"La Sombra Del Amor"

En la ciudad de Tokio capital de Japón. La distinguida, adinerada y prestigiosa señora De Pegaso, se encuentra en el aeropuerto esperando a su hijo el joven Seiya en compañía de su novia la señorita Saori Kido,una chica muy distinguida. Seiya había permanecido dos años y medio en Grecia con el fin de terminar sus estudios de media.

Por razones personales regresa a terminarlos a Tokio, junto a su novia y sus amigos. Seiya termina enamorado de Miho una linda y humilde chica sin ningún estatus social, ella es la simple ayudante de la cafetería del instituto. Desde ese suceso las cosas cambian para él en todas las áreas de su vida.

– Señora Ayaka, ¿Cree usted qué se tarde mucho ese vuelo? – Preguntó la hermosa Saori que al parecer estaba algo cansada de esperar a su novio – ¿A caso no viene en una aerolínea privada? –

– Sé me hace raro que no haya llegado – Contesto la hermosa madre preocupada – La verdad ¡Me alegra mucho su regreso! Ahora estarán juntos en el instituto –

– ¡Estoy muy feliz de su regreso, mis deseo de verlo son muchos! – Anuncio con una sonrisa muy grata – ¡Nunca entendí por que el señor Seiya lo envío a estudiar a Gracias, si acá hay buenos institutos – Dijo con mala cara

– La verdad yo tampoco entendí eso nunca, ¡Que bueno que mí Seiya decidió volver –

– Si, ya en una semana inicia nuevo semestre, así continúa de una vez y no pierde tiempo y luego de este semestre en un año nos graduamos –

– ¡Si ya quiero que mí Seiya termine! ¡Para luego hacerles su compromiso! Sé lo mucho que se aman los dos –

– ¡Tiene toda la razón! – Contesto con una gran sonrisa

– ¡Que viaje tan incomodo! ¡Pero por fin estoy en mi país! – Exclamo el joven al desmontarse del avión – Muchas cosas buenas me están esperando

Luego de iniciar su camino con un pesado suspiro de alivio… A lo lejos logro distinguir dos figuras muy preciadas para él "Su madre y su novia" Su preciosa novia con su melena lila suelta, con un precioso vestido amarillo y unas hermosas zapatillas negras, sus ojos tenían tantas ansias de verla. Su elegante madre traía puesto un vestido azul con unos zapatos de tacón color negro.

– ¡Madre que alegría verla nueva vez! – Exclamo feliz mientras la besaba y la abrazaba

– ¡Yo más mi hermoso hijo! – Dijo sonriente – ¡No te imaginas lo mucho que me agrada tu llegada! –

La pareja de miro con devoción unos segundos, para luego dar un fuerte abrazo.

– ¡Mi vida, no te imaginas cuanto te extrañe! – Dijo la novia feliz

– Yo igual Saori, no te imaginas cuanto te extrañe – Contesto con una sonrisa – ¡Me alegra tanto estar de vuelta! – Dijo para luego besarla

– En una semana volvemos a nuestra labor – Comento Miho a su prima Rión

– Si – Contesto de manera pesada

– Quiero tener algo mejor que eso, la verdad con ese dinero no nos alcanza para los medicamentos de la abuelita –

– Y lo peor de todo es tener que estudiar en la noche, ese instituto queda muy retirado de acá, además de eso es muy peligroso para las dos –

– Y tampoco la abuela se puede quedar sola, su enfermedad va muy avanzada –

– Tenemos que estar preparadas para lo que sea – Contesto Miho triste – Lo mejor será estar en contacto con nuestra tía –

– Si, y en cuanto a nuestro trabajo de ayudante… Pues tenemos que hablar con la señora Aika tal vez nos ayuda -

- ¿Crees qué haga eso? – Preguntó con dudas –Toda la gente de ese instituto es igual, yo estoy ahí por no tener otra cosa –

– Si, pero al menos nos dejan buenas propinas los niños ricos que la verdad no sé porque nos miran como cosas raras –

– Por nuestro estado social – Dijo cabizbaja

– Pues la verdad eso no me importa, yo sólo quiero avanzar –

– ¡Eso es lo que ambas queremos Rión! – Exclamo Miho sonriendo

– ¡Vaya si que no ha cambiado nada! – Exclamo Seiya desde el parqueo – ¡Kiki! – Saludo a su chófer y amigo de muchos años

– ¡Joven Seiya que gusto verle! – Anuncio alegre

– ¡El gusto es mío! – Contesto al subirse a la limusina

Todos se dirigieron a la mansión De Pegaso… El joven iba con la mirada perdida en el cristal tanto tiempo lejos de casa, de su novia y amigos. ¡Por fin regresaba!

– ¡Por fin llegue a mi dulce hogar! – Exclamo Seiya feliz

– Ordene un almuerzo especial para ti – Anuncio su madre

– Y yo organice una fiesta de bienvenida para esta noche – Anuncio Saori Feliz

– ¿Una fiesta? – Preguntó aturdido

– Si cariño, Saori siempre está muy pendiente de todos nosotros – Contesto la madre feliz

– ¡Mi vida no tienes idea de cuanto te extrañe! – Dijo mientras lo abrazaba

– ¡Saori estas invitada al el almuerzo!–

– ¡Gracias suegra! –

– Seiya, subiré sus maletas – Anuncio Kiki

– No tienes porque decirlo ese es tu deber – Grito Saori con cierto grado de superioridad –

–¡Saori no le hables de esa forma! – Contesto Seiya enojado

– ¡No me digas que estas de el lado de ese! –

– ¡Te dije que basta de insultos! – Grito enojado

– ¡Mejor me voy a mi casa! – Contesto al salir del parqueo de la mansión

– ¡Saori espera! – Grito tratando de detenerla – ¡Saori! ¡Estoy hablando contigo! –

– ¡Lo siento joven, no era esa la intención mía verlo pelear con su prometida! – Se disculpo Kiki – Bajando la cabeza

– ¿Qué rayos le pasa? – Preguntó sin entender – ¡No veo la razón de su enojo! ¿Dijiste mi prometida? –

– Si, eso dije – Confirmo Kiki

– No es mi prometida, apenas llegó y ya estamos peleando –

– !Me disculpa pero esa señorita es muy altanera! –

– No te preocupes por eso Kiki, ella siempre es de esa forma sólo que ahora la veo peor, no entiendo nada –

– Lo importante es que se quieren mucho –

– Bueno eso es verdad –

– ¿Qué tiene planeado para hoy?–

– La verdad nada, ni siquiera me agrada esa fiesta con los chicos – Dijo con pesadez

– Si quiere lo puedo acompañar a dar una vuelta, muchas cosas han cambiado desde que usted se fue –

– ¡Te lo agradezco Kiki! – Dijo con una sonrisa – Luego del almuerzo nos vamos, por cierto quiero otro auto ya ese paso de moda – Dijo al señalar su viejo deportivo color amarillo

– ¿Va a comprar otro deportivo? –

– No, prefiero un convertible color negro que vi cuando veníamos –
– Pues hoy mismo lo puede comprar, luego otro de los chicos se le adelanta–

– !Si!–

El joven Seiya luego de la discusión con su novia decide almorzar para luego comprar un auto, junto a su chófer Kiki que más que eso es su amigo de confianza. Muchas cosas pasan por su cabeza por la reacción de Saori.

- No entiendo que le sucede a Saori, de repente se comporto de una manera extraña que no entendí porque lo hizo – Con esas palabras se recostó en su cama – Tomare un descanso luego iré almorzar con mi madre, tal vez mi padre no venga como siempre –

El joven se quedo profundamente dormido…

– Miho, no olvides que está tarde tenemos que ir al instituto tenemos que hablar con la señora Aika – Anuncio Rión

- Si, no lo olvido, en cuanto termine de lavar los platos nos me voy a bañar, tú apúrate con la ropa –

-Si, si, lo peor me toca a mi–

- Eso le elegiste tú – Contesto sarcástica

– ¿Entonces me estás diciendo qué acabas de pelearte con Seiya? – Preguntó Marin algo confusa

– Si, amiga no sé que le pasa – Contesto con algunas lagrimas

– Pero apenas acaba de llegar –

– Lo sé –

– Saori, si tú de verdad quieres estar con Seiya te recomiendo que te comportes y si vas a seguir con Ikki mejor será que sea con cuidado – Aconsejo mientras jugaba con sus dedos

– La verdad, Ikki me dijo que quiere que deje a Seiya y esté con él, pero la verdad… Yo siempre voy a preferir a Seiya lo quiero mucho y además de eso no puedo dejar de ser la señora De Pegaso – Dijo sonriendo

– No veo la razón de estar con dos – Comento mientras se paraba de su silla – Yo sólo quiero que hagas las cosas bien –

– ¡Te lo agradezco mucho! –

– Nos vemos luego – Dijo al despedirse

Con esas palabras Marin salio de la mansión Kido. Saori no le hizo ni el más mínimo caso a las palabras de su amiga.

– ¿Para qué voy a dejar a Ikki? Soy feliz con los dos Seiya no tiene porque enterarse de nada – Comento para si misma mientras miraba por el amplio balcón de su hermosa habitación

La tarde transcurrió de la manera más normal. Seiya despertó de su larga siesta él jamás imagino dormir tanto tiempo…

– ¿Qué hora es? ¡Mami debe estar molesta conmigo! – Decía el joven para si mismo mientras estrujaba sus ojos – Me voy a tomar un buen baño y luego iré con Kiki a comprar el auto y para más tarde tener que ir a la dichosa fiesta – Concluyo con muy mal gesto

– ¡Date prisa Rión! – Gritaba Miho desde la puerta de su humilde casa – Si llegamos tarde Aika sé molestara mucho –

– Ya voy, ya voy, no es para tanto Miho – Dijo sonriendo

– Adiós abuela – Se despidieron ambas

– Se cuidan mucho mis niñas – Contesto la anciana

Ambos primas se dirigían al instituto de Athenas con el propósito de establecer acuerdos de su empleo. Las humildes chicas trabajaban muy duro para poder mantenerse ellas y su abuela enferma.

El joven Seiya tomaba un baño, pero se encontraba muy pensativo…

– ¿Qué me espera? Es como empezar otra vez casi 3 años lejos de todo las cosas tal vez han cambiando mucho… No sé si mis amigos me vean igual, y la verdad sé que quiero mucho a Saori pero aun estoy pensando en la forma en que se comporto hoy con Kiki –

– Date prisa Rión, siempre tengo que estar hablando mucho contigo –

– No seas aguada Miho, solo una vuelta más en los columpios –

– Si llegamos tarde vamos a perder el trabajo y eso si que no lo quiero –

– ¡Vamos! –

– Debes dejar la costumbre, de cada vez que pasamos por la avenida querer estar jugando en el parque ¡No te entiendo! –

– ¡Me encanta el parque! –

– Ami también me gusta, pero ahora vamos de rápido –

– ¿Pero de regreso vamos a venir? –

– ¡Está bien! – Exclamo feliz

– Estamos a dos cuadras –

– ¡La que llegue primero! –

Las dos chicas comenzaron a correr… Luego de unos minutos

– ¡Gane Miho! –

– Solo fue suerte – Contesto respirando hondo – ¡La próxima soy yo! –

– Eso lo vamos a ver – Contesto sonriente

Ambas llegaron a la oficina de la señora Aika. Administradora de la enorme cafetería del instituto.

– ¡Adelante chicas! – Anuncio con una sonrisa

– ¡Gracias señora! – Contesto Miho

– Pueden sentarse –

– Gracias – Contesto Rión

La señora Aika, inicio la conversación con las chicas, con el fin de establecer nuevos acuerdos laborales, para el nuevo semestre que en tan sólo una semana iba a iniciar.

– Las dos tienen que trabajar en la mañana –

– Señora Aika, nuestra abuela está muy enferma y la verdad no ha mejorado nada, no sé puede quedar sola – Explico Rión

– Siento mucho su caso chicas – Dijo apenada – Las ayudare con el sueldo, lo dejare igual –

– ¿Y cómo será? – Preguntó Miho

– Una va venir en la mañana y la otra en la tarde – Explico Aika

– Pues Miho va a venir en la mañana – Contesto Rión

– Por mi no hay problemas de todas formas tenemos que estudiar en la tanda de la noche – Contesto con pesadez

– ¿En la noche? – Preguntó Aika Alterada

– Si, así es en la noche – Explico Rión

– Chicas pero por ustedes ser empleadas el instituto está en la obligación legal de becarlas a las dos –

– ¿De verdad? –

- Si Rión, sólo que yo no será para este semestre – Contesto con una sonrisa – Si ustedes eligen estudiar acá las cosas les van a cambiar mucho, pues hasta sus horarios de trabajo, pero tiene que ser para el próximo tengo que hacer una solicitud ustedes deciden –

– Gracias señora Aika, la verdad lo pensaremos, por ahora yo vendré el lunes en la mañana y Rión el la tarde a trabajar – Con una linda sonrisa las primas salieron del lugar

Felices por aun tener su empleo, era un alivio para ellas. Su abuelita está muy enferma y ellas dos son las responsable de todo los gastos, tienen una tía pero vive muy alejada de ellas y su estado económico no es nada bueno.

– ¡Mi querido Seiya! – Saludaba muy alegre Ajuna empleada de toda la vida en la mansión

– ¡Gusto en verla! – Contesto

– ¡Mucho tiempo mi niño! Le prepare un rico almuerzo y se quedo dormido –

– ¡Lo siento mucho Ajuna, llegue muy cansado, pero le prometo que más adelante vamos a compartir un rico café –

– Si, mi niño –

– Ahora la dejo que voy de salida con Kiki, debe estar desesperado – Con una abrazo muy cariñoso se despidió

El joven iba a comprar su nuevo auto, muy perfumado y muy bien vestido, llevaba puesto un poloche blanco que le dibujaba muy bien su musculatura, un Jens azul, con un hermoso tenis blanco. Con su elegancia sport se dirigió a su destino por cosas de Seiya decidieron ir caminado

– ¿Nos vamos Kiki? –

– Vámonos –

Ambos se dirigieron a una elegancia agencia de autos del año.

- A cambiado mucho la cuidad –

– Bastante –

– Prefiero caminar así conozco más –

Luego de unos minutos llegaron a su destino

– ¡Muy lindo el parque! – Exclamo el joven – No me fije que estaba ahí cuando pasamos en la mañana –

– Tiene como 8 meses –

Ambos entraron a la tienda… Las chicas iniciaron su carrera como acordaron…

– ¡Te gane Rión te lo dije! – Exclamaba Miho feliz

– Eres una tramposa – Contesto al salir corriendo – Si me atrapas te empujo en los columpios –

– ¿A dónde irá primero? – Preguntó Kiki al salir de la tienda

– No tengo ideas de cómo estrenar mi nuevo auto – Contesto sonriendo

Miho iba a salir corriendo detrás de Rión pero al mismo momento de voltear… Su mirada tropezó de frente con otra mirada que se detuvo a mirarla unos minutos. La joven sé quedo muda, y quien la miraba a ella hizo lo mimo. Rión al no recibir respuesta a su travesura salio de los arbusto donde se oculto y se topo con la escena Kiki termino hablando solo porque el joven Seiya estaba algo entretenido mirando a Miho.

– ¿Seiya? –

– Di, dime Kiki –

– ¿Nos vamos? –

– He, he si ya nos vamos – Contesto al momento de pestañar

– ¡Miho vámonos! – Grito Rión al tomarla del brazo

Los gritos de Rión ayudaron a que Seiya escuchara el nombre la chica, que con tan solo mirarla llamo toda su atención por unos minutos, y él hizo lo mismo en ella. Él joven abordo su convertible negro del año con unos hermosos aros plateados y rumbo a su destino cada vez miraba por el retrovisor con la intención de ver otra vez ese lindo rostro. Miho siguió su camino y no dijo una sola palabra durante el trayecto…

Continuará...

¿Qué va a suceder ahora?

¿Seiya & Miho tendrán el valor de hablarse?

¿Qué va a pasar en la fiesta de Seiya?

¿Y el compromiso con Saori?

!Nos leemos pronto!