Albert Andrew era el más respetado -y temido- laird en toda Escocia. Amaba a sus hombres como hermanos y a sus tierras con pasión. Y no permitía que ninguna mujer cruzara el umbral de su castillo.

Ciudad de Nueva York, 1998. Con un prometido indiferente y una estancada carrera de escritora, Candice White, una chica huerfana, encontraba pasión y aventura sólo en las inéditas novelas que escribía. Hasta que un héroe escocés comienza a llamarla...

Candice anhelaba al hombre de sus sueños. Supo que estaba muy agotada cuando... ¡empezó a oír su voz estando despierta! Para aclarar su mente, se fue a dar un paseo al parque, se quedó dormitando en un banco y despertó en la Escocia del siglo XIV en la tierra de Albert Andrew, un arrogante y guapo lord con una voz muy familiar. Candy pondría su ordenado mundo patas arriba e iría adonde ninguna mujer había ido antes: derecho a su corazón..