no tendremos piques, ni estaremos enganchados a ningún 24 horas, ni nada de eso, ¿verdad? El hype se os va a pasar mañana.
Los demás lo miraron y rieron. Esto solo acababa de empezar.
Y aquí van sus opiniones sobre el programa (aunque ya sabréis por dónde van los tiros):
- James: Lo ve SOLO por la música. En realidad, está un poco celoso porque Lizzy pasa más tiempo pendiente del programa que de la vida real. Su banda visita el programa la segunda semana.
- Lizzy: Enamorada de Cepeda. Team Friends a muerte. Shippea Almaia y Aiteda.
- Rose: Tiene un súper crush con Miriam. Muy fan del Ragoney. Odia a Cepeda.
- Scorpius: Odia OT y los lunes porque tiene que aguantar a todos comentando el programa sin parar.
- Lily: Muy fan de Ana Guerra. Tiene la Bikina de despertador.
- Theo: Muy fan de Ricky. Se sabe la coreo de "Let me entertain you"
- Albus: Lo ve solo por Alice (al principio). Le encanta cómo canta Nerea.
- Alice: Adora Almaia y a Amaia y Alfred en solitario (aunque a veces Amaia le parece demasiado directa).
